
Capítulo 67 •💘
Sentado en el sofá de su sala de estar, Jimin jugaba con el pote de helado que tenía entre sus piernas, su cuchara empujando y apuñalando el verde contenido con chispitas de chocolate, desquitando toda su frustración y enojo con la inocente comida.
Y a pesar de lo que había dicho sobre querer comer helado, en ese momento realmente no se encontraba interesado en consumir cualquier cosa.
Su mente seguía trabajando en todos los sucesos que habían sucedido ese día, lo que solo empeoraba su mal humor, y además, le estaba comenzando a provocar un horrible dolor de cabeza.
Estúpido Min Yoongi.
Estúpida perra mamá de Yoongi.
Estúpido día que había comenzado tan mal como presintió que sería tras dejar el hospital.
Ah... Realmente necesitaba una cerveza, una botella de soju, cualquier cosa que le ayudara a quitar el mal sabor de boca que tenía con toda la situación.
—Si sigues apuñalado de esa forma a ese pobre helado, lo transformarás en una sopa de menta con chispa de chocolate, honey —expresó Taehyung, dejándose caer a su lado en el sofá con su propio pote de helado.
—De alguna forma necesito quitar está mala energía que se esta reuniendo en mí —refunfuñó.
—Sé lo que quieres decir, y ya te dije que si quieres podría decirle a uno de mis...
—No le pediré a ninguno de tus tíos que moleste, asuste o lastime a Yoongi —cortó.
—Pero quieres golpear a ese idiota —indicó Tae.
—Por supuesto que quiero hacerlo, pero no por eso significa que voy a meter en problemas a los demás para lograrlo —suspiro y enterró por última vez la cuchara en el helado.
—¿Realmente no hay ninguna señal por parte del baboso? —se quejó su amigo—. Se supone que iba a venir, ¿no? Necesito poner mis puños en alguna parte de su anotomía.
—Dijo que lo haría, pero no creo que quiera aparecer por aquí luego de haber golpeado a su amigote por estúpido —resopló Jimin.
Pero solo por si acaso, sacó su teléfono y lo revisó. Tan pronto como observó la pantalla apagada, recordó que su batería había muerto temprano en la mañana.
—Genial, simplemente estupendo, nada me sale bien este día —refunfuñó levantándose.
—¿Qué sucede, mi dulce ácido? ¿El estúpido bueno para nada te está molestando? —cuestionó feroz—. ¿Ya viene? ¿Puedo matarlo?
—No es eso, solo olvidé que mi teléfono se apagó temprano por la batería —explicó colocándolo a cargar.
—Bueno, eso explica también por qué no contestaste ninguno de los mensajes e imágenes graciosas que te envié durante el día —comprendió—. Hablando de eso, olvida lo último que te envié, no eres un mal mejor amigo hermano —expresó con su mejor sonrisa inocente antes de comer una cucharada de helado.
—Siento que dijiste cosas mucho peores que eso —murmuró volviendo a tomar asiento en el sofá.
—Entonces, ¿qué es lo que vamos a hacer con la basura de Min baboso Yoongi? —cuestionó Tae, observándole con atención.
Observando a su mejor amigo, Jimin recuperó su pote de helado y cogió una gran cucharada de ello.
Su rostro se arrugó un momento cuando su cerebro se congeló.
—No puedes neutralizar tus pensamientos congelando tu cerebro, créeme, ya lo he intentado y no funciona —resopló su amigo.
—No puedo seguir pensando en lo mismo en este momento, TaeTae, gracias a la perra de su madre y la estúpida con la cual quieren comprometerlo, mi cabeza está llena de mierda y no sé qué creer —se quejó el hermoso pelinegro.
Y las crueles palabras de la madre volvieron a atacar su mente, fomentando a crecer esa malvada semillita que plantó.
Él mejor que nadie sabía lo realmente malvada que era la madre de Yoongi, de la forma en que lo controlaba y lo estúpidamente empeñada que estaba en terminar su relación con Yoongi.
Por lo que, en teoría, no debería de creer en cualquier cosa que esa mujer le hubiera dicho.
Lo sabía.
Pero aun así, el comportamiento de su estúpida pareja no estaba ayudando en su caso.
Tampoco el que hubiera tenido un "inesperado" Encuentro "fortuito" Con la estúpida de Yu-ri en la salida, quien más que encantada le contó todo sobre lo que hablaron en la oficina de Yoongi.
