Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Arthur Frederick

Pedido de: Fujoshi_con_miel42

Tematica: Omegaverse/Soulmates

Idea: Perspectiva de Arthur sin alma gemela

Notas: perdooooon  esto me quedo peor de lo que pensaba XD la música del joker no ayuda. Espero que te guste<3<3 con mucho amor para ti. Cualquier cosa que no te guste eres libre de decirmelo n.n

Solo, caminando en medio de la noche, con una herida de bala que él podría curarse si no hubiese sido tan profunda, abandonado, sin nadie en esta vida.

Sabía que su pandilla lo detestaba, que Dino Golzine solo lo manipulaba a su favor, que todo el mundo lo quería muerto.

Porque todos estarían mejor sin él ¿Verdad?

Era un maldito asesino, quitó vidas inocentes, la sangre que contenía en sus manos era más de la que pudiese imaginar.

A pesar de ser consciente de aquello también tenía sueños, soñaba con encontrar un lindo omega que fuese su destinado, tener hijos y poder darles el amor que jamás recibió de sus padres.

La vida era una mierda.

Ahora se estaba desangrando, a diferencia de Ash él no tenía un dulce y tierno japonés a su lado, él no era tan habilidoso, ni siquiera poseía 200 de IQ. Siempre tuvo que arreglárselas solo.

¿Por qué se quedaba sin hacer nada?

Ah si, tampoco tenía alma gemela. Nació sin una, ni siquiera le dieron la oportunidad de soñar.

Recordaba, desde niño, dibujarse la muñeca, pensar que en algún lugar existía una persona que lo sentía, que se preocupaba por su existencia, que cuando el día llegara todos sus traumas y heridas de la infancia se irían.

Pero no fue así.

Esa persona nunca llegó.

Trató de olvidar su dolor acostándose con omegas, pero cada vez que lo hacía el miedo invadía el rostro de sus acompañantes y no estaba dispuesto a cargar con la culpa de aquello.

Mierda...la soledad pesaba más de lo que hubiese podido imaginar.

Deseaba tanto ser alguien diferente, pensar en otra vida, fuera de la mafia, fuera de Ash Lynx y de Dino Golzine, dejar de ser el perro al que todos utilizaban sin piedad. Estaba cansado, muy cansado.

La lluvia de repente comenzó a caer. En aquellos callejones de New York se encontraba gente desesperanzada, personas que al igual que él no tenían marca, que estaban desdichadas, sin amor, sin nadie que se preocupara por ellas.

Sus miradas estaban vacías al igual que la suya, el alcohol y las drogas no los ayudarían a arreglar sus heridas, lo sabía por experiencia propia.

Llegó como pudo al callejón mas apartado, un lugar por donde nadie pasaba, donde no lo encontrarían.

Estaba harto de huir, ya no lo haría, no es como si tuviese las fuerzas necesarias como para levantarse del suelo y caminar a un hospital.

"Arthur ya llegué a casa cariño" le gustaba imaginar su vida en algún universo paralelo.

"Bienvenido a casa amor" una en donde hubiese tenido marca.

"¡Papi! Soy muy bueno en la escuela, saque buenas calificaciones" en donde le dieran la oportunidad de ser bueno, de redimirse, de demostrar que él también poseía un corazón.

"Pues como premio iremos al Central Park por un helado" soñar no le costaba nada, al menos aquello hacia que el dolor que estaba sintiendo en su hombro se suavizara.

— ¡¿Por qué no pude ser normal?! ¡¿Qué hice para Mercer esto?! ¡¿Ah?!— sus gritos se escucharon tan desgarradores que por un momento el cielo se estremeció, la lluvia aumentó su intensidad y las lagrimas que brotaban del rostro de Arthur Frederick se mezclaron con esta.

En esos minutos recordó toda su vida, las golpizas de su padre, su escape de casa, cuando perteneció a la pandilla de Ash, su alianza con Dino Golzine, y el último enfrentamiento que tuvo con el lince de New York el cual lo dejó en ese estado ¿Por qué no murió allí mismo? Hubiese sido menos doloroso, ni siquiera en aquello la vida se apiadaba de él.

Cuando el reloj marcó las dos de la tarde el pandillero cerró sus ojos para no volverlos a abrir.

Lo enterraron en una fosa común donde dejaban a los que no tenían a nadie, ni siquiera las personas cercanas a él se interesaron en saber como murió.

Tal vez en otra vida todo sería distinto.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro