El Puesto De Kiyopon I
Hay veces donde los seres humanos podemos llegar a ser tan tontos para caer con trampas fáciles, y yo no soy la excepción.
El entrenamiento de la Sala Blanca me preparó para cualquier escenario posible, podía identificar fácilmente una trampa oculta en la persona.
Aunque eso no duró tanto ya que alguien me engaño con un simple plato de comida, nunca supe que eso fuera posible, pero lo más decepcionante es haber caído dos veces con el mismo truco.
Horikita Suzune si que es una chica que temer, si Sudo logra conquistarla podría ser felicidad o el mismo infierno en su vida.
- Vaya, pero si es Ayanokouji.
Nagumo se acercó a mi para sentarse en el banco donde me encuentro ahora mismo.
- ¿Necesitas algo, Nagumo-senpai?
- Siempre quieres ir directo al grano ¿eh?
Su sonrisa me dio algo de inquietud, pues nunca sale nada bueno de la boca de él.
- Esta bien, necesito que me hagas un favor.
- ¿Un favor?
- Solo es algo pequeño.
El mismo presidente me está pidiendo un favor en estos momentos, pensé que sería más cauteloso conmigo pero viene a hablarme con total normalidad.
- ¿Y si me niego?
- Nunca pensé que un kohai sería descortés con su senpai.
- Eso es depende de quien sea.
La risa de Nagumo se hizo presente, se nota que mis palabras lo están divirtiendo, incluso su risa podría igualarse a la de Ryuuen.
- Vamos, solo será algo pequeño.
- No se si sea buena idea.
- Si no me acompañas entonces no sabrás nunca de que trata.
No entiendo por qué insiste tanto, pero ya que no hay nada que perder decidí aceptar su petición, de todos modos estoy preparado por si intenta algo en contra de mi.
- Esta bien, lo acompañaré.
- Perfecto, entonces sígueme.
Levantándose de su asiento al igual que yo decidí seguir a Nagumo para saber cual es ese favor.
Habíamos llegado a varios puestos donde se encontraban algunos estudiantes.
Vi como vendían productos, muestras gratis, juegos y algunos mangas de los que le gusta al grupo de Ike.
¿Para qué me traería Nagumo a un sitio como este?
- Ya llegamos a mi puesto.
Al revisar detenidamente el puesto me di cuenta de que no decía el nombre, se logra apreciar una pantalla pequeña donde no se podía ver el nombre del puesto.
- Todavía no enchufé la pantalla para que se aprecie mi puesto.
Eso tenía mucho sentido, entonces gasto algunos puntos en una pantalla pequeña que se muestra el título ante los demás.
- La tarea es muy sencilla, solo tienes que cuidar mi puesto por algunas horas, ya que debo de atender un asunto con Asahina.
La sonrisa de Nagumo se hizo presente pues parecía un trabajo sencillo.
- ¿Cuántas horas exactamente?
No tenía la exactitud de cuanto tiempo podría tardar Nagumo resolviendo su asunto con Asahina-senpai.
- ¿Te parece si le pido a Asahina que te envíe un mensaje para decirte cuando resolvamos el asunto?
- Eso sería bueno.
- Genial, entonces te dejo el puesto, no te olvides de enchufar el letrero.
Con esas palabras dichas, Nagumo se fue del lugar para ir a resolver sus asuntos con Asahina-senpai.
- Me pregunto de que trata su puesto.
Esas dudas se me presentaban por alguna razón, pues el sentimiento de que no sería nada bueno.
Pero para quitarme de esas dudas solo tenía que enchufar la pantalla para saber el puesto de Nagumo-senpai.
Revisé un poco el puesto para poder encontrar el enchufe, aunque no me tomo mucho tiempo ya que se encontraba al lado del conector.
Sin nada más que perder, enchufé la pantalla y el título apareció inmediatamente.
- Eh...
El puesto se llamaba: "Besos por 5,000 puntos privados"
No solo el título decía eso sino que mostraban las diferentes categorías de los besos que podías dar.
Beso Frances: 8,000 puntos.
Beso Italiano: 9,000 puntos.
Beso Personalizado: 10,000 puntos.
- Sabía que no tenía que aceptar.
Ya sin manera de salir de esto, no tuve de otra que quedarme aqui, aunque tranquilamente podría irme y dejar un mensaje en el puesto, no podía hacerlo.
- Aun no se si los puntos me lo darán a mi o a Nagumo por esto.
Pero mis dudas se esfumaron al ver una pequeña máquina donde podías pasar el celular y pagar con tus puntos, algo parecido a lo que tienen en la tienda de la escuela.
- Veré si hay algo más por aquí, si me quedo mucho a la vista, podrían malinterpretar la situación.
Con eso dicho, me di la vuelta para inspeccionar algunas cosas del puesto.
- Fufu, pero si es Ayanokouji-kun.
Al voltear pude notar que se trataba de Sakayanagi, la líder de la clase A.
No tengo idea de como pudo llegar tan rápido aquí, considerando de que su capacidad para caminar es muy lenta.
