🧁-Capítulo 2
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El verano estaba haciendo estragos en la joven pareja, sobre todo en el pobre alfa. Estaban a mediados de Junio y la temperatura se hallaba alrededor de los 35° y Hoseok estaba en la creencia de que dentro de poco terminaría derretido.
Eran las cinco de la tarde y Taehyung convenció a su alfa de ir al parque cercano a disfrutar de la sombra y viento. Hoseok no quería ir, creyendo que terminaría como un cubito de hielo expuesto al sol, en su camino a aquel lugar. Así que antes de salir, el alfa se cubrió de bloqueador solar de los pies a la cabeza, pues su piel era muy sensible.
Quince minutos después, se hallaban sentados sobre una manta azul, debajo de un frondoso árbol, mientras se echaban aire con un lindo y pequeño ventilador de baterías. Hoseok tenía su espalda recargada en el fuerte tronco, viendo a su bello omega acercarse con un par de paletas heladas de tres colores en forma de cohete espacial, las favoritas de la linda parejita.
—¿Recuerdas que en nuestra primera cita no quisimos ir al cine o a un restaurante? —Tae mencionó ya sentado a lado de su novio, mientras ambos degustan su congelado dulce. —solo vinimos aquí y comimos muchas de estas paletas de hielo.
Asintió. —Hicimos muy feliz al vendedor, dijo que solo había vendido una en todo el día, hasta que llegamos nosotros y acabamos con ellas. —se rió bajito.
Taehyung se carcajeó recargando su cabeza en el hombro de su alfa. —Solo hablamos de nosotros mientras yo te dibujaba en una hoja de papel.
El alfa sonrió saboreando su paleta. —Me gustó mucho ese dibujo… pero se me fue de las manos por culpa del viento y terminó en el lago… —hizo un puchero triste. —Amorcito ¿Me perdonas?
—¿Eh? ¿Por lo que le pasó al dibujo? —asintió. —Pastelito, ya pasaron dos años, no te preocupes, no fue tu culpa… —tocó su nariz dulcemente. —Además, ahora tengo muchos dibujos y pinturas tuyas.
Hoseok sonrió ladeando su cabeza para dejar un besito en los claros cabellos de su omega, entrelazó sus manos libres y así ambos disfrutaron de su compañía y sombra mientras terminaban sus paletas congeladas. El atardecer comenzaba a caer, las risas de los niños aún se escuchaban, acompañados de su pasos correr o los timbres de sus bicicletas. El alfa se hallaba con su cabeza cómodamente recostada en el regazo de su novio, mientras mantenía sus ojitos cerrados, disfrutando del ligero viento y las caricias en su cabello, que lo terminaron arrullando como un bebé, hasta que se quedó dormido. Taehyung aprovechó para tomar su libreta de bocetos, su lápiz y comenzó a dibujar a su lindo lindo alfa.
Para Taehyung, Hoseok era su musa, su inspiración. El omega podría haber creado muchas pinturas y dibujos a lo largo de su vida, pero definitivamente, sus favoritos siempre serán los que tienen a Hoseok como protagonista. Nunca pensó tener a alguien que lo inspirara tanto y se siente tan feliz de que esa persona sea su amado novio… sobre todo, amaba dibujarlo cuando estaba haciendo cosas tan simples, como dormir, estudiar, sonreír e incluso cuando lo ve tan contento regando sus plantitas. Cualquier mínima cosa que su alfa hiciera, le parecía perfecto para plasmarlo en un papel.
Incluso había pasado más de una vez, donde se encontraban perdidos en el placer, que Taehyung quedaba maravillado con las expresiones de su novio. Así que aún en medio del acto, sintiendo a su alfa moverse en su interior, se ponía a dibujarlo con algo de dificultad. Hoseok ya estaba acostumbrado a que su omega hiciera eso cuando tenían relaciones, y lo amaba.
Cuando la noche cayó, ambos se retiraron de aquel lugar, caminando con calma, tomados de la mano, mientras chocaban sus hombros dulcemente, sacándose mutuamente pequeñas risitas.
Compraron otro par de paletas congeladas para irlas comiendo en el camino. Hoseok iba muy tranquilo, saboreando la suya mientras pensaba que llegando al apartamento, regaría a sus lindas plantitas. Por otro lado, en la mente de Taehyung apareció su alfa en el momento en que introdujo toda la paleta helada a su boca, la sacó relamiendo sus labios, entonces miró a su novio y se sintió sucio por estar pensando en hacerle un oral. Pero a la vez se sintió sumamente caliente ¿Hace cuando no le hacía un oral a su alfa?
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Hoseok terminó de llenar su rociador con agua, y se dirigió a su pequeño vivero muy feliz. Con calma se puso a rociar cada una de sus plantas mientras les hablaba de manera tierna.
—¡Mira cuánto has crecido! —exclamó con alegría dando saltitos. —Agua para ti también~
El alfa amaba hablar con sus plantitas porque él sabía que eso las hacía feliz y las ayudaba a crecer, también les cantaba o les ponía música. Desde que empezó a hacer eso, se dio cuenta de que sus plantas crecían mucho más rápido, nunca las veía tristes, estás siempre estaban muy vivas y de un color verde rebosante… Hoseok era un alfa demasiado alegre y positivo que irradiaba felicidad todo el tiempo. Sus buenas vibras hacían feliz a cualquiera.
Así que mientras Hoseok estaba muy entretenido con sus plantas, Taehyung se hallaba dentro de la ducha. El alfa había sido el primero en bañarse en cuanto llegaron, pues se había manchado la boca y camiseta con su paleta, y a él no le gustaba sentirse sucio ni pegajoso. Un vez el omega salió, se colocó su blanca bata de baño, mientras que con una toalla más pequeña secaba su cabello, viendo como esta quedaba levemente pintada de un color verde gracias al tinte.
En su camino a la habitación de la pareja, fue pensando en que sería buena idea retocarlo, mientras iba tarareando una pegajosa y animada canción. —Drop drop drop… gogobebe~ —se sentó en la cama sin dejar de tararear y mover su cuerpo como si escuchara la música. —Dress code is bling bling bling~
Estaba por quitarse la bata, cuando Hoseok ingreso a la recámara con sus ojos cubiertos en lágrimas, un puchero en sus labios y un dedo sangrante. Taehyung negó con un suspiro tomando la mano de su alfa. Llevó su mano libre a la mejilla contraria y con su pulgar, limpió una traviesa lágrima.
—¿De nuevo? —asintió. —Ya te dije que tuvieras más cuidado con tus cactus, pastelito… —miró el dedo índice que mantenía una pequeña herida sangrante. Lo llevó al baño y colocó su dedo bajo el agua del lavamanos. Una vez limpio, otra gruesa gota de sangre brotó de aquella herida.
—Fue un accidente… —puchereó viendo como el menor acercaba sus labios. —¿Qué haces?
—Le doy un besito a tu dedito lastimado…
Hoseok soltó una risita aún con el rastro de lágrimas en sus ojos. —No soy un niñoooo…
—Pero a veces actúas como uno, alfa mío~
Las mejillas de Hoseok se pintaron de un sutil rosado. Su omega sabía muy bien cómo hacerlo sonrojar… pero se confundió cuando vio que el peliverde comenzó a dejar ligeros lengüetazos en su dedo y después lo introdujo a su boca.
—Amorcito —se rió bajito. —¿Qué haces?
—¿Qué crees… que hago? —murmuró de manera sensual, percibiendo el ligero sabor metálico.
—Uuh… ¿Crees que mi dedo es una paleta? ¿Se te antojó otra? ¿Quieres que vaya a buscar una para ti?
Negó relamiendo sus labios. —Lo que se me antoja… —sacó el dedo de su boca. —...está aquí en casa.
—¿Trajiste una más? ¿Está en el congelador? —hizo el intento de caminar pero Taehyung lo detuvo.
—Amor… —paseó su lengua por el interior de sus mejillas. Se acercó a su novio haciendo círculos con su dedo en el pecho de su mayor. —Mi antojo… —dejó un corto besito en los suaves belfos y entonces movió su mano hasta la entrepierna de su alfa dejando un apretón ahí mismo. Hoseok jadeó. —Es tu pene.
