La depresión es un tema que muchos jóvenes no afrontan en nuestra generación, Jungkook era parte de aquellos jóvenes.
Toda su vida sintió que su padre solo lo usaba para beneficio público, nunca tuvo un "te amo hijo " no tuvo momentos felices con su padre pero su punto quiebre fue cuando una de las personas más importantes de su vida murió.

Un día como hoy hace dos años, un 8 de agosto el chico que una vez amó murió.

Jungkook tenía los ojos rojos y hinchados  como consecuencia de las lágrimas que se deslizaban en su rostro mientras miraba aquel álbum de fotos, donde sonreía con el que una vez fue su chico.

Jung-su era un chico callado que conoció en una carrera de autos, el castaño corría como la bestia, le gustaba el arte y su pasión era ser cantante.

Jungkook compitió con el chico y desde ahí formaron una amistad que poco a poco fue formando un amorío inocente entre dos jóvenes que no sabían lo que era una vida dura.

Pero Jung-su tenía muchas mentiras y cosas que Jungkook se enteró tarde, tan tarde que no lo pudo salvar.

La puerta fue abierta y de ella llegó Hoseok con un ramo de rosas amarillas con flores nubes, el pelirrojo miró con pesar a su amigo.

— ¿Listo kook ? - pregunto-.

Jungkook limpió su rostro rápidamente y fingió una sonrisa, aunque sabía que con hoseok podría demostrarse débil.

— ¿Compraste las cerezas rojas que te pedí ? - pregunto el pelinegro tomando su chaqueta de cuero.

A Jung-su le gustaban muchos las cerezas.

— Si están en el auto, Namjoon nos espera - musitó el pelirrojo — y traje las rosas que me pediste.

Jungkook asintió y después de ello salieron de la habitación del pelinegro quien sentía sus ojos pesados, su labios  resecos y sintiéndose sin ganas.

Subieron al auto de namjoon en silencio y se dirigieron al cementerio donde había sido enterrado Jung-su.

Jungkook veía el cielo pensando en si el chico lo veía desde arriba, pensando en que quizás él debería ir con él.

Porque Jungkook sentía culpa por la muerte del castaño, porque no se dio cuenta de las cosas a tiempo pero a veces las cosas se dan porque así estaba escritas para hacer.

— Kook - musitó Namjoon — ya llegamos -.

Jungkook volvió de sus pensamientos y suspiró asintiendo, hoseok le ofreció las rosas y namjoon le dio las cerezas.

El joven se bajó del auto mientras sus amigos lo veían desde el auto.

— No lo había vuelto a ver así de mal desde hace meses - musitó Hoseok preocupado.

— A estado mejorando desde que Jimin entró a su vida pero - hizo una pausa mirando a Jungkook — siempre habrán días como estos mientras él no acepte que no fue su culpa la muerte de Jung-su-.

Por otro lado Jungkook vio la  paliada con el nombre que tanto le dolía pronunciar, tomó asiento en el duro césped del lugar y dejó las flores amarillas junto con las cerezas.

— Hoy se cumplen tres años Jung-Su - musitó a la pálida — te extraño si te soy honesto, aveces me hacen falta tus malos chistes sobre los autos - sonrió mientras algunas lágrimas se deslizaban por su rostro — extraño ver tu rostro con aquellas sonrisas y que me hables sobre cómo el amarillo te parecía hermoso - sus ojos se ponían cada vez más aguados — extraño que me dijeras que si existía la alegría en un mundo tan mierda y que esa felicidad se transmitía a través de los cerezos rojos.
Jungkook lloró en silencio, mientras veía aquella pálida.

— Lamento no haberme dado cuenta antes lo que tenías - sus labios temblaron — siempre tendrás una parte de mi corazón abejita - le sonrió a la pálida — pronto te presentaré a alguien que ha llegado a mi vida y se está convirtiendo en alguien especial para mí - musitó — prometo esta vez no perderla como lo hice contigo.

Esa tarde Jungkook lloró mientras el sol salía en el cielo mientras un castaño miraba a Jungkook desde el cielo sonriente.

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Era un día tranquilo en la cafetería en la que trabaja Jimin, no habían venido tantos clientes como comúnmente habrían.

El rubio bufó posando sus brazos en la barra de la cafetería mientras miraba a la gente caminar afuera.

— Creo que saldremos temprano hoy - musitó Beomgyu a su lado — si seguimos a este paso claro-.

Jimin suspiró sin decir nada — mejor para mí necesito dormir todo lo necesario antes de empezar el nuevo semestre - musitó el rubio y beomgyu fingió sentir un escalofrío.

— Joder no me hables de la universidad que me pones nervioso - musitó sacudiendose.

Jimin río por ello negando con su cabeza — pero bien que te gusta estar en ella para ver a tu nuevo amorcito eh ? - comentó bromeando.

Beomgyu bufó mirando hacia otro lado — Yeonjun siempre me busca por los pasillos de la universidad no es mi culpa que nos encontremos por  "accidente" - se defendió el menor haciendo reír a Jimin — además tú que tanto hablas si bien que te la pasas peleando con Jungkook y por ahí veo miraditas que dicen otra cosa que no es odio - atacó.

Jimin se sonrojo en silencio recordando que hace días había seguido a Jungkook para saber qué hacía, además que seguía descubriendo estos nuevos sentimientos hacia el pelinegro.

— ¡Ajá ! Te quedaste  callado eso quiere decir que tengo razón !! - exclamó
Beomgyu sonriéndole con burla.

Jimin fue a hablar pero en eso el timbre de la cafetería sonó anunciando que había nuevos clientes.

Jimin se dirigió a la caja mientras beomgyu fue a la máquina de cafés listo para hacer nuevos pedidos.

— ¡Bienvenidos !! ¿Qué desean pedir ? - pregunto Jimin levantado la vista y viendo a Namjoon y Hoseok — Oh chicos hola - musitó el rubio sonriente pero bajo su sonrisa al ver que Jungkook ni siquiera lo había visto y solo tomo asiento en una mesa.

— No lo malinterpretes Jimin - musitó Namjoon rápidamente al ver a donde miraba el rubio — digamos que hoy es un mal día para él, esta fecha le afecta mucho a él.

El rubio enarco una ceja confundido por las palabras del mayor.

— Kook perdió una persona especial este día - musitó Hoseok — es todo lo que te podemos decir -.

Jimin entendió entonces el comportamiento del pelinegro y miró hacia su dirección comprendiéndolo.

— Que van a desear ? - preguntó volviendo su vista hacia a los dos chicos.

— Dos capuchinos y dale algo a Jungkook que no sea café por hoy - dijo Namjoon.

Jimin asintió sonriente y una vez pagado el pedido se fue hacía beomgyu quien empezó a preparar capuchinos.

Mientras Jimin preparaba un batido de fresa con chocolate y sacó un pedazo de pastel de mango.

Les llevó los capuchinos a los chicos quienes estaban una mesa aparte de la de Jungkook para darle su espacio.

Jimin suspiró tomando la bandeja con el batido y el pedazo de pastel, se animó así mismo pues nunca había estado tan nervioso por acercarse a Jungkook como lo estaba ahora.

— Un batido de fresa con chocolate con un pastel de mango para esta mesa - musitó dejando el pedido, Jungkook levantó la mirada al reconocer la voz del rubio — los mangos le hacen bien a un corazón triste cachorro -.

Jungkook le sonrió — Hola Park  - musitó sin ánimos — ¿trabajas aquí ? - pregunto.

Jimin asintió — es mi trabajo de medio tiempo claro aparte de hacerte la vida imposible cachorro - musitó mirándolo con egocentrismo.

Jungkook carcajeo por ello — aww consideras molestarme un trabajo gatito - dijo y Jimin rio.

La campana sonó de nuevo avisando nuevos clientes y Jimin suspiró debía ir a atenderlos.

— debo irme pero disfruta la bebida y el postre - musitó sonriéndole — las frutas nos suelen dar un poco de alegría en momentos inesperados - dijo y se alejó del pelinegro.

Jungkook sonrió levemente y miró el  postre leyendo la nota de Jimin.

" siempre que te sientas triste puedes venir aquí y te haré la bebida de fresa con su respectivo postre de mango cachorro ;3 "
Jungkook sintió su corazón palpitar de nuevo, sintió aquellas emociones que solía tener con Jimin y con una leve sonrisa bebió el batido disfrutándolo y comió aquel postre feliz.

Mirando al chico que causaba esa alegría atendía  a nuevos clientes que llegaban al lugar.

