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14 - Sunhye

Me dolía más de lo que me gustaría admitir que él me hubiera dejado así. No sabía quien era esa chica por la que él quería aún luchar después de haberlo rechazado por ser virgen, y saber su nombre no me generaba precisamente paz.

Se notaba lo mucho que aún le interesaba ella a Jungkook, porque no se lo pensó dos veces en dejarme sola para ir detrás de ella. Jungkook aún la quería, y aunque me estuviera dando cuenta de cosas que no me gustaban, tenía todavía bien claro el objetivo por el cual él me había buscado, por duro que fuera, yo tenía que aceptarlo, y ser profesional, no me podía dejar llevar por las emociones, una cara bonita, una sonrisa de conejo y unos ojos lleno de estrellas, claro que no podía confundirme.

Él era un chico más, y yo no tenía porqué ir detrás de él, no había motivo alguno, y eso se acababa justo en ese momento. Si Jungkook quería verme, por el motivo que fuera, le tocaba buscarme, yo no estaba para rebajarme a ningún hombre.

Porque aunque los dos hubiéramos sentido ese "algo" esa noche, él seguiría prefiriendola a ella; yo solo era una puta que lo ayudaba con sus problemas.

Salí del baño más decaída de lo que pensé, me limité a pensar en lo que había pasado y en lo rápido que Jungkook había cedido a su ex novia, busqué mis pertenencias y me permití salir del gimnasio para irme a preparar para una noche más en el club.

Cuando llegué a mi casa, me di un baño de agua caliente que me haría relajar mis músculos, salí secando mi cuerpo y me coloqué algo cómodo para irme. Pedí un taxi que me dejó en la puerta del Hot Sinner y saludé a Hobi que se encontraba ya en la barra.

Se encontraba limpiando los vasos con una servilleta, me miró y me sonrió con una sonrisa preciosa.

—¡Buenas tardes! —su ánimo hacía florecer el mío con solo verle —¿Y eso aquí tan temprano? —preguntó, yo ladeé mi cabeza apretando los labios.

—Digamos que no me apetece estar ahora mismo en mi apartamento —contesté y él asintió —¿Me sirves algo?

—¿Qué te apetece? —miré las estanterías.

—Estaría bien un Gin-Tonic —dije, y Hobi sonrió.

—Lo normal —se encogió de hombros lo que me hizo sonreír —¿Y se puede saber el motivo por el cual no quieres estar en tu apartamento ahora? Perdona que me meta, pero cuando no estás en el club disfrutas mucho tu tiempo libre —añadió mientras colocaba en una copa algunos hielos y buscaba la ginebra y la tónica para mezclarlas.

—He estado un poco distraída, ¿sabías que se acerca el cumpleaños de mamá? —Hoseok me miró sorprendido, el sabía lo que me afectaba hablar de mi madre, sabía mis problemas personales y sabía lo mal que lo había pasado.

Aunque todo era una tapadera para todo lo que me pasaba.

Se veía en sus ojos la preocupación. Dejó una rodaja de limón sobre el hielos y el líquido y me tendió la copa.

—Quiero ir a verla, pero no quiero encontrarme a mi padrastro, Hobi —jugué con mi dedo al rededor del borde de la copa, perdida en mis pensamientos.

—No tienes que hacerlo si no quieres, de todos modos, ella se olvida todos tus cumpleaños —asentí mientras le daba un sorbo a mi Gin-Tonic, el cual estaba delicioso.

Nadie preparaba tan buenos Gin-Tonic como Jung Hoseok.

—Pero en parte no quiero ser como ella —hice una mueca, Hoseok estiró una mano por la barra que nos separaba hasta colocarla encima de la que tenía libre, dándole un apretón levemente.

—No eres como ella, Susu —me mostró una sonrisa afectiva que me ablandó un poco —Eres mucho mejor, y más guapa seguro —me hizo reír y di otro trago.

—¿Aunque sea chica fácil? —pregunté levantando una ceja.

—Las chicas fáciles son lindas —negué con una sonrisa de oreja a oreja —Por cierto, casi se me olvidaba, alguien que aprecias y conoces mucho te quería ver, estaba en la sala de práctica —informó y yo fruncí mi ceño.

—¿Alguien que aprecio? —levanté una ceja.

—Sí, si quieres una pista, es que baila en el tubo como tú —pensé un momento y enseguida caí en quien podría ser.

—No —aún no me lo podía creer.

—Sí —asintió él con una sonrisa.

—Adiós, Hobi, nos vemos en un rato —me despedí, no sin antes beberme todo mi Gin-Tonic de un solo trago para salir corriendo hacia la sala de práctica.

La sala de práctica estaba detrás de las habitaciones, era donde la señora Choi nos daba nuestras clases de Poledance, y conocía a alguien que quería muchísimo gracias a esas clases.

Cuando atravesé todo el club y abrí la puerta, me sentí muy feliz de volver a verla, traía ropa de práctica y se detuvo al verme, hacía tiempo que no la veía. La había extrañado muchísimo.

—¡Solar!

—¡Sunhye! —chillamos ambas y corrimos para abrazarnos —¡Qué guapa estás! —me apretó contra ella y yo hice lo mismo.

Había conocido a Solar hacía muchos años, cuando inicié con las prácticas de Poledance, ella era una alumna estrella de la señora Choi, ambas nos hicimos muy unidas, hasta convertirse en la única amiga chica que tenía, nunca nos habíamos separado y compartíamos todo lo que nos pasaba a la otra, nunca hubo secretos, hasta que se enamoró de un millonario americano que se la llevó lejos de mi, pero aún así, no habíamos perdido el contacto por nada del mundo.

Nos separamos luego de un rato y ambas nos miramos con una sonrisa de felicidad absoluta.

—Te extrañé mucho —dije radiante.

—Y yo —respondió.

—¿Pero tú no estabas en planes de casarte con el americano? —pregunté.

La última vez que había hablado con ella había sido hacía una semana, justo después de haberle dicho a Jungkook que nos veríamos, ella conocía algunas cosas.

—Sí, ¿pero adivina qué? —le dio suspenso.

—¿Qué?

—¡Qué me voy a casar aquí en Corea! —dijo emocionada y celebré con ella dando saltitos de alegría.

—Me alegro mucho, Solar, así podré asistir, me moría por verte vestida de blanco —sonreí —¿Y cuándo es?

—En un mes, aún tenemos que preparar todo, y son muchísimas cosas, pero Tyler contrató a personas de confianza mientras yo me relajo un poco —dijo —Pero ya dejemos de hablar de mi —cortó su tema de raíz y yo me puse tensa de momento—¿Qué pasó con ese chico que me habías dicho? ¿Pasó algo entre ustedes? ¿Se acostaron? —preguntó.

Ambas nos sentamos en el suelo de madera del lugar, cruzando las piernas en posición del indio y Solar quedó delante de mi.

Entre las dos no había secretos, y este no iba a ser la excepción, además, me hacía bien compartir mis cosas con ella, porque era como una ayuda a cargar mi peso, y ella siempre estaba encantada de ayudarme a llevarlo.

—No, aún no, hicimos cosas, pero él aún no está preparado para... Eso, y no creo que quiera dar ese paso conmigo —bajó mi mirada.

—¿Porqué?

—Su ex novia, la que te conté que lo había dejado, lo llamó hoy mientras estaba apunto de besarlo y perder todo mi autocontrol y profesionalismo, y él no se pensó dos veces dejarme e ir detrás de ella —conté, ella alzó las cejas.

—Uy, eso debió de haber sido duro —asentí.

—Pero no vale la pena, Solar, él está enamorado de ella, y yo no quiero estar detrás de él rogando por su atención, es un chico que se merece todo, pero yo soy profesional, y sí él solo me buscó para sexo, eso es lo único que va a obtener de mi —aclaré, Solar asintió comprendiendo mi punto de vista.

—¿Pero y si él decide dar el paso definitivo de acostarse y que sea contigo, eres capas de aguantarlo? —preguntó.

Yo me mordí mi labio un poco frustrada.

¿Era capas de aguantarlo?

No tenía idea, aún ese momento no había llegado y sentía que Jungkook tenía que dar ese paso con la persona que quería, y yo no era esa persona, y si me escogía a mi, me esforzaría por darle una noche memorable y me prepararía mentalmente para olvidarlo y seguir con mi vida, eso era lo más razonable.

—Espero que si —me encogí de hombros.

—De todos modos, siempre voy a estar ahí, para apoyarte, no importa lo que sea —le di una sonrisa agradecida mientras nos cogíamos de las manos.

—Gracias —ella negó como si no hubiera necesidad de darlas, pero sí que las merecía —Tenemos que quedar para tomar algo, pero tengo que ir a ver a Namjoon, aún no sabe que estoy aquí —le informé.

—¿Aún te sobreprotege de esa manera? Está muy colado por tí, Sunhye, y tú sigues sin darle ni la hora —dijo.

—Nam es como un hermano mayor —añadí.

—Para tí, pero para él sabes que nos es así —me encogí de hombros sin darle importancia.

Sabía que tenía razón, pero Namjoon seguía siendo la persona a la que le estaría el resto de mi vida agradecida, aunque para él, yo significara otra cosa.

Además, yo tenía interés en alguien más.


(•••)
Capítulo aburrido, lo sé.

Pero vendrán mejores.

¿Qué creen que pueda pasar? Yo estoy ful escribiendo Cockiness y Perfectly Imperfect con su nueva trama.

Bueno, os leo.

Lxs sarangheo

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