Cuando Félix pudo dejar de llorar el abuelo de Chan le hizo un té para que se calmara un poco y ahora ambos estaban sentados en la mesa del comedor ya que la abuela de Chan había preferido quedarse en un hotel.

— Gracias por dejarme quedarme aquí señor.

— No hay problema Félix, esta casa es grande y además estoy muy contento de recibir visitas, la mayoría del tiempo estoy solo en estas cuatro paredes. Cuando Chan se vaya lo voy a extrañar mucho.

— Lo entiendo perfectamente, cuando Channie se fue me sentía solo sin él alrededor, no me había dado cuenta de la falta que me hacía.

— Yo de todo corazón deseo que ustedes se arreglen. Ahora Félix yo tengo que salir un momento, ya sabes dónde es tu habitación, ponte cómodo y descansa sí, regreso en un rato.

Cuando Sangyeon se fue Félix cogió sus cosas y subió a la que sería su habitación. Acomodó todo y luego salió otra vez, se sentía inquieto. Estaba sumido en sus pensamientos cuando alguien toca la puerta, al no escuchar respuesta de Chan para abrir decide él mismo ir. Cuando abre la puerta se topa con una chica muy bonita y que lo miró de arriba hacia abajo sin disimular.

— Hola... ¿Channie se encuentra? - dijo con una sonrisa.

— ¿Y tú quién eres? - dijo molesto por el apodo que usó para referirse a Chan.

— Oh disculpa, mi nombre es Lily, soy amiga de Channie y su futura novia. - dijo con orgullo.

— ¿Disculpa?

— Hola Lily, ¿cómo estás? - interrumpe Bang Chan de pronto.

— Channie... - aparta a Félix y abraza a Chris dándole un beso en la mejilla. — Estoy bien.

— ¿Qué te trae por aquí?

— Vine a invitarte a una fiesta, no te quiero ver desanimado por ese idiota que no supo valorarte sí, además estoy seguro que la pasaremos bien.

— Está bien cuenta conmigo.

— Genial, entonces nos vemos esta noche.

Félix se sentía fuera de lugar y con un dolor en el pecho, esa chica acababa de llamarlo idiota y lo peor que estaba coqueteando con su esposo en sus narices, se sentía molesto.

— ¿No irás verdad? - dijo Félix cuando vió que Chan se iba de nuevo a su habitación.

— ¿Aún sigues aquí?

— Chan por favor no vayas, esa chica solo quiere seducirte.

— Y eso que tiene que ver contigo Félix. - lo mira. — Tú y yo ya no estamos juntos, es que nunca lo estuvimos.

— Channie.... Yo... Yo sé que...

— No quiero estar cerca de ti Félix, tu presencia me hace daño.....

— Chan yo te quiero... por favor no vayas...

— No Félix, tú no me quieres, nunca lo has hecho. - dijo y se fue dejando a Félix con el corazón roto y lágrimas cayendo de sus ojos.

Cuando llegó la noche Félix aún estaba en su habitación, desde que tuvo esa conversación con Chan lo único que había hecho era llorar sin parar.

Por otra parte Chan se estaba arreglando para ir a esa dichosa fiesta, en el fondo no tenía deseos de ir, pero no quería ser débil frente a Félix. Cuando estaba saliendo de su habitación, vió a Félix salir del baño, se le veía decaído, no pudo evitar sentir preocupación pero decidió dejar esos sentimientos de lado, se miraron a los ojos unos segundos pero Chan rompió el contacto visual y bajó para irse a la fiesta.

Cuando Lily pasó por él ambos se fueron rumbo a dónde sería la fiesta. La casa estaba llena de gente bailando, otras bebiendo y algunas parejas besándose, ese no era para nada su ambiente. Estuvo un tiempo viendo a las personas bailar pero después harto decidió irse de ahí y ahogar sus penas en un lugar más tranquilo. Al final se sentó en un bar y trago tras trago terminó algo mareado pero aún estaba algo consciente. Alrededor de las una de la mañana llegó a su casa. Todo estaba oscuro y en silencio por lo que subió a su habitación sin hacer ruido o eso intentó ya que tropezó con algo. Estaba por entrar a su habitación cuando alguien lo toma de la mano...

— Channie, ¿estás bien? - dijo un somnoliento Félix.

— Sí, ahora déjame en paz.

— Estás borracho Chan.

— Sí, lo estoy y es tú culpa.. - dijo apuntándolo — Es tu culpa Félix, es tu culpa por ser tan hermoso, ¿por qué no puedo simplemente olvidarte Félix? ¿Por qué soy tan idiota, y te sigo amando a pesar de todo?

— Channie... ven necesitas dormir.

Félix llevó a Chan hasta su habitación y lo recostó en la cama. Le quitó la camisa y sus zapatos...

— ¿Por qué me estás desnudando?

— Shh Chan, deja de quejarte.

Félix buscó un pijama en el clóset y después se lo puso. Se sentó a un lado de Chan y le empezó a acariciar el pelo esperando a que se durmiera... Cuando vió que ya respiraba tranquilo, decidió irse pero Chan sostuvo su mano.

— N-no te vayas..... por favor Lixie duerme conmigo.

Félix un poco inseguro se acostó a su lado y enseguida Chan abrazó su cintura y escondió su cabeza en el cuello contrario, Félix le empezó a acariciar los cabellos otra vez.

— Te extrañé tanto.... - dijo Chan somnoliento. — Te amo.... te amo demasiado Félix.

Félix se apartó de Chan para poder mirar el rostro de Chan, se veía tan lindo dormido y tan adorable. Sin pensarlo acercó su rostro al del contrario y le dió un beso en su frente, después otro en su nariz y por último uno en la comisura del los labios. Iba a separarse cuando de un momento a otro Chan lo vuelve a abrazar por la cintura y sube casi toda la totalidad de su cuerpo sobre Félix para después estampar sus labios en los del contrario. Félix se sorprendió al inicio pero después le siguió el beso con ganas, se besaron con hambre y deseo contenido, cuando el aire hizo falta se separaron creando un chasquido. Chan le dió otro pequeño beso antes de volver a esconder su cara en el cuello contrario y al poco tiempo quedarse dormido.

— Yo también te amo Channie... - dijo antes de quedarse dormido también.

A la mañana siguiente Chan abrió los ojos cuando los rayos del sol empezaron a colarse por su ventana, tenía un dolor de cabeza horrible. Iba a levantarse cuando sintió un par de brazos rodeándolo sin intensiones de soltarlo, no tenía idea de cómo Félix había llegado a su habitación. Cuando se pudo levantar fue al baño y se dió una ducha. Tomó una pastilla para el dolor y fue a su habitación para cambiarse de ropa. Cuando estaba terminando de vestirse vió como Félix poco a poco despertaba por lo que se sentó en una esquina de la cama a esperar que estuviera del todo despierto.

— Ya estás despierto...

— Buenos días lobito - dijo Félix con una sonrisa.

— ¿Por qué estás aquí en mi habitación?

— Yo ... ayer tú.... llegaste muy borracho de la fiesta y yo te ayudé a que te acomodaras ya que estabas tropezando con todo y no quería que tu abuelo se asustara.

— En ese caso gracias....

— Channie tú.... ¿recuerdas algo más de lo que pasó anoche?

— No, ¿hay algo que debería recordar?

— Tú.... olvídalo... - dijo suspirando.

— Yo qué, habla.

— Me dijiste que me amabas... - dijo acercándose.. — Nos besamos anoche...

— Estaba borracho..

Félix aprovechando que Chan estaba sentado en la cama y distraído mirando a otro sitio para evitar su mirada se acercó y se subió en su regazo poniendo una pierna a cada lado del cuerpo Chan. Chan lo miró sorprendido e intentó apartarlo pero a quién engañaba.
Félix tomó el rostro de Chan con sus manos y se fue acercando hasta que sus narices rozaron.

— Channie por favor tienes que escucharme sí, tengo mucho que decirte, tengo que explicarte muchas cosas por favor.

— No sé si quiero oírlo Félix, no quiero que vuelvas a jugar conmigo.

— Te prometo que no estoy jugando lobito sí, te voy a hablar con la verdad. – dijo acariciando con su nariz la mejilla de Chan.

Chan cerró los ojos ante las caricias que Félix le daba, era todo tan nuevo para él pero se sentía tan bien. De un momento a otro sintió un leve presión en sus labios que no tardó en corresponder tomando al cuerpo que estaba encima de él apegándolo aún más. Félix se sentía tan feliz de volver a sentir los labios de Chan y bueno Chan se sentía completo al tener a Félix con él. Ambos sabían que tenían mucho por hablar y tenían que aclarar las cosas pero por ese momento sólo querían disfrutar de la compañía del otro.

Capitulo nuevo en recompensa por la demora. Espero y sea de su agrado.