Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 3 *CANCELADO*

Antes que nada, este capítulo era el capítulo original de la tercera y bueno, prácticamente está lista pero recién me animé a publicarlo xd

Osea bien puede ser una continuación como no y para nada tiene que ver con el capítulo anterior xd.

















El sábado sería uno de mis días favoritos si tan solo Kana, mi hermana mayor, amante del anime, una incurable fujoshi, no me llamara para ser una de su modelo de sus fotografías.

—No sabes cuanto me alegra que seas mi modelo, Ryu —habló entre una sonrisa. Aunque siendo honesta, ella no me dejó otra opinión—. Ahora, vístete —guiñandome y entregándome una bolsa de papel mediana a lo que le eché un vistazo.

—Debes estar bromeando —miré de arriba abajo el traje, era uno de esos uniforme policial de mujer muy jodidamente sensual: falda negra muy corta y con unos pantis negros, aun que agradezco este último porque ocultaba las marcas que cierto imbécil me lo hizo.

—Uy —dijo—. Es verdad —se acercó a la mesa,  rebuscaba entre un montón de telas, murmurando un "¿dónde esta?" hasta que logró con el objetivo en mano y volvió hacía mí entregando aquella peluca negra—. Con esto ya está completo—otra vez me guiñó el ojo acompañado con esa sonrisa que me hubiera gustado borrar con la misma peluca.

No me reconocí para nada cuando terminé de vestirme y me vi en el espejo. Era practicamente otra persona, el estilo de la peluca bien puesta, los ojos de rojizos gracias a los lentes de contacto, las ropa ajustada y el maquillaje, todas esas cosas hacía su magia para no ser la misma de siempre.

Aun, me estaba viendo en el espejo hasta que la fujoshi me interrumpió—Ven, vámonos, chicuela —me indicó con una sonrisa y salimos del habitación.

Los flashes sonaban por donde quiera, las luces son tediosas cuando te daban directamente en la cara, ya me cansaba de realizar diferentes poses y miradas cada tres segundos, me fastidiaba aun más cuando me echaba más maquillaje si solamente se le salía un poquito y realmente me ponía a prueba TODA MI PACIENCIA porque la fotógrafa de lentes, Kana, me chillaba cosas tan vergonzosas como "Ay, chica, maúlla", "Uyu-yui, esta noche eres peligrosa".

Agradecí a Dios cuando sonó el celular de mi hermana para detener esos flashes y contestar la llamada. Pero me llenó de confusión ya que cortó con una sonrisa de oreja a oreja, entusiasmada como una niña que estaba apunto de recibir su regalo.

—Ya llegó, ya llegó, ya llegó —quería preguntar qué o quién llegó pero ella me ganó la conversación —El modelo.

Imaginé a un tipo muy simpático, alto y elegante y, sobre todo, soltero que únicamente no salía con mujeres porque era gay. No es que alguna vez me haya interesado, es que mi hermana coqueteaba con uno cuando lo ve y siempre terminaba con la misma historia.

—Te presento a este galán —levanté mi vista hacía Katana y a su invitado especial con mucha indiferencia hasta que lo vi—. Baji Keisuke-kun.

—¿Qué tal? —alzó una mano sin prestarme atención a mí. Y, más bien, miraba las paredes de un lado a otro.

Sabía perfectamente una cosa; él no me reconoció. Y estaba bien, porque estoy segura de que el apenas sepa que soy yo vestida como policía erótica, no se aguantará las ganas de morderme como si se tratara de carne tierna.

Me alejé lo más que pude de él, arrastrando a Kana por el brazo hasta una distancia segura para que Baji no nos escuchara.

—¿Se puede saber qué te pasa? —cuestionó.

—¿Qué hace él aquí? —pregunté molesta.

—¿Eh? Es que lo vi en la calle con un moto y dije "este sí o sí me lo tengo que pescar " y insistí mucho para que venga hoy —dijo sonriente como si lo que había hecho fue lo más normal del mundo. 

Ya me imaginaba toda la drama que hizo en la calle para convencerlo en venir a este lugar.

—¡¿Sabes lo difícil que es encontrar a un chico con cabello largo natural?! —lo dijo como si se tratara de un asunto de vida o muerte.

Resoplé —Él es el mismo Baji Keisuke del que te hablé, el de mi salón.

Se quedó estática por unos instantes, después miró de reojo al chico mencionado— ¿Pero... no mencionaste que era un tipo con anteojos que aparentaba ser listo pero que en realidad una zanahoria lo sería más? Porque realmente no se parece a nada a lo que tú me describiste— dijo agregando cosas que nunca dije pero tampoco dejaban de ser mentiras.

—Sí, pero... —no tenía caso seguir hablando del él y cómo es que se convirtió en el chico que estaba apunto de tomar las fotografías, ademas él podía a comenzar a sospechar algo—. Solo no digas que me llamo Ryuko, ¿de acuerdo?

Mi hermana solo encogió los hombros asintiendo y felizmente no preguntó nada más para seguir con las sesión y terminar de una jodida vez.


Nos pusimos a modelar el como si fuera el criminal sexy y yo la policía sensual que parecía que seducía a él.

Luego estaba acostada boca arriba en un colchón con sábanas rojas y negras

No podía creer que mi hermana fuera capaz de hacerme esas cosas con un chico que, si no fuera por suerte, sería un desconocido. No podía evitar temblarme cada vez que su respiración rosaba mi piel casi desnudo; mis labios estaban realmente cerca a las de él, pudieron haber sido besadas en cualquier momento; sus colmillos, ¡maldición!, se veían tan sensual y me daban miedo en ser domadas por ellas. Todas esas cosas me tentaban y me hacía entrar en calor.

—¡Bien, chicos! —dijo mi hermana dando una palmada—. Descanso de 15 minutos —terminó de informarnos y se marchó del lugar junto con la cámara. Quedamos únicamente el azabache y yo, y por alguna razón me sentí sumamente nerviosa, alejándome de él. Me acerqué a la mesa que 

—¿Alguna vez te han dicho que eres guapa? —habló el colmilludo atrás mía sin que yo me diera cuando.—¿Sabes? conozco a una chica casi tan guapa como tú.

Alcé una ceja por su peculiar comentario.

—Si quieres —se me acercó justo detrás de mi oído—. Después de las fotos podemos conocernos más...

Aclaré un poco mi garganta para sonar diferente —Lo siento pero yo no salgo con tipos que apenas vi por 20 minutos. Además —volteé a verlo y Baji tenía esa sonrisa pícara y coqueto—. 

—Igual... —miró hacía otro lado, apoyándose en la mesa—. Yo también tengo una novia —comentó.

Miré sorprendía pero por suerte logré disimularlo.

La novia se refería a mí, ¿no? Aunque, en todo el tiempo que he estado con él, nunca me dijo que yo era su novia oficial o algo por el estilo. Y por si fuera poco una inmensa inseguridad me llenó por temor a no ser yo.

—Y... ¿cómo se llama? —traté de sonar de lo más normal cuando en mi cabeza estaba ansiosa por despejar las dudas.

Baji solo sonrió con esa sonrisa burlona como si supiera que estaba desesperada por saber la respuesta y alargó muchísimo la pausa.

—Es... Ryuko. 

No saben el gran alivio que recibí al escuchar mi nombre y lo increíblemente rápido que desapareció con una simple pregunta.

—¿Y qué te gusta de ella?

—Su pecho supongo —me contuve las ganas de dar una buena golpiza por esa respuesta—. Porque si hablamos de su personalidad es algo amargada, aburrida y.

—¡Ya entendí! —lo interrumpí. Ya no me apetecía continuar seguir escuchando hablar mal de mí. 

Con enojo caminé hacía la puerta con la intención de salir del salón pero, unos brazos me rodearon por detrás impidiéndome que diera un paso más. Sorprendiéndome.

—De verdad, te ofendió todo eso? —no entendía lo que pasaba, él no sabe que soy yo ¿verdad?— Ryuko.

—¿Cómo sabías que era yo? —pregunté asombrada.

—Por el olor —dijo inhalando muy fuerte la base de mi cuello, asiéndome unos cosquilleo en dicha zona.

—¿Qué a caso eres un perro? —exclamé y tan pronto como terminé de decir, maldije.

Se me acercó lentamente acorralándome hacía la otra pared, sonriendo maliciosamente—. ¿Quieres saberlo?

Cerré los ojos dejándome llevar por la sensación y el tanto deseado tacto. Unió sus labios con los míos, su lengua nuevamente recorrió el interior de mi boca.

Sus manos viajaban por encima de mi falda, acariciando mi trasero. Luego sentí su rodilla moviéndose entre mis piernas llenándome de placer, me masturbaba.

—Es, espera... —hablé cuando sentí su mano en mi pecho tratando se desabrochar mi camisa—. Kana vuelve... en menos de 15 minutos... —mi voz comenzaba a quebrar —.

—Nunca aprendí a medir el tiempo —respondió—. Siempre fui malo en matemáticas, ¿lo olvidas?—sonríe.

Sin embargo los dos dejamos de hacer lo que estábamos haciendo por los sonido de unos tacones acercándose a nosotros.

—¡Eso fue una belleza! —entró con una patada mi hermana haciendo un tremendo escándalo. Y con un brinco, ambos dejamos de hacer lo que estábamos a punto de llegar.

—Qué tan rápido pasan los 15 minutos —habló en voz baja mientras que yo intentaba bajar la temperatura que Baji me subió—. ¿Continuamos luego? —susurró en mi oído.

Maldita sea, otra vuelta se me subió el calor.







































Hola, ¿cómo les va? (*'∀ ` *).

Es en esta parte donde demoré más de lo creía, no pensé que me iba atascare tanto. Pero a cambio de escribir tanto en esta parte, me iba adelantando en otros capítulos, así que quizá eso compense (?

Y sé que interrumpo mucho las escenas HOT de esta historia pero prometo que el siguiente capítulo subiré más el tono. Así que prepárense muy bien mentalmente (*'ω'*)b. Es hora de que leer tantas mangas y comics no apto para menores de 18 años den sus frutos.

Agradezco en verdad a las personitas que estén aquí, en serio que me hacen feliz y animar con este historia.

Sin más que agregar, nos leemos.






Fifinixx

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro