Rompió la puerta de contención, no sabía quién era, no sabía QUE era, su cabeza dolía cada vez que trataba de recordar, lo único que sabía era que debía escapar de sus captores.

Soldados Grineer y Orokin comenzaron a arremeter en contra suya, disparando y magullando su "piel", deseo ya no sentir más dolor y su piel entera fue cubierta por la ferrita que emergió de su ser, ahora las balas rebotaban cómo simples gomas.

Miro furioso a sus atacantes, ellos eran los causantes de su actual situación, eran los bastardos que le arrebataron todo, debían morir.

Su visión se tiño de rojo, su cerebro palpitaba y su respiración se agito aún más, rugió con furia llenándose de fuerza embriagadora y se lanzo contra sus captores.

Lo siguiente que hubo fue una masacre indiscriminada, amputó y aplastó a todo el que se encontrará en su camino, de pronto dos científicos se atravesaron en su camino.

Los reconoció, eran los causantes, aquellos que le habían hecho tanto daño... Los persiguió disfrutando cada segundo de su desesperación, debían sentir lo que él sintió por tanto tiempo.

En su persecución mato a más guardias, más científicos, hasta que los había acorralado... Y vio con shock el paisaje, el cuarto era un vertedero... Uno de cadaveres, en su mayoría niños.

Su sangre hirvió con aún más intensidad, y tomando del cuello al tipo que se reía como un maníaco exprimiendolo a tal grado que lo había decapitado, el segundo que lo veía simplemente le arrancó la cabeza de una patada.

Corrió por el plantel buscando la salida, en su camino arrasó son todo lo que se interpusiera a su paso, incluso algunos warframe, pero su fuerza iba aminorando y con forme más luchaba más sentía las ganas de tomar un respiro.

Forzó una de las celdas para entrar rápidamente, cerrando sus ojos mientras trataba de recuperar el aliento, volvió a abrirlos para darse cuenta que estaba siendo observado por alguien.

Era casi la mitad de su tamaño, su complexión era frágil a simple vista, su cabello verde y rizado estaba sucio de su sangre seca y enmarañado; las esmeraldas que tenía por ojos lo miraban fijamente.

El niño simplemente se limito a verlo, con miedo en sus ojos, expectante a lo podría hacer, solo basto un movimiento para que el niño desapareciera sin dejar pistas.

Antes que pudiera hacer otra cosa escucho a los guardias revisando las demás celdas en su búsqueda, no tenía tiempo, debía huir. Salio disparado estampando a uno de los Orokin dejandolo como una mancha en la pared.

Antes que se fuera voltio atrás, mirando por última vez los ojos esmeraldas del niño encarcelado.

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Salio de los vagos recuerdos cuando su pupilo lo tomo de la mano, bueno... Su primer alumno, recientemente un segundo había llegado en busca de sus enseñanzas.

Un chico de la clase B, "tetsutetsu tetsutetsu", le era curioso como alguien podría tener el nombre y apellido exactamente idénticos. Su peculiaridad era una versión reducida de su piel de hierro, el chico necesitaba una ingesta de hierro exigente y mientras más pasaba el tiempo más fragil se volvía.

Tanto el pelirrojo como el peligris eran casi identicos, tenian la misma edad, nacieron el mismo día, la misma hora y sus peculiaridad tenían que ver con el endurecimiento de la piel, era aterradoramente gracioso.

Kirishima: -ya terminamos el calentamiento, ¿Que sigue?- pregunto con un poco de agitación.

Rhino: -peleen con su quirk activo- ordenó estoico.

Ambos chicos asintieron, alejándose y tomando pose de combate frente a frente. No era la primera vez que luchaban, ni la segunda... Era la tercera vez.

Ya conocían el quirk de su rival, las limitaciones, las ventajas, el modo de luchar del otro, y aún así tetsutetsu no había podido ganar una sola vez.

El chico era fiero, era casi tan agresivo como Bakugo, no temia recibir los golpes, pero era limitado, ambos tenían casi la misma resistencia física y peculiar, la diferencia radicaba en la técnica: kirishima era más ortodoxo, ambos eran boxeadores por naturaleza, pero el pelirrojo ganaba por mucho en técnica y experiencia.

Si tetsutetsu conectaba un golpe, kirishima conectaba cuatro, todos a zonas vitales y con intención de dañar y noquear lo más rápidamente posible, eso no sería problema sino fuera por qué ambos eran exactamente igual de duros, eso eliminaba cualquier ventaja física.