Y como si eso no fuera suficiente, también le mostró una grabación de Yoongi burlándose y hablando mierda de ellos y su supuesta relación que terminó siendo solo una apuesta tonta por diversión.
Solo era un cuerpo para pasar un buen rato y tener buen sexo, nada más.
Quería creer que, en realidad, era una grabación trucada, pero él mejor que nadie conocía la voz de su pareja como para reconocer realmente que era él quien estaba diciendo todas esas cosas asquerosas.
—Es tan difícil saber si esas perras sucias están diciendo la verdad o no —suspiró su mejor amigo, llamando su atención.
Los labios de Jimin se torcieron ligeramente con ello, ya que en realidad, no le había contado toda la situación que pasó con Yu-ri fuera de la empresa, distrayéndole con sentirse mal.
Se sentía un poco culpable por no decirle de la grabación que esa estúpida le había mostrado.
Pero si le hubiera dicho, Jimin estaba seguro de que Tae muy posiblemente le habría dejado con Jungkook solo para subir y darle unos buenos golpes a Min estúpido Yoongi.
Uhm... Tal vez si debió de haber abierto su boca en ese momento.
—Pero ¿sabes? Independientemente de que haya razón o no, de igual forma quiero venganza con el baboso —declaró Tae—. Si te hizo pasar un mal rato y sufrir, no importan las excusas que dé, tiene que sufrir —gruñó.
—Entiendo perfectamente ese sentimiento —suspiró Jimin.
—¿Y si renunciamos? —preguntó de pronto—. Ese idiota no es nadie realmente sin ti, y quedará un jodido caos si renuncias, lo suficiente como para que aprenda parte de la lección, la otra corre por mi cuenta —sonrió malvadamente.
—No me tientes, que así como estoy en este momento lo acepto —se quejó.
—Hay que hacer algo para vengarse de ese estúpido —exclamó su mejor amigo.
—Pero renunciar de esa forma también estará metiendo en problemas a otros —indicó.
—No es momento de pensar en otros, ahora es cuando hay que ser egoístas y pensar solo en nosotros mismos —declaró—. Si me dejas tu auto podría ir a comprar unas cajas de huevo, rollos de papel higiénico y pintura en spray para divertirme con su casa —exclamó sonriente.
—Te dije que no me tentaras así —se quejó Jimin.
—Vamos, Jimin-ah —pronuncio con tono meloso—. Ese idiota merece algo como eso y más. Fue una mierda contigo todo el día, abusó de su posición —le recordó, ahora utilizando lo que le había contado para convencerlo.
El muy maldito sabía perfectamente como hacerlo.
—Es mi jefe, solo estaba empleando ese papel —le recordó, con sus labios torcidos en molestia.
—Antes que tu jefe, es tu pareja, y lo estuvo demostrando desde el mismo día en que llegamos del campamento e incluso antes, por lo que no me vengas con esa excusa, honey —resopló—. Vamos, solo será una cucharadita de karma.
—No quiero que te metan en la comisaría, mi estómago sigue dando algunas vueltas como para ir a buscarte —expresó finalmente.
Y con tan solo esas palabras, la mirada traviesa y malvada de Taehyung cambio a una preocupada.
—Cierto, te veías muy mal cuando te trajimos —recordó—. ¿Seguro de que no quieres ir al hospital? Tal vez algo le sucede al pequeño pastelito —comentó observando su vientre.
Recordando el correo que no había abierto por esperar estúpidamente a hacerlo con Yoongi, Jimin de pronto sintió el deseo de averiguarlo en ese mismo instante.
—Dame tu teléfono —pidió dejando su helado de lado.
Sin preguntar nada, Taehyung se lo entregó y el pelinegro fácilmente lo desbloqueó ingresando la contraseña y entonces abrió su correo.
—¿Qué haces? —preguntó su mejor amigo, inclinándose más cerca con curiosidad—. ¿Buscas una hora para el médico?
Leyendo en silencio los resultados de sus exámenes, Jimin soltó una lenta exhalación y le entregó el celular a su amigo de vuelta.
—Bueno, aparentemente, el pequeño pastelito se encuentra bien —pronunció sin poder evitar la pequeña sonrisa en su rostro, colocando su mano sobre su vientre.
La mirada del rubio siguió el movimiento de esa mano, luego observó el celular en su mano y la sorpresa brilló en su rostro antes de observar a su mejor amigo.
—¿Me estás diciendo lo que creo que estás diciendo? —exclamó.
—Sip —sonrió suave—. Aparentemente tengo aproximadamente siete semanas de embarazo, lo que equivale a un poco más de un mes —reveló, y solo con eso el manto de mal humor se levantó brevemente.
—Oh, joder. Oh, mierda —exclamó Taehyung antes de abrazar efusivamente a su mejor amigo—. ¡Seré tío! —chilló y Jimin rió suavemente ante su emoción.
—Y yo papi —pronunció, cerrando sus ojos.
—Maldito, ¿desde cuándo sabías que te había llegado el correo y no me habías dicho nada? —reprochó, alejándose y tomando su rostro entre sus manos.
—Antes de salir del trabajo lo revisé y lo vi ahí —respondió—. Había estado esperando a Yoongi para revisarlo, pero ya sabes cómo fue toda esa mierda —explicó.
—Mal amigo, debiste de haberme llamado a mí mi primero —reprochó, golpeando la nuca del pelinegro.
—Ay —se quejó—. Trátame con cuidado, llevo una vida abordo ahora —le recordó.
—No hay excusa, yo soy primero que el baboso y lo sabes —refunfuñó y colocó una mano sobre el vientre de su amigo—. Prometo que seré el mejor tío del mundo, quien será todo buena onda y diversión a diferencia de Namjoon. Seré quien te llevará de juegos, te enseñará a disparar con una pistola de juguete y golpear a otro niño con el bate de béisbol...
—Tae —interrumpió Jimin con una ligera risa—. No se supone que debes de enseñarle eso —indicó.
—El dulce de leche necesitará defenderse y soy perfecto para enseñarle —anunció y luego observó su teléfono cuando comenzó a sonar cantando "bebé voy a acecharte esta noche. Atraparte y comerte viva. Solo como animales".
Pero en vez de contestar, Taehyung solo bloqueó la pantalla, logrando con ello que la canción se detuviera.
—¿Por qué no le contestas a Jungkook? —preguntó Jimin, reconociendo la canción.
Y tenía que admitirlo, realmente describía muy bien a Jeon.
—Porque probablemente él también sabía de todo esto y no dijo nada —bufó—. Hasta donde sé, perfectamente podría haber estado jugando conmigo —refunfuñó.
Rodando sus ojos, Jimin movió su mano y le dio en la nuca a su mejor amigo.
—Ay, ¿y eso por qué? —refunfuñó.
—Porque ahora tú eres quien está buscando excusas para alejarse —indicó—. Jungkook puede ser el amigo de Yoongi, pero eso no significa que le cuente todo, ya sabes cómo es Min —suspiró—. Ahora, deja de usarme como excusa y ve con tu hombre.
—No eres una excusa —gruñó.
—Los dos sabemos la verdad, así que será mejor que vayas con él —indicó Jimin—. Jungkook es el primer hombre que ha logrado mantenerte tanto tiempo, sabes que significa algo, no lo ignores por miedo ni mucho menos me uses como excusa para ello.
—Me caes mal —pronunció Taehyung con un puchero.
—Sí, claro, ve con él —ordenó.
—Pero... No quiero dejarte solo cuando estás mal —indicó, observándole preocupado.
—¿Me ves llorando? —alzó una ceja.
—Que no se vea no significa que no esté sucediendo interiormente —argumentó.
—Estaré bien —aseguró—. No sé qué es lo que está sucediendo, pero en el mejor de los casos, Yoongi me tendrá que dar una buena explicación y besar el piso para que lo perdone, y en el malo... Solo tendré que cambiar de trabajo —se encogió de hombros.
—¿Y el baby? —preguntó Tae, observando su vientre.
—Supongo... Que se lo tendría que decir en algún momento, pero no ahora —suspiró—. Vamos, ve con tu chico —ordenó cuando el teléfono volvió a sonar.
—Está bien —anunció, levantándose del sofá—. Me llamarás cualquier cosa, ¿de acuerdo? Estaré con mi celular en la mano —prometió.
—Estaré bien —le sonrió suave.
—Lo que me recuerda, tienes que encender tu teléfono —anunció Tae.
Levantándose del sofá también, Jimin se dirigió al mueble donde lo había dejado cargando y lo encendió.
O al menos lo intento, ya que con la poca carga que poseía no le dejó.
—Lo intentaré dentro de unos minutos más —prometió—. Y nada de convencer a Jungkook para vengarte de Yoongi —advirtió observando cómo se dirigía a la puerta.
—No prometo nada —expresó con una gran carcajada malvada.
Observado a su amigo finalmente retirarse de su departamento, Jimin negó y observó la carpeta que había dejada abandonada en el mueble tan pronto como llegó.
Juntando sus cejas ante el interés de Yoongi porque trabajara esa misma noche en ella, Jimin la abrió para encontrar solamente en el interior un post-it con la letra de su pareja.
"Lo siento, bebé, tiene a mi hermano en su poder, aguanta un poco más e iré a contarte todo cuando no tengamos ojos sobre nosotros"
El ceño fruncido solo se presentó más ante la nota de Yoongi, dejándole más confundido que antes.
¿De qué estaba hablando? ¿Ojos sobre ellos?
¿Qué se supone que tenía que creer con aquello?
Observando su teléfono con duda, Jimin lo intentó encender nuevamente.
No creía que Yoongi le hubiese estado hablando por ahí, ¿cierto?
Y entonces, tan pronto como la pantalla se iluminó, su celular comenzó a volverse loco ante la avalancha de mensajes que le atacó uno de tras de otro, sobresaltándolo.
Tomándolo, Jimin contempló los mensajes que le había enviado Taehyung durante el día, pero en realidad su mirada estaba fija sobre la cantidad de mensajes absurdas que le había enviado su pareja, había incluso superado la cantidad que le enviaba Tae cuando estaba aburrido.
—¿Qué es todo esto? —refunfuñó presionando el chat de Yoongi, pero su atención fue hacia la puerta cuando esta fue tocada.
Recordando las palabras de Yoongi sobre ir a su departamento a explicarle todo, el cuerpo de Jimin comenzó a moverse mucho antes de que su cerebro tomara una decisión y dejó el teléfono para abrir la puerta esperando ver a Yoongi.
Solo... Que no era él.
—¿HyoSang? —preguntó, observando confundido a su ex.
—Hey —saludó, con una sonrisa estúpida.
—¿Qué quieres? —cuestionó con desgano y solo algo irritable.
—Bueno, somos vecinos, y me preguntaba si tenías azúcar que...
Sin siquiera terminar de escucharle, Jimin empujó la puerta.
—¿Qué crees que haces? —cuestionó con el ceño fruncido cuando su puerta no se cerró completamente por culpa del pie de ese idiota que se interpuso en su camino.
—Evito que me cierres la puerta en la cara, qué más —se burló, ejerciendo más fuerza.
—Sal de mi casa —ordenó cuando la fuerza del contrario superó la suya, logrando abrir la puerta.
—No, tú y yo tenemos unas cosas que arreglar —anunció, acercándose.
—¿En serio? ¿Y sobre qué? —alzó una ceja.
—Te mostraré lo que el amigo entre mis piernas puede hacer —declaró y se abalanzó sobre él, estrellando sus bocas juntas.
Gruñendo ante el repentino ataque, inmediatamente las manos de Jimin intentaron apartar al estúpido loco, pero este le golpeó contra la puerta y luego tomó sus manos atrapándolas sobre su cabeza.
—No sabía que podías ser tan divertido —se burló Hyosang.
—¿Quieres saber qué es divertido? Toma esto, imbécil —gruñó, alzando su pierna para golpearle directamente en su entrepierna con su rodilla.
Quejándose, HyoSang inmediatamente retrocedió, dándole su espacio mientras le maldecía.
Cuando el imbécil alzó su puño, para Jimin fue algo instintivo cubrir su vientre mientras lo esquivaba, lo cual habría resultado más efectivo si tan solo no se hubiera caído en el proceso sobre su trasero.
—Ahora sí, me ganaré ese dinero con gusto —gruñó el idiota, lanzándose sobre él.
Y en lo único que podía pensar Jimin, era en qué mierda estaba pensando HyoSang, mientras intentaba esquivarlo y pensar en un plan de escape.
Lamentablemente, ahora no podía luchar tan descuidadamente como antes si no quería herir la vida que crecía en su vientre.
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Canción mencionada "Animals" de Maroon 5
Espero que disfrutaran del cap mis copitos, nos vemos, un abrazote y un besote! se me cuidan! <3
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