Jungkook se aferró a la mano que entrelazó sus dedos con los de él, aliviado de sentir el calor ajeno, la firmeza de su agarre.

"Creo que tenemos un poco más de tiempo antes de que sea hora del almuerzo" Taehyung dijo, mirando al frente. "¿Quieres hacer otra cosa antes de ir a comer?"

Pero Jungkook no le contestó, costándole soltar a Taehyung cuando llegaron a su coche, pues el alfa le abrió la puerta y esperó a que Jungkook subiera, el omega mantuvo sus manos sujetando al alfa, acercándola a su rostro para besarle entre los nudillos antes de dejarlo ir.

Taehyung cerró la puerta y Jungkook se quedó solo con sus pensamientos por un par de segundos.

No había salido nada mal, el cachorro estaba bien, Jungkook aún tenía bajo peso, aunque estaba mejor desde la última vez, le habían recomendado hacerse chequeos más seguidos, pero todo estaba bien, su cachorro crecía bien y no habían complicaciones.

Nacería en la segunda semana de julio, le dijeron.

En un poco menos de dos meses.

¿Dos meses? Joder.

Le dieron un par de vitaminas y le recomendaron volver para indicarle una dieta acorde a sus necesidades, pero Taehyung que había estado tratando de tranquilizarlo todo el viaje de ida y en la espera, se había quedado callado, al menos, más de lo que Jungkook podía querer.

Su mano aún seguía buscando al omega cerca y su tacto no había cambiado, pero no había mirado a Jungkook a los ojos y se veía un poco pensativo, Jungkook al igual que él, no podía dejar de pensar.

Taehyung se subió, apenas un momento después y no terminó de sentarse cuando ya estaba estirando una mano hacia Jungkook para tocarlo solamente, aunque tuvo que soltarlo para abrocharse el cinturón, aún sin girarse a mirarlo.

"Hyung" Jungkook llamó y el alfa le dio una mirada, aunque no al rostro, sino que a su cuerpo y se inclinó a él, sobresaltando a Jungkook, pero sólo se acercó a abrocharle el cinturón, pues había notado en la mañana que Jungkook no lo había hecho y optó por hacerlo él antes que decírselo.

"¿Así te ajusta o está bien?" le preguntó, con el mismo tono de siempre, pero Jungkook le tomó la muñeca para que no alejase la mano, para que no se alejase de él y Taehyung tuvo que mirarlo a los ojos.

Oh.

Se quedaron así un segundo, quizá más, pero Jungkook no sabía qué decir por el momento y estaba demasiado abrumado como para pensar rápido, Taehyung parecía en su misma situación.

Jungkook se quedó en silencio y pronto la expresión tranquila de Taehyung se desvaneció.

Contornó el rostro en una sutil mueca de tristeza y sus ojos se apagaron, aunque al mismo tiempo se pusieron un poco brillosos y abrió la boca para decir, aunque no pudo hacerlo al principio.

Tuvo que pasar un momento hasta que pudo.

"Lo siento" dijo y Jungkook sentía que el alma se le caía al piso.

No sabía por qué se estaba disculpando y no sabía si quería saberlo, no podía pensar, así que sólo soltó a Taehyung y se enderezó, dejando de mirarlo, se cruzó de brazos, aferrando las manos a su propio cuerpo y Taehyung se enderezó, quedándose en silencio también.

Y quizá, Jungkook pensó, debería haber disfrutado un poco más de lo que tuvo hasta hacía dos horas.

Las manos en él, los besos que se le daban. El pensamiento de un futuro, la sensación de protección.

Dolía. Todo siempre volvía a doler.

"Lo siento por ponerme así" Taehyung volvió a susurrar y la voz se le sintió ahogada. Jungkook se estremeció ante su tono, dándose cuenta de que realmente, no quería que Taehyung se lo dijera.

"Está bien" dijo y esperaba que fuera suficiente. "Yo entiendo"

De hecho, lo entendía.

Entendía lo que Taehyung estaba sintiendo, y estaba en todo su derecho de hacerlo, era lo que Jungkook había temido y sabía que podía pasar, sabía que era lo más probable, porque después de todo, Taehyung y él eran muy distintos.

Se quedaron en silencio nuevamente y sin mirarse, Jungkook no podía, estaba demasiado abrumado como para hacerlo y sólo escuchó el chasquido del cinturón de seguridad de Taehyung cuando lo quitó, al segundo siguiente, el alfa se inclinó hacia él y apoyó la cabeza en su regazo.

Jungkook apartó las manos de su propio cuerpo y vio a Taehyung inclinarse más hacia él, para poder descansar la mejilla en su muslo, con todo el cabello cayéndole sobre la cara, con el labio inferior entre los dientes.

Tardó en reaccionar, pero el omega le puso una mano entre los omóplatos y la otra en el pelo, sacándoselo de los ojos, viéndolo respirar temblorosamente.

"Lo siento" él volvió a decir. "Sólo...no sé qué sentir"

"Yo sé" Jungkook le aseguró, acariciándole la espalda con cuidado, no pudiendo inclinarse a besarle el pelo porque no creía que podría y no sabía si era correcto. "Era lo que trataba de decirte. No pasa nada si cambias de opinión, no quiero que te obligues a algo sólo por mantener tu palabra, no quiero hacerte eso. Sólo dímelo. Por favor"

El alfa deslizó una mano por sus piernas y se aferró a él, girando la cabeza para apoyar la frente en su muslo, quedándose así un rato, sin decir nada, sólo respirando pesadamente, Jungkook no dejó de acariciarle la espalda, con la mirada tras el parabrisas, con las manos temblándole cada vez un poco más.

Tragó duro y cerró los ojos, tratando de buscar confort en el calor que sentía en la mano que reposaba en la espalda del alfa, en la suavidad de su pelo, en su grueso aroma, en su presencia.

En él así de cerca. ¿Cuánto más podría tenerlo así de cerca?

Taehyung se quedó así un rato, con una mano en el muslo en el que apoyaba la frente y poco a poco fue relajándose, al menos, empezó a respirar con normalidad y cuando dejó salir un pesado suspiro, la voz le tembló al decir palabra.

"Lo siento" repitió y al parecer era todo lo que podía sacar por el momento. Se enderezó un poco, pero sintió frío de repente y volvió al regazo del omega, donde pudo cerrar los ojos y calmarse un poco más.

Jungkook no le negó tacto, le frotó la espalda con cuidado al igual que el cabello, no diciendo nada más y Taehyung se sintió patético.

Se sintió patético por sentirse de aquella manera cuando no era él quien estaba en la peor posición, estaba pidiendo un poco de contención cuando era él quien había prometido proveer tranquilidad y confort, ¿qué tan patético podía ser? Jungkook era un arma de doble filo, podía despertar sus instintos más primitivos y conseguir que Taehyung no buscara más que su bienestar, pero también era capaz de desarmarlo, de reducir a Taehyung a un manojo de sentimientos que no se podían sostener y eran demasiado pesados para enfrentarlos con la cabeza en alto.

Y quizá no estaba reaccionando de alguna manera que hiciera que Jungkook se sintiera seguro, pero ver al cachorro, más allá de sólo tocarlo, había tocado algo en Taehyung que aún no terminaba de procesar.

Haber abandonado a Jungkook y perderse el embarazo, nacimiento y la mayoría de la infancia de su hija era algo a lo que aún no terminaba de hacerle luto y ver a Jungkook en estado, verlo gestar un cachorro y estar con él en ese proceso estaba haciendo estragos en él, aunque no quería.

"Está bien" el omega le dijo, pero sonaba desolado, joder, Taehyung se estremeció ante su tono y los ojos le ardieron un poco más. "Perdona por hacerte sentir así"

Y Taehyung inhaló en un jadeo, molesto consigo mismo porque Jungkook tuviera que tomar también la responsabilidad de cómo se sentía y aunque le hizo frío, se enderezó, con una mano aún sujeta al muslo del omega, que dejó su mano sobre Taehyung y la deslizó por el cuerpo del alfa a medida que éste se sentaba correctamente en su asiento.

Se miraron a los ojos por unos cuantos segundos antes de que Taehyung hablara.

"No te tienes que disculpar" negó, frunciendo un poquito las cejas pero en reacción a su propio tono de voz, que sonó ronco y tembloroso. "Soy yo quien me está haciendo sentir así"

"No" Jungkook fue el que sacudió la cabeza. "Es que te estás dando cuenta de lo que- de lo que de verdad implica y va a implicar quedarte conmigo"

Taehyung lo miró, angustiado y Jungkook tuvo que presionar fuerte los labios, sacando voluntad de donde fuera para poder decir.

"Yo quiero estar contigo" le dijo y los ojos se le llenaron de lágrimas, poniéndole una mano en la cara, sólo queriendo que Taehyung lo abrazase y lo besase, que le dijera que era bueno que su cachorro estuviera bien, que irían a comprar juntos las vitaminas que le habían recetado, que-

Que hicieran las cosas que no pudieron hacer.

Pero era esperar mucho, Jungkook no podía ser egoísta y pretender que Taehyung fuera el padre de su cachorro cuando sabía que no solamente no le correspondía, sino que también sería sumamente doloroso para él.

Y quizá aún se estaba a tiempo.

"En dos meses, voy a tener a mi cachorro" Jungkook le dijo, pero el alfa ya debía saberlo, él estuvo ahí cuando se lo dijeron. "Ya elegí tenerlo. Quiero tenerlo. Y yo no quiero, en serio no quiero que te quedes conmigo si te sientes así. No es justo para nadie"

"Es que no es eso" Taehyung exhaló, negando otra vez con la cabeza, sintiéndose ahogado. "Es sólo que-"

"Taehyung hyung" Jungkook le llamó y esta vez le puso las dos manos en las mejillas, mirándolo a los ojos. Se dio un momento y se acercó a besarlo, apenas presionando sus labios en él, pero Taehyung respiró sobre su boca, como si hubiera necesitado ese beso.

Jungkook tuvo que separarse para mirarlo a los ojos, sintiendo la presencia del alfa en el alma, sintiendo que tocaba la de él con las manos.

"Yo no quiero que tomes responsabilidad por nada, ya te lo he dicho. Yo no quiero que no hagas nada que no te corresponda. Pero los dos tenemos que entender que- que si nos vamos a sentir así, si mi cachorro te va a hacer sentir así- yo no puedo hacer eso. No puedo. Entiéndeme. Por favor"

Taehyung inhaló por la boca y se atrevió a acercarse a volver a besarlo, deslizando la mano en el muslo de Jungkook hacia arriba para rodearle la cintura y atraerlo un poco más a él.

"No me sentí así- por lo que crees. No" él murmuró y volvió a agachar la cabeza ante el omega, en vergüenza o en angustia, Taehyung no sabía, sólo sabía que necesitaba de las manos que lo sostuvieron y tuvo que encogerse para sentir que podía refugiarse en el tacto del omega. "Es sólo que no dejo de pensar en todo el tiempo en el que no estuve. Las cosas que me perdí. Las cosas que podríamos haber hecho. Me duele no haber visto a Haerin cuando nació, cuando- cuando aprendió a hacer todo. Me duele que hayas estado solo en todo esto, que hayas estado- con Minhyuk, que él haya estado. Me duele demasiado"

Jungkook no pudo contestarle.

"No deja de dolerme" Taehyung insistió y no lo soltó en ningún momento. "No quiero separarme de ti, no quiero separarme nunca más de ti, ni de Haerin. Y yo sé que cuando tu cachorro nazca, no voy a poder evitar quererlo porque es tuyo, Jungkook-ah. Y yo- yo no puedo hacer más que amar todo lo que venga de ti, Jungkook"

Taehyung volvió a alzar la cabeza y cubrió las manos de Jungkook con la suyas, juntando frentes con él.

"Me duelen las cosas que te hizo, las cosas de las que no te pude proteger" le dijo y Jungkook se quedó rígido, no pudiendo decirle que no dijera más porque el cuerpo no le respondía y sabía que no era la intención de Taehyung, pero qué degradado se sentía cuando pensaba en las veces que permitió que Minhyuk le pusiera un dedo encima. "Pienso mucho en todo eso, Jungkook-ah. A veces ni siquiera sé si quiero saber todo lo que te hizo todo este tiempo"

"Ya" Jungkook pudo exhalar, en un gemido dolido. "Por favor"

"Sé que te ha lastimado tanto y que aunque no esté, sigue presente de alguna manera" él dijo y Jungkook dejó de mirarlo, pareciendo a punto de largarse a llorar. "Quiero encontrar la manera en la que el dolor que ha provocado no dictamine cómo vivimos. Es todo lo que quiero. Yo no te dejaría por nada" el alfa le aseguró y apretó las manos del omega, no queriendo soltarlo. "Todo lo que hablamos, lo que te prometí, sigue vigente, eso no va a cambiar. Sólo no puedo evitar que me duela. Yo jamás quiero lastimarte, jamás quiero que lleves el peso de mi arrepentimiento. Quédate conmigo" Taehyung le suplicó. "Quédate conmigo para siempre, Jungkook-ah"

Y Jungkook cerró los ojos cuando Taehyung lo abrazó, un poco incómodos los dos, pero se aferraron el uno al otro, oh, Jungkook pasó las manos por debajo de los brazos del alfa para ponerlas sobre su espalda y apoyó la boca en su hombro, con los ojos cerrados, llenándose de aquel aroma.

El corazón le ardió y murmuró apenas.

"Por favor" le pidió, bajito. "No le guardes rencor a mi bebé por las cosas que su padre hizo"

Y Taehyung lo apretó más contra sí, exhalando con la boca abierta, esperando que eso deshiciera el nudo en su garganta.

"¿Cómo puedes pensar que yo haría algo así?" dijo, pero no se oía a reclamo, más bien había dolor en su voz.

"No lo sé" Jungkook le contestó, aún con los ojos cerrados, recostándose en el hombro del alfa para poder inhalar su esencia desde su cuello, acercándose a apoyar la punta de la nariz en la piel que la camisa que llevaba dejaba al descubierto. "No quiero que me dejes. Pero tampoco quiero que te quedes si estar conmigo hace que todo duela"

"Estar contigo no es lo que me duele" Taehyung le aseguró. "No haber estado es lo que me duele. Aún no lo supero. Yo voy a estar bien, sólo...entiéndeme. ¿Sí? Quisiera poder estar bien todo el tiempo, pero hay algunas cosas que me superan. No quiero que lleves esa carga, sólo permíteme sentirme triste por las cosas que han pasado"

Taehyung dejó de decir y la garganta le ardía, casi quejándose cuando el omega se apartó de él, pero volvió a sentir sus manos en la cara, en sus mejillas y el beso que se acercó a darle fue dulce.

Fue tan dulce, Taehyung dejó de respirar y se derritió ahí, con los ojos ardiendo y el corazón angustiado, pero Jungkook le limpió el atisbo de una lágrima con el pulgar y qué patético podía ser. Jactarse de ser un alfa hecho y derecho durante toda la vida lo hacía ver patético cuando el estatus se le desintegraba en las manos del omega que adoraba.

Jungkook volvió a besarlo y Taehyung quería esconderse en su regazo, cerrar los ojos y llorar como pocas veces había hecho antes, cuando peleaba con sus padres porque querían que fuera a la universidad en la ciudad y Taehyung se negaba a dejar a sus abuelos, a sus amigos, a él, y Jungkook era el único al que podía confiarle ese miedo, ese enojo, el único al que Taehyung dejaría que lo consolara. ¿Cuándo fue la última vez que lloró frente a alguien? Llorar de lleno, con sollozos y lágrimas incontrolables, la última vez había sido hacía tanto tiempo, honestamente, Taehyung no había tenido mucho en su vida que le provocara tal inmensa tristeza como para hacerlo llorar.

Jungkook, sin embargo, siempre tocaba una fibra sensible en él sin siquiera intentarlo, era parte de lo que lo hacía él, era parte de lo que los hacía a ellos, así, juntos.

Taehyung apartó el rostro de él y volvió a encogerse contra el omega, agachando mas la cabeza hasta que se encontró con su vientre, acurrucándose ahí, volviendo a recibir la mano en el pelo y la otra en la espalda.

"A pesar de todo" Jungkook le dijo, en voz baja y Taehyung no lo podía ver, pero estaba estirando la comisura de los labios apenas, en una pequeña sonrisa triste. "No has cambiado en nada"

"Puedo ser bastante patético" el alfa se quejó, con los ojos cerrados. Jungkook bufó una sutil risa y asintió.

"Alfa patético y baboso, ¿son cualidades innatas o adquiridas?" le preguntó y Taehyung sonrió sin gracia, frotando el rostro en la ropa del omega, que olía a limpio, a él, a ellos dos.

Oh.

"No sé cuál opción es peor" dijo y las caricias en la espalda lo relajaron, ah, quizá estaba bien ser patético por cinco minutos y tomar el consuelo de su omega encinta, porque a pesar de siempre remarcar su estatus como alfa, no podía evitar que Jungkook hiciera que todo fuera equitativo.

Porque con él todo siempre era correspondido.

"Me gustan los alfas patéticos que proveen" el omega le dijo, tratando de alivianar el ambiente y no hacía falta, sus manos gentiles eran suficientes para calmar una tormenta. "También me gustan los babosos que se obsesionan conmigo"

"Qué bueno" Taehyung sorbió la nariz, regresando la mano al muslo del omega, sujetándose de él. "Porque estoy un poco obsesionado contigo"

"Mh, eso me agrada" él sonrió esta vez un poco más ancho y le sacó el pelo de la cara, pero Taehyung mantuvo sus ojos cerrados, calmándose en su amparo. "Perdona por haber asumido lo peor. Fue automático. A veces no dimensiono que alguien pueda llegar a quererme como me quieres"

"Yo te adoro" el alfa lo corrigió. "Y quiero que estemos juntos. No quiero nada más"

Y Jungkook sólo pudo peinarle el cabello con los dedos, sintiendo al alfa relajarse contra él. No podía dejar de mirarlo, a su bonito perfil, a la nariz que se había pintado de un sutil rosado por las ganas de llorar y de seguro la espalda le dolía por la posición, pero Jungkook no lo apartó hasta que Taehyung no lo hiciera por su cuenta.

Se quedaron así un rato más, hasta que Taehyung se enderezó, aún con los ojos cerrados, sonriendo cuando Jungkook le acarició la mejilla con los dedos.

"Gracias" murmuró, sorprendiendo a Jungkook. "Hacía mucho que alguien no me abrazaba así. Estoy aliviado de poder seguir sintiéndome así contigo. Estoy agradecido de que sigas siendo tú"

Jungkook no supo contestarle y sólo volvió a abrazarse a él, riéndose cuando esta vez fue estrechado en brazos.

"Okay, vuelvo a ser alfa. Ven aquí" Y Taehyung buscó su boca desesperadamente, besándolo quizá un poco fuerte, pero a Jungkook no le importaba, porque fue él quien lo besó aún más fuerte y se rió cuando el otro jadeó un poco demasiado necesitado, con las manos yendo a su cintura para meterse debajo de la ropa.

"Déjame" Jungkook casi le gruñó, pero estaba sonriendo. "No me vas a tocar aquí"

"¿Dónde entonces?" Taehyung le preguntó, pero obedeció, volviendo a tocarlo por sobre la ropa, pero no se conformó con solo una parte, pues deslizó las palmas abiertas a sus muslos y Jungkook le mordió el labio en regaño. "Dime dónde. Vamos hacia ahí"

"Preferiblemente" el omega le respondió, quizá un poco demás animado. "Donde estemos solos"

Taehyung se separó un poco y lo miró a los ojos, pensando un largo rato antes de presionar los labios que tenía hinchados y babosos por los besos.

"No se me ocurre mucho" admitió y miró un segundo al asiento trasero del auto, como si lo contemplara, pero Jungkook le golpeó el hombro, haciéndolo reírse. "¿Qué?"

"Ni siquiera lo sueñes"

Y regresó a hacer pucheros, Jungkook no pudo resistirse a él y volvió a recibir sus besos, quejándose poquito cuando sintió un tirón en su espalda, por lo que Taehyung incomodó su propia posición para que Jungkook se sentara más cómodo en su asiento.

"No estoy para estas posturas" el omega se rió e hizo reír al alfa, que le pasó una mano por la panza y después subió esa misma mano a su rostro, acariciándole los labios con el pulgar.

Jungkook abrió los ojos y miró a Taehyung frente a él, el corazón acelerándosele un poco más cuando vio destellos dorados en los iris del alfa, su mano en su cara se deslizó a su cuello y frotó donde Jungkook fue marcado, pero el solo tacto del alfa despertó el lobo en él y le hizo casi rogar por pertenecerle.

Oh.

"Jungkook" le dijo y volvió a besarlo, Jungkook exhaló encantado con el tacto que le hizo ver estrellas y le estremeció el cuerpo entero. "Sé mío, Jungkook"

Si habían sacado algo bueno de aquel mar de emociones en donde se ahogaron por un segundo, además de ser sinceros y encontrar consuelo en el otro de las cosas que los agobiaban, fue aquello.

El alfa no apartaba las manos de Jungkook y el omega se regocijó en ello, teniéndolo siempre cerca, su mirada siempre yendo a él, recibiendo un pequeño beso en la mejilla o la nariz en su pelo cuando Taehyung consideraba que había pasado mucho tiempo sin sus rostros a meros centímetros.

"Tengo que ir al mostrador para pedir las vitaminas" él anunció, mirando al alfa a la cara y tardó en tener su atención. "Vamos a pagar y después te dejo llevarme a almorzar" Jungkook le sonrió, sin dejar de mirarlo a los ojos y Taehyung no se resistió, se acercó un poco más y después de revisar a su alrededor, le dio un pequeño beso y Jungkook no sintió la necesidad de esconderse, simplemente alzó el rostro para que el beso durase un poco más y cuando Taehyung se apartó, estaba sonriendo, los dos sonrojados.

"¿No necesitas nada más?" él preguntó, revisando la farmacia más allá, en la zona de perfumería. "Tu cabello huele diferente"

Jungkook alzó las cejas hacia él porque, de hecho, había usado el shampoo en casa de los abuelos porque dejó el suyo en casa de sus padres.

"Hoy me siento proveedor" Taehyung bromeó y Jungkook tuvo que reírse, alzando una mano para cubrirse la boca. "Si te puedo comprar algo, ¿Haerin no necesita algo? Hablando de ella, deberíamos ir a comprarle unas cuantas sábanas y algunas cosas para el cuarto" él no esperó respuesta y rodeó los hombros de Jungkook con el brazo, trayéndolo a su lado para caminar directo a las góndolas.

Jungkook sintió un pequeño escalofrío ante el contacto, pero pasó su brazo para rodear la cintura de Taehyung, sujetándose de su camisa, haciendo al alfa sonreír.

"La próxima semana me van a asignar un proyecto" Taehyung comentó, deteniéndose cuando Jungkook se asomó a ver en una de las góndolas con él en busca de algo para sí mismo también. "Me darán un bonus en el trabajo y es una oportunidad para hacer valer mi puesto. Me promovieron hace poco, así que es mi momento de brillar"

"Estoy seguro de que te irá bien" Jungkook le dijo y cuando lo miró, le sonrió con interés. "Entonces, ¿no escatimo en llevarme lo que quiera?"

Y aunque se lo dijo en broma, los ojos del alfa brillaron, oh, Jungkook se rió de él y para él, el omega no lo podía saber, pero verlo sonreír a pesar de todo hacía que Taehyung sintiera paz en el corazón.

Al fin, al fin.

Dejaron la farmacia con más cosas de las que Jungkook pretendía llevarse, las vitaminas, que era lo primordial, shampoo y acondicionador del que siempre solía usar, un jabón que clamaba ser neutro y que Taehyung sugirió porque según él intensificaba el olor natural del cuerpo, y Jungkook decidió complacerlo, pidiendo una que otra tontería que no comprendía mayor gasto, pero el alfa se veía contento de poder proveerle ciertos gustos.

Fueron a almorzar y Jungkook pudo relajarse, sentarse en una mesa de un restaurante de la zona a comer y no pensar en nada más, reírse y charlar con Taehyung, que disfrutaba mucho de hablar de las cosas que hacía, de la gente que conocía, y vaya que le gustaba quejarse de su trabajo.

"Para mí. Para mí, eh" el alfa empezó y la expresión de disgusto podía ser bastante atractiva. Jungkook lo miró divertido. "Esos dos tienen algo"

"Qué intriga" Jungkook dijo, casi burlándose de él, pero Taehyung asintió con la cabeza, coincidiendo con su acotación. "Las relaciones con compañeros de trabajo nunca terminan bien" añadió, tomando su vaso de jugo para darle un sorbo y vio la expresión del alfa cambiar.

Oh.

Jungkook le alzó las cejas y Taehyung chasqueó la lengua.

"Tienes razón" él asintió y Jungkook sólo lo miró, demasiado inseguro de si quería preguntar, de si quería saber. Taehyung fue rápido en cambiar el tema. "Hace unos días hablé con Hoseok y con Jimin" dijo, sonriendo nuevamente, ladeando la cabeza hacia el omega. "Les conté que estamos juntos. Están felices por mí. Se lo he dicho también a mis padres. Y a mi jefe"

"¿Yoongi hyung?"

Ah.

Taehyung trató de no parecer tan obvio, pero se estremeció un poco ante la voz de Jungkook decir el nombre de aquel omega.

"Te escuché llamar así una vez a tu jefe" el omega señaló, dejando su vaso de lado. "Si le llamas hyung, deben ser cercanos"

"Sí, lo somos" Taehyung asintió y no pudo apartarle la mirada. Se quedaron así, encarándose el uno al otro, a mitad del almuerzo, apartados en una mesa del restaurante que más los tentó mientras paseaban por la pequeña ciudad buscando un lugar donde comer.

Jungkook fue el primero en dejar de mirarlo y dio otro bocado a su comida, joder, Taehyung exhaló por la boca y simplemente decidió ser sincero.

"Él suele preguntarrme por ti" Taehyung dijo y quizá habría querido mantener el buen humor todo el día, pero si habían acordado sincerarse, no le quedaba de otra que hacerlo del todo. Jungkook dejó de masticar de golpe y tragó sin más, volviendo a alcanzarse su vaso de jugo para beber otro sorbo.

"¿Por mí?" preguntó, desconcertado y Taehyung asintió, dejando salir un pesado suspiro.

"Yoongi hyung- hasta hace unos meses, cuando yo se lo dije, Yoongi hyung estuvo en una especie de relación con Minhyuk"

Jungkook no reaccionó, al menos, no cambió la expresión de desconcierto que había mantenido.

"Sé que lo sigue molestando, pero Yoongi hyung no quiere saber nada de él. Quizá deberías saberlo. Él suele sentirse muy culpable por ti, siempre me pregunta cómo estás" el alfa tragó un poco. "Es un amigo muy cercano. Realmente, él no tiene la culpa-"

"No tienes que excusarlo, hyung" el omega dijo, en voz baja. Taehyung lo vio presionar los labios y aunque no parecía tristeza del todo, había cierta amargura en su mirada. "Minhyuk- no es la primera vez que me hace algo así. Si es un amigo preciado para ti, entonces es alguien a quien quiero respetar. No quiero hablar de Minhyuk. No hablemos de él. Por favor"

"Okay, okay" el alfa asintió y extendió su mano hacia el omega, que la tomó para entrelazar sus dedos, relajando un poco la tensión en sus músculos cuando Taehyung le sonrió suavemente. "Es que Yoongi hyung es un amigo de años y también es mi superior. Y tú eres mi pareja, mi omega. Quiero que te sientas seguro en mi entorno si quiero integrarte a él"

"Y yo realmente aprecio eso. Es lo que más aprecio. Gracias" Jungkook le tomó las manos con las dos suyas y Taehyung se derritió, sintiéndose sonrojar poquito en las mejillas cuando el omega alzó su mano y le besó los nudillos. "Sigue contándome de las cosas que hacías. Recuerdo que llorabas porque no querías ir a la universidad, pero incluso hiciste un posgrado"

"Me quedé a la mitad del posgrado" Taehyung lo corrigió, con una mueca. "Conseguí el empleo que quería y tuve que dejarlo para tomarlo, no iba a tener otra oportunidad así. No me arrepiento, pero es algo que quiero terminar"

Y Taehyung lo miró y esta vez, la mirada de Jungkook sí reflejaba un poco de tristeza, pero no dejó de sonreír.

"En algún momento te voy a obligar a que lo retomes" él dijo, sin dejar de lado la linda sonrisa, levantando un poco de arroz de su plato para meterlo en su boca, diciendo mientras masticaba. "Cuéntame" le pidió. "Todas las cosas que hacías"

Y Taehyung lo hizo para complacerlo, quizá con un poco de pesar porque de hecho, él había concretado muchas de las cosas que Jungkook y él habían planeado juntos, y cada vez que tragaba saliva le sabía amarga porque aunque Jungkook lo escuchaba con atención y con los ojos grandes curiosos, podía ver en su expresión que había algo que faltaba en él, algo que era demasiado grande en él.

La carencia de sueños cumplidos.

