DESCRIPCIÓN Donde la 97 line tendrá una fiesta y obviamente estarán Lisa y Jungkook. Bambam los presentará.

[ Por favor comenten todos aquellos que aman a Bambam, por que yo lo adoro ]

* * *

LISA MANOBAN.

-No puedo creer que te estemos ayudando en esto, Lisa.- Suspiré al escuchar las palabras de Jennie, que me ayudaba a ponerme la chaqueta de cuero.-Y menos ahora que debutamos.

Habíamos debutado hace un par de semanas y teníamos que ser sumamente cuidadosas con lo que hacíamos o decíamos; porque ahora teníamos los ojos y atención de todos en nosotras.

-Lo sé. Pero, Bambam en verdad quiere que conozca a sus amigos y de alguna manera no lo quiero decepcionar.-Me excuse e hice un puchero, esperando que aquello le hiciese bajar la guardia.

Jennie suspiró y al instante pude ver como dos figuras entraban por la puerta, con la respiración un poco agitada.

-Listo. Ya se fue mánager oppa.- Comunicó Rosé.- Debes irte con cuidado y por favor Lisa, no salgas en ninguna foto o estamos muertas.

Asentí y les di un abrazo, pensando que su amistad de verdad era muy valiosa. No todas las amigas hacen lo que ellas están haciendo por mi.

-Las quiero, chicas. ¿Qué haría yo sin ustedes?

-Probablemente estarías viviendo debajo de un puente, pero bueno...- Le pegué juguetonamente a Jisoo al escuchar sus palabras.

Todas reímos y me despedí.

El lugar en el cual nos veríamos estaba cerca de donde vivíamos, así que una pequeña caminata no le hace mal a nadie ¿Cierto? Igual, por sí algo y para ser precavida, me puse una máscara negra y una gorra también negra, para evitar que cualquiera me viese la cara o me reconociera.

Según mi amigo, nos encontraríamos en un restaurante que no fuese muy concurrido. Esto debido a que todos los que estaremos presentes, somos idols y a algunos no nos convendría que nos viesen allí.

Suspiré al verme frente al famoso restaurante. Era pequeño y por lo que podía ver no había nadie, a excepción de un grupo de chicos muy ruidosos.

Mierda. Sólo hay chicos ¿Por qué Bambam no me lo dijo? Creí que estarían las chicas de TWICE. Bambam, me había dicho que ellas también estarían.

Abrí la puerta del restaurante haciendo que una campanita sonara. Ahora muchos ojos están en mi. Maldije esa campanita en mi interior.

-¡Pranpriya!-Casi que salté del susto cuando Bambam corrió de su asiento hasta llegar a mi.

Su gran figura me envolvió en un abrazo que correspondí de inmediato. Tengo que admitir que había extrañado a este tonto. Mucho a decir verdad.

-Pensé que no ibas a venir.-- Me susurró en el oído.- No me habías confirmado nada.

- Y tú no me habías dicho que aquí habrían tantos chicos.- Susurré esperando que ninguno de sus amigos me escuchara. Podía sentir como Bambam sonreía en nuestro abrazo y me separé.

-Lo siento, será mejor que te presente.-Emocionado me tomó de la mano y me llevó hasta su mesa. En el camino me quité mi mascara quedándome sólo con la gorra.

Los ojos de algunos de ellos se abrieron exageradamente al verme, sonreí nerviosa e hice una reverencia.

-¡Bambam, no nos dijiste que tu amiga era Lisa de BLACKPINK!- Sentí mis mejillas rojas a más no poder cuando Yugyeom dijo aquello. A él era el único que reconocía ya que era compañero de Bambam.

-Chicos les presento a Lalisa Manoban, más conocida como Lisa.-- Dijo y una fila de seis chicos hicieron una reverencia muy mal coordinada. Solté una risita al verlos y mis ojos viajaron a uno de ellos.

Tenía una cara seria que lo hacía ver muy atractivo. Demasiado atractivo. Y también misterioso. Me gusta. Además vestía de negro como yo y mi vista se dirigió a sus zapatos, para después cruzar a los míos. Ambos llevábamos timberlands. Qué raro.

-Pero miren, si tenemos a estos dos luciendo como pareja.- Casi que quise matar al chico alto que dijo eso. No sabía su nombre pero él al ver mi cara de confusión se apresuró a presentarse.-Perdón no me he presentado, mi nombre es Mingyu.

Y como si lo hubiesen ensayado, todos de inmediato empezaron a decir sus nombres, mientras que yo sólo recibía sus presentaciones con una gran sonrisa. Empezando a acostumbrarme al desastre que estos chicos tienen al estar juntos.

Cuando llegamos al chico de los timberlands, él aclara su garganta y me da una linda sonrisa. Es como un pequeño conejito. Ya me siento morir de ternura, así que sin poder evitarlo suelto una sonrisa yo también.

-Mi nombre es Jungkook.- Dijo e hizo una reverencia que respondí con otra.

Su rostro se me hacía conocido, obviamente todos eran idols y habré visto su cara en alguno que otro lado, pero con él era diferente. Si rostro parecía más claro en mi mente, a diferencia de los otros.

Pero no puedo recordar de dónde...

Mientras todos empezaban a crear conversaciones, mis ojos estaban en el chico de timberlands.

- ¿Qué miras Manoban?- Su voz áspera y burlona me hizo apartar la mirada, sintiéndome avergonzada.

-Lo siento.

-¿Por que?- Me preguntó.

En realidad no lo sabía.

-No lo sé. Tal vez te incomoda.- Suspiré y esta vez fue mi turno de moverme incómoda en mi asiento.

-No, está bien. Lo que hice ahora era sólo con intención de molestarte. Soy así siempre.-Me confirmó y me dio una linda sonrisa que correspondi.

-Bueno, pues ya somos dos. Yo también molesto mucho a mis unnies, usualmente por eso se enojan conmigo, pero no veo razón de...- Paré al darme cuenta de que estaba hablando de más. Pude ver una sonrisa burlona en su rostro.

Bien hecho, Lisa. Sigue jodiendolo todo como siempre.

-Lo siento, ya empecé a hablar de más.-Bajé la mirada sintiendo mis mejillas rojas. Cuando su mano subió mi mentón casi que se me salen los ojos de la impresión.

-Está bien.-Sonreí ante sus palabras y casi que sentía mis mejillas arder.

De los nervios quise distraerme con algo, así que intenté tomar de mi bebida, fallando y derramandola... ¡En la camisa de Jungkook!

-Lo siento tanto, en verdad. Yo soy así, no se lo que hago.- Empecé a soltar mientras intentaba limpiarlo con una servilleta, él sólo reía y me miraba de manera burlona.

Gente, hoy definitivamente no es mi día.

-Oye ¿De qué te ríes?-Dije enojada y con voz delgada. Su rostro se suavizó pero volvió a su mirada burlona de hace un rato.

- Nada.-Dijo y me puse nerviosa al notar como esta vez sus ojos sí estaban constantemente en mi.

Quité la mirada de él por un momento y pude ver como los otros estaban en sus propios asuntos, casi que dejándonos a los dos afuera de todo. Genial. Bufé y seguí comiendo de mi plato.

- Lo siento.-Repetí sin quitar la mirada de mi comida. Llené mi boca con un poco de pollo sin mirar a Jungkook.

Había una gran mancha en su camisa, debo agradecer que es negra y casi no se nota. Gracias a Dios, sino me sentiría mucho más culpable.

La horas pasaron y la cena estaba siendo un gran ambiente. No sabía cuánto necesitaba salir y despