23
Jimin observó a uno de los enfermeros acercarse a la camilla donde Jeon permanecía, revisaba los signos de su amigo.
— Deberías ir a casa a descansar — dijo de repente el enfermero tomando por sorpresa a Jimin quien elevó la vista para encararlo.
— Necesito estar aquí para cuando despierte — exclamó en voz baja moviendo la vista hacia el rostro de Jungkook.
— Has estado aquí por los últimos tres días — comentó — evitar conciliar el sueño también es malo para la salud, los signos vitales del paciente están mejorando al igual que la saturación de oxigeno.
— Pero yo debería quedarme aquí por sí necesita algo — tercamente sacudió su cabeza de manera negativa.
— Lo comprendo, pero de nada va a servir si te enfermas también.
Bien, el enfermero tenía un punto. Sin embargo, él no quería irse de su lado.
— Estará bien — agregó el contrario — estamos haciendo rondas para vigilarlo, si llegase a tener alguna recaída lo cual no lo creo probable por su mejoría, cualquier enfermera o médico vendrá enseguida.
Jimin mantuvo su mirada durante un largo tiempo en su mejor amigo, hasta que asintió pausadamente con la cabeza.
— Vendré lo más pronto posible — respondió.
— Intenta dormir un poco, las sombras bajo tus ojos muestran lo cansado que te debes sentir.
Suspirando Jimin acató la orden del enfermero no sin antes echarle un vistazo a Jeon, para luego acercarse hacia su rostro y susurrarle al oído que no estaría mucho tiempo fuera.
Transcurrieron alrededor de veinte minutos en que Jimin llegó al apartamento que había estado compartiendo con su mejor amigo las últimas semanas, el silencio allí adentro fue casi aterrador para él.
Pero el enfermero tenía razón, él se sentía exhausto y a pesar de que los hermanos habían insistido en que estarían cerca, él se negó a moverse de su lado.
Namjoon había estado también aquellos días haciéndole compañía, pero la incomodidad entre ellos era demasiado para ignorar.
Sacudiendo la cabeza para desechar los recuerdos, Jimin luego de tomar una refrescante ducha se dirigió hacia la habitación para poder dormir un poco, no pudo evitar activar las alarmas en su móvil considerando el hecho de que no quería dormir por demasiado tiempo y estar alejado de Jungkook.
En el hospital nuevamente el médico estaba revisando al menor, pero esta vez era Namjoon quien estaba allí en la habitación a la expectativa cuando observó al hombre revisó unos papeles por demasiado tiempo.
— ¿Sucede algo? — cuestionó al observar la expresión inquietante que adoptó el rostro del enfermero.
— Eres su hermano mayor, ¿Verdad?
— Si, lo soy — Namjoon no pudo evitar abandonar el asiento donde se hallaba sentado.
— ¿Hace cuánto el joven Jeon sufre de ataques de ansiedad? — el médico esperó pacientemente por una respuesta mientras Namjoon formó una expresión silenciosa tratando de recordar la fecha exacta.
— No estoy seguro, todo comenzó luego del accidente.
— ¿En qué tipo de situación su cuerpo responde de esa manera?
Namjoon se mantuvo en silencio tratando de rememorar las situaciones en las que su hermano había tenido ataques de ansiedad.
— Hubo un par de semanas luego de que despertó de las cirugías en las que tuvo pesadillas de forma seguida — relató manteniendo la mirada en el médico quien asintió al escucharle — él no lograba dormir por lo que los médicos le recetaron pastillas para conciliar el sueño.
— ¿Todavía tiene pesadillas del accidente? —cuestionó.
— No lo creo, no sé sobre ello — admitió — solía decirnos sobre estas cosas hasta que un día simplemente se detuvo.
— Aún las tiene — la voz de Jimin a las espaldas del enfermero los tomó por sorpresa a ambos.
— ¿Es así? — preguntó Namjoon sorprendido por ello.
— No son recurrentes a comparación de hace meses, pero de vez en cuando es fácil saber cuándo las ha tenido — dijo Jimin moviendo la vista hacia su mejor amigo — de alguna forma estas se detienen durante un período de tiempo, pero estas últimas semanas sé que las ha tenido ya que lo he visto levantarse varias veces por la noche.
— Es una situación totalmente normal luego de sufrir un accidente, claro que difiere en la forma y medida en que la persona reacciona ante un trauma similar — explicó el médico — la anemia, las pesadillas, sus niveles de cortisol también eran elevados y los ataques de ansiedad son un claro diagnóstico de estrés postraumático.
Jimin jadeó al escucharle.
— En casos de personas que han sufrido accidentes de tráfico es recomendable una terapia cognitivo-conductual — el médico movió sus manos mientras hablaba — eso ayuda a las personas con la situación que enfrentan luego de lo sucedido.
— Pero mi hermano a parte de las pesadillas y demás no parecía verse tan afectado — comentó Namjoon captando la atención del hombre.
— Existen ocasiones donde estos síntomas y otros más aparecen luego de seis meses del accidente, algunas personas no toman las sesiones de terapia como algo importante por realizar hasta que su cuerpo empieza a fallar tanto física como mentalmente.
— Entonces su sugerencia es que en cuanto mi hermano se recupere enviarlo a las terapias.
— Es lo más recomendable en estos casos — el médico bajó la vista unos segundos antes de regresarla — si este tipo de situaciones no son tratadas a tiempo me temó que un neumotórax será el mínimo de problemas que sufrirá.
Jimin parpadeó asustado prestando atención a las indicaciones del médico quien al poco tiempo de checar nuevamente a Jungkook abandonó la habitación.
Ambos se quedaron en silencio por demasiado tiempo, hasta que Namjoon sacudió sus manos temblorosas separando sus labios para suspirar con demasiada fuerza tomando valor para enfrentar la mirada pesada de Jimin hacia él.
— Puedo hacerme una idea de lo que estás pensando Jimin — admitió Namjoon mojando sus labios de forma nerviosa — yo no sabía que habría secuelas como estas.
Jimin se mantuvo en silencio escuchándolo.
— No estoy pidiendo que creas en mis palabras o que confíes nuevamente en mi — dijo el mayor — pero quiero dejarte en claro que no tengo y nunca tuve la intención de que mi hermano se enfermara de esta forma.
— Pudiste decirnos la verdad — dijo Jimin sonando molesto y dolido — arrastraste a Yoongi en esta situación con el alto riesgo de que terminara en la cárcel.
Namjoon sacudió su cabeza de lado a lado enérgicamente.
— No fue mi idea que Yoongi fuera cómplice de todas estas mentiras.
— ¿Fue idea de Hoseok?
— No — confesó — ninguno de nosotros tuvo que ver con esa decisión.
— ¿Estás insinuando que Yoongi solo decidió inculparse por el accidente sabiendo perfectamente que terminaría en la cárcel?
Namjoon tuvo la intención de responder al cuestionamiento, pero un sonido captó la atención de ambos.
Un quejido escapándose de la garganta de Jungkook, un surco formándose profundamente en su frente mientras pequeñas gotas de sudor aparecieron deslizándose sobre su piel.
— ¿Qué es? — preguntó Namjoon acercándose a la camilla.
Ellos pudieron notar en el monitor que la frecuencia cardíaca de Jeon estaba comenzando a subir paulatinamente.
— ¿Debería llamar al médico? — cuestionó Namjoon sin saber qué hacer en esos momentos.
Jimin observó detenidamente a su mejor amigo quien se quejó una vez más, pudo observar que debajo de sus párpados el movimiento ocular era realmente rápido.
— Es una pesadilla — la voz del médico quien regresó los asustó.
— ¿Está teniendo una pesadilla justo ahora? — preguntó Namjoon.
— Lo más probable es que se deba al traumatismo junto con el ataque que tuvo — el médico se acercó a Jungkook para fijarse en el movimiento ocular — la parasomniaNREM suele ser común en personas que han sufrido algo que los ha afectado de forma importante en su vida.
Los quejidos por parte del menor se mantuvieron hasta que se detuvieron varios minutos después.
— ¿Él va a continuar teniendo pesadillas? — preguntó Namjoon sonando realmente preocupado — lidiamos con su insomnio hace un par de meses hasta que mejoró sin la ayuda de las pastillas.
— Probablemente — comentó el hombre — ¿En el momento en que sufrió el ataque tenía alguna relación con el accidente?
Namjoon bajó la mirada sintiéndose culpable de ello.
— Si — respondió Jimin por el mayor — ellos estaban discutiendo sobre eso.
El médico formó una mueca al escucharlo.
— No soy quién para entrometerme en los problemas familiares de los pacientes o sus vidas privadas, pero como la persona que está atendiendo su salud, les sugiero solucionar lo más que puedan con respecto a los asuntos que generen daño en el paciente para evitar nuevos ataques futuros.
— Lo comprendo — respondió finalmente Namjoon — lo haremos.
Jimin asintió al escucharlo siendo seguido por el médico quien comprobó que la frecuencia de Jungkook volvió a ser estable.
Unos minutos después de que el médico abandonó la habitación, Jimin tomó asiento en la silla más cercana a la camilla para poder recostar sus brazos al costado del brazo de su mejor amigo y descansar su cabeza allí, comprobando cada cierto tiempo su rostro.
En cuanto los movimientos oculares rápidos regresaron, no demoró en moverse hacia arriba para deslizar suavemente su mano contra la mejilla derecha de Jungkook y con sus labios besar la piel de la frente donde las gotas de sudor estaban apareciendo.
A los pocos segundos la frecuencia se estabilizó de nuevo.
— Para serte sincero Jimin — Namjoon habló a su costado una vez que se acercó a la camilla — realmente estoy agradecido de que mi hermano te tenga en su vida, de no ser por ti él definitivamente habría empeorado.
— Bien, en eso si estamos de acuerdo — respondió Jimin para besar nuevamente la frente de Jungkook antes de alejar su rostro y observar a Namjoon observarle sintiéndose culpable por lo sucedido — por ahora solo estemos de acuerdo en querer la recuperación de Jungkook.
— Estoy de acuerdo.
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