Terminaron de comer y Taehyung no dudó en ofrecerle a que fueran por un postre, helado preferiblemente, queriendo mimarlo aunque fuera con algo diminuto y consiguió que Jungkook le aceptase un helado y el par de aretes que vieron en una vidriera mientras caminaban entre las tiendas del centro de la ciudad.

"¿Qué te parece si lo compartimos?" el omega sugirió y sonreía, no había dejado de sonreír aunque el rastro de esa mirada melancólica seguía en él. "¿Se te curó la perforación que tenías?"

"Creería que sí" Taehyung se tocó la oreja mientras alcanzaban su coche estacionado a un lado de la acera donde se permitía y como siempre, se acercó a abrir la puerta para Jungkook, pero no lo dejó subir, asomándose a él para encerrarlo entre su cuerpo y el auto. Taehyung tocó con los dedos su lóbulo y sintió la carne cicatrizada entre los dedos cuando apretó. "Me la puedes hacer otra vez si quieres. Esta vez no lloraré"

Jungkook se rió y Taehyung se inclinó a darle un pequeño beso.

"Si te subes encima para hacerla, creo que incluso podría disfrutarlo" murmuró y el omega arrugó la nariz.

"Sucio" le dijo, pero estaba sonrojado. "Tú siempre me quieres encima"

Y Taehyung se rio un poco más relajado, aliviado de que pudieran seguir bromeando y quiso volver a besarlo, pero no lo hizo porque escuchó que alguien se dirigía a ellos, es decir, a él claramente no, pero sí a Jungkook.

"Jungkook oppa"

Oh.

Taehyung retrocedió un paso de inmediato cuando escuchó esa voz y se giró a un lado al mismo tiempo que Jungkook, que perdía la sonrisa y el alfa alzó las cejas ante la muchacha que clavó los ojos en él, mirando a Jungkook por un solo segundo antes de regresar la mirada a Taehyung.

Joder.

"Buenas tardes, Mara" Jungkook dijo y forzó una pequeña sonrisa, su mano en el pecho de Taehyung retirándose lentamente y ella miró al omega, con la boca un poco abierta, intrigada. "Hace mucho que no nos saludamos. ¿Ibas a trabajar? ¿No es muy tarde?" Jungkook trató de sonar casual, haciendo a la muchacha reír un tanto forzado.

"Sí, de seguro me regañan otra vez" dijo, regresando la mirada al alfa, que la saludó con un asentimiento de cabeza que la hizo sonrojar.

Jungkook se quedó rígido y no miró a Taehyung cuando habló.

"Este es Kim Taehyung" dijo, llamando la atención del alfa, quizá sorprendido de que Jungkook lo presentara, lo que hizo al omega sentirse un poco culpable.

Taehyung podía ir por ahí exclamando orgulloso que Jungkook era su pareja -su pareja, dios santo- y ¿por qué Jungkook no podía hacerlo también?

"Es el papá biológico de Haerin-ah"

Bueno, aún era un poco tímido como para exclamarlo.

Mara alzó las cejas, mirando al alfa que le sonrió con amabilidad.

"Es un gusto" él dijo, volviendo a asentir hacia ella y Mara le devolvió el gesto, Jungkook sabía que ella lo reconocía de aquella vez, la primera en la que él y Taehyung volvieron a verse.

Qué vueltas daba la vida.

"Ya nos habíamos visto" ella dijo y Jungkook se tensó. "Te vi con Haerin-ah una vez, ¿cierto, Taehyung-ssi?"

Jungkook fue el que se mostró sorprendido.

Miró a Taehyung y éste mantuvo la sonrisa, asintiendo con la cabeza.

"Claro, lo recuerdo. Haerin-ah me dijo que eras amiga de Jungkook-ah"

El omega no quiso aclarar que no eran exactamente amigos íntimos, pero...

Mara lo miró un poco más, con los ojos abiertos de par en par y Jungkook exhaló, un poco sonrojado, ese sólo gesto siendo suficiente para que el alfa notase su incomodidad y le puso una mano en la cintura para frotarle poquito.

"Qué bueno saludarte, Mara" Jungkook dijo sin más, volviendo a sonreírle. "Yo creo que llegas muy tarde"

"Sí, cierto, ¿no?" ella balbuceó y avanzó un par de pasos en la dirección que debía marchar, por lo que quedó del lado contrario a donde los había interceptado, por lo que Jungkook tuvo que girar la cabeza para mirarla, al igual que Taehyung. "La última vez que nos vimos dijimos que íbamos a tomar algo para ponernos al día y nunca lo hicimos"

"Cierto" Jungkook asintió. "Puede que en estos días"

"Okay~" Mara asintió, dándole una mirada a Taehyung y después a Jungkook, moviendo las cejas de una manera rara y el omega se sonrojó un poco más.

"Adiós, Mara"

"Muchísimo gusto en conocerte, Taehyung-ssi" ella exclamó y se dio vuelta para irse, joder, Jungkook resopló, sintiendo la cara caliente y cuando Taehyung lo miró, se veía intrigaod.

"¿Es la de los alfas altos y guapos?"

Jungkook volvió a resoplar, sacudiendo la cabeza.

"¿Qué?"

"Haerin me dijo algo así" señaló, de alguna manera enternecido con el rubor en la cara del omega. Se inclinó a besarle la esquina de la boca y no pudo hacer mucho más porque Jungkook se subió al coche, inquiriendo cuando Taehyung se subió también luego de unos segundos. "¿La conoces hace mucho? Cuando Haerin y yo salimos a comprar comida una vez cerca de la casa de tus padres, me crucé con ella. Saludó a Haerin, pero ella no quiso charlar mucho. Me contó que es amiga de ese omega. Jihoon"

Y cuando se giró a mirarlo, Jungkook estaba presionando los labios un poco disgustado.

"¿Podemos no hablar de eso?" él le pidió y se recostó por un segundo en el hombro del alfa que estiró la mano para frotarle el muslo.

"Por supuesto" asintió. "Sólo intento conocer a la gente que tienes alrededor, sea buena o mala"

Jungkook tomó la mano de Taehyung con las dos suyas para acariciarle los dedos, pero el alfa tuvo que soltarse, aunque tomó la mano de Jungkook para acercarla y poder darle un beso antes de dejarlo para poder conducir.

"Mis compañeros de trabajo son más decentes que los amigos que he tenido" Jungkook comentó, abrochándose el cinturón, frotándose la panza con las dos manos, antes de entrelazar los dedos sobre su regazo. "Paso la mayor parte del tiempo con ellos, así que es un alivio"

"¿Sí?" Taehyung sonrió, quizá emocionado de que Jungkook quisiera hablar de sí mismo. "¿Cómo son?"

Y el viaje a casa de sus padres fue más liviano de lo que Jungkook pensaría, estaba un poco ansioso, sí, pero nada que Taehyung no pudiera apaciguar, con su linda sonrisa, la tranquilidad en su aura, su mano cálida en Jungkook cada vez que podía estirarla hacia él para frotarle las manos, la pierna o el abdomen. Hizo el viaje soportable y demasiado corto, quizá Jungkook estaba ya sintiendo malestar cuando se encontraban a pocas calles de la casa y cuando se detuvieron enfrente, el alivio que lo inundó cuando no vio el auto de su padre en la casa fue irracional.

"¿Quieres esperar un segundo?" Taehyung le preguntó y habría sugerido entrar él solo, mas no creía que debía, por más estrés que quisiera ahorrarle a Jungkook, no era lo que correspondía.

El omega negó.

"No" dijo y se desabrochó el cinturón, poniendo la mano sobre la manija de la puerta. "Sólo no me dejes solo"

Y no tuvo que recibir respuesta, Jungkook abrió y bajó por su cuenta, esperando a que el alfa se pusiera a su lado para cerrar la puerta y después de un largo suspiro, avanzó. Fue un debate, pero Jungkook se adentró en el patio delantero sin más y llamó a la puerta, no dándose tiempo a pensar, a debatir o dudar.

Cuando Taehyung se paró detrás de Jungkook, contuvo el impulso de acercarse a confortarlo con una mano en su espalda, el hombro o sostener su mano, esperó, con el mismo nudo en la garganta que había sentido la última vez que estuvo en esa casa hacía unos días y tensó los hombros cuando la puerta se abrió.

Jungkook pensó en los tres días que estuvo fuera que cuando llegara el momento y tuviera que volver a esa casa, se obligaría a mantener la compostura, pero cruzó miradas con su madre y se sintió diminuto.

Insignificante, inane.

Se quedó quieto mientras su madre lo escrutaba, primero a él, después detrás de él, a Taehyung. Jungkook inhaló cuando la mirada de la omega regresó a él y ella presionó los labios.

"Buenas tardes, Jungkook"

Los ojos se le llenaron de lágrimas.

"Hola" pudo decir sin más y la voz le salió casi sin aliento, dejando de mirarla porque necesitaba salir de ahí con la cabeza en alto. "Vengo por mis cosas. Perdona si no es un buen momento"

"Tu padre no está" ella dijo, casi con el mismo tono de voz. "Creo que es un buen momento"

Por supuesto.

Jungkook sólo asintió y esperó, no supo qué, con los labios presionados y el corazón latiéndole fuerte, y se sobresaltó cuando sintió una mano en la espalda.

"Buenas tardes" Taehyung dijo, con un pequeño asentimiento de cabeza. "Trataremos de tardar lo menos posible"

"Taehyung hyung, vino a ayudarme" Jungkook dijo. "No puedo solo"

"Está bien. Pasen" su madre asintió, haciéndose a un lado y Jungkook tragó duro, pero avanzó, con Taehyung detrás, los dos pidiendo permiso mientras su madre cerraba la puerta y Jungkook sintió el olor de la casa, tan común como todo, como una puñalada al corazón.

Jungkook se quedó rígido por un momento, pero la mano de Taehyung en su espalda lo hizo avanzar, joder, lo hizo lo más rápido que podía y fue a la habitación, pudienod respirar al fin cuando llegó a la misma y se dio un momento para cerrar los ojos, encogiéndose en sí mismo y la mano en su espalda subió a su pelo y se deslizó a su rostro, mientras Taehyung se paraba frente a él.

"Terminemos rápido así podemos ir a dejar todo a casa de los abuelos antes de ir por Haerin. ¿Te parece bien?" él murmuró en voz baja y Jungkook asintió, presionando fuerte los labios para no hacer ningún sonido, pues no creía que algo inteligible saldría de su boca si se atreviera a hablar.

Taehyung la besó la mejilla antes de dejarlo ir y se alejó un poco, no sabiendo por dónde empezar, oh, Jungkook miró a su alrededor y el corazón dolió, porque encontró la ropa que había dejado para lavar ahora limpia doblada sobre su cama, la que le correspondía a él en la suya y la de Haerin en la cama más pequeña a un lado.

"¿Necesitas unas cajas?"

Jungkook se giró a mirar a su madre y apretó aún más los labios, hasta que palidecieron. La miró por dos segundos y terminó asintiendo con la cabeza.

"Por favor"

Ella se marchó y Jungkook volvió a inhalar con la boca, acercándose al armario para buscar los bolsos y las cajas que no había terminado de desempacar cuando regresó a casa de sus padres, Taehyung sólo lo miró pero el omega no podía devolverle la mirada, joder, dejó los bolsos sobre la cama y uno lo destinó para guardar la ropa.

El alfa no dijo nada, ni al ver los ojos tristes de Jungkook ni cuando su madre volvió a aparecer en el marco de la puerta, con dos cajas que quizá eran demasiado para las pocas pertenencias que Jungkook tenía.

Se acercó a recibirlas, murmurando un pequeño agradecimiento y tanto ellos como ella no supieron qué debía hacer.

"¿Necesitan ayuda?" preguntó en un hilo de voz y Taehyung negó, dejando una de las cajas en el suelo para la otra pesarla en la cama donde él sabía que su cachorra dormía, para poder empezar a guardar todo.

"Gracias" Taehyung dijo por lo bajo una vez más y la omega asintió, dejando de mirarlos a los dos.

"Si necesitan algo, pueden pedirlo"

Y cuando se marchó, Taehyung sintió un profundo malestar en el centro del pecho, se giró a mirar a Jungkook y lo vio alzar una mano mano para limpiarse las lágrimas que le caían por las mejillas, oh, dejó todo y se acercó a abrazarlo, pero Jungkook tensó los hombros, rechazando el gesto.

Oh.

"Terminemos rápido, por favor" le pidió, sorbiendo la nariz mientras guardaba toda la ropa bien doblada y Taehyung sólo se acercó a dejar un beso en su hombro, alejándose de él para tomar el reloj y el peluche de Haerin y guardarlo en la caja.

Quitó las estrellas del techo para también empacarlas, Jungkook le señaló cómo guardarlas para que el pegamento no se arruinara y a Taehyung le dio tristeza, también, buscar el cofre de Haerin donde recordaba que ella le había mostrado que lo guardaba, tomar el marco de fotos de la mesita de noche, sus libros, sus dibujos pegados con apenas un poquito de cinta en la madera del estante para los libros, de la puerta del armario. Los acomodó en uno de los cuadernos que encontró y lo metió en la caja, terminando con todo lo que no implicara ropa en menos de veinte minutos.

La mayoría de cosas si es que no todo era de Haerin y Jungkook continuaba acomodando el bolso, sentado en la cama esta vez, cuando Taehyung cerró la caja, aclarándose la garganta antes de decir.

"Las cosas de Haerin ya están" murmuró, con suavidad. "¿Hay algo más en otro lado?"

"En la cocina" Jungkook dijo, en voz baja, sin mirarlo. "En el refrigerador, está el calendario de Haerin. Está su taza y su vaso favorito, también algunas cosas que me traje del departamento, pero...no importar"

"Preguntaré" Taehyung asintió y Jungkook hizo pucheros cuando el alfa se acercó a él y le tomó las mejillas con las manos, alzándole el rostro para inclinarse a besarle la frente. "Después te dejo perforarme la oreja. ¿Eso te consolaría un poquito?"

Y lo hizo estirar una sonrisa triste, Taehyung le apretó las mejillas para hacerlo quejarse y dejó la habitación con una pequeña sonrisa y la caja vacía en las manos, aunque el gesto se le fue cayendo a medida que se acercaba a la cocina y escuchaba sonidos venir de ahí, por lo que se adentró con cautela.

"Jungkook me dijo que-" pero dejó de decir, porque la madre del omega había dejado varios utensilios en la mesa de la cocina y la mujer se giró a mirarlo cuando lo escuchó.

"Todo lo de aquí es de él" ella dijo, dejando una sartén sobre la mesa. "Revisaré otra vez para asegurarme de que no haya quedado algo"

"Gracias" el alfa dijo sinceramente y acomodó como buenamente pudo todo en la caja, quizá debería envolverlo con papel o algo, pero no prescindía de materiales, ni tiempo.

Taehyung alzó la mirada y miró el refrigerador, el calendario que resultaba ser una lámina de imán del tamaño de una hoja de cuaderno, con un bolígrafo colgando de la misma, donde veía la letra de Haerin anunciando los eventos de los días, de lunes a domingo y sonrió con ternura ante lo escrito en los días sábado y domingo.

Mi papá viene a verme ♡ jugar y divertirme mucho

Sacó el calendario del refrigerador y notó también un dibujo de Haerin pegado en la puerta, leyendo la dedicatoria aunque la letra parecía un poco más desordenada, menos entendible y el corazón se le desbocó al notar también que el papel parecía un poco viejo.

Oh.

Lo dejó donde estaba, girándose a guardar el calendario y alzó la mirada cuando la omega a un lado dijo.

"¿Cómo está Haerin?" preguntó, en voz baja y un poco dudosa. Taehyung cerró la caja.

"Bien, la pasó bien en su viaje. Ganó varios premios" comentó. "Ella está bien"

La vieja omega relajó los hombros, como si estuviera aliviada de que él respondiera su pregunta.

"Qué bueno" dijo. "¿Dónde se están quedando?"

Oh, pregunta capciosa.

Taehyung lo pensó un segundo y terminó siendo sincero.

"En casa de mis abuelos" respondió. "Provisoriamente, van a quedarse ahí. Al menos, hasta que Haerin termine el año escolar"

La mujer sólo lo miró y Taehyung levantó la caja de la mesa.

"Dejaré esto en el auto" anunció, caminando fuera de la cocina y se calzó los zapatos como tuvo, quizá un poco torpe cuando tuvo que abrir la puerta con una mano y se sentía incómodo por dejar solo a Jungkook, aunque fuera sólo un par de minutos. Optó por dejar la caja en el suelo del asiento trasero, procurando que quedara bien posicionada e iba a tener que conducir despacio para evitar que algo se rompiera, aunque consideraba que había acomodado todo de manera segura.

Cerró la puerta del coche y lo aseguró antes de volver a la casa, yendo de nuevo a la habitación y Jungkook seguía sentado en la cama, pero había dejado de acomodar y estaba mirando a la ventana de la habitación, con el labio inferior entre los dientes y cuando Taehyung se acercó, se puso de pie de inmediato, rodeando el cuello del alfa con los brazos y Taehyung lo abrazó también, frotándole la espalda con una mano.

"¿Por qué tienen que ser así?" el omega susurró, apenas y con la voz ahogada. Escondió el rostro en el cuello del alfa y bajó los brazos de su cuello porque se sintió incómodo y apretó los brazos contra su propio cuerpo mientras ponía las manos en el pecho del alfa. "¿Por qué es tan difícil demostrar siquiera que les importo?"

"Quisiera saber responderte" Taehyung dijo, apoyando la mejilla en el pelo de Jungkook. "Pero rogar respuestas que no te quieren dar, simplemente te va a lastimar más"

Y se arrepintió de haberlo dicho porque Jungkook jadeó por aire, con el rostro escondido en pecho. Taehyung sólo pudo consolarlo por unos momentos más hasta que lo sintió calmarse, lo miró con pena cuando Jungkook alzó la cabeza y tenía el rostro sonrojado y los ojos aguados, las pestañas húmedas y los labios fruncidos con el fin de contener el llanto.

"Dime qué falta y lo haré yo" Taehyung le puso las manos en las mejillas y le limpió las lágrimas antes de que cayeran. "Ya llevé al auto todo lo que había en la cocina. ¿Qué más falta?"

Y realmente, no era mucho.

Jungkook tenía ya un par de cajas con cosas suyas de antes y lo que debía terminar de guardar era la ropa, trató de ocuparse en eso mientras Taehyung se llevaba las cajas y se levantó a buscar en los cajones de la mesa junto a su cama lo poco que era suyo para guardarlo también en los bolsos, nuevamente quedándose de pie en aquella habitación vacía, como la había encontrado hacía unos años, hacía un año.

La primera vez que regresó, cuando Haerin era casi una bebé, Jungkook había llorado toda la noche no por todo lo que lo había llevado a salir de la casa de la madre de Minhyuk, sino también porque cuando sus padres lo recibieron y Jungkook entró a la habitación, su habitación de toda la vida, no encontró nada más que sólo la cama, el colchón y el armario vacío.

Nada que había sido suyo estaba ahí, aunque su madre le había dicho que muchas de sus pertenencias estaban guardadas, Jungkook se había sentado en el suelo junto a la cama a llorar, con Haerin siendo muy pequeña durmiendo con el rastro de lágrimas en el rostro porque ella también había estado asustada con todo lo acontecido y sus abuelos suficiente paciencia les habían ofrecido como para pedirles también contención.