El rostro de Hoseok se puso rojo, Taehyung sonrió travieso. Se dejó caer sobre sus rodillas y bajó el pantalón de pijama de su novio, junto con la ropa interior. Tomó entre sus manos el dormido miembro de su alfa, comenzando a dejar sutiles caricias una y otra vez, logrando que este empezara a reaccionar ante el toque.
—T-Taehyung… —relamió sus labios, recargando sus manos en el blanco lavamanos.
—Shh… —acarició suavemente la longitud, sintiéndolo endurecerse poco a poco. —Relájate…
El alfa tragó grueso, cuando sintió la lengua pasearse por la punta. Dejó salir un largo suspiro tembloroso, presionando sus nudillos en la blanca porcelana. El omega dejó besitos y suaves lamidas tal como lo hacía con aquella paleta… luego, introdujo el falo lentamente a su boca, escuchando las profundas respiraciones de su novio.
Ya se encontraba duro en su totalidad y eso había hecho muy feliz a Taehyung al saber que estaba haciendo un excelente trabajo. Gimió gustoso mientras movía su cabeza hacia adelante y atrás lentamente… su lengua se paseaba con una increíble habilidad, sintiendo las gruesas venas y la caliente piel.
—Mmm… —el omega gimió al sentir el sabor del líquido preseminal, así que aumentó la velocidad de sus succiones, dejando a la par unos cuantos suaves mordiscos que hicieron al Hoseok vibrar.
Gruñó llevando su mano derecha a los húmedos cabellos del peliverde. El pecho de Hoseok subía y bajaba rápidamente, casi al mismo ritmo de la felación. Entonces Taehyung succionó la punta un par de veces más, sin dejar de acariciar con sus manos el tenso miembro.
—Oh Tae… —apretó el agarre en los claros cabellos de su novio al percibir el tan conocido cosquilleo en su vientre bajo. —V-Voy a…
Pero a Taehyung no le importó, él continuó con su ritmo, dándose cuenta que el alfa había empezado a mover sus caderas y entonces el omega jadeó extasiado al saber que su amado alfa le estaba prácticamente follando la boca mientras sujetaba sus cabellos.
Con un movimiento profundo, sintió como el glande tocó el inicio de su garganta, haciéndole contener una arcada. Sus ojos se cristalizaron ante tan tremenda sensación… y fue en un santiamén, en el que el caliente y viscoso líquido llenó su boca… Taehyung gimió gustoso, tragando por completo la semilla de su alfa, como si se tratara de dulce miel.
Las piernas de Hoseok se hallaban temblorosas y su frente perlada mientras trataba de recuperar la respiración después de tremendo orgasmo. Por otra parte, Taehyung se limpió las comisuras con su dorso, manteniendo sus mejillas rojas y una traviesa sonrisa de satisfacción total. Entonces se puso de pie y atacó la boca de su mayor con desesperación, siendo correspondido con torpeza
El omega contuvo un chillido cuando se vio inesperadamente levantado en brazos. El aroma de ambos llenaba el lugar y eso hizo gruñir con orgullo al alfa… pero solo dio un paso, ambos se tambalearon, pues el pantalón de pijama se hallaba enredado en sus pies. Taehyung llevó una mano a su pecho del susto. Hoseok hizo un puchero a manera de disculpa y a como pudo, salió de ese enredo, emprendiendo camino a la recámara.
Una vez dejó a su omega sobre las sábanas, se quitó su camiseta y la lanzó a algún lado de la habitación. Se subió a la cama, pero Taehyung colocó su pie en su pecho y lo detuvo. Hoseok lo miró confundido… pero sus pupilas volvieron a dilatarse cuando Taehyung deshizo el nudo de su bata, la abrió con una increíble lentitud que solo hizo gruñir a su alfa una vez más. Hoseok se lanzó a su omega en cuanto vio la preciosa desnudez de su novio y atacó sus labios con un hambre voraz.
—Pastelito… —jadeó entre besos. —Tómame, duro… por favor… hazme delirar…
—Tus deseos… —gruñó mirándolo a los ojos con una sensual sonrisa ladina. —Son órdenes...
A
sdfghjkl amo escribir esto~ ¡Espero les haya gustado! ¡Gracias por las +1700 lecturas! Nos leemos en el próximo capítulo~💙✨
—Sony🌼✨
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