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Habían pasado cerca de tres años después del incidente de la muerte de Changbin y el que San se encontrará encerrado, sin embargo, había alguien que solía visitar frecuentemente a San.

Esa persona era Wooyoung.

Durante la investigación, salió a la luz el como Changbin utilizaba a Wooyoung para beneficio propio, el como se supone se veía con más gente, incluso la existencia de un hijo suyo el cual no reconocía. Todo aquello había dejado un gran dolor en Wooyoung, pero eso no fue todo.

También se había enterado que San había hecho todo aquello por defenderlo, se enteró del enorme enamoramiento de San por él y no pudo evitar sentirse mal consigo mismo.

Durante todo el tiempo que había estado bajo la sombra de Changbin se dio cuenta de lo mal que había tratado a San, el como seguía las órdenes de Seo solo para poder burlarse de él. Había sido un idiota completamente, por lo que para enmendar un poco sus errores decidió visitar a San. Pero aún creía que San debía pagar por su mayor error cometido.

Al principio el pelinegro se negaba a verlo, ni siquiera quería recibir visitas suyas, pero Wooyoung no se rindió.

Cuando San no quería ver a Wooyoung, éste solía dejarle un par de caramelos junto a una carta donde le confesaba hacer sido un idiota por no darse cuenta de lo mala persona que fue Changbin y le pedía disculpas por ello constantemente. Y solo fue cuestión de tiempo para que San logrará aceptar de vuelta a Wooyoung en su vida.

Cada vez que podía Wooyoung iba a visitarlo y San volvía a sentir aquel sentimiento de cuando eran estudiantes. Un amor adolescente.

ㅡ¿Te gustaron los caramelos que te traje? ㅡcuestionó Wooyoung hacia el pelinegro del otro lado del vidrio.

ㅡEstuvieron muy deliciosos, gracias.

ㅡSan... ahora que tenemos más confianza ¿Puedo preguntarte algo?

El pelinegro asintió.

ㅡ¿Tú mataste a Changbin?

ㅡCreo que después de todo lo que supiste es más que obvio ¿No lo crees? ㅡmencionó San con la mirada seriaㅡ. Igual entenderé si piensas alejarte de mí.

ㅡNo lo haré, porque después de todo siempre trataste de defenderme sin que me pudiera percatar de ello.

ㅡ¿No tienes miedo de estar cerca de alguien que es asesino?

Wooyoung negó lentamente.

ㅡRecuerdo que una vez le mencionaste a Changbin que harías lo que fuera por la persona que amabas, que matarías por esa persona ㅡmencionóㅡ. Y por más escalofriante que suene eso, fue lo que hiciste, terminaste con la persona que me estaba haciendo daño todo ese tiempo y por estupidez mía no fui capaz de notarlo. No sé si deba decirlo, pero gracias por ello, San.

San, por primera vez en esos tres años había sonreído genuinamente.

Y nuevamente Wooyoung era el causable de su sonrisa.

Pero para desgracia suya, aquello no era del todo cierto, era verdad que Wooyoung le agradecía por ello, pero eso no le quitaba el hecho de que el rubio se mostraba temeroso a estar cerca suyo.

San no tenía ni la menor idea que Wooyoung ayudaba a la policía solo para sacarle la verdad de todo, cosa que consiguieron fácilmente, usando la única debilidad de San. Y vaya que habían obtenido lo que más querían.

Aquello solo le quitó a San la oportunidad de poder salir libre gracias a su conducta, aquella oportunidad la había perdido al confesar ser el asesino de Changbin.

Después de ello, Wooyoung no volvió a visitar ni saber nada de San. Quién el pelinegro se enteró más tarde que Wooyoung había sido cómplice de la policía, usando un micrófono escondido en algunas visitas que tuvo con él.

Aquello San no pudo soportarlo y meses mas tarde se ahorcó en su propia celda, dejando una nota con la frase:

"¿De que sirve haber hecho todo por alguien que me teme de solo estar cerca mío?"

Wooyoung logró enterarse de lo sucedido y no pudo evitar sentirse culpable. Eso no era lo que el buscaba. Solo quería que San pagará por lo que le había hecho a Changbin, a pesar de lo errores que cometió él, el rubio aun aún tenía la esperanza de enmendar todo con él y quizás, comenzar una nueva vida junto a él.

Sin embargo, después de la muerte de San no deja de visitar su tumba, donde suele dejarle unos lindos tulipanes cada dos semanas sin falta.

Tal vez si San hubiera buscando otra manera de arreglar las cosas todo hubiera terminado diferente, si tan solo no hubiera iniciado esa pelea escolar pudieron haber tenido su final feliz...

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Finalmente esta historia ha finalizado, espero les haya gustado, sinceramente el final lo cambie para hacerlo más realista. No creía apropiado que hubiera un final feliz sabiendo que se tomaron elecciones erróneas y la enseñanza que tendría la historia se perdería con un final "feliz".

La canción Class fight demuestra claramente que las agresiones hacia los demás, en la mayoría de los casos, es influenciada por una relación dónde se ve reflejada la violencia, como en algunos casos del entorno familiar. Los padres de San demostraba no tener una buena comunicación entre ellos, la madre podría tener una opinión y el padre terminaría teniendo la razón en base a su opinión, dejando en claro que aquí tenían más peso las palabras del padre. Y San, creyendo que su padre siempre tendría la razón seguiría su consejo creyendo que con ello su problema acabaría, pero después nos demuestra las consecuencias de sus malos actos...

Tengo la certeza que la historia haya dejado en claro lo que Melanie trato de darnos a entender en su canción y que cada uno le dé su propia interpretación personal.

Espero con muchas ansias el que está historia halla llenado sus espectativas y les haya gustado.

Sin pena, pasen pasense por mis demás historias ♡

Los quiere, Gigie<3