Cuando se fue y volvió años después, hacía un poco más de uno, la habitación también estaba vacía y esta vez Jungkook no permitió que aquello lo lastimase, aunque poco a poco había vuelto a ocuparla sólo para dejar cosas que no confiaba que estuvieran seguras en su departamento y Haerin había tomado el gusto de usar el cuarto cuando visitaban casa fin de semana, en los cuales a veces podían quedarse a dormir.

Otra vez, esa misma habitación estaba vacía y Jungkook tenía que terminar de aceptarlo, aunque en su corazón aún estaba arraigado el cariño que tenía por este lugar. Esta casa dejó de ser su casa hacía mucho tiempo, estaba habitación dejó de ser suya cuando todas sus pertenencias terminaron tiradas o en cajas que nunca pudo llevarse.

Cerró los bolsos y volvió a dejar caer unas cuantas lágrimas porque sabía que irse ahora significaría no volver nunca más y dolía, dolía en lo más profundo de sí mismo y debía ser molesto, realmente, consolarlo y darle un abrazo debería ser algo demasiado trabajoso, pero Jungkook tenía el corazón partido y cuando Taehyung regresó, jadeó con necesidad, ni siquiera teniendo que pedirlo porque el alfa volvió a abrazarlo y Jungkook se encogió en él, permitiéndose molestar al alfa con su angustia, rogando que hiciera el esfuerzo de calmarlo.

Taehyung así lo hizo, lo balanceó en brazos lentamente, le besó el pelo, el cuello y el hombro repetidas veces y no dijo nada, simplemente lo sostuvo y cuando Jungkook pudo enderezarse, le besó las mejillas para recoger con los labios los rastros de sus lágrimas y Jungkook sintió que su corazón sanaba poquito cuando le dio un profundo beso en los labios.

"Vamos" él lo animó, poniéndole el pelo detrás de las orejas y Jungkook mantuvo la mirada gacha. "¿Ya está?"

Jungkook volvió a sollozar a medias y asintió.

"Sí"

Taehyung le pasó el bolso más liviano y Jungkook se aseguró de caminar lo más cercano a él que podía, con la cabeza poquito agachada, la mirada triste y aún demasiado sonrojado, no la vio, pero sintió el olor a canela de su madre cerca, sabiendo que ella estaba a unos pasos y cuando tuvo que calzarse las zapatillas, Jungkook alzó la mirada para mirarla.

Y volvió a quebrarse.

La omega no le dijo nada y sólo se acercó a abrazarlo, Jungkook sollozó contra su hombro pero no le devolvió el gesto, sólo respiró profundo su aroma una última vez y se apartó, no dejando que ella le secara las mejillas porque apartó el rostro, saliendo de la casa antes que el mismo Taehyung y no quería que le dijera nada.

No quería quedarse y esperar que le dijera algo y no lo hiciera.

Caminó hacia el auto de Taehyung y dejó el bolso en el suelo junto a la acera, apoyándose el talón de casa mano en los ojos, queriendo evitar que las lágrimas siguiesen cayendo, conteniendo el aliento para no largarse a llorar ahí.

Taehyung se detuvo un paso después cuando pretendió seguirlo, pero se giró a mirar a la mujer que no se estaba permitiendo llorar, con los labios apretados entre sí, con los ojos llenos de lágrimas.

El alfa exhaló para liberar la garganta, pero la voz aún así salió áspera cuando habló.

"El número de la casa de mis abuelos sigue siendo el mismo" le dijo, en voz baja. "Cuando quieran hablar con Haerin y disculparse con Jungkook, creo que sabe que él siempre les permitirá volver. De verdad espero que en algún momento decidan dejar de dañar a Jungkook de esta manera sabiendo lo mucho que él los aprecia"

Y cuando regresó a su auto, dejó el bolso en el suelo para abrazar a Jungkook nuevamente, pero el omega no se permitió acurrucarse en él, simplemente murmuró.

"Vámonos, por favor"

"Sí" Taehyung le concedió, abriendo la puerta de atrás para lanzar los bolsos al asiento, cerrando y abriendo la puerta del asiento del acompañante para que Jungkook subiera. "Vamos"

"Haerin-ah, ¿por qué estás enojada?"

Haerin relajó el ceño fruncido cuando Minsu le dijo aquello.

"No estoy enojada" le dijo y por un segundo volvió a fruncir las cejas. "Estoy pensando"

"¿En qué piensas?" Minsu le preguntó con curiosidad, las dos con las mochilas en la espalda, listas para salir y terminar con el día, con la semana.

Haerin miró al frente mientras los niños de clases menores salían primeros y dijo para responder a Minsu.

"En mis papás. Lo que me dijo Channie hoy no me gustó" Haerin dijo, con los labios fruncidos.

"¿Qué cosa?" Minsu inquirió. "¿Que tus papás son novios?"

"Ellos no son novios" Haerin refunfuñó, con las cejas poquitos fruncidas y los labios apretados. "Son amigos"

"No entiendo, ¿es malo si son novios?" su amiga le preguntó mientras avanzaban en la fila para salir y Haerin, que iba delante de ella, se giró a mirarla escandalizada.

"¡Uh huh!" exclamó, regresando la vista al frente. "Ellos son amigos"

"Pero el señor Taehyung es tan amable" Minsu dijo, acelerando el paso y caminando junto a Haerin, tomándole la mano para que la maestra no las regañara por romper la fila. "Y tu papá Jungkook es muy, muy, muy bueno. Mi papá dice también que el señor Taehyung es más agradable que el otro señor feo"

Haerin alzó los hombros.

"A mí no me gustan esas cosas" Haerin murmuró, esta vez cambiando la expresión de molestia a una de incomodidad. "Ya no quiero hablar de eso"

Y Minsu no le preguntó más, las dos sólo caminaron de la mano a la salida y cuando Minsu vio a su papá alzar la mano para llamarle la atención, Haerin sintió que la sonrisa se formaba en su boca por sí sola cuando vio a su papá alfa sonreírle, de pie junto al papá de Minsu y las dos corrieron hacia ellos, oh, Haerin fue recibida con un cálido abrazo y el alfa la alzó por un momento para darle un beso en la mejilla, oh, el enojo y quizá malestar desapareció y en cuanto él la dejó en el suelo, Haerin volvió a abrazarlo.

"Ah, ahora me siento mal porque yo no te recibo así" escuchó que el papá de Minsu decía y Haerin se rió, con el rostro escondido en la ropa de su papá.

Taehyung le acarició el pelo con cuidado de no desacomodárselo mientras miraba a Jaesuk.

"Nosotros nos vamos" él anunció y bajó la mirada a Minsu. "Espero que les haya ido bien hoy"

"Sí, muy bien" Minsu asintió y Haerin salió de su escondite para mirar hacia arriba a su papá.

"¿Y mi papá?" preguntó, un poco extrañada de no verlo porque le dijo que hoy no iría a trabajar.

"Se sentía un poquito mal, así que se quedó en casa" le respondió y otra vez dejó de mirarla para encarar al papá de Minsu. "Con respecto a lo otro, hyung-"

"Entonces, ¿vas a venir mañana en la tarde, Taehyung-ah?" le preguntó. "Puede ser más temprano. Una hora. De seguro a Jungkook-ssi no le molesta"

Taehyung dudó y miró hacia abajo a Haerin, que lo miraba con curiosidad y terminó suspirando.

"Vale, puedo una hora" asintió y Haerin sorprendió cuando el papá de Minsu suspiró aliviado. Él y su papá hablaron por un rato más de algo que ella y Minsu no estaban enteradas y cuando se despidieron, se dijeron que se veían mañana y Haerin no dudó en preguntar en cuanto caminó de la mano con su papá a su auto.

"Papá, ¿qué vas a hacer mañana?" ella preguntó y se subió al auto, deteniéndose un segundo y respirando profundo porque olía a su papá omega y de pronto lo extrañó, tardando en acomodarse en el asiento para abrocharse el cinturón.

"Jaesuk hyung quiere invitarme a jugar tenis, así que le dije que podía ir" él le respondió, girándose para cerciorarse que ella tuviera el cinturón antes de arrancar. "Si a tu papá le parece bien, vamos los tres juntos y mientras yo estoy con él y sus amigos, tú y Minsu-yah pueden jugar. ¿Qué te parece?"

Haerin abrió la boca, sorprendida y no dudó en asentir.

"¡Sí!" dijo y se arrastró al borde del asiento para acercarse a su papá, aunque no llegó muy lejos. "Papá, ahora eres amigo del papá de Minsu"

"Más o menos" él se rio y aunque estaba sonriendo, Haerin podía ver algo raro en sus ojos. Estaban un poco brillosos, pero no como si estuviera contento. "Aunque hay que ver si tu papá se siente bien. Hoy está un poco triste, así que pasemos a buscar unas cuantas cosas para animarlo. ¿Bien?"

Oh.

"Okay" Haerin asintió, de pronto confundida. "¿Por qué está triste mi papá? Hoy cuando vinimos a la escuela estaba bien y estábamos contentos"

Haerin lo vio por el espejito de adelante cuando su papá dejó de sonreír apenas.

"Mi papá me dijo que iba a ir al doctor hoy, ¿el bebé está enfermo?"

"No, el bebé está bien" el alfa le aseguró, en voz baja. "Es que hoy pasaron algunas cosas que no fueron felices"

Taehyung pausó y ¿estaba bien tratar de evadir temas al darle explicaciones? Él no quería dejar las preguntas de Haerin a la deriva, pero quería cuidarla de ciertos temas, de ciertos conflictos.

"Fuimos a la casa de tus abuelos a buscar tus libros" dijo, en tono calmado para no preocuparla. "Y se sintió un poco mal porque nos llevamos todo del cuarto"

"¿Por qué?"

Ah.

"Porque siempre fue su cuarto" le respondió. "Y fue difícil para él que ya no lo sea. Lo puso triste"

"Oh..." Haerin asintió, entendiendo a medias. "Entonces, ¿ya no vamos a vivir en casa de mis abuelos nunca más?"

Su papá tardó en contestar.

"Tu papá y yo hablamos, y decidimos si es mejor que estén en casa de mis abuelos" él dijo. "Perdona que no lo hayamos hablado contigo antes. Debimos hacerlo"

Haerin se quedó callada un segundo, pensando en lo que le dijo, analizando la disculpa.

"¿Mis abuelos están enojados?" preguntó finalmente, mientras su papá detenía el auto a un lado de la calle. Se bajó y Haerin se desabrochó el cinturón, dejando su mochila en el asiento y bajando con él, tomándole la mano cuando el alfa cerró la puerta.

"Contigo no" él le contestó y le hablaba con calma, con la verdad, por lo que Haerin se sintió más tranquila, segura de hacer preguntas que tendrían respuestas de verdad. "Es sólo que a veces los adultos tienen problemas muy grandes que no- intentan resolver para estar bien"

Haerin tomó la mano de su papá con las dos suyas, caminando a su lado alzando la cabeza para mirarlo cuando él bajó la mirada para sonreírle.

"Yo no quiero que te preocupes por eso, ¿sí?" él dijo y usó la otra mano para pellizcarle la mejilla, haciéndole sonreír. "Ahora, tu papá y yo elegimos que lo mejor es que estén con mis abuelos, ¿tú qué piensas?"

"A mí me gustan mis bisabuelos" ella le dijo y entraron al pasillo que estaba lleno de tiendas, Haerin miró a su alrededor, encantada porque le encantaba entrar a las tiendas donde vendían todo tipo de baratijas y cosas bonitas. Caminaron lentamente y ella siguió diciendo. "Son muy buenos y me dejan dormir con ellos. En casa de mis abuelos nunca me dejaban dormir con ellos"

"Ya veo"

"Además, papá, si estamos ahí cuando vienes a visitar te quedas más tiempo" dijo y alzó la cabeza para mirarlo. "Nos vemos más tiempo. Además" ella añadió y regresó la vista al frente, con una sonrisa sin mostrar los dientes, con los labios apretados. "Además mi papá se porta distinto. Más gracioso. Es como que ya no está nervioso"

"¿Sí?" su papá le preguntó y caminaron un poco más, Haerin exclamó contenta cuando vio a la distancia el campo de margaritas y se soltó para alcanzarlo, esperando a que él la detuviera o dijera algo, pero como no lo hizo, Haerin se adelantó a las flores, inclinándose a levantar un par y luego de unos momentos, su papá la alcanzó, inclinándose a alzarla del suelo mientras ella seguía de cuclillas y la hizo reír, Taehyung sonrió ante su reacción y la besó en el pelo antes de volver a dejarla en el suelo.

"Papá, siempre me alzas" ella dijo y se estiró la ropa para acomodarse. "No soy bebé"

Él le hizo un pequeño puchero.

"Pero todavía estás chiquita" él le dijo. "¿Qué pasa si te trato como mi bebé?"

"Nooo~" Haerin se rio y se escapó de él, caminando unos pasos más adelante, girándose a mirarlo con las mejillas sonrosadas y una linda sonrisa, caminando en reversa. "No sabes, papá, que yo soy grande"

"Sí, eso lo sé" él asintió, y cuando la alcanzó, caminaron los dos tambaleándose porque le tomó las mejillas con las manos para apretárselas, sonriendo cuando ella se sujetó de sus muñecas. "Pero si aún puedo cargarte, ¿me dejas? ¿Puedes seguir siendo mi bebé?"

Y ella lo miró, entre encantada y renuente, dejando de caminar para sonreírle.

"¡Cárgame en tu espalda, papá!"

Taehyung no dudó en agacharse para que ella se subiera a su espalda, oh, disfrutó de sus delgados brazos rodeándole el cuello y trotó un poco para hacerla reír mientras caminaban a la tienda de pasteles de arroz, los dos sin dejar de reírse y la bajó cuando llegaron, entrando a la tienda de la mano, con Haerin tirando de él para llevarlo al mostrador, nunca dejando de sonreír.

Compró dos jugos de fresa para el camino y un par de cajas de pasteles para llevar, Taehyung mantenía la mirada en Haerin mientras ella le contaba lo que había hecho en la escuela, en clase y el receso, lo que la hizo saltar emocionada.

"Papá, ¿te gustan los dibujos?" ella le preguntó, tratando de disimular y él lo pensó un poco.

"Por supuesto que sí" dijo y se acercó a recibir la bolsa con los pasteles. "¿Vas a regalarme un dibujo?"

Pero Haerin no le contestó, sonriendo como si escondiera un secreto pero los ojos le brillaron cuando recibió su jugo, acercándolo de inmediato para beber de la pajilla y saltó contenta, tomando la mano que su papá desocupó al llevar la bolsa con los pasteles y su jugo con la otra.

"¿Rico?" él le preguntó y Haerin asintió con la cabeza, soltándole la mano para abrir ella la puerta de la tienda y pudieran salir, diciendo en cuanto el sol de la tarde les entibió las mejillas.

"Papá-"

"Taehyung-ah"

Oh.

Haerin se giró cuando escuchó que llamaban a su papá y se encontró con una señora, oh, miró hacia arriba y dejó de sonreír, recibiendo la atención de la señora, que la miró sorprendida.

"Oh" su papá dijo y Haerin lo miró, acercándose a tomarle la mano, mirando a la señora.

"Papá" le llamó y la señora se mostró sorprendida, mirándola a ella y después a su papá.

"Buenas tardes" él dijo, Haerin lo sintió agarrarle la mano con cuidado como siempre, pero apretaba poquito para que ella no se soltara. Haerin tampoco lo haría. "Disculpa que no pueda charlar más, Sulhee-ssi. Me tengo que ir"

"No, espera"

Haerin torció poquito los labios.

Acercó su jugo para tomar un sorbo y la señora la miró, como si estuviera sorprendida y ¿cómo conocía a su papá si él no vivía ahí?

La mujer alzó la mirada a Taehyung momentos después y cuando superó un poco el shock, dijo un poco aturdida.

"¿Cómo estás? Nunca más volvimos a vernos" ella le dijo e intentó sonreír, dándole una ligera mirada a Haerin y Taehyung se sintió un poco incómodo con la manera en la que miraba a su hija. "Nos quedaste mal en la reunión de la otra vez"

"No creo que haya quedado mal, simplemente no me apeteció ir" él le respondió, arrepintiéndose de inmediato de ser tan directo, pues vio por el rabillo del ojo a Haerin mirarlo, con curiosidad.

Sulhee lo miró.

Luego de un día lleno de emociones, pretendía terminarlo en paz con su hija y omega, con su familia en la seguridad de su casa, sin hacer mucho, sólo disfrutando de su compañía, la calidez de su presencia. Sentía en la yema de los dedos la necesidad de asegurarse con el tacto que Jungkook se sentía mejor, y ciertamente no tenía tiempo para esta clase de encuentros.

"Me tengo que ir" él dijo nuevamente, pero Sulhee habló antes de que él siquiera avanzara un paso.

Y no le habló a él.

"Tú eres Haerin, ¿no es así?"

Taehyung palideció un tono.

"Me llamo Haerin" ella le respondió como era usual, pero se veía confundida. "Yo no la conozco"

"Me imagino que no" Sulhee dijo y le sonrió. "Pero yo conozco a tu otro papá"

"Kang Sulhee" Taehyung masculló y llamó la atención de la omega y de Haerin, que se encogió ante su tono, pero él no lo notó, demasiado centrado en la mujer frente a él, que se enderezó, con las cejas arguedas.

Oh.

"Realmente" ella dijo, más que aturdida, quizá atónita. "No has cambiado en nada, Taehyung-ah. Demasiado bueno para tu bien"

"Papá"

Taehyung entornó los ojos y todo el malestar que se había acumulado en el día estaba volviendo a llegar al tope, amenazando con desbordarse con algo tan minúsculo que podía ser la gran cosa.

Haerin hizo temblar su labio inferior y tiró de su mano, no queriendo llamarle la atención, sino buscando soltarse de su agarre.

Oh.

Taehyung bajó la mirada a ella y perdió la expresión de molestia al verla nerviosa, encogida en sí.

"No pasa nada" él le aseguró y sólo miró a Sulhee una última vez, sólo dirigiéndose a Haerin cuando volvió a hablar. "Perdona, mi amor. Vamos a casa, ¿sí?"

Y Haerin no pudo hacer más que seguirlo cuando se alejaron de la tienda, aunque sólo hicieron unos cuantos pasos porque la señora volvió a decir en voz alta y Haerin sólo quería ir a casa con su papá.

"Taehyung"

Pero el alfa no se volteó a mirarla, aceleraron un poco el paso y Haerin sí miró hacia atrás a la mujer que sólo los observaba. Ella alzó la vista y vio a su papá la mandíbula tensa y las cejas fruncidas, oh, Haerin miró la mano que él tenía sujeta y tiró poquito para que aflojara, volviendo a llamarle la atención y el agarre se suavizó. No era fuerte ni le dolía, pero no era como siempre y cuando él se detuvo, cuando cruzaron el campo de flores y llegaron al pasillo de las tiendas, se detuvo y se agachó para mirarla a los ojos.

Haerin normalmente no le gustaba cuando hacían eso, ella no era chiquita y terminaba siendo más alta que los adultos que se agachaban para hablarle, pero él se veía preocupado y ella no supo qué decir.

"¿Te apreté fuerte?" él le preguntó, tomándole la mano que le había sujetado y le besó los nudillos. "Perdón, mi amor"

"¿Estás enojado?" le preguntó, con cautela y él negó.

"No. Sólo me puse nervioso. Es una persona que no quería encontrarme"

"¿Quién es?" Haerin volvió a preguntar y lo vio ponerse aún más tenso, pero no dudó en responderle.

