Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Cita accidentada

—¡Oh Dios Mío! –Exclamo aterrorizada y sorprendida.

Oh Dios Mío. Oh Dios Mío. Oh Dios Mío. Es lo que repito porque, al parecer, he atro-atropellado a alguien.

Espero no haber atropellado a alguien. Espero haber colisionado con algún letrero de "no estacionar aquí". Espero que sea eso. Por favor. Por favor. Por favor.

No tengo idea de cómo sucedió. Okay, miento. En mi defensa diré que estaba dejando mi móvil en mi bolso y solo aparté la vista de al frente un nanosegundo. Estaba terminando de estacionar mi auto, cuando sentí un fuerte golpe proveniente del parachoques.

Bajo del auto y me dirijo a la parte delantera, porque necesito saber que no he arrollado a alguien. Por favor no. Por favor no. Por favor no.

Traga saliva porque lo que veo es a un... a un chico quien se está empezando a levantar. ¡Santa Virgen!, su brazo no se ve nada bien.

—Oh... –No continúo porque soy interrumpida por el chico.

—¡Casi me matas! ¿Dónde aprendiste a manejar? ¿Estás loca?... —No sigo escuchando ya que me preocupa más su brazo. Hay un poco de sangre, producto de un raspón, bueno, eso es lo de menos. Él está sujetando su brazo derecho, el cual parece inerte.

—Oye, oye –Respiro profundamente–. Lo siento. Verás, estaba estacionando mi auto cuando sentí y escuché un fuerte golpe... Bueno, eso está más que comprobado. –Examino el área afectada. Reanudo mi mirada al chico–. Ahora, en serio, creo que debemos dirigirnos a un hospital. Tu brazo no se ve nada bien.

—De acuerdo contigo. Esto duele como mierda.

—Déjame ayudarte a abrir la puerta. –Abrola puerta del copiloto ya que puede dificultarle ese simple movimiento.

—Gracias. –Hace una mueca de dolor mientras ingresa al vehículo.

Doy media vuelta, pero antes veo el parachoques, parece normal, aunque una parte esta media hundida. Ahora eso es lo de menos.

Ingreso al auto y, según mi super GPS, el hospital más cercano queda a unos diez minutos.

Mientras manejo cavilo en lo que acaba de acontecer. ¡No puedo creer que haya atropellado a una persona! Demonios. Tenía una cita a las 5: 00 PM. Debo avisar y cancelar la cita Peter. Claro, primero debo llevar al chico a mi lado a un hospital y luego disculparme con Peter.

Adiós cita de reencuentro con mi amigo de la infancia de la escuela primaria Lincoln.

Suspiro.

***

Durante el trayecto, y sumergidos en un silencio absoluto, de nuevo me disculpo con chico.

—Lo siento.

Hace una mueca de dolor y asiente.

Divagando llego a la conclusión que este percance pudo haber finalizado incorrectamente. ¿Qué tal sí el muchacho era de esos energúmenos que terminaba denunciándome? Sí, he tenido mucha suerte.

No sé, pero él me recuerda a alguien. Siento la sensación que conozco a esta persona.

***

Ya en el hospital al chico –que por cierto se llama Evan– le realizan exámenes y un médico comunica que tiene una luxación, por ende, deberán colocar la extremidad a su estado habitual y tendrá que usar un cabestrillo por unas semanas.

Mientras Evan prosigue con el médico, pago la consulta. Él no quería que pagará, lo cual es raro, ya que acabo de atropellarlo. Tenía que pagar, es lo mínimo que puedo y debo hacer luego de lo acontecido.

Después de un tiempo transcurrido, Evan sale de un consultorio y se acerca adonde me encuentro.

—Listo –Anuncia–. Perdón por tener que esperar, tuvieron que recolocar la zona afectada. Incluso con anestesia local, nunca olvidaré ese dolor y el sonido que se escuchó cuando mis huesos regresaron a su posición normal. –Se estremece.

—Uh. Apuesto que eso dolió como el infierno.

—Incluso más –Quedamos en silencio por unos segundos–. Aparte de llevar esto –se refiere al cabestrillo–, informaron que debo tomar medicamentos para el dolor, pero debo esperar porque, al parecer, surgió una emergencia y todo el mundo fue para allá.

—¿Te indicaron cuánto tiempo debes esperar?

—No –Se sienta a mi lado y rasca su nuca con nerviosismo–. ¿Deseas tomar un café mientras esperamos? –No esperaba esa propuesta de su parte. ¿Acepto o no?

—Eh... –Dudo por un minuto. ¿Cuán contraproducente puede resultar aceptar un café de la persona que acabas de accidentar? Sin embargo, me escucho decir–. Claro. Vamos a la cafetería.

