— ¡No! Me parece insólito lo que has hecho, lo primero que te advertí es que no quería llamar la atención, ahora sin embargo, tendré que terminar presentándome, ¿No viste la cara de presidiario que tenía el papá de la loca esa? ¡Me quiere comer vivo! Y tú ofreciéndote al hijo como carne fresca... ¿Qué diría Papá de todo eso?

— ¡Déjalo de una vez! ¡Papá está muerto! ¡Bien muerto! —Gritó Azeneth quitándose de golpe los platillos de los dedos con los cuales llevaba el ritmo.

— ¿Cómo dices? No vuelvas a llenar tu boca con la memoria de Papá, ¡No te lo permito!

—Tú lo defiendes como si de verdad hubiese estado para ti. ¡Pero no estuvo Mirán!

— ¡Los pocos meses que pudo sí estuvo! Y en todo caso, ¿Quién eres tú para hablar de él? ¡Ni lo conociste!

— ¡Incluso si lo hubiese conocido pienso que fue un viejo verde que se aprovechó de mamá cuando aun era muy joven y la metió en este mundo de mierda en el cuál ahora anda con dos tipos! ¿¡O me vas a decir que te gusta saber que anda con el amigo de papá y nuestro padrastro!?

Me detuve llegando a casa y con toda la mala leche le solté una bofetada. Para cuando pude darme cuenta ella me estaba ya mirando con odio, y yo que no solté el freno le hice ademán para que se bajase. Mi familia es un asco, Azeneth me defrauda, mamá me defrauda, y sin embargo sigo con ellas porque así lo querría papá.

Azeneth corrió a la puerta de casa y para cuando entró me marché. Extrañaba de sobre manera a papá, aun cuando no lo conocí mucho, siento que él si me hubiese comprendido. En este lugar no puedo visitar el mausoleo Alauî, tendría que viajar a los Emiratos, pero sin embargo he decidido recordarlo sólo, quiero preguntarle tantas cosas que hoy no comprendo a cerca de los negocios que llevo, quiero volver a saludarlo y decirle que no puedo con todo este trato.

Sentado en el mirador cerca de Malibú, he tomado la foto que tenía dentro de mi abrigo y la he observado un rato antes de levantar la mirada al cielo estrellado.

—Sabes papá... me duele un montón ver tu sonrisa en esta foto y no poder aceptar que ya no estás... dímelo más de tres veces porque no dimensiono que ya nadie comprenda que es ser una familia. ¿Soy yo el que me equivoco? ¿De qué va todo el rollo de mamá con esos tipos?

Incluso si le seguía hablando, parecía que ni él me escuchaba ya, nadie se sentaba a preguntarme qué demonios sentía.

—Y desde luego, no me dirás ni mu. Papá, no quiero volver a pensar en nada, quiero olvidarme de quién soy, ya no quiero ser un Alauî... —Tiré con fuerza entonces la botella de Ron que traía tomando desde hace un buen rato. Para mi fortuna nadie estaba aquí para joderme por los vidrios rotos.

He subido otra vez al Corvette y me he tapado con mi abrigo, hoy me quedaría a dormir aquí, dejaría que Azeneth se quedara sola en la casa que alquilamos para estar aquí hasta que el plan concluyese.

Estoy caminando por un pasillo increíblemente largo, creo que debe de ser una escuela, ¿Pero por qué todos visten de gala? Mamá está mucho más joven y saluda a alguien que está detrás de mí, miro de reojo y veo pasar a papá, parece enfadado. Enseguida veo como le suelta una bofetada que hace que me acerque corriendo a detenerlo. Pero entonces se voltea y me detiene sin decirme nada. Mamá llora desconsolada, pero es papá quien vuelve a abrazarla. ¿¡Qué demonios estaba ocurriendo!?

Enseguida me volteo a ver lo que mamá ve con tanto miedo, mientras que papá sonríe con diversión. ¿Qué ven? Solo hay una chica desaliñada detrás de mí que está llorando, y tas de ella, un tipo que la jala del brazo y la obliga a irse.

Cuando he despertado logré dejar salir todo el temor que me provocó aquella pesadilla. ¿De qué iba?, no entendía nada. Hace años no soñaba con papá... ¿Qué habrá querido decir?

Ofuscado me revolví el cabello y leí los mensajes en mi teléfono:

Boca de Trailero 09:01 Am

No te escribo para que te disculpes, nunca lo haces. Sólo para avisarte que tu objetivo se mueve a esta dirección que te archivaré más abajo, creo que estudia allí, pero ojo... iba en la motocicleta con un chico. Si no te apresuras nos ganarán los millones hermanito.

Negué. Encima de todo parecía que tendría que hacer malabares para que la chica no se fijara en el tipo de la moto. Enseguida seguí leyendo otro mensaje:

Scarlet L 09:20 Am:

He llegado a los Ángeles... quiero hablar a cerca de nosotros Mirán, ya no podemos retrasar más la conversación. Un beso.

Scarlet lobos es mi antiguo objetivo, el que me obligaron a olvidar. Estarán de chiste, no pienso dejarla ir, es la chica de mis sueños, la amo... me enamoré como un enfermo de ella, cada vez que me baila me vuelve loco, o cada vez que me lleva con ella a sus clases de pintura, el solo verla pintar me hace feliz. Scarlet es mi única salida de mi absurdo vivir, me escucha, y sobre todo, le doy todo lo que ella desea. Pero lamentablemente la he dejado algo de lado por ponerle atención a los negocios, pero para compensar aquello le mandé unos pasajes Online para que viniese y pasásemos más tiempo juntos de este lado del globo.

Mamá 09:30 Am:

Mirán, Samir Colleman me ha llamado y me ha hablado a cerca de un joven que anoche bailó con su hija de mala manera, y me imagino que ese chico eres tú, él solo me ha llamado para contármelo como anécdota, pero me queda claro una cosa, y es que si sigues con ese juego en esa familia, me obligarás a pelearme con ellos, y no quiero tener que hacer algo como eso. ¿Crees que disfruto deshacerme de las personas? ¡Ubícate de una vez por favor hijo!

¡Bah! ¡A joder a otra parte! Les he dejado en visto a todas. No iba a deshacerme de la niña de Colleman, si por alguna razón ese tipo conoció a papá mala suerte, porque no me detendrían en la carrera de robar dinero y hacer crecer mis empresas, quiero poner un hotel más, y últimamente no ha ido bien todo esto.

Llegando a la dirección que me entregó Azeneth en un archivo adjunto (Todo esto después de bañarme, y cambiarme de traje en la casa) . Era un Campus enorme, de hecho he aparcado dentro de él. Ahora necesitaba una excusa para estar aquí. No podía ponerme a estudiar hoy mismo, sin embargo, podía pasar a buscar los requisitos que necesito, o bien de alguna forma poder dar alguna clase de lengua extranjera, bendita sea la maestría que saqué en Marrakech antes de irme a Dubai por los negocios de papá.

Cuando descendí y desabotoné un botón de mi camisa, sentí las miradas sobre mí de varios de los alumnos que pasaban, nadie hacia ningún comentario, pero bien sabía que miraban mi pinta y mi deportivo. Para este lado del globo se les ve extraño a los que se visten de traje, no lo comprendo, me parece inmensamente estúpido que así sea.

Mi celular nuevamente a vibrado y nuevamente he leído con atención, esta vez era uno de mis hombres:

Martin 12:30 Pm

El objetivo está moviéndose en dirección poniente, entra directo a la biblioteca.

Mirán 12:31 Pm

Los veo sobre las 11:00 pm en casa, no quiero retrasos, avisa a los demás. Tenemos una piedra en el camino.

Martin 12:31 Pm

No se quedará allí por mucho tiempo señor Alauî. Nos vemos.