"Una compañera de la escuela que solía conocer" dijo. "Ya no somos amigos, así que no me emociona saludarla"

Haerin hizo un mohín, ladeando la cabeza.

"¿Ella conoce a mi papá?"

Joder.

"Sí" él asintió. "Pero tampoco son amigos. No te preocupes por eso, ¿sí?"

"Okay" ella asintió. "Pero tú pareces preocupado, papá. Ella me conoce, pero yo no la conozco, ella sabía mi nombre. ¿Por qué?"

"No lo podría saber, mi amor. Pero no importa. Perdóname si te apreté fuerte la mano, ¿sí? Lo hice sin querer"

"No me dolió" ella le aseguró, recibiendo caricias en la mano. "Pero no te enojes, papá. No me gusta si te enojas"

"No estoy enojado" él le aseguró y la atrajo para abrazarla, aún con el jugo y las bolsas con pasteles en la otra. "Vamos a casa. ¿Sí?"

"Okay"

"¿Qué te parece si vamos a comprar unas flores para tu papá y la abuela?" él le preguntó y trató de sonreír, Haerin lo miró fijo y asintió con la cabeza. El alfa se puso de pie y volvió a tomarle la mano, Haerin caminó con él, pero se dio vuelta para ver la tienda de pasteles de arroz y la señora que los había interceptado fuera de la tienda ya no estaba ahí.

Oh.

"¿Jungkook-ah?" dos golpes en la puerta le llamaron la atención. "¿Estás despierto, cariño?"

Jungkook se encogió un poco más en sí mismo, pero terminó enderezándose.

"Sí" dijo en voz alta, pero sintió una punzada en la cabeza que le dolía e hizo pucheros.

"¿Por qué no sales un segundo? Tu abuelo tiene algo para darte"

"Okay" el omega dijo, sin muchas ganas.

Taehyung lo había traído a la casa unas horas antes y acomodaron lo que pudieron antes de que Jungkook volvió a quebrarse y el alfa lo llevó a recostarse a descansar un poco, los dos acurrucados en la cama hasta que fue hora de ir a buscar a Haerin y Taehyung se ofreció a ir solo y dejar que Jungkook se recompusiera para que Haerin no lo viera así de desganado.

No había funcionado, la ausencia del alfa sólo hizo que Jungkook lo extrañase más y se abrazó a la ropa con la que Taehyung había dormido la noche anterior, abrazado a su cachorro, esperando que regresara.

Ahora estaba saliendo de la habitación, debería ir a lavarse la cara y tomar un poco de agua, tenía ganas de alguna fruta también, pero primero fue a ver a los abuelos que habían pedido su presencia, Jungkook escuchó sonido desde las otras habitaciones y cuando se asomó a la más pequeña, la que se había designado para Haerin, se quedó con la boca semiabierta al ver que estaba ya lista.

Sólo estaba la cama y una mesita a un lado, las paredes estaban libres y si había algo destacable en la pequeña recámara, era el enorme ventanal que dejaba ver parte del patio lateral. Estaba limpio y olía como el resto de la casa, con las paredes beige y la mesa de madera al igual que la cama y el marco de la ventana, pero no era eso lo que le llamó la atención.

"Estábamos seguros de que aún lo teníamos cuando llegaste a la casa y aprovechamos que te ibas a trabajar para buscarla y arreglarla. Tu abuelo se pasó toda la mañana armándola" la abuela dijo, pero Jungkook no podía avanzar a mirar de cerca la cuna que estaba en una esquina junto a la ventana.

"Hay que comprar un colchón nuevo eso sí" el viejo alfa se acercó a cerciorarse que la cuna estuviera firme, poniendo las manos sobre la misma para pesarse y la estructura no vaciló.

La abuela chasqueó la lengua.

"Tenemos un poco de dinero ahorrado" exclamó, "así que este es nuestro regalo para tu bebé"

Y cuando los dos se giraron a mirar a Jungkook, los ojos se le llenaron de ternura y aflicción.

Por enésima vez en el día, en la semana, Jungkook alzó las manos para cubrirse la cara y se largó a llorar.

"Oh, mi Jungkookie"

Lloró un poco más fuerte, Jungkook estaba cansado de llorar, pero quizá era todo el dolor, la angustia y el estrés de la semana, quizá era que ahora sentía la libertad de llorar, quizá eran las hormonas del embarazo, pero lloro con lágrimas y mocos, espasmos y sollozos y no tardó en ser abrazado.

"Mírate, todo un bebé llorón" la omega le dijo con cariño y le acarició el pelo. "Ya, mi amor. Hay que estar feliz"

"Vas a dar a luz a un bebé llorón con todo este llanto" la voz del abuelo reclamó y Jungkook sollozó, encogiéndose en las manos suaves y gentiles que lo consolaron. "Ya. Nos vas a hacer llorar a nosotros"

"Gracias" Jungkook susurró, aún con la cara entre las manos y la cabeza le dolió un poco más. "Y perdón por todo"

"¿Y ahora por qué son las disculpas?" la omega le dijo y obligó a Jungkook a quitar las manos de su cara. Le limpió las mejillas y le sacó el pelo de la cara. "Nada de perdones ni disculpas, sólo queremos que digas gracias, gracias, gracias por todo lo que se te va a dar. ¿Sí?"

"Okay" él asintió, con voz chiquita. "Gracias"

"Así está bien" el abuelo le dijo y Jungkook sintió sus manos frotarle la espalda. "Tranquilo que tu niña y Taehyung no tardan en llegar. ¿Quieres recostarte un rato más y cuando lleguen le digo a Taehyung que te prepare un té y fruta?"

Jungkook hizo pucheros y asintió con la cabeza, recibiendo otra caricia en el pelo.

"Muy bien. Ve a descansar, fue un día largo hoy y como siempre, ese bebé debe estar todo enojado contigo. Taehyung me ayudará con la cena hoy. Descansa. ¿Bien?"

"Okay. Gracias" Jungkook volvió a decir y no sentía que fuera suficiente, pero los abuelos lo escoltaron al cuarto y Jungkook regresó a la cama, donde se había acurrucado la última hora, y esperó ahí hecho una bolita, con los pies fríos cruzados entre sí y una mano simulando una almohada contra su mejilla, porque la otra la tenía sobre su panza, frotando cuando se sentía demasiado frío y lo sintió en el alma antes de dilucidarlo.

La sensación en su pecho que le indicaba la presencia de su alfa e hija se intensificó poco a poco, oh, Jungkook se sentó en la cama como pudo y pronto la puerta del cuarto se abrió y todas las emociones volvieron a aguarle los ojos.

"Papá" Haerin le dijo, borrando su sonrisa y Jungkook estiró los brazos hacia ella, recibiéndola con un fuerte abrazo cuando la tuvo al alcance y cerró los ojos mientras apoyaba la nariz en su pelo, un poco disgustado porque olía a ajeno, a los olores usuales de la vida más allá de casa pero en ella estaba impregnado el aroma que Jungkook necesitaba.

Y el dueño de dicho aroma apareció pronto y Jungkook lo miró, deteniéndose de llamarlo con palabras, quizá para disimular, quizá porque lo necesitaba tanto que no podría siquiera formular una sílaba.

No hacía falta, sin embargo.

Alfa.

Taehyung avanzó a él sin dudar y Jungkook relajó un poco el abrazo a Haerin, que se apartó para mirarlos a los dos, no parpadeando cuando vio a su papá omega de inmediato abrazarse al alfa, como si no se hubieran visto en mucho tiempo, pero Haerin sabía que ellos habían pasado la mañana juntos.

Oh. Oh.

No pudo decir nada, ni preguntar por qué su papá se veía como si hubiera llorado y pronto su padre alfa la atrajo para que se uniera al abrazo, Haerin no protestó, simplemente cerró los ojos y se acurrucó en ellos, como si fuera una cuna y Haerin a veces podía decir cosas que no eran tan verdad.

Porque aunque se jactaba de ser grande, sí que le gustaba hacerse chiquita en el agarre de sus padres, como una bebé.

"Tu papá necesita mucho cariño" su papá Taehyung le dijo y Haerin lo miró, desviando después la mirada a su papá Jungkook, que escondió la cara en el hombro del alfa como si tuviera vergüenza y Haerin sintió que los ojos le ardían poquito porque vio lágrimas en la cara de su papá. Se acercó a abrazarlo fuerte y frotó la mejilla en él, recibiendo sus brazos alrededor.

"Papá, no llores" ella dijo y su papá dejó de respirar porque si lo hacía, lo haría seguido de un sollozo. "Porque me haces llorar-"

Y ella no terminó de decir porque las lágrimas cedieron y lloró también, sólo con lágrimas, acurrucándose en el omega con cuidado de no apretarle la panza, sintiendo el brazo de su padre alfa alrededor.

"¿El bebé debe estar llorando también?" ella preguntó, sorbiendo la nariz y Taehyung se rió, inclinándose a besarle la frente.

"Quizá sí, porque no le gusta que su hermana esté triste" él dijo, acariciándole el pelo y luego miró a Jungkook, o lo que podía de su rostro, los tres sentados en la cama, abrazados el uno al otro. Le acarició el pelo y también se acercó a besarlo, con la mirada de Haerin en él. "Lloremos un poquito más, después nos calmamos, y vamos a ordenar tu habitación. ¿Sí?"

"Okay" Haerin asintió, mirando a su papá omega que seguí acurrucado en el pecho del alfa y él no dejaba de acariciarle el pelo y la espalda, tratando de consolarlo, de calmarlo.

Haerin sólo los miró, sólo teniendo ganas de llorar porque le dolía ver a su papá triste pero sin llorar, quizá tranquila de que su otro padre estuviera para consolarlos. Taehyung le sonrió a ella, apenitas, para asegurarle que todo estaba bien y quizá sí.

Aunque estaban poquito tristes, estaban bien.

Iban a estar bien.