— Me gustas tanto Park Jimin  - susurró para sí mismo con una sonrisa.

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Había sido un día tranquilo en la cafetería, Jimin terminó de limpiar las mesas de la cafetería antes de cerrar esta.

— ¿Tú le entregas las llaves a la jefa mañana, no ? - pregunto beomgyu tomando su bolso.

— Si - respondió Jimin tomando su bolso también listo para irse, ambos jóvenes salieron de la tienda y una vez que el rubio se aseguró de cerrar con seguro el lugar miró a su amigo quien sonreía al ver una persona en un auto.

Jimin dirigió sus ojos azules en el auto y vio a Yeonjun con una sonrisa.

— Por lo visto la noche de películas se cancela - musitó Jimin bromeando.

— Hey en mi defensa me avisó hace unos minutos que estaba aquí afuera - musitó el chico — además creo que no te has dado cuenta que un pelinegro tatuado te anda esperando allí - comentó mirando hacia una dirección.

Jimin volteó su rostro y sus ojos se encontraron con aquellos ojos oscuros que le aceleraban el corazón. El pelinegro por su parte le sonrió levantando su mano como saludo.

— Bueno anda con tu perro gruñón yo me voy - se despidió Beomgyu alejándose de Jimin quien carcajeo por lo que dijo su amigo, acomodo  su cabello rápidamente y caminó hacia donde estaba Jungkook.

— Hola cachorro - musitó Jimin sonriendo — ¿qué haces aquí ? -.

— Hola gatito enojon  - musitó de igual manera el pelinegro — Bueno alguien me animó en la tarde y yo solo quería ser un buen cachorro que le llevara de regreso -
comentó guiñandole un ojo al más bajo.

Jimin carcajeó tratando de controlar su corazón acelerado — acepto tu forma de decirme gracias - dijo sonriéndole.

Jungkook asintió alegremente — Bueno vamos - dijo y le abrió la puerta del auto y Jimin entró en este.

Minutos después el pelinegro encendió el auto y se largó del lugar con el rubio, la ciudad se veía hermosa de noche y Jimin la veía desde la venta del auto con una sonrisa.

Jungkook por su parte veía de vez en cuando al rubio en silencio sintiendo muchas emociones en su interior.

Sabía que Jung-Su estaría alegre de verlo interesado en otra persona y no quería frenar aquellos sentimientos que estaba sintiendo por aquel rubio.

Mientras la luna y las estrellas se mostraban en todo su esplendor aquella noche, Jungkook miró aquel  estadio de carreras desde la carretera y sonrió.

— Si te llevo a otro lugar primero te molesta ?- preguntó al rubio quien se giró a verlo.

— No está bien - respondió un poco confundido — mientras no me secuestres estaré  bien - musitó bromeando y Jungkook rio.

— Te prometo que no te secuestrare por esta noche - le siguió el juego — te voy a llevar a un lugar especial -.

Jimin lo miró con ansias y sonrió mientras que Jungkook por su parte aceleró el auto para llegar a aquel  estadio al cual llegaron minutos después y ambos se bajaron del auto.

— ¿Qué es esto ? - preguntó Jimin confundido.

— ya verás - musitó el más alto quien tomó la mano del rubio y se dirigieron hacia la parte trasera del estadio de carreras.

Jungkook con una pinza que tenía en el bolsillo abrió una de las puertas de los empleados y le dio pase a Jimin quien entró al lugar que los dirigía a la cocina del estadio.

Jungkook cerró la puerta con cuidado y miró a Jimin sonriente — ven conmigo - musitó extendiéndole su mano y Jimin aceptó gustoso.

El pelinegro los guió fuera de la cocina y caminaron por unos largos pasillos hasta que paró sus pasos y Jimin chocó con la espalda fuerte del mayor.

— Cierra los ojos - pidió.

Jimin encarnó una ceja confundido — para qué ?- pregunto.

— prometo que te va gustar pero cierra los ojos Jimin - pidió — confía una vez en mí -.

Jimin suspiró y aceptó cerrando sus ojos, sintió como Jungkook lo tomó de las manos guiándolo a un lugar.

— Cuando yo te diga abre los ojos - musitó el pelinegro en su oído.

Jimin asintió y escuchó como Jungkook encendía algo.

— ábrelos - musitó Jungkook volviendo a su lado.

Jimin abrió sus ojos y vio el lugar sorprendido, estaban en el estadio de carreras profesional de la ciudad.

El rubio miró el cielo desde el estadio notando como la luna y las estrellas estaban en todo el centro del lugar.

— Este era mi lugar favorito de niño  - musitó Jungkook tomando asiento en el césped — me gustaba ver las carreras de autos y pensar que algún día podría ser alguno de ellos -.

Jimin imitó la acción del pelinegro y lo miró en silencio.

— Este estadio me trae tranquilidad- musitó — puedo mirar el cielo en todo su esplendor-.

Jimin sonrió mirando el cielo pues era cierto — te gustaría ser un profesional en las carreras de auto ? - le preguntó al más alto-.

— Sabes tengo dos hobbies, el primero es manejar autos y el segundo.. te lo diré cuando estés listo para saber todo de mí - musitó guiñandole el ojo.

Porque aunque sabía que Jimin ya sabía su secreto esperaría a que el rubio le confesara que ya lo sabía.

Jimin se quedó en silencio y miró al pelinegro — quieres dedicarte a esos dos hobbies ?-.

Jungkook lo pensó y asintió — sería mi sueño dedicarme a esas dos cosas pero la realidad es que solo soy un chico que su familia lo usa - musitó mirando el césped del lugar.

Jimin posó su mano en la mano tatuada de Jungkook quien lo miró fijamente — aunque te sientas usado por las personas siempre existirán las que te apoyan hasta en lo que el mundo no considera correcto - dijo mirándolo — si quieres ser un profesional en las carreras de autos yo te apoyo kook - musitó.

Jungkook sonrió débilmente — y yo siempre te apoyaré en tus presentaciones de baile Jimin - dijo acariciando el rostro del contrario.

Ambos se quedaron en silencio viéndose fijamente, Jungkook sintió las mariposas en el estómago al ver aquellos ojos azules como el mar mirándole, Jimin sintió su corazón acelerarse al tener aquellos ojos oscuros fijos en él.

El pelinegro tragó saliva nervioso y esperando ser correspondido acercó su rostro al de Jimin quien cerró los ojos por inercia, Jungkook pegó su frente con la del más bajo.

— ¿Sabes ? Me prometí odiarte desde la primera vez que te vi - musitó con sus ojos entreabiertos mirando al más bajo que abrió sus ojos levemente — intenté odiarte Jimin enserio lo hice y te hice esas estúpidas bromas pero me me sentía mal cada vez que te las hacía porque me di cuenta que estaba ocultando lo que verdad sentía -.

— y qué sentías ?- preguntó el más bajo sonrojado.

— Sentía que debía estar cerca de ti - musitó — porque te volviste una necesidad mía sin darme cuenta, tus ojos azules me aceleran el corazón de una manera que no puedo describir Jimin porque te volviste la carrera más adictiva en la que pude competir.

Jimin sonrió levemente y posó su pequeña mano en las mejillas de Jungkook — creo que ambos caímos en esa maldita carrera adictiva- musitó de igual manera.

Jungkook sonrió levemente y cerró sus ojos para después unir sus labios delgados con los gruesos de Jimin con su corazón acelerado, sus nervios al millón.

Pero por fin sucedía estaba besando a Park Jimin y se sentía increíble sus labios encajaban a la perfección con los del más bajo y aunque solo era un pequeño beso se sentía como el mejor beso de todos los tiempos.

Ambos se separaron lentamente y se miraron fijamente sin decir una palabra.

O al menos fue eso hasta que una luz que no les permitía ver bien a ambos los apuntaba.

— Oigan ustedes !! Qué hacen aquí !!! - exclamó el guardia de seguridad.

Jungkook lo miró y rápidamente tomó la mano de Jimin levantándose ambos del césped y escapando del guardia.

Ambos sonriéndose cómplices del otro y sintiéndose felices.

Este solo era el comienzo de su historia.

⭑ࣶࣸ❤️‍🔥 ֺ✦ Closer to you ༣ 🥊˖࣪ ✶
2/2
Perdón :( se fue el tiempo hoy tuve que ir al hospital avisarte una amiga que tiene una enfermedad grave y se fue la hora allí.
Espero les guste este cap
Jsjs ya se dieron su primer beso 😭💕
Aquí les dejo una foto de cómo es Jung-su

Y aquí les dejo una foto de cómo son Jimin y Jungkook en la historia