Cuando entré en la biblioteca tuve que hacerle unos guiños a la chica que estaba cuidando aquí, no mucho después caminé por los pasillos recogiendo algunos libros para que la mentira tomara forma, y cuando la hallé dejé que chocase conmigo otra vez. La niña reacciona como el aceite a fuego alto, rápidamente se enciende. Tras unas caricias en su mejilla y un poco de drama deje una cita abierta para después. Así y más fácil me resulta la niña pipí.

Cuando acabé mi objetivo allí salí en busca de Scarlet que me esperaba en una cafetería céntrica. De hecho, cuando bajé del deportivo me pareció raro, llevaba su cabello al descubierto, pero restándole importancia me acerqué tomándole la cintura y dejándole un beso en los labios.

—Cariño discúlpame, tengo mucho trabajo.

—No te preocupes, ya estás aquí y eso es lo que importa...

—Bien, ¿Qué quieres de comer o beber pequeña?, tengo muchas ganas de que la pasemos bien esta tarde.

Scarlet se quitó las gafas oscuras y pude ver ahora con claridad como sus lágrimas corrían por sus mejillas.

— ¿Qué sucede? Amor, no llores, ya se acabó la distancia... —Sequé sus lágrimas con mis pulgares y la miré apenado, era obvio que la cagaba con mi ausencia.

—Estoy embarazada. Mirán.

— ¿Cómo? —Alcé una ceja tratando de procesar. Puede parecer estúpido, pero jamás le hice el amor a Scarlet, siempre le he dicho que para mí es sagrado esperar a la noche de bodas, mi religión así lo admite para las mujeres, y yo quería cambiarlo, y adaptarlo también para los hombres, es por eso que no he experimentado con ninguna chica aun.

—Estoy embarazada de otro Mirán. ¡Lo siento! ¡Pequeño lo siento mucho! Pero es que tú estuviste tanto tiempo fuera de Dubai...

Enfadado, defraudado era poco para todo lo que sentía. La mujer que tanto amo me falló, me hundió y me meó encima. Después de que hasta una casa había comprado para nosotros dos... Después de que ese hermoso collar de oro blanco que lleva en el cuello se lo regalé con toda la devoción que un hombre le puede tener a su mujer...

—Y te abriste de pierna al verte sola... mira que clase mujer eres Scarlet. —Murmuré con los puños como roca sobre la mesa. Mi mirada no iba a ningún lado, yo no temía mirarla y hacerle saber que me destruyó y que no quedaríamos así.

—Por favor, Mirán, hice todo porque volvieras... me dejaste sola...

—No te dejé sola Scar. ¡Te llamé cada noche!

— ¡Las llamadas no acercan a nadie! Mira, Mirán, no hay nada que decir, ya lo sabes, ¿Qué saco con quedarme aquí a qué me humilles diciéndome quizá que cosa?

—Tienes razón, no mereces nada.

Me levanté junto con ella y cuando pensó que todo había acabado, le tiré el collar dejando caer las cuentas de oro. No iba a dejar que se llevase nada de mí, me cagó todo el panorama, otra vez confirmo que ya nadie sabe hacer familia.

Ella soltó un llanto descomunal, pero su madre que la consuele, me marché dejando a todo el mundo mirando. Me importan tres pepinos ahora.

A toda la velocidad que iba, casi no distinguía los árboles, esta vez iría con todo, iba a darle en clavo a Scarlet justo ahora que enamorase a la niña Colleman. Sólo es cuestión de tiempo.

Pedí entonces que me mandasen el Link con el perfil de Instagram de lola, Azeneth lo envió, y yo no tardé en comentar una de sus fotos. Niña descuidada con cuenta pública.

Mirán_Alauî_K

¿Cuándo nos quedamos en las escaleras de nuevo?

Y no pasó mucho tiempo, para cuando recibí un mensaje de ella en mi Instagram, en donde le indiqué:

Mirán_Alauî­_K:

Pasaré por ti al Campus norte. Hoy comienzan las lecciones de conducir. 17:00 Pm.

JavieraJames2604