Extra 1: Carter y Nathaly.
Este es el primer extra del libro, espero que les guste, cabe destacar que Carter y Nathaly son los padres de Kaira y Nickolas, solo pongo lo relevante, pero si quieren conocer más con gusto continuo escribiendo de ellos en extras, o en una historia a parte, en unos días subiré el extra de Benedic y Monic, quienes se mencionan en este capitulo, pero muy vagamente, si les guste dejen su Like y recomiéndenlo, me sería de mucha ayuda, en el extra de Benedic, conocerán más acerca de está misión, así que aun falta, si tienen dudas con gusto responderá sus comentarios, besos.
Desacato
CARTER
La puerta cae frente a nosotros alzando una gran polvareda, los soldados entran abriéndonos paso, volteo a ver a mi compañero y este asiente con la cabeza y los dos entramos, los soldados se comienzan a disipar entrando en diferentes puertas, y tomando diferentes caminos, tomando todo el perímetro del lugar, y a lo lejos se pueden empezar a escuchar los disparos.
-Hay rehenes los cuales necesitan ayuda, mi Capitán –dice un soldado llegando a mí –el problema es que pueden salir heridos en el fuego cruzado y creemos que hay minas o explosivos escondidos por todo el lugar.
-Comunícame con la Comandante a cargo –ordeno, y este saca la radio y comienza a buscar contacto.
-Benedic –llamo a mi compañero, quien se acerca –necesito que regreses y traigas más soldados, no creo que los 20 seamos suficientes –digo con preocupación.
Unos gritos se escuchan y después unos disparos, los cuales hacen que mi mejor amigo y compañero en misión salga corriendo en la dirección que se escucharon, intento correr tras él, pero el soldado me detiene entregándome la radio.
-Comandante Nathaly Murphy, ¿con quién hablo? –me llega la voz femenina a través del aparato.
-Habla con el Capitán Carter O'connor –respondo –tenemos un problema, hay varios rehenes y existe la posibilidad de que todo el piso este minado, lo que hace que estemos en una bomba de tiempo –informo –necesito más soldados.
-Denegado Capitán, marque retirada, no pienso perder soldados, repito, marque retirada –dice con seriedad.
-No puedo hacer eso, es una misión en la que hemos trabajado por meses, mis hombres ya están
Me quedo en silencio cuando el soldado que estaba frente a mí me empuja, evitando con su cuerpo que una bala me vuele el cráneo, caigo al piso con la radio en una mano y utilizo la otra para sacar el arma y matar rápidamente a la persona que me estaba apuntando.
- ¡CAPITÁN! ¿QUÉ ESTÁ PASANDO? –escucho los gritos al otro lado de la radio - ¡CAPITÁN!...
Apago la radio desacatando la orden y preparo mis armas ingresando a la casa, del lado contrario por el que se fue Benedic, alzo el arma acabando con todo el que se me atraviesa, al ingresar a las habitaciones encuentro mujeres y niñas unas sobre otras tratando de protegerse, continúo avanzando, dejando que mis soldados se encarguen de sacarlas a todas a salvo, mientras yo y unos cuantos más acabamos con los captores.
Una hora después estamos saliendo con los últimos rehenes, nadie quedo con vida adentro, y todo el lugar está lleno con charcos de sangre, intestinos y casquillos, busco entre los soldados a Benedic, pero no lo encuentro, por lo que entro a la casa nuevamente y me pongo a buscar entre los distintos caminos y habitaciones que hay en ella, paso por una y me tengo que regresar de golpe cuando escucho como se rompe una mesa.
Abro la puerta y veo a una señorita en paños menores aventándole cosas a Benedic, y este esquiva cada uno de los objetos, moviéndose con rapidez hasta llegar a ella, y cuando la intenta tomar esta le da un codazo en la nariz que hace que me toque la mía cuando siento que hasta a mí me dolió.
Intento acercarme a ayudarlo, pero cuando nota mi presencia con la mano me indica que me vaya, pero niego, tratando de ingresar, pero la llegada de un soldado me detiene, cierro la puerta a mis espaldas para que nadie vea la humillada que le están dando a mi mejor amigo.
-Mi Capitán, la Comandante está afuera y exige su presencia –dice el soldado y se ve más pálido de lo que su tono de piel es.
-Dile a la Comandante que cuando pueda
- ¡Puedes ahora! –grita la Comandante llegando a nosotros - ¡Lárgate! –le dice al soldado, quien parece temblar ante el grito.
El soldado se marcha con rapidez y la Comandante Murphy llega a mi lado y no tengo tiempo de reaccionar antes de que me gire la cara de un puñetazo que me causa dolor en la mandíbula y siendo como se me parte el labio, y continúa avanzando, metiéndose a la habitación a lado de la que se encuentra Benedic, por lo que camino detrás de ella metiéndome.
Parece que el destino hubiera elegido la peor habitación que pudo, ya que hay intestinos por todas partes, al igual que sangre y cuerpos, la mujer frente a mi camina como si nada de eso le impresionara, e incluso llega a aplastar con la punta de su tacón algo que se podría creer es un pedazo de cerebro y no tiene reacción alguna.
-Desacato mi orden Capitán –dice como si tratara de contenerse de gritarme.
Nunca antes de esta misión he tratado con ella, ya que al ser una misión especial y por ser la mejor en el puesto la llamaron para comandarla a ultima hora y no tuve la oportunidad de conocerla, solo nos mandó ordenes de la misión, ya que para cuando se estuvo preparando la misión ella comandaba una misión en Irak.
-Acaso se le ocurro en la posición en que me dejo frente al consejo al desacatar la orden que di, pude haber perdido a soldados y haber explotado una calle entrara por su desobediencia –me recrimina girándose hacia mí.
-Sí, pero eso no paso, salvamos a más de 35 mujeres y niñas secuestras, que estaban siendo preparadas para su venta –digo informando de la victoria que fue la misión –y todo eso sin ninguna baja.
Camina hasta a mí y me toma del cuello del chaleco antibalas acercándome a su cara, en donde me percato del color verde claro de sus ojos y la pequeña mancha café que tiene en su pupila izquierda.
- ¡CAPITÁN! –me sacude haciéndome reaccionar –me importa un culo si la misión fue una victoria o no, mi puesto se me respeta, quiera o no una mujer es su superior, me corte los ovarios en cada entrenamiento y me sangraron cuando cumplí cada misión siendo la mejor a mi edad, ganando me el puesto de la Comandante más reconocida de todas las centrales, y no pienso perder el respeto por el que he luchado tanto por su indisciplina.
Me suelta dándome un empujón haciendo que me golpee con la puerta entre abierta que se cierra ante el contacto que tengo con ella, la mujer me observa con intenso enojo, y así a como estoy contra la puerta ella se me acerca aprisionándome para tener toda mi atención.
-Esta misión no llego a su fin, el cabecilla que me importaba escapo con varios de sus socios, y ahora sabe que vamos tras él, por lo que vamos a continuar trabajando juntos, así que espero que no vuelva a desobedecerme, o me encargare de que sea el próximo intendente de la central, ya que su puesto como Capitán es apenas nuevo tardare más en tronar un dedo a que usted sea de menor rango –me amenaza con toda la tranquilidad del mundo.
-No volverá a suceder Comandante –digo para evitarme más problemas.
La vista de la mujer frente a mi baja a mis labios y sube una de sus manos a mi quijada, limpiando la sangre que escurre por ella, y luego se aleja como si hubiera tocado fuego y sin decirme nada más me aparta, saliendo dejándome confundido, salgo siguiéndola, pero ya se encuentra a pasos de mí.
-Estará en los calabozos una semana –la oigo gritar
La forma en que camina hace que sus caderas se contorneen, causando que no pueda apartar la mirada de ella hasta que se pierde, y es ahí cuando me doy cuenta que tengo la boca abierta a causa de ella, inteligencia, fuerza, autoridad y belleza, cualidades que solo mujeres excepcionales tienen, y ella cuenta con eso y más.
NATHALY
Salgo de la casa maldiciéndome la razón por la cual lo toqué, por la cual me sentí mal después de golpearlo y amenazarlo, me subo a la camioneta que me espera, nos vamos al aeropuerto, durante todo el trayecto al aeropuerto no puedo pensar en otra cosa más que en el Capitán Carter O'connor y varias veces me sorprendo sonriendo cuando recuerdo la manera en que se quedó embobado viéndome los ojos, o la sorpresa en su mirada cuando le limpié la sangre del mentón.
Llego al aeropuerto y me cambio de tacones, ya que manche los que tenía puestos y me subo a avión privado preparado para mí, el cual me lleva directamente a Alemania, en donde en tres semanas me volveré a encontrar a Carter, para darle su castigo y preparemos un nuevo plan, lo que me recuerda que no vi a Benedic entre los soldados, así que ya en el aire le marco al Capitán.
-Comandante –contesta a través del teléfono.
-Capitán, quiero que me diga el estado del Capitán Murphy –digo –no me lo encontré en la pequeña visita, y necesito saber cómo se encuentra.
-El Capitán se encuentra bien, estaba tratando con una de las rehenes, la cual llevaremos, ya que por lo visto tiene información que necesitaremos –me informa Carter, pero puedo notar cierto cambio en su voz.
-Dígale a mi hermano que me llame –digo y cuelgo antes de que él me pueda contestar, ya que me doy cuenta que básicamente le dije que era mi hermano como si estuviera interesada de que supiera que estoy soltera.
Alejo de mi mente todo tipo de pensamientos sobre Carter y me concentro en analizar y crear una estrategia que nos sirva, pero en cada plan que hago encuentro vacíos que nos podrían poner en peligro, las horas para dormir disminuyen y el tiempo que paso en la oficina aumentan, los días se me van y cuando me doy cuenta es el día de llegada de los capitanes y la rehén.
Preparo la sala de juntas y me mentalizo para que cuando vea a Carter me comporte como lo que soy, pero todo eso se me olvida cuando lo veo llegar, el tatuaje en su cuello que se nota debido a que la camisa que trae es la de entrenamiento, así que se le nota una parte del dibujo, recuerdo en todas las fotos de mi hermano que lo vi y la vez que por accidente le di me gusta a una foto de una aplicación social de su perfil, cuando ni siquiera nos conocíamos, pero era mi gusto culposo.
Regreso a la realidad y explico el plan tratando de nunca juntar mi mirada con el que es mi distracción, pero se me es imposible, que hace muchas preguntas y nunca se calla, pero lucho contra mis hormonas, y al final sale bien, solo que al terminan me tengo que ir a cambiar, ya que su aroma y voz me dieron problema con mi ropa interior.
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