- Hola Sakayanagi.
Saludé sin ser descortés con ella.
- Nunca pensé que serias capaz de hacer un puesto que sea de besos.
La sonrisa se hizo presente en su rostro.
- En realidad no es mi puesto, es de Nagumo-senpai, solo lo estoy vigilando.
- Ya veo, pero sabes que si alguien más te ve podrían pensar que tu hiciste ese puesto ¿no?
- Lo sé, pero no tengo muchas opciones la verdad.
Una pequeña risita soltó la líder de la clase A, le parece divertida la situación en la que me encuentro.
- Es raro verte aquí sola sin Kamuro acompañándote, Sakayanagi.
- En realidad le pedí que me encontrara por aquí, por lo que no tardará mucho en llegar.
- Ya veo.
Supongo que era algo común, no creo que Kamuro deje sola en estos momentos a Sakayanagi, aunque las ganas no le faltan.
- Ayanokouji-kun.
- ¿Qué pasa?
Mi pregunta hizo que ella comenzará a jugar con su cabello y un leve sonrojo se hizo presente en su rostro.
- Es algo vergonzoso para alguien como yo pedir algo así.
- ¿Qué quieres decir?
- P-Puedo...
Los nervios se notaron al tratar de expresar sus palabras correctamente. Es la primera vez que la veo nerviosa en estos momentos.
- ¿P-Podría darte un b-beso?
Con qué era eso, siendo sincero me sorprende mucho que ella me pida algo así.
- Tiene algo que ver con lo que me dijiste esa vez ¿no?
- Así es, creo que es un buen momento para enseñarte eso.
- Ya veo, si no tienes inconvenientes, entonces si puedes.
Con mis palabras dichas, hizo que su sonrisa se hiciera presente en el rostro de ella.
Le mostré lo primero que debía hacer, donde paso su celular por la maquina paga hacer el pago.
Me sorprendió que al momento de pagar haya elegido el beso personalizado, supongo que quiere disfrutar este momento.
- Muy bien Ayanokouji-kun, primero necesito que me abrazes.
Con un toque de atrevimiento en sus palabras, salí del puesto por unos momentos y me acerque a ella.
Rodeando mis brazos alrededor de su espalda delgada la acerque a mi, sentí como su cabeza se colocó en mi pecho.
- ¿Así esta bien?
- Claro que si. Puedo escuchar los latidos de tu corazón.
Se acercó mucho más a mi sintiendo como sus manos pasaban por mi espalda.
Al mirar alrededor pude notar miradas de los demás estudiantes que se encontraban en sus puestos.
Algunos comenzaron a susurrar algunas cosas que no podía entender, pero supongo que no es común ver a la líder de la clase A abrazando a alguien de la clase D.
- Ahora mirame, Ayanokouji-kun.
Las palabras de Sakayanagi hicieron que la mirara para notar que sus ojos estaban brillando como una doncella enamorada mientras sus mejillas se enrojecian.
Ella se acercó lo suficiente para plantar un beso profundo en mis labios.
Una sensación que no había sentido se extendió por todo mi cuerpo, pronto deje que mis acciones tomarán el control.
Sosteniendola por la cintura mientras le devuelvo el beso.
Ella no quería quedarse atrás por lo que introdujo su lengua y comenzó a jugar con la mía.
Esto hizo que me sorprendiera de su actitud atrevida.
No queriendo quedarme atrás procedí a tomar el control por unos segundos, aunque la deje que hiciera lo que quería pues ella había pagado su beso, yo solo era el pequeño chico que debía besar sin restricciones.
Luego de unos pequeños minutos donde pareció una eternidad, ambos nos separamos dejando un hilo de saliva.
- ¿Qué te pareció el beso?
Los nervios y el sonrojo seguían presentes en el rostro de Sakayanagi.
Tenía que dar una respuesta demasiado sincera en estos momentos, pues es algo único que no sentía desde hace mucho, aunque mis emociones desaparecieron cuando era un niño.
- No sabría como describirlo, pero sentí mi cuerpo como se calentaba y me daba una sensación algo extraña.
- Esas son las palabras que quería escuchar.
Su sonrisa quedo plasmada al obtener mi respuesta.
- Bueno, gracias por...
- Deberíamos continuar esto en un lugar más reservado.
El comentario de Sakayanagi hizo que me sorprendiera un poco por el tono en como lo dijo, un tono atrevido.
- Parece que mis palabras tuvieron un gran efecto en ti ¿eh?
- Yo...
Sakayanagi se acercó nuevamente a mi mientras sentía su mano tomando la mía.
Ambos entrelazamos nuestros dedos por unos segundos, parecía que ella quería que continuaramos con esto, pero todo se acabó en cuanto oímos una voz.
- ¿Qué están haciendo?
Ambos volteamos a ver y vimos a Kamuro qué ya había llegado aunque podía notar en su rostro, se mostraba molesta.
Bueno, siempre se ve así cuando nos encontramos.
- Qué bueno que llegaste Kamuro-san.
- Hola.
Di un pequeño saludo a Kamuro mientras sentía como Sakayanagi soltaba mi mano.
Kamuro se acercó a nosotros mientras nos miraba a ambos con una expresión seria.
Supongo que trata de analizar la situación en estos momentos.
Sentía como miraba arriba, creo que ya vio el letrero del puesto en donde nos encontramos.
- No puedo creer que hicieras un puesto de este estilo.
Con un tono serio me miro con más desprecio.
- En realidad no es mi puesto, es el de Nagumo-senpai.
A pesar de que le dije que el puesto era de Nagumo, su mirada no cambió en lo absoluto, seguramente no creía en mis palabras.
- Ya veo.
Con eso dicho, ella saco su celular de su bolsillo para luego entregárselo a Sakayanagi.
- Te quiero pedir una cosa.
- Claro, ¿Qué es?
Una Sakayanagi confundida por las palabras de su pequeña sirvienta, pues no sabía que quería en estos momentos.
- Tomame una foto.
Sakayanagi sorprendida por la petición de Kamuro, estaba a punto de decir algo, cuando Kamuro le dio su celular.
Vi como ella se acercaba a mi cuando sin previo aviso, tomo mi camisa con mucha fuerza y me dio un beso.
Mi sorpresa fue evidente ante lo que esta pasando, incluso vi a Sakayanagi algo sorprendida.
Pero dejo esa expresión para plantarla con una sonrisa mientras usaba el celular de Kamuro para tomar la foto que ella le había pedido.
Sintiendo nuevamente la sensación en mi cuerpo, me deje llevar por el beso mientras ponía mis manos en la cintura de Kamuro.
No entendía lo que decían los demás estudiantes alrededor, pero supongo que andan sorprendidos por lo que acaban de presenciar.
Dos chicas de la Clase A besando a un chico que posiblemente no sea importante y que se encuentra en la clase D.
Kamuro siguió besándome mientras ponía su mano en mi pecho tratando de tocar más a profundidad.
La agresividad de ella era sin lugar a dudas algo que no esperaba.
Incluso hizo lo mismo, estábamos con nuestras lenguas entrelazadas hasta que escuche un click, era el flash de la cámara y de la foto que había tomado Sakayanagi.
Ella rápidamente se separó del beso mientras sus mejillas se enrrojecian.
- Wow...
- No te hagas ilusiones, esto no lo hice por que me gustas.
Kamuro comienza a decir esto mientras toma su celular devuelta para luego guardarlo.
- Solo lo hice para que Hashimoto me dejara en paz.
- ¿Eh?
- No paraba de insistirme en que saliéramos, por lo que dije que tenía novio, y ahora solo tengo la prueba.
Entonces todo el asunto del beso fue para que Hashimoto la dejara de fastidiar.
- Fufu, Kamuro-san si que eres realmente atrevida.
- No creas cosas así, solo fue por eso, nada más.
- Dices eso pero tu rostro muestra que lo disfrutaste en lo absoluto.
La sonrisa de Sakayanagi hizo que una Kamuro enrojecida se avergonzara de lo sucedido, por lo que sólo guardo su celular.
- ¿Ahora podemos irnos?
Desesperada por querer salir de la situación en la que se encontraba, Sakayanagi asintió mientras volteaba a verme.
Camino hacia el pequeño mostrador donde paso su celular nuevamente, supongo que es para pagar el beso que me dio Kamuro.
- No es necesario eso Sakayanagi.
- Ella te beso y creo que mereces el pago por el atrevimiento de Kamuro.
Sin más que decir, pago el beso que me dio Kamuro y guardó su celular.
- Muchas gracias.
- No hay nada que agradecer, solo espero que podamos repetir esto ¿Vale?.
La sonrisa de Sakayanagi donde mostraba algo de seducción y a la vez sonar traviesa hizo que mi cerebro se apagará por unos segundos.
- Nos vemos Ayanokouji-kun.
Sakayanagi acompañada de Kamuro se fueron del lugar.
No puedo creer que incluso Kamuro se prestará para algo como esto, aunque supongo que era para Hashimoto.
- Necesito leer más libros del amor.
Esas fueron mis palabras internas, una vez termine con esto, iré a preguntarle a los libros y a Internet por situaciones de este estilo.
De repente mire alrededor y vi a varios estudiantes con la cara sorprendida y roja.
Supongo que es porque me besaron dos chicas de la clase A.
Aunque de la nada su sorpresa se hizo más grande, dejándome algo confundido del por qué se estaban sorprendiendo, escuché un ruido que venía del mostrador.
El sonido era de la maquina donde tenías que pasar tu celular para pagar con tus puntos.
Eso quiere decir que alguien había pagado para que yo le diera un beso.
Volteando a ver de quien se trataba, mis ojos se fijaron en la persona que no esperaba.
Ella ha estado muy apegada a mi en estos meses, pero me sorprende que llegara a este punto.
- ¿Ichinose?
- A-Ayanokouji-kun, quiero que nos besemos.
...
Continuará...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro