
XVI
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Era finalmente el día de su fiesta. Sí, la fiesta en que lo presentarían como el Omega Luna y eso le aterraba. Habían pasado unas cuantas semanas, en las que aprendió etiqueta, además de cosas importantes sobre el territorio de Daegu y el Clan Kim. Namjoon también le había ayudado mucho para escoger su vestimenta y ese mismo día lo estaba maquillando, no solo a él, también a su abuela porque ella ahora también sería parte del Clan Kim y eso le alegraba porque no quería una fiesta si su amada abuela no estaba en el lugar, agradecía que su suegra fuera tan comprensiva.
Sí, también había conocido a la señora Kim, pero esta vez como el omega de sus hijos y aunque al principio se sintió incomodo e incluso fuera de lugar. Poco a poco la omega logro sacarlo de la incomodidad, demostrándole principalmente que ella era una omega como él y que solo por llevar el apellido Kim no era más importante.
Incluso supo que los señores Kim estaban más felices con él que con Yewoon, porque la omega jamás se había preocupado por ser buena nuera, simplemente había llegado como reina del lugar cuando realmente ese no era el caso.
Jungkook se sentía mal por ratos, porque se alegraba cada que le decían que era mucho mejor que Yewoon, pero como Namjoon le había dicho una vez "Siéntete feliz, porque ahora tu eres el Omega Luna y esa perra no está más, puede ser mezquino pero créeme, eso no se compara a todo lo que hizo esa estúpida" desde ese momento dejo de sentirse culpable y disfruto de ser mejor que aquella omega.
Una vez los tres estuvieron listos, escucharon el timbre sonar y al salir vieron a los tres alfas. Ellos llevarían a Jungkook y Namjoon iría con la abuela Lee, en su propio auto. Aunque Jungkook no estaba muy seguro de aquello, su abuela le aseguro que era mejor que fuera con sus alfas y que no se preocupara tanto por ella.
Se dirigieron entonces a la mansión del Clan Kim, ahí los esperaban muchas personas importantes, junto a unos cuantos periodistas que cubrirían la noticia. Jungkook no había estado del todo de acuerdo con eso, no creía necesario que publicaran la noticia. Sin embargo Yeseul le había explicado que eso era necesario, para que de esa manera ya nadie se metiera con él o intentara hacerle algo malo, era como una protección, sin embargo de ahora en adelante siempre tendría al menos un guardaespalda cuidándolo.
A pesar de sus dudas Jungkook lo acepto, porque la omega se veía bastante emocionada planeando todo, casi como si ese día fuera la boda. Pero no, ellos no habían pensado en el matrimonio pero sí en la marca, como que tenían que esperar hasta que Jungkook tuviera su celo para así pasarlo los cuatro juntos, de esa manera para Jungkook sería fácil tomar los tres nudos y, sobre todo, sería menos doloroso.
Incluso hace unos días Yeseul le había dado un libro especial, al parecer era un tipo de guía para los Omega Luna para que no se asustaran por lo que fuera a pasar o para que simplemente se prepararan mentalmente. Era vergonzoso sí, pero también muy informativo.
Jungkook comprendió, gracias al libro, que no se iba a embarazar tan fácil de sus alfas. A diferencia de otros omegas en donde el nudo es importante para lograr un embarazo, para Jungkook no sería así porque el nudo era meramente para el marcaje y después de eso sus alfas podrían tomar turnos para embarazarlo. Era debido a eso que se sentía avergonzado, habían muchas notas allí y otras que fueron añadidas con el tiempo, al parecer un Omega Luna no lograba embarazarse de sus alfas, lo cual le resultaba extraño hasta que sus alfas decidieron tomar turnos y finalmente logro quedar en estado.
Incluso había leído anécdotas de otro que no había quedado en estado inmediatamente, que a pesar de estar sano y ser fértil, le había tomado algunos años lograr tener un cachorro. Debido a que la tecnología en el momento no era tan avanzada, las conjeturas del omega fueron que simplemente como él mismo no se sentía capaz de criar un cachorro, su cuerpo se adaptó y prácticamente no permitió que la inseminación se lograra hasta que finalmente el omega se sintiera capaz.
Era un poco extraño, no se había visto nada como aquello en algún omega, pero recordando lo que se hablaba en los libros antiguos sobre el Omega Luna. Este Omega era simplemente especial, no era como cualquier otro y siempre era perfecto para estar con los trillizos del clan Kim. Tal vez era un tanto extraño, pero también fascinante, como era tan especial y raro al mismo tiempo.
Cuando menos se dio cuenta llegaron a la mansión y los cuatro salieron del auto esperando un poco por el auto de Namjoon que no tardó en aparecer. Ahora los cinco, junto a la abuela Lee entraron a la mansión y de inmediato se hizo un silencio en el lugar. Habían unas cuantas personas esperándolos desde ya, suponía que ya sería la hora del anuncio aunque se estuviera muriendo del nerviosismo.
—¡Jungkookie!— exclamó la hermosa Omega caminando rápidamente hacia él para abrazarlo —Abuela Lee, un placer verla nuevamente.
—Igualmente Yeseul-ah— sonrió la alfa —Joonie llévame donde hay bocadillos, esta vieja alfa tiene hambre.
—Claro abuela— sonrió Namjoon —Nos vemos tía.
—Pasen y disfruten por favor— pidió la omega con una sonrisa para después dirigirse a Jungkook y arrastrarlo por el lugar con sus alfas siguiéndolos.
—¿A dónde vamos señora Kim?— cuestionó curioso.
—Mamá, dime mamá o al menos Yeseul— hizo un puchero.
—Ma-mamá ¿A dónde vamos?— preguntó una vez más, un tanto sonrojado.
—Vamos a donde esta Yuseong— explicó con una sonrisa —Daremos el discurso de una vez, la prensa esta lista para tomarles unas cuantas fotos y luego celebraremos.
—Mientras más rápido mejor, de esa manera en cualquier momento podrás escabullirte a la habitación de los trillizos y nadie los molestara— le guiño un ojo sonrojándolo.
—¡Mamá! – reclamaron los trillizos avergonzados.
—Ya, vayan con su padre tengo que hablar con Jungkookie a solas— ordenó con tono demandante y los alfas no pudieron hacer más que obedecer.
—¿Mamá?— cuestionó el omega.
—Ven aquí— tomo su mano y lo llevo a una parte donde no había personas, pero si podían escuchar bastante de lo que acontecía en el salón.
—¿Pasa algo?— cuestionó Jungkook.
—Quiero agradecerte Jungkookie— sonrió con cariño —Tu sabes que había sido difícil la situación en la que estábamos, mis hijos estaban separados y el lazo que tengo con ellos dolía demasiado. A veces siento que es mi culpa que pasara todo lo que pasó, siempre fui bastante exigente con ellos y jamás dejaba que las o los omegas fueran pareja de ellos, por eso se habían mudado— explicó —Tal vez suene mal pero para mí no había ninguna persona que estuviera a la altura de mis hijos, además estaba la leyenda y yo realmente quería que ellos encontraran a su omega para ser felices.
—Eso no es malo, simplemente es su amor de madre— intentó explicar Jungkook.
—Fui muy mala con muchos omegas— rió divertida —Yo una vez iba a dejar el puesto como omega de uno de los líderes— explicó —No podía embarazarme y era muy duro, todos me veían con lástima porque no podía hacer la única cosa que se esperaba de mí— suspiró —Hasta que el día en que escape discutí fuertemente con Yuseong y me desmaye, fue ahí que supimos que tenía tres bebés en mi vientre.
—¿Por qué me dice esto?— preguntó Jungkook.
—Porque es duro ser la pareja del líder, yo soy la pareja de uno de ellos y tú lo serás de los tres, te verán mal, hablaran de ti a tus espaldas e incluso harán cualquier cosa para sacarte del medio— explicó con tono serio —Pero tienes que recordar siempre que tú eres el Omega Luna, tu eres tan importante como los líderes e incluso aún más porque ellos inevitablemente te obedecerán. Tienes que cuidarte, confiar en tus instintos y confiar en los trillizos, entre los cuatro podrán liderar como se debe— sonrió.
—Pero yo...
—¿Los amas?— cuestionó Yeseul.
—Sí— asintió con convicción.
—Entonces eso es lo único que necesitas, mientras los ames y ellos te amen, todo se hará más llevadero— sonrió con cariño —Además siempre estaré aquí por si tienes dudas.
—Gracias mamá— sonrió con cariño recibiendo un abrazo del omega.
Ambos callaron al escuchar como el señor Kim comenzaba a hablar sobre la leyenda del Omega Luna, en ese momento Jungkook se puso más nervioso pero intento calmarse, no estaría solo allí porque estaría con los señores Kim y sobre todo con sus alfas. Cuando escuchó su nombre, salió del pequeño salón y de inmediato camino hacia los trillizos, con paso firme y elegante, sentía las miradas sobre sí, eso estaba bien porque era el Omega Luna, el omega de los futuros líderes de Daegu.
—Ahora unas palabras de mis hijos— anunció Yuseong dando paso a los trillizos.
—Sé que este anuncio es inesperado, para nosotros también lo es y créanme no lo hacemos porque tomaremos el poder inmediatamente. Consideramos que aún somos demasiado jóvenes como para hacernos cargo de este gran territorio— comenzó Vante.
—Sin embargo nos comprometemos a aprender mucho más, todo lo que sea necesario para liderar de buena manera el territorio de Daegu, llevaremos cursos intensivos por parte de nuestro padre y tíos— explicó Taehyung con una sonrisa
—Aún somos jóvenes pero reconocemos que nuestro destino es hacernos cargo de Daegu, de proteger nuestro territorio y por supuesto, de ayudar en su crecimiento. Para ser cada día mejores y dar un buen ejemplo a los que viven bajo nuestra protección— explicó Taehyun con una pequeña sonrisa
—Nosotros— Jungkook suspiró de manera nerviosa sintiendo las manos de sus alfas en sus hombros —Nosotros como futuros líderes haremos todo lo posible para mejorar, de ser posible, el territorio. Aún tenemos muchas cosas que aprender, pero estudiaremos mucho para poder llegar a ser líderes dignos de su respeto. Esperamos contar con el apoyo tanto de los que viven bajo nuestra protección como de los aliados que tenemos— sonrió.
Los cuatro hicieron una corta reverencia y luego levantaron los rostros sonrientes, los aplausos no se hicieron esperar. Había murmullos pero en su mayoría todos estaban emocionados porque una vez más fueron bendecidos con el liderazgo de los trillizos Kim junto al Omega Luna. Eso solo quería decir que Daegu, y sobre todo el Clan Kim, aun contaban con la bendición de la Diosa Luna para continuar como hasta ahora.
Después de un par de anuncios más por parte de Yuseong, todos continuaron con la celebración, Jungkook fue llevado de un lado a otro por Yeseul para presentarle a muchos omegas y muchas omegas que poco a poco se hacían paso en las tareas importantes del territorio. Todos hablaban sobre algo de estar juntos para hacerse más fuertes, en verdad eran personas muy interesantes a los ojos de Jungkook.
Sin embargo comenzó a sentirse algo cansado y agobiado cuando comenzaron a presentarle alfas, principalmente porque sus alfas no estaban con él. Tuvo la oportunidad perfecta para alejarse un poco, simplemente para tomar un poco de aire en el balcón, se disculpó y camino rápidamente hacia el lugar. La luna estaba hermosa y desde ese lugar se podía ver el espeso bosque, recordando gratamente como fue correr junto a Vante, pensó que tal vez podrían salir los cuatro para correr un poco.
—Te he estado esperando, maldito— gruño una voz a sus espaldas y solo pudo reconocer la voz como la de Yewoon.
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Sobre lo del omega luna, eso es algo que la escritora original decidió hacer para sus omegas luna, en lo personal a mi me encanta.
También el celo es más que nada para marcar al omega o renovar el lazo, osease que cuando ocurra el acto no esperen que enseguida haya bebés.
Por cierto el celo de cada alfa es individual, porque sino pues hay pelea y el celo de los alfas si es para embarazar, por eso tendrían que turnarse, aunque supongo que solo sera cuando el omega (en este caso Jungkook) quiera.
Y eso es todo, es un resumen del resumen del omegaverse de la escritora original, si tienen dudas diriganse a ella, porque yo solo soy alguien que esta adaptando la historia al vkook.
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