Capitulo 2: ¡No me quiero ir!
—¿Zafiro? ¿Zafi? — Me decía mi madre mientras me movía con delicadeza — ¿Zaf? ¡Por amor al cielo ya despierta! — Ella sacude con mas fuerzas.
—¿Que ocurre? — Digo sin abrir mis ojos — ¿Pasó algo?.
— Parate y ponte algo decente, te veo abajo, tu padre y yo tenemos que hablar, es importante — Ella salio de mi cuarto dejandome con una duda enorme en la mente. ¿De que quieren hablar conmigo? ¿Importante? ¿A que se refiere con eso? me separe de la sabanas y me senté un rato en la orilla de mi cama, mientras pasaba mis dedos por mi cara limpiando un par de lagañas. Jamas volveré a dormir tan tarde, sin importar lo bueno que este el libro.
Me levante y me dirigí directo al baño, tome mi cepillo y le coloque crema dental (Colgate, la marca número 1 reconmedada por odontólogos XD) abrí el grifo me me lave la cara con un poco de jabón liquido para después cepillarme lo dientes, salí de baño y me cambie de ropa, puesto que estaba en pillamas, me puse algo para estar en casa unos pescadores y una camisa azul cielo y mis sandalias eran algo perfecto para estar en los últimos días de vacaciones antes de volver a mi universidad y encontrarme con todos mis compañeros y mis profesores favoritos, moría de ansias por estar de nuevo es la biblioteca, tocar la portadas de los libro, respirar el adictivo aroma de café recién hecho por la cafetería, el cual no puedo probar, sentarme en los bancos que estaban cerca de los arboles, presumirle a todos mis compañeros que la chica tímida es la mas rápida de todos, extraño el olor a tiza y a marcador acrílico que mis maestros usan para explicar cosas nuevas... En fin ¡Extrañaba todo! Aunque, probablemente algunos lo ultimo que quieren es hablar de tareas, exposiciones y trabajos eso para mi es algo muy entretenido y me distrae de muchas cosas.
Cuando término de vestirme salgo de mi cuarto y veo a una de mis empleadas, Jessica Alvarado, una de chica de 27 años que trabajaba para mis padres desde siempre, su madre, Erica, trabajaba con mi padres y la traía muy seguido de pequeña, puesto que, al ser ella un embarazo adolescente, Erica no tenia a nadie para que cuidara de su hija. Siempre ha sido muy colaboradora y eficiente, nunca ha tenido problemas con mi familia es puntual, ordenada, de buena presencia, muy pulcra y cariñosa.
— Señorita Zafiro, buenos días, su madre me envió a ver si ya estaba lita para desayunar.
— Dile que estoy lista para bajar. Y por favor, te he dicho que solo me digas Zafiro — Ella sonríe de forma tierna.
— Lo siento señorita, pero es que ya me acostumbre desde pequeña de enseñaron eso y creo que a estas alturas no lo puedo cambiar — Se excusa en la costumbre, pero yo se que es por respeto.
— Ya te haré cambiar de opinión —Ella sonríe. Yo camino hasta el pasillo y bajo las escaleras cuando llego al comedor veo una mesa servida y a mis padre murmurando cosas, cuando me ven ambos dejan de hablar y me miran con una cara de preocupación ¿Que esta pasando aquí?
— Zafiro, ven por favor toma asiento — Mi madre pone una sonrisa que era notoria mente forzada; hago lo que me ordena y me siento al frente de los dos.
—¿Pasa algo que yo deba saber? — Los miro a ambos estaban bastante raros, se miraban con ojos cómplices a cada rato y mi madre no es buena actriz — ¿Todo está bien?.
— Zafiro, tu sabes que te amamos y que queremos lo mejor para ti... — Mi padre sonaba algo triste y avergonzado.
— No dudo de eso, son mis padres y confió en que quieres lo mejor para mi, pero eso no va al tema ¿Que esta pasando? — Mi aire cortante no ayudaba en nada, se que algo no anda bien, no voy a quedarme sin saber lo que pasa solo por que mis padres lo quieren ocultar. Jessica se acerca una jarra de jugo de naranja a la mesa, hasta ella sintió la presión del ambiente y con un simple "Disculpe" dejó el jugo en la mesa y se marcho casi que corriendo a la cocina — Y bien, aun espero la respuesta.
— Zafiro, ¿Recuerdas a la empresa con la que quería hacer negocios?— Dice mi padre.
— Como olvidarla, una empresa extranjera con la cual hubieras tenido mas capital y nuevos clientes muy importantes, Índigo era su nombre, si mal no recuerdo — Es raro pero siempre estoy pendiente de las cosas que mis padres hacen en su trabajo, tengo que, algún día yo seré la dueña y necesito estar muy preparada para dar lo mejor de mi y mantener en alto el nombre de mi familia. Mi padre sonríe y asiente con la cabeza.
— Eres mejor que mi secretaria —Esto me causo algo de gracia, el siempre me dice que tengo mejor memoria que su secretaria — Pues el asunto es que... Cerramos un muy buen contrato con ella; ellos prestaran sus servicios a nuestra instalaciones y nosotros a las suyas, algo mutuo, ganar/ganar le veo muy buen futuro creo que traerá beneficios muy comprometedores — Esto era algo bueno, no se por que tenían esas cara yo estaba emocionada un contrato con una empresa como lo era esa no es algo que pase todos los días, con solo pensar en que el nombre de del nuestro negocio esté en el extranjero es algo por lo cual se debería celebrar y no estar actuando raro y preocupados.
— Y ¿Eso es por lo que estaban tan preocupados? — Alzo una ceja y sonrió con inocencia — Esto es algo bueno, no se por que ten esas caras — Me sirvo algo de jugo y le doy un sorbo.
— Zafiro, el contrato dice que alguno de los dueños debe estar en las instalaciones que ambas empresas mantienen... — Me quedo inmóvil, cuando logro reaccionar lo miro muy confundida ¿Él tendría que irse lejos? Esto no es posible, él nunca había estado lejos de mí ni de mi madre, era un hombre ocupado pero siempre está muy al pendiente de la familia, él no se podía ir. Dejo el jugo en la mesa.
—¿Te vas a ir? — Lo miro con timidez, él y mi madre desvían la mirada y yo bajo mis manos las escondo en mis piernas.
— No — Alzo la mirada y me quedo atónita ¿Que pasa? —, nos vamos... — Ok... en definitiva estoy caída de la mata ¿Nos vamos? ¿TODOS? ¿Que pasa con mis estudios? ¿Que pasa con Tony? — El dueño de la compañía y ya tiene todo listo, y yo también solo falta empacar y-.
— ¡No! — Lo interumpo con un grito me fue inevitable retenerlo. Ellos se sobresaltan — ¡No! ¡No me quiero ir!.
—Zafiro — Esta vez es mi madre la que habla — El dueño de Índigo solo hará lo prometido si tu padre o yo supervisamos las nuevas instalaciones y no nos queremos separar decidimos que tu vengas con nosotros — Estaba que lloraba pero no lo iba a hacer.
—¿Y no se les paso por la mente que tal vez yo debería opinar al respecto? ¡¿No creen que yo debí saber esto antes?! — Ellos no toleran lo gritos pero no me iban a impedir que yo me expresara — ¿Porque no puede ir a supervisar otra persona? No me quiero ir, yo me quiero quedar.
—Zafiro- —No le dejo hablar.
—¿Que pasaran con mis estudios? ¿Y mis compañeros? ¿Que hay de mi novio? ¡No me puedo ir! ¡Amo este lugar!— Mi padre está algo molesto con mis gritos e incluso me siento mal por que los empleados me escuchen, pero no me puedo quedar callada, necesito tener mi voto en esta casa.
— Lo de tus estudios está arreglado... En la ciudad hay un muy buen instituto que estoy seguro que amaras, allí es como uno de esas escuelas en las que vives hasta las vacaciones y está muy cerca de una playa, lo amaras...
— ¡No lo amare! Me gusta aquí, no me quiero ir ¡Soy mayor de edad! — Me levanto de la silla y le doy un golpe a la mesa, mi padre se levanta y me mira intimidante.
—¡No voy a tolerar este comportamiento! Ve a calmarte un poco y después ven y lo hablamos — Me asustó un poco, mi padre puede ser un hombre muy intimidante cuando se lo propone, pero yo no estaba en condiciones para discutir. Subí hasta mi alcoba tome mi bolso y mis llaves, tenia planeado salir y calmarme si no lo hacia me pondría a llorar y no iba a permitir que me viera así....
—Señorita Zafiro... —Volteo a verla, pero estaba muy alterada que no sabia quien era — La-lamento ser inoportuna — Su cara se torno se color rosa.
— Jessica... No te preocupes... Lamento que hayas escuchado esa discusión... Estoy muy apenada — Agacho mi cabeza. Ella se acerca a mi y me abraza, por la diferencia de alturas mi cara quedo mas abajo de su hombro, pude oler la fragancia de su ropa y respirar la esencia de su pelo negro, luego de unos segundos de suelta y me mira fijamente.
— No se tiene que disculpar, yo también me hubiera enojado y es normal enojarse un poco — Sus palabras eran justo lo que necesitaba — Si necesita hablar con alguien yo siempre estaré disponible...
— Gracias Jessica, voy a salir un momento a procesar toda esta tontería... Por si mis padres preguntan... — Ella me sonríe y me dice que no me preocupe por nada.
Salí de la casa mas tranquila pero necesitaba hablar con otra persona, tome prestada la camioneta de la familia y puse rumbo a casa del peli-castaño que mejor me comprendía, Tony, su casa no quedaba muy lejos pero ir caminando no era un opción tenia que hablar con el lo antes posible. Unos cuantos semáforos me molestaron en el camino, el vivía en una casa pequeña cerca de un hermoso parque. Estacione al frente y apague el vehículo, baje de el y toque un par de veces la puerta "No hay nadie" me responden de adentro un voz femenina "Deja de fastidiar" la puerta se abre y sale una niña.
—¡Hola Zafiro! — Me abraza la pierna con muchos ánimos. Yo me agacho un poco y juego con sus mejillas.
— ¿Como está la niña mas linda de todas? — Sacudo sin piedad su cabello.
— Bien... ¿Viniste a ver a Tony? Si es así, salio por un helado, ya debe estar por regresar, pero no importa pasa y jugamos — Entro y ella cierra la puerta.
—¿Cuando llegaste? —Me siento en el sofá y ella me sigue.
—Hace dos días — Tony no me contó nada — Pero fue raro mi mamá solo me vistió y me trajo ¡Ni siquiera me trajo el cepillo de dientes! Pero importa mi hermano ya me compro otro y me lleva deja con la vecina cuando va a trabajar — Ella era una niña muy conversadora y a mi encantaba escuchar sus historias, era un equilibrio muy bueno. Creo que pasaron como 10 minutos y ella se puso al día conmigo y me contó un par de cosas chistosas, como cuando Tony se secaba el cabello cerraba los ojos y parecía la escena de la sirenita cuando Ariel sale del agua o cuando se despierta en la noche para ir al baño o tomar agua se tropezaba con sus juguetes y cosas por el estilo.
La puerta del frente se abrió dejando ver a un lindo castaño ojos cafés de piel tostada y espada ancha.
— Hey florecita ¿Por le falta el seguro a la puerta? — Tenia un pote de helado en las manos, cerro la puerta y me su vista se poso con la mía, de inmediato una sonrisa se poso en sus labios — ¿Zafiro?.
—La única e inigualable — Pose de diva — Perdón por no avisar, vine de emergencia, tengo que hablar contigo...
—Te va a cortar ¡Corre viejo! — Tony la mira con enojo y a mi con preocupación — Te lo digo por experiencia.
—Si, estoy seguro que a ti muchas chicas te hacen lo mismo — Dice sarcástico — Ve y sirvete algo de helado y nos dejas — Jazmín, que así de llamaba, no lo pensó dos veces y tomo el pote y se fue a la cocina. Estando solos el se acerca a mi, me besa en los labios y se sienta a mi lado — ¿Que te pasa? No me digas "Tenemos que hablar" por que me asusto.
— Es... es que mis padres... ellos... ellos quieren que yo me... — Mis ojos empezaron a aguarse amenazando con soltar lágrimas, Tony me abraza y me acaricia el pelo.
— Shh... Respira... No te preocupes por ellos, cuéntamelo por partes — Me calma un poco.
— Esta mañana ellos me contaron que... yo me voy a mudar... me voy a ir... y lo peor es no se a donde, no se nada, ellos ya tienen todo arreglado e incluso ya tienen una universidad para mi... no me quiero ir Tony ¡No me quiero ir! — No me supe contener, comencé soltar lágrimas y el puso mi cara en su pecho, mientras me decía que todo iba a estar bien, pero yo sé que no ¡Nada va estar bien!.
Pase toda la tarde con Tony y su hermana, ella era la mejor para subirle el animo a cualquiera. Tony la ama pero no lo demuestra mucho, y yo se que el daría su vida por ella, aunque le gusta que ella crea lo contrario. Tal vez los problemas no eran tan graves, pero aun así... No quería dejar a Tony tampoco ir a el "Instituto", no quería dejar todo solo por capricho de mis padres menos tener que empezar de nuevo, costo mucho hacer amigos como para dejarlos así, como si nada.
Pasaron como 5 días después de eso, mi voz era nula en mi casa, mis padres seguían con la mudanza sin importar lo que yo pensara y, según ellos, las clases comenzaban en dos semanas y teníamos que estar allí lo antes posible para que yo tuviera una buena habitación y ubicarnos en la zona, en esos días me entere un poco mejor a donde íbamos era una ciudad costeña llamada Ciudad Playa investigue un poco mejor y, aunque era lejos, era un lugar bastante decente. Pase la mayor parte del tiempo con Tony no quería irme sin que nos despidieramos lo mejor posible, esa fue una buena semana, en cuanto a Tony y a mi nos referimos, varios paseos por el parque, muchas horas de poesía que ambos compartimos, un par de visitas al cine y acostarnos tardes fueron lo que evito que yo no creara la tercera guerra mundial en mi casa, suerte que tenia a Jessica para no volverme loca.
Al final sí me mude, la despedida mas triste que tuve en la vida, seguido de 8 horas de viaje hicieron de ese el peor día de mi vida... No crucé palabra con mis padres en esos días, lo que creo que fue o mejor para ellos después de todo su trabajos fue la prioridad en ese tremendo lío, la casa nueva era linda, no lo voy a negar, pero me sentía como una completa extraña en ese lugar, mi habitación tenia la mayoría de mis pertenencias pero le faltaban todos lo recuerdos los recuerdos que yo había vivido en la otra... Ese nuevo lugar era vacío en ese aspecto...
________________________________________________________
Hola! Después de un mes... Aqui esta! jeje espero que les guste.
Voten y comenten si les esta gustando.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro