37. Hombre hermoso a la vista
Cuando por fin termino de beber el bendito café (para no decir maldito) yo literalmente ví la gloria, no me gusta que me observen durante tanto tiempo y más si es un hombre como él. Con anteojos, cabello medio largo (con un sexi corte además) y ojos de color almendra.
¡Que hombre más tentador! (Dije en mis adentros).
Pero no puedo tener ningúna aventurilla por ahí, después de todo soy la primogénita de la familia y con esa cadena tan pesada no puedo hacer lo que se me venga en gana, sin pensarlo más de cuatro o cinco veces.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro