Comienza así
Cada historia tiene su manera de iniciar, ya sea con una típica escena feliz o con una triste, y en pocos casos una dramática, a fin de captar la atención del lector que juzga desde el primer capítulo devorado, sin embargo, la mía comienza así:
-la educación es primordial para la vida, buenas tardes a los presentes, primeramente agradezco a Dios por sus muchas bendiciones, a mis padres por siempre alentarme a seguir adelante y sobre todo por su amor incondicional, a mis maestros por brindar un granito de arena en mi aprendizaje, a mis amigos por los hermosos momentos de locura que hemos pasado. Reímos recordando.- Han sido tantas aventuras que hemos atravesado, resta decir felicidades a todos lo logramos con sangre y sudor. Dramatizo. -un poco de ayuda de Wikipedia, el rincón del vago y otras páginas pero lo logramos, para finalizar me dirijo hacia los futuros bachilleres espero que sigan nuestros pasos. Observo a cada uno. -Gracias.
Con rostros alegres la lluvia de aplausos empezó, por fin éramos libres de la cárcel llamada secundaria, en donde compartimos hermosos momentos y uno que otro nada agradable, contamos.
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3, y lanzamos el birretes cual entonces lo teníamos previsto.
Una hora después que la hermosa celebración a patio abierto terminará nos dimos un abrazo grupal, nos despedimos de maestros extraordinarios; compañeros que se iban a otro lugar, a estudiar la carrera seleccionada.
En la vida entrarán personas agradables, de esas que quieres para siempre y lastimosamente tienen que marchar a sus sueños, también habrán quienes no lograrán ganar corazones y parten así de simple personas van y vienen; lo entendí cuando vi a todos alejarse hacia rumbos diversos persiguiendo sus sueños.
-comandante come moco mañana nos vemos. Habla mi mejor amigo detrás de mí, sonrío antes de voltear me.
-claro capitán cabezota.
-¿paso por ti?
-no lo dudes. Sonrió para luego irse.
-hija nos vamos. Habla papá acercándose.
-por supuesto.
Caminamos hasta su auto, donde mamá junto con mi hermano mayor nos esperaban, en realidad es él único tonto que tengo como hermano. No tardó en dar marcha rumbo a casa, una vez que estuvimos dentro.
-estas grande pequeña. Me abraza mi hermano.
-así es. Contesto con orgullo.
Mantenemos una agradable conversación mientras llegábamos, a los pocos minutos el auto estacionó, subí a mi cuarto directo a descansar, para solo bajar a cenar y de vuelta a la cama, a pesar que había sido un día alegré también fue cansado, por ende caí tendida.
La noche paso en su sarteamen así como la mañana, y la hora de salir con mi mejor amigo no tardó en aparecer, dispuestos a disfrutar y reír, tal vez hacer alguna tontera pensaba mientras caminábamos cayados.
-sabes te extrañar, eres la mejor. Dice rompiendo el silencio.
-yo igual, pero recuerda vendré todos los finés de semana.
-eso si, bueno olvidemos eso, tenemos que disfrutar. Dice con una sonrisa de lado.
-si hay que pasarla bien está semana que nos queda juntos. Dije para que de nuevo el silencio nos invadirá.
Él tonto este es un gran hombre, que ha estado conmigo en cada etapa de mi vida y se sentía horrible separarme de él. Hemos tenido desacuerdos como cualquier amigo que se protege sin embargo reconocemos el acto y volvemos a la rutina, por ello lo extrañaré.
-¿en que piensas tanto?. Interrumpe mis pensamientos.
-sabes. Decido comenzar. - tenemos años de ser mejores amigos, y hemos estado en las pésimas y las buenas. Le comento con un poco de tristeza en mi vos. -sin separarnos. Concluyo
-aja un día hay que celebrarlo es raro alcanzarlo.
-si.
No tardamos en llegar a nuestra eskimeria favorita donde hemos compartido grandes momentos, ambos tomamos un suspiro para entrar, cual caballero me dio pasada primero.
-¿sabes que es lo más gracioso de nuestra historia?. Dice llamando mi atención
-¿que?
-de chispa y el de ella caramelo. Pide los esquimos.
Nos fuimos a sentar en la única mesa vacía. Trajeron el pedido sin pensar dos veces me adelante a hablar.
-bueno sigue me contando. Digo comiendo mi esquimo sonriendo cual niña.
-ya se me estaba pasando, recuerdas las tantas veces que creyeron que andábamos.
-si, se sorprendían al decirles que no. Digo recordando, la sociedad tiende a creer apariencias, es literal ya no se puede pasar bien con amigos porque se imaginan e inventa cosas irreales.
- también solían decir que los mejores amigos siempre quedan juntos y nosotros no seríamos la excepción.
-si. Le respondo sin entender su punto.
-eso me da risa que nunca estaremos juntos por que somos muy buenos amigos como para hacerlo, cierto. Lo conozco perfectamente se cuál era su punto y que pretendía hacer, la ganas de evitar más la conversación hace que me levanté lista a irme.
-debo irme, gracias por todo. Digo rápido.
-¿pero dime antes que sucede?. Dice algo preocupado.
-no, no es nada.
-¿te acompaño a casa?.
-no, no, no, no, pide un taxi te lo agradeceré. Al mismo instante llama a uno.
-me llamas al llegar.
- si, no te preocupes. Digo subiendo al taxis.
-cuídate.
-rápido. Pude mencionar.
Sin voltear a ver atrás mis lágrimas empezaron a caer, el taxista pregunto qué pasaba yo solo negué le di la dirección de mi casa y le pagué. Al estar en mi hogar caigo a moco tendido dejando a los brazos de Morfeo hacer su trabajo.
No sé si les ha pasado, un amigo se enamora de ustedes y de pronto el ambiente se vuelve incómodo eso justo quería evitar tenía mis sospechas y que las confirmara sería incómodo.
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Acuerda te de darle a la estrellita.
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