—¿Te parece si vamos a la cafetería que queda al frente del hospital? –Se encoje de hombros. Me desconcierta su propuesta–. No soy muy amante del café de los hospitales, son asquerosos.

Sonrió. En efecto, tiene razón.

—Buen punto. Entonces, ¿vamos?

Debo estar loca porque acabo de aceptar tomar un café con un extraño, y no cualquier extraño, es el extraño que atropellé. Oh, Dios. Sip, estoy loca.

En tanto caminamos al establecimiento, Evan me cuenta que aún le duele el brazo, pero el dolor no es nada comparado con el que sintió segundos después del accidente.

Ingresamos a la cafetería y nos sentamos en una mesa al lado de una ventana que da hacia la calle.

Observo el menú. No obstante, aún sigue desconcertándome sentir que conozco a este chico de algún lado. Pero, ¿De dónde?

Ordenamos y minutos después nos traen nuestros pedidos: cafés para ambos. Reanudamos la conversación.

—¿Así que tenías una cita? –Enarca una ceja y me mira directamente– ¿Por eso estabas en tu modo loca al volante? –Bebe su café.  Lo observo antes de responder. Sin duda es guapo.

—Oye, más respeto. Acabo de salvarte la vida, amigo.

—Corrección, acabas de provocarme una lesión en mi brazo derecho.

—Y lo siento, mil y una veces. –Debo mi café.

—Disculpas aceptadas, Charlotte.

—Ese es mi nombre –Sonrió–. ¿No me has dicho por qué estabas en mi camino? Digo, ¿por qué estabas en medio de un parqueo, delante de un auto que estaba a punto de terminar de estacionarse? –Es una pregunta que he estado formulándome, pero que no había tenido la oportunidad de efectuar

Él me mira por unos segundos y suspira.

—Lo que sucede es que también tenía una cita –Oh, eso es... ¿interesante? ¿Pero qué tiene que ver eso conque haya estado delante de mi auto?–. Por la expresión de tu rostro deduzco que te estas preguntando por qué en el sano juicio de una persona estaría en medio de un estacionamiento, cuando un auto intenta estacionarse. La respuesta es simple.

»Verás, desde hace un par de semanas y, gracias a una conocida red social, encontré a una compañera de infancia –Jadeo, porque esto no puede ser posible, o ¿sí?–. Quedamos en vernos hoy a las 5:00 PM, en el café-restaurante Little Garden. –Sonríe. Yo lo observo estupefacta. Continua.

»Cuando había terminado de estacionar mi coche vi a la chica de quien he estado enamorado desde la infancia. Entonces dije, ¿por qué no sorprenderla?

Oh no, no puedo ser posible. Es decir, como no me di cuenta que era él. Cuando él me envió la solicitud de amistad acepté inmediatamente porque es imposible olvidar a tu amor de la infancia. Su foto de perfil era de él a contraluz y no había fotos de él, eran fotos más artísticas, de paisajes o personas. Bellas fotografías, por cierto. Entonces no tenía idea de cómo luciría hoy en día mi amigo e amor de infancia.

Parpadeo y sigo escuchando lo que dice.

—Mientras me acercaba a su coche, que terminaba de ser estacionado, pasó el accidente. Por ello no llegué a sorprenderla, más bien ella me sorprendió a mí. Y de qué manera. Su coche dio otro movimiento y yo terminé chocando con él. ¿Error de mi parte? Lo acepto. Pero no cambiaría nada de lo sucedido porque he pasado la mejor visita a un hospital, a excepción de la fractura y el cabestrillo –hace una mueca que termina en una sonrisa encantadora–. Aunque eso se recompensa con la mejor cita con ella. Mejor dicho, la mejor cita accidenta con ella. ¿Tú qué opinas Lottie?

—Yo... Tú... —Abro los ojos porque acabo de atropellar a mi amigo. Además, acabo de tener una cita accidentada e inesperada con él, con... —Peter Evan Moore.

~-~-~-~-~-~-~-~-~-~-~-~-~

Hola por aquí, Cita accidentada es la primera historia que estoy publicando por wattpad. Es una historia corta, de un solo capitulo, y que como comenté en Tiempo de leer, surgió gracias a un mini reto realizado por RomanceEs.

Bueno seré breve porque mi hermana esta molestando, quiere usar la laptop. Eso pasa cuando compartes cosas.

En fin, Sunshine y Flor gracias por siempre leerme y estar ahí, por ayudarme, por todo. Gracias chicas.

Espero que les guste. Comenten y voten por favor.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro