Otra semana pasó y Jungkook no había vuelto al bar, su orgullo quizá demasiado comprometido en demostrarle al pelirrojo que se equivocaba. Que él no estaba siquiera mínimamente interesado en buscarlo.

Tocó la puerta tres veces, entrando luego de escuchar la autorización; no inmutándose al ver a Hoseok dentro, quien acostumbraba pasar demasiadas veces por dicho despacho.

—He terminado el informe B61, comisario —entregó las carpetas beige a Yoongi. Hoseok rio levemente.

—Wah, no hay nadie aquí Kookie, no hay necesidad de tanta formalidad.

—Prefiero mantenerme al margen, después de todo estoy en el trabajo. No quisiera que alguien se llevara una idea equivocada o pensaran que por ser amigo de Yoongi hyung tengo empleo gratis. Me esfuerzo igual que el resto —Yoongi asintió complacido.

—Se le llama prudencia, Hoseok. Aunque sé que no la conoces —se burló con el mencionado haciéndole ojitos—. Gracias, Jungkook. Continúa haciendo un excelente trabajo.

Los ojos de su menor brillaron tras el reconocimiento.

—Por supuesto, comisario —y abandonó el despacho.

—¿De verdad me consideras imprudente? —preguntó con un puchero en sus labios. Yoongi rodó los ojos, divertido por su actitud infantil.

—¿Y todavía lo preguntas? Te la pasas metido aquí, pareces mi marido.

—Podría dejar de parecerlo —Yoongi leyó rápidamente entre líneas.

—Deberías regresar a trabajar, listo —apartó la mirada fingiendo interesarse en los documentos en sus manos con el rostro caliente.

—Como ordene, comisario —respondió juguetonamente y se levantó, más que satisfecho de ver las mejillas rojas de Yoongi. Su propio corazón vuelto loco.

Estaba perdidamente enamorado.

[...]

"En sus ojos contenía a todas las estrellas.

Brillando como diamantes u oro.

Como si todas las piedras preciosas estuvieran fundidas en ellos.

Pero un tono imponiéndose por encima del resto, un bañado platinado reflejando los secretos de su alma, besando sus verdades y desnudando su razón.

Y entonces lo sabe: que el color de los enamorados no es el rojo o el rosado.

Es el plata, del brillo de las galaxias en su mirada."