A los dos días, el padre de Nadia inmediatamente llego   a la casa de Sara Miller, su ex – esposa, luego de haber sido llamado por otra recaida de la pequeña, él necesitaba una explicación de por que Nadia había vuelto a intentar quitarse la vida en una crisis.

Sin ningún objeto filoso en casa, o algún sitió donde colgarse y con un botiquín solamente con enjuague bucal, Nadia encontro una solución... Detergente liquido...El motivo de la recaída fue gracias  a su madre, la señora Miller. Trantando de obligar a Nadia a hacer lo que ella quería. Queria tenerla de vuelta:a su hija bailarina.

Y mas inteligente que hizo Cedric en ese momento fue llamar a su padre, tomaron las cosas de Nadia y dejaron la casa de su madre.

 Dejar todo ese dolor detrás, era difícil, por mas que cambiara de número era algo que no se borraba, antes de irse Toppy fue a dejarle su patineta, ya que sabía que ella la necesitaba mas que él y ella le dejo su nuevo número  al menos para no perder el contacto. 

 No iría tan lejos ya que por mas lejos que se fuera lo hecho, hecho esta. No podías borrarlo cambiando tu domicilio. 

(...)

6 Años de silencio, 

 Ningún momento de felicidad,  solamente oculta en la oscuridad.

..... 

- No creas que te vas a salvar hoy, Nadia.. que vives conmigo de nuevo no te va ha salvar de mis reglas- dijo la señora Miller mientras conducía, Nadia levanto la mirada del piso y suspiró, mientras escuchaba una canción de rock en la radio del automóvil  — ¿ que porquería es esta? Mejor cambiemos – esa música es un asco. – dijo la señora cambiando la emisora. 

- Es Queen,  no es un asco - respondió colocando los ojos en blanco y la mujer la imitó  molesta, interrumpiendo el momento un anunció  de última  hora  llamo la atención  de las mujeres. 

" se anuncia los resultados de la autopsia que paralizo a la ciudad, de acuerdo a la carta dejada como testimonio de la señorita Gabriella Perez, bailarina protagónica de la compañía dynamite, siendo el primer sospechoso por infundir la fuerza el coreógrafo y profesor Marxiam Stewart, conocido en el mundo artístico como Mark,- será llevado a prisión preve...."

 - ¿ que basura es esta? -se quejó la señora miller cambiando la emisora de la radio — seguro era otra puta de esas que quieren fama y no la soportan, que asco que quieran envolver a ese hombre tan amable, recuerdo que el fue una gran persona y –

- ¡Cállate madre! -grito furiosa Nadia, al bajar del automóvil ella, furiosa encerrándose en su habitación y  llorando por ese fantasma que hoy estaba tras las rejas aunque solo era de forma  preventiva, igual era una especie de alivió.

(..)

 
- Ha pasado casi un año desde que estas aquí y ya te expulsaron a mitad de año del mejor colegio, Nadia no puedo creer que nadie quiera aceptarte. Y todo debido que es mitad de año,¡ ya tienes casi 17! ¿ cuando vas a madurar? Yo a tu edad estaba triunfando en la vida, ¿ A donde quieres llegar?—reclamó —  Andas con tu corte espantoso sin forma y tu mechón rosado como si fueras un personaje de la naranja mecánica.- decía molesta la señora Miller mientras se rascaba las sienes frustrada. 

- ¿ Tuve que dejar a mi esposa para ver esto? Madre yo fui a la escuela y me contaron que Nadia ayudó a una niña que era castigada por el profesor, por eso ocurrió todo. "No es una película de terror" ella es una adolescente. – la defendió Cedric molesto. El hermano mayor de Nadia hacía dos años que se había casado con una compañera de la facultad de derecho y ambos trabajan en el mismo bufet, a pesar de la metamorfosis de Nadia pasar de niña prodigio en el Ballet a una  andrajosa patinadora vestida siempre de negro con un mechón rosado, su hermano la seguía amando y la aceptaba tal como era.

- La inscribimos hace 4 meses en el colegio católico, dos meses atrás al colegio de señoritas y mírala allí como una rebelde sin causa— exclamó la señora.

- Estas exagerando si es así la situación tendré que llevarla a mi casa y allí yo me ocuparé de ella.— le respondió Cedric molesto.

- No deberías hacerlo, no quiero incomodarte— dije apenada Nadia, no quería incomodar la vida de casados de su hermano, y tampoco podía incomodar a su padre de nuevo, ya suficientes peleas había tenido él con su madre por su custodia. 

- Orgullosa deberías sentirte de ella. — consoló a Nadia abrazándola, Cedric era un hombre alto y bastante amoroso, siempre quería brindarle apoyo a su hermana, la miro con aquellos ojos azules que mostraban orgullo mientras le daba palmadas en la espalda.

-—¡Golpeo a un profesor!, lo dejo inconsciente de una patada.— respondió la mujer señalándola, Nadia levantó la mirada y Cedric le sonrió orgulloso.

.- Estaba molestando a una chica le hacía bullyng incluso la cacheteo frente a todos- se defendió Nadia y la mujer  arrugó  el rostro molesta. 

- ¿Ves, ves? Ella es una justiciera. — Dijo Cedric orgulloso.

- Es una bandida atrevida y salvaje. Ve esa cara, ¿acaso no dice posible "presa" ella es una vergüenza para nuestro apellido.

- Deja de molestarla. ¿No era tu hija preferida cuando bailaba? Debería serlo ahora, ¿o ya no es perfecta para ti?— agrego irónico . – vámonos.

—- No se vayan. — titubeo la señora, si se iban ella perdía la pensión que recibía por su hija -¿Puede estudiar en el colegio publico no? Allí te aceptarán. No tiene el nivel del Colegio católico donde se graduó tu hermano, y tampoco tu padre deja que vuelvas a estudiar en casa, pero será allí.. — dijo ella de mala forma.—¿Puedes quedarte entonces? Pregunto ella dudosa,  Cedric miro a su hermana y la abrazó  con cariño.

— no tengas miedo, si no funciona convenceré a papá para que vuelvas a estudiar en casa— dijo aabrazándola.

Nadia sabía que en un colegio enfrentaría otra realidad... esto era lo que hacía feliz a su padre y a su hermano, ya que ellos intentaban todo lo posible por hacerla feliz, y ella estaba consiente de todos sus esfuerzos (...)