10 minutos de lucha intensa acabo con la victoria del pelirrojo nuevamente, eso no desánimo al chico de la clase B, solo mostró que debía seguir entrenando.

Ambos voltearon a ver al warframe esperando sus órdenes.

Rhino: -vuelvan a entrenar, vallan al fondo donde están las pesas y hagan los ejercicios que están en el estante dorado-.

Y así lo hicieron, no bajaron el ritmo, sus cuerpos gritaban por descanso, pero sabían que de no hacerlo tendrían que afrontar un castigo, kirishima por experiencia propia y tetsutetsu por las anécdotas de su amigo/bruh.

Tetsutetsu admiraba la determinación de su amigo, siempre decidido y con una sonrisa en el rostro, era una verdadera muestra de hombría y coraje.

Rhino: -vuelvan a luchar-.

Las ganas de quejarse de ambos solo fueron reprimidas por el miedo a las consecuencias.

Y así el proceso se repitió dos veces más...

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Ojiro: -se señor Wukong ¿Es realmente necesario esto- pregunto tembloroso.

Estaba atado de manos encima de una columna a más de 10 metros del suelo frente a una carrera de obstáculos, no media más de 500 metros pero la cantidad de trampas y terreno engañoso era suficiente para hacerlo temblar.

Wukong: - por supuesto que si, ¿quieres mejorar tu peculiaridad no?, Lo único que tienes es una cola mientras que otros pueden lanzar fuegito, chispitas, o un KFC sin derechos- su tono naturalmente burlesco contrastaba con el discurso serio.

- lo pudiste ver en festival, careces de ventajas que son necesarias para la supervivencia... PERO no te me agüites que eso no significa que seal inútil- activo su caminata nebulosa para llegar hasta el joven que se veía decaído.

- tienes conocimiento marcial pero te olvidas de algo, debes ser ligero como una mariposa también, o en nuestro, caso como un chango- dijo para comenzar a correr en la pista.

No utilizo sus manos, no hizo el doble salto, ni salto bala, no ralentizó su gravedad, ni activo su paso nuboso, solo utilizo las piernas y la fuerza de su cola; y aún así completo el circuito con una facilidad que dejaría en vergüenza a cualquier malabarista o gimnasta. Volvió a aparecer al lado del chico.

Wukong: - tu cola es como un tercer brazo, uno pegado por encima de la raja, pero sin la limitación de la inflexibilidad de uno y con la fuerza de ambos juntos-.

- ahora...- tomo la hek kuva de su espalda y disparo cerca de los pies del chico.

-corre perra corre que el próximo tiro no fallaré- recargó su arma, y el chico ya estaba a cien metro y contando.

Mashirao Ojiro fue obligado a recorrer 15 vueltas a base de palabras motivadoras... y plomo...

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Oscuridad... era todo lo que había, ni siquiera podía ver más haya de su pico, de pronto un ser que solo era visible por el leve brillo morado de su superficie apareció, abalanzandose como un perro rabioso para atacarlo.

No siquiera tuvo que ordenar le a dark shadow para que atacase a la aberración, la propia sombra conciente estaba estresado y temeroso, la oscuridad lo hacía más fuerte pero más inestable, aún así Tokoyami se mantuvo firme y controlo a su simbiótico amigo.

Otro ser apareció, otro más, más y otro más; cada vez eran más para el propio dark shadow, el chico ave tomo las kronen estándar que se le había Sido prestado y comenzó a luchar.

Pero la oleada era interminable, y su agotamiento comenzaba a verse, tenía que concentrarse en no recibir daño y controlar su peculiaridad viviente, cada vez era más difícil de hacer ambos hasta que su limito se rompió.

El cansancio y el poder inestable de su amigo hicieron que la sombra se imponiera a la voluntad de su amo... Tomo posesión de su cuerpo y comenzó a atacar desenfrenadamente.

Las luces del lugar se prendieron revelando una gran sala con apariencia casi vacía a excepción de algunas estatuas de warframes adornando el lugar, mirando desde palco Sevagoth y Nekros observaban al descontrolado chico.

Él señor de los muertos salto frente del chico y palmeo el medio de su pecho, Tokoyami sintió como si su alma hubiera Sido expulsada de su cuerpo por una fracción de segundo, eso fue suficiente para que dark shadow desapareciera desplomando al chico inconsciente.

Nekros: - (nada mal, lastima que le faltarán 30 segundo para terminar el ejercicio)- miro el enorme temporizador debajo del palco.

Sevagoth: - (aún es joven y con mucho margen de mejora, gracias por ayudarme amigo)- inclino levemente su cabeza recibiendo una negación del otro warframe.

Nekros: -(siempre es un honor ayudar a los amigos del joven maestro, si necesitas alguna otra ayuda puedes llamarme)- salió del lugar dejando al pirata de las sombras junto a su nuevo protegido.

Asíntio con su mirada para después mirar al chico ave, pateo levemente su pierna hasta que el chico reaccionó.

Tokoyami: -eh?, ¿Qu que paso?- pregunto confundido.

Sevagoth: -fallaste la prueba- respondió secamente.

Pudo ver cómo el rostro del chico se deformaba en frustración.

Sevagoth: -pero fuiste mejor de lo esperado, incluso impresionaste al gruñon de Nekros- extendió su mano para ayudarlo a levantarse.

Tokoyami: -yo... No merezco tales halagos, sucumbí al abismo de mi oscuridad y me deje llevar por la brutalidad indiscriminada- bajo la mirada con vergüenza.

Aquel que sobrevivió a la peor tormenta lo miro expectante, sabía lo que era no cumplir con la expectativa, era algo que todos pasaban, tomo del hombro del chico llamando su atención.

Sevagoth: -aun eres joven, muchacho, puedes mejorar. Aún que no lo creas yo pasé lo mismo que tu- activo su sombra y se reunió con ella nuevamente.

-No es malo fallar mientras que sigas mejorando, en el fracaso está el potencial de mejorar, ahora venga, te enseñaré unos truquitos a ti y dark shadow-.

El chico ave asíntio motivado por tener tal mentor, uno que ya había estado es su zapatos y quería ayudarlo a ser mejor que su yo del ayer.

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Miro impaciente al bastardo frente suyo, no habían hecho otra cosa que meditar... Y meditar, sentados como idiotas.

Apareció en la puerta de su casa frente a la vieja bruja y el viejo blando, no sabía que les había dicho para convencerlos, solo que la bruja le gritó y cuando lo hizo todo se oscureció.

Despertó en esta mierda de gran salón frente a uno de los lame botas del bastardo alienígena de cabello verde.

Bakugo: -dijiste que me harías más fuerte, ¡Dónde está el maldito entrenamiento!- salto de su lugar con chispas en sus palmas.

Baruuk: -este es el entrenamiento, joven Bakugo- respondió sereno sin romper su postura.

Bakugo: -grrrr ¡Una mierda!, ¡No voy a perder tiempo en estupideces de una mierda extra como tu!- dió medio vuelta furioso para marcharse.

Baruuk: -mmmmh cuánto orgullo en una sola persona, en especial para alguien tan joven, ¿Puedes respaldar tu ego?- pregunto deteniendo al blondo.

Bakugo: -¿Que?- pregunto con un rostro de furia reprimida.

Baruuk: -pregunte que si podías respaldar tu ego, para poder mirar por encima a los demás debes mostrar que puedes pasar por encima de cualquiera- respondió con seriedad.

-hasta ahora no eh visto nada en ti que respalde tu ego- clavo el primero de los clavos en el orgullo del rubio.

Bakugo: -¡Por supuesto que puedo hacerlo!, ¡Soy mejor que todos esos extras!, !seré el número 1 y lameran mis botas reconociendo su lugar!- se señalo así mismo con una postura tan recta y rebosante de todo el orgullo que poseía.

Baruuk: -palabras vacías de alguien común- el segundo clavo había Sido enterrado.

-si eres tan grandioso, ¿por qué quedaste tercer lugar en el festival?, ¿No eso significa que hay al menos dos alumnos más fuertes que tú?- el tercero fue peor que los otros dos juntos.

Bakugo: -¡ESAS PERRAS TUVIERON SUERTE!, ¡CARA QUEMADA NO LUCHO CONTRA MI Y LA ZORRA DE TU DUEÑO NO LUCHO COMO SE DEBE- un escalofrío recorría cada fibra de su ser.

El ambiente se torno pesado y asfixiante, algo en el bastardo había cambiado, su serenidad aún seguía ahí pero ahora tenía un significado completamente distinto, uno que decía "deja de ser un imbécil y cierra la boca por tu bien".

Baruuk: -cuida tus palabras, Katsuki Bakugo, soy paciente pero no tolerare una ofensa más hacía la joven shield ni a mi joven señor- su tono sereno era más... Ronco.

-respondiste con furia negando la verdad, no eres capaz de ver más haya de tí, tu orgullo es frágil, endeble, injustificado... ¿Crees que no se nada de tí? Eres un matón que fue encubierto por una secundaria decadente solo por tener una peculiaridad más o menos fuerte- clavo tras clavo salían de sus palabras, la serenidad de su voz daba la sensación de que estaban al rojo vivo.

-un pez mediano en una pecera chica, ahora que fuiste trasladado a un acuario no puedes aceptar que hay quienes te superan fácilmente, crees que eres perfecto y por lo tanto no tienes nada que mejorar, otros ya lo están haciendo y apuesto que algunos ya te superaron- rompió su postura y camino amenazante hasta el rubio que estaba a punto de explotar.

-y lo peor de todo es que ese acuario no es nada comparado al basto océano...- pateó con fuerza el pecho del cenizo explosivo lanzandolo varios metros.

Mientras jalaba aire vio como el warframe se acercaba sin prisa.

Baruuk: demuéstrame que puedes respaldar tu Injustificado orgullo, que no eres más que palabras vacías-.

Katsuki sintió como ese bastardo lo veía por encima, su sangre termino de hervir y su psique de romperse. Con furia desmedida se lanzo solo para recibir otra patada aún más fuerte que la anterior.

Baruuk: -katsuki Bakugo, tu primera lección será... Un golpe de realidad- sentenció con un hilo de voz casi inaudible.

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En la playa de dagoba Iida daba su cuarta vuelta a la playa, su nuevo mentor le había amarrado varias pesas en la cintura como contrapeso.

Cuando terminó se desplomó en el suelo jadeando en busca de aire, la sombra de Gauss cubrió su rostro ayudándole con el sol.

Gauss: -¿No es lo mismo verdad?- rio fuertemente, se alejo y tomo una botella para regresar y tirar el agua en el joven velocista.

-esto ayudará a enfriar te un poco, ¿Cómo sientes los nuevos escapes?- fijo su mirada en las pantorrillas del chico.

Iida: -son geniales, pude usar mi recipro bust por una vuelta entera y en ningún momento se sobre calentaron- comento feliz, su estado de ánimo era igual al de un adolescente cuando estaba cansado.

-tambien los googles son geniales, solucionan el problema del aire en la vista y el aumento se ajusta a mi problema de vista- se quitó el objeto para ponerse sus lentes normales.

Gauss: -me alegro que te hayan gustado, no sufro de los problemas que otro corredor tendría- crackeo su casco permanente puesto.

-pero eso no significa que no lo entienda, este mundo es increíble, gran parte de los humanos de aquí tienen algo que lo hace únicos- miro el mar sentandose al lado del chico.

Iida: -ustedes también tienen dones, incluso puedo decir que son mejores- miro al warframe.

Gauss: -es porque nosotros fuimos hechos para aniquilar ejércitos, somos máquinas de guerra, no elegimos ser lo que somos... Excepto Gara...- rio levemente por un chiste que solo el entendió.

-un warframe no puede tener defectos, si los tiene es desechado, así de simple- Su tono se volvió sombrío.

Iida: -entonces si fallan Izuku los-.

Gauss: -No, no, él no haría eso, el joven amo nunca hizo eso, él es uno de los poco que no nos veía como meras herramientas- recordó todas las misiones que hizo con él, como los trato como una familia cuando despertó por segunda vez.

-es de la clase de personas que comparte su Victoria pero se adjudica la derrota solo para él, nunca nos culpó-.

Si la sonrisa de warframe pudiera verse, Iida tendría un déjà vu con la figura de su hermano a un lado.

Iida: -debe ser un gran líder- dijo con admiración.

Gauss: -él mejor de todos. El descanso termino, ahora harás ejercicios de fuerza, debes tener un cuerpo fuerte para resistir tu propio poder- parándose de la arena le tendió la mano al joven peliazul.

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Fin del capítulo.

Autor: ¡Sin miedo al ban!, *Cof cof*... Espero que le haya gustado el capítulo.