Narra Astrid:

Wow, eso ha sido más sencillo de lo que creí, pensé que ella pelearía por la situación, pero terminó debilitándose por el simple hecho de que según Hipo saldría lastimado si la seguía amando. Me voy directo a la cueva principal feliz de la vida al haber completado mi misión y veo a Hipo terminando de acomodar los últimos pedazos de leña.

—Hipo, tenemos que hablar -hago mi papel de chica arrepentida-

—Ay, Astrid, ¿otra vez volveremos a discutir ese tema? -suena exasperado, pero no me importa-

—Es sobre Nereida -rápidamente reacciona preocupado por ella, lo cual me hace hervir de ira y celos, pero intento tranquilizarme-

—¿Qué tiene? ¿Está bien? -intenta esquivar la conversación para ir con ella pero yo me coloco enfrente suyo rápidamente-

—Si, está bien -cierro los ojos y suspiro intentando relajarme- pero me dijo algo de lo que no te quiero contar

—Iré a preguntarle que es -otra vez intenta escapar, pero vuelvo a detenerlo-

—Me dijo que todo lo que pasaron juntos, lo que paso entre ustedes...fue una farsa -lo miro "apenada"- lo siento

—No es cierto, Astrid -dice como si lo que hubiera dicho fuera una broma-

—Si quieres pregúntale -me hago a un lado y hago un ademán al lugar donde se encuentra la chica- verás que no miento -lo miro "triste" y el se encamina hacia esa chica dejándome ahí sola- pronto volverás a ser mío, Hipo, y ahora que tu querida amiga te alejará de su vida, nada podrá detenerme...

Narra Hipo:

Después de lo que Astrid me ha dicho, decido averiguar la verdad. Me dirijo al lago de la Salvajibestia y ahí la veo, parada, viendo directo hacia el enorme dragón enfrente de ella. Al estar a su lado, le sonrío, pero ella ni siquiera me dirige la mirada.

—Hola, Mi Lady -digo sonriente, pero ella sigue sin decir nada ni mirarme- ¿estás bien? -pregunto ahora preocupado-

—Si, estoy bien -responde con voz fría-

—Nereida... -me coloco frente a ella para que me vea a los ojos- ¿qué pasa?

—Nada, pensé que tu familia y amigos ya se habían ido de aquí -sonríe-

—No, siguen aquí -digo algo confundido-

—Deberían de irse, ya pronto oscurecerá -su tono de "amabilidad" comienza a confundirme-

—¿Qué tienes? ¿Qué te dijo Astrid? -al decir el nombre de ésta, noto un ligero cambio en su expresión, de frialdad a tristeza-

—Nada que te interese, ahora vete con tu familia directo a tu isla -dice enojada-

—Nereida, no te dejaré aquí -agarro su mano y ella la retira rápidamente- ¿no ves que te quiero como mejor amiga? Yo se que tu también me quieres

—Qué iluso eres -se burla-

—¿De qué estás hablando? -temo por lo que va a decir-

—Jamás te quise como amigo, Hipo -ríe hipócritamente- solo te usé para tener más cerca a Furia Nocturna, que por si no lo sabías, es mi mejor amigo y se quedará conmigo -me mira furiosa-

Al decir esas palabras, siento un horrible dolor en mi pecho, ¿Astrid tenía razón? ¿Nereida me mintió todo éste tiempo? Me encuentro dolido, yo la quiero tanto y ella llega destrozando mis sentimientos rápidamente. Decido ser fuerte ante esto y mi mirada de tristeza cambia a una de furia y enojo.

—¿Así que todo éste tiempo me mentiste? -pregunto furioso-

—¿Decepcionado chico vikingo? -me mira burlona-

—Si -suspiro exasperado-

—Aw, siento haber decepcionado al jefe de Berk -hace un puchero-

—Nunca pensé que fueras así -la miro molesto-

—Lamento que mi forma de ser no te guste -entrecierra sus ojos enojada-

—Bueno, espero y estés mejor aquí sola -digo dándome media vuelta- vamos, Chimuelo

—Furia Nocturna no se irá contigo -me detiene con su brazo haciéndome verla cara a cara-

—Por si no lo sabías, Chimuelo ya forma parte de mi familia, y tú dijiste que me fuera con mi familia -sonrío victorioso-

—No te atrevas a desafiarme, vikingo -su tono ha cambiado a uno que jamás había escuchado, más enojado de lo normal-

—Oblígame -la reto-

Antes de que ella pueda darme un golpe o algo, Chimuelo se atraviesa entre nosotros, lanzándose hacia ella y tirándola al piso, dejándola inmóvil con sus patas y en shock. Chimuelo le gruñe furiosamente y ella está asustada, al igual que yo, jamás pensé que Chimuelo fuera a tener esa actitud con ella.

—Furia Nocturna... -dice Nereida asustada y confundida, pero antes de decir algo más, Chimuelo ruge en su oído como lo hizo conmigo la primera vez que lo conocí-

—Chimuelo, ya basta -digo algo asustado porque la vaya a lastimar y se separa de ella volviendo conmigo-

Nereida se para en shock y voltea a ver a Chimuelo confundida y asustada, una lagrima se desliza por su mejilla y luego me mira furiosa.

—Está bien, ¡vete con él! -grita más fuerte de lo que jamás había escuchado- ¡no te necesito! -dicho esto, se da media vuelta y baja la colina para ir al lago-

Es lo último que escucho por parte de ella, la he perdido. Camino hacia la cueva principal con una mirada de tristeza mientras Chimuelo gruñe intentando consolarme, pero ya nada puede hacerme sentir mejor. Al llegar, veo a mis padres, junto con Bocón y Astrid, listos para volver a Berk. Mi madre me ve confundida al igual que Bocón, mi padre serio, y Astrid apenada.

—¿Dónde está Nereida? -pregunta mi madre-

—Ella no vendrá -respondo seco- vámonos -me subo en Chimuelo-

—¿Qué pasó? -pregunta mi madre confundida-

—Sólo no quiso venir, es todo -digo exasperado-

—Val, sabes que ella pertenece aquí -dice mi padre consolándola- no podrás separarla de esta vida

—Tienes razón -dice mi madre con una lágrima- espero y esté bien en éste lugar

—Bueno, ¿qué estamos esperando? Vamos -dice Astrid contenta-

Partimos del Santuario directo a Berk dejando a Nereida junto con los demás dragones en éste. Mi corazón se encuentra roto, sus palabras aun rondan en mi mente..."jamás te quise, Hipo"..."¿decepcionado chico vikingo?".

Una lagrima se desliza por mi mejilla, afortunadamente tengo mi casco, (el que por cierto ha rescatado mi padre del lago, donde mi madre hizo que me agarrara un dragón, dejando a Chimuelo por un tiempo) así que nadie nota mi dolor y tristeza. Después de una hora, llegamos a Berk.

Bajo de Chimuelo y me quito el casco, toda la tribu nos recibe aliviados y se sorprenden de ver a mi madre viva y de vuelta en la isla con mi padre. BrincaNubes es admirada por todos, jamás habían visto a un dragón como ella. Astrid baja de Tormenta y camina hacia mí feliz, pero yo la miro enojado, sé que ella ha tenido algo que ver con los actos de Nereida.

—¡Todos al salón de Hidromiel! -grita mi padre a todos los vikingos- ¡festejaremos el regreso de mi querida esposa Val! -todos los vikingos gritan felices y caminan juntos al salón de Hidromiel-

Camino detrás de ellos hasta que un agarre en mi brazo me detiene. Volteo y veo a Astrid que me mira confundida, dirijo una mirada de enojo y furia hacia ella, siempre pensé que ella sería una gran amiga, pero me equivoqué.

—¿Qué pasa Hipo? -pregunta tratando de entender-

—Lo que pasa es que me mentiste -digo enojado, pero tratando de no perder la calma con ella-

—¿De qué hablas? -se hace la inocente-

—No te hagas la que no sabes -me suelto de su agarre- sé que tuviste que ver con las reacciones de Nereida conmigo después de estar contigo -entrecierro los ojos molesto- pensé que eras mi amiga -dicho esto, me doy media vuelta y me dirijo al salón con los demás-

—Si soy tu amiga -la escucho decir a los lejos molesta, pero no me importa-

Llego al salón y veo a todos felices bailando, platicando y riendo entre todos. Me siento excluido ante eso, no me siento lo suficientemente bien para estar en este lugar, así que salgo y me qued afuera viendo las estrellas. Pienso en Nereida y otra vez llega ese sentimiento de dolor, una lágrima se desliza por mi mejilla, ¿por qué me hizo esto? ¿Por qué me hizo sufrir después de todo lo que pasamos juntosk? Miro una vez más hacia arriba y articulo unas palabras.

—Espero que estés bien en éstos momentos Nereida...y espero que pronto encuentres la felicidad y libertad que siempre anhelaste -escucho la puerta del salón abrirse y me seco la lagrima rápidamente, volteo y veo que es mi madre-

—¿Qué haces aquí afuera hijo? ¿Por qué no estás adentro? -pregunta mirándome algo triste-

—No tengo ánimos de convivir con los demás -respondo algo cansado-

—La extrañas, ¿verdad? -al decir eso la abrazo-

—Demasiado -una expresión triste atraviesa mi cara-

—Entonces, ¿por qué no le pediste que viniera? -se separa y me mira confundida-

—Lo intenté, pero ella estaba molesta conmigo por algo, y siento que Astrid tuvo algo que ver en eso -de repente, me encuentro muy molesto- estoy muy molesto con ella, siempre pensé que ella era mi amiga

—Tranquilo Hipo -mi madre intenta tranquilizarme- ya todo pasó, ahora lo que importa es que sabemos que Nereida está a salvo, siento decirte esto, pero ella pertenece a ese lugar -me mira triste-

—Pero acabas de decir que... -no me deja terminar-

—Ya se lo que dije, pero debes entender que ella está acostumbrada a otro tipo de vida, yo volví porque yo ya sabía lo que es vivir aquí, pero ella no, y debemos entenderla -me sonríe-

—Está bien -suspiro- si la amo...debo dejarla ir -con esto mi madre me da un último abrazo y vuelve al salón dejándome ahí afuera pensando-

Narra Nereida:

—¿Crees que lo herí mucho? -le pregunto por centésima vez a la Salvajibestia, quien siempre me contesta con un gruñido de enfado- deja de contestarme así, dame una respuesta -suplico algo molesta- ¿debo volver con él? -la Salvajibestia me mira exasperada- está bien, está bien, ya no te molestare más -levanto mis manos en defensa y me retiro del lago-

Es de noche y las estrellas brillan en el cielo, con una luna resplandeciente como el acto principal. Me siento tan sola en este lugar, ni un sonido humano, sólo los gruñidos de dragones durmiendo y roncando. Recuerdo las palabras de Hipo antes de irse..."espero y estés mejor aquí sola", no Hipo, no estoy mejor aquí sola, te quiero de vuelta...

Me dirijo a un punto de la cueva donde se puede ver hacia el exterior y me siento en un extremo mirando hacia el horizonte.

—Hipo... -pronuncio con voz algo quebrada- espero que estés bien en estos momentos...y espero que pronto encuentres la felicidad y libertad que siempre anhelaste -una lagrima se desliza por mi mejilla- siempre te tendré en mi corazón, y ahora sé que me he encariñado profundamente de ti sin darme cuenta -respiro hondo- pero me he dado cuenta que si eres importante en mi vida...debo dejarte ir...y eso es lo que hice -con esto último, bajo mi cabeza a mis rodillas y me hundo en un mar de lágrimas y tristeza buscando una solución-

Narra Valka:

Después de la fiesta todos se van a sus casas a dormir, al igual que Estoico, Hipo y yo. Durante todo el día, Hipo no tuvo ánimos de convivir con alguien, me duele saber que es por causa de Nereida, presiento que ella también estará igual en estos momentos. Hipo se ha ido a su cuarto sin decir "buenas noches" o algo y se encerró dejándonos a Estoico y a mí abajo.

—Estoico...¿no crees que deberíamos ir por Nereida? -le pregunto-

—Val, basta -dice suspirando- no podemos separarla de esa vida que tiene allá -me mira dulcemente- debes dejarla ir

—No... -niego con mi cabeza- ha sido parte de mí durante los últimos 5 años, y si es parte de mí, también lo será de ésta familia

—Val, no puedes ir por ella a éstas horas -dice preocupado-

—Tengo que hacerlo, Hipo no quiere convivir, no quiere comer, no quiere hacer nada desde que la dejamos allá -las lágrimas amenazan con salir-

—Val, tranquila -me abraza- sé que esto es duro para ti como para Hipo, pero ambos deben entender que ella es feliz allá, y si es feliz, nosotros somos felices -se separa y me sonríe- tranquila, pronto sabremos noticias de ella

—Eso espero -bajo mi cabeza- pero por lo mientras no quiero que Hipo sufra

—Yo hablaré con él mañana, ¿si? -coloca una mano en mi mejilla-

—Está bien, confío en que lo harás sentir mejor -sonrío débilmente-

—Claro que sí, es más, le diré a Astrid que conviva con él mañana, así se sentirá mejor -esa chica no me da buena espina, pero debo dejar que Estoico haga lo mejor para hacer sentir bien a Hipo, después de todo, ha convivido con él todos los años de su existencia-

—Está bien, espero que resulte -digo feliz-

—Claro que resultará -dice para luego mirar el reloj- ya es tarde, preparé un cuarto para ti, espero y te sientas cómoda de vuelta

—Gracias, Estoico -sonrío y me dirijo escalones arriba- descansa

—Igual tú, Val -dice dulcemente y me adentro a mi habitación pensando en qué pasará con Hipo y Nereida después de un tiempo-

Narra Estoico:

Valka se ha ido a su habitación mientras que yo me encuentro herrando unas cuantas cosas en el fuego. Hipo está sufriendo mucho por esa chica, pero yo sé que pronto lo superará. Además, Astrid es mejor candidata para ser su pareja, es la más bonita y fuerte vikinga de Berk, pronto volverán a estar juntos.

Sigo herrando hasta que el ruido de la puerta me distrae. Me dirijo a abrirla y me encuentro a Astrid detrás de ella, me mira con una sonrisa triste.

—Buenas noches, señor Estoico, ¿puedo pasar?

—Claro Astrid, adelante -le doy paso- ¿qué sucede?

—Es Hipo -baja su cabeza- sabe que lo separé de Nereida -me mira con ojos llorosos- ¿cree que algún día me perdone?

—No te preocupes por eso, Astrid, conozco a Hipo y sé que pronto la olvidará -coloco una mano en su hombro-

—Me siento muy mal por lo que le hice -empieza a llorar- vi la mirada que le daba a ella, él jamás me miró de esa forma, esa mirada demuestra cuanto la quiere, le importa, y yo lo hice sufrir -se sienta en una silla y cubre su rostro en la mesa- él la ama, se nota en su mirada dolida, jamás lo vi de esa forma, él era feliz con ella y los separé

Lo que dice me hace pensar un poco en las acciones que yo he tomado, Astrid tiene razón, ellos eran felices y los separamos. Jamás había visto a Hipo de esa forma, él en realidad ama a la chica, y yo me había enganchado en que él y Astrid debían de estar juntos toda la vida. Pero ahora no puedo cambiar lo que ha pasado, es muy tarde. Hipo está dolido y molesto con la chica, y presiento que ella está igual, por lo que es mejor que estén separados un gran tiempo y cuando sea el momento adecuado, se vuelvan a encontrar, claro, si el destino los quiere juntos.

—Tranquila Astrid -ella levanta su vista hacia mí- ahora es muy tarde para reparar los daños que hemos hecho, lo mejor será que ellos estén separados un gran tiempo, debido a los problemas que ambos se causaron con la pelea que tuvieron, y cuando sea el momento adecuado se vuelvan a encontrar, claro, si el destino lo quiere así -sonrío-

—Tiene razón, señor Estoico -se levanta- pero durante ese tiempo...¿qué pasará con Hipo?

—Necesitará mucho apoyo, y que mejor que tú para levantarle los ánimos cada día -sonrío pero ella se queda seria-

—Hipo en estos momentos me odia por lo que le hice, dudo que quiera volver a hablarme y confiar en mí

—Bueno, dale tiempo para que olvide lo que pasó -sonrío y ella igual-

—Bueno, mejor lo dejo descansar -dice y se dirige a la puerta- espero que pronto ellos vuelvan a estar juntos -sonríe-

—Lo mismo espero, Astrid, descansa -digo y la puerta se cierra detrás de ella-

Me quedo ahí pensando un poco en nuestra plática, he sido muy cruel con ellos, nunca pensé en la felicidad que ellos tenían juntos. Recuerdo que ellos se ven justo como Valka y yo cuando éramos jóvenes, me siento muy mal por todo lo que causé entre ellos. Terminaron peleando por mi culpa y ahora ambos están dañados, tengo que hacer algo al respecto. Espero que pronto Hipo y Nereida vuelvan a estar juntos y pedirles disculpas por lo que les hice.

¡Hola chicas! ¿Cómo han estado? Perdonen mi ausencia, no hace mucho entré a clases y como falté una semana debía ponerme al corriente con materias y así </3 lo bueno es que todo parece ir a la perfección para este semestre n-n <3

¿Qué les ha parecido el capítulo? :33 nuestros queridos protagonistas fueron separados </3 pero descuiden, no planeo dejarlos separados para siempre xD bueno, como verán, las pequeñas actitudes de maldad con Astrid y Estoico han acabado, así que el único que nos queda es Drago ManoDura 7u7 estoy ansiosa por llegar a la batalla xD

Bueno...respecto al capítulo anterior, me di cuenta de que hubo ciertas peticiones en cuanto a lo que sucede en batalla *cof cof, Estoico muere, cof cof*. Y me han pedido no matarlo, lo cual me convencía al principio...hasta que vi la petición de que Nereida fuera la que estuviera en su lugar ('8 </3. Como se debe saber, alguien debe morir en la historia para hacerla más interesante (8 (okno ;-;). Pero dejaré esto en sus manos:

¿Muere Estoico ó muere Nereida en batalla? 7u7 uno de los dos se tendrá que ir ('8 </3

En fin, me despido por hoy, ¡ya saben que las amo con todo mi corazón y mi alma! ¡Gracias por seguir apoyando la historia! ¡Nos vemos luego! <3<3<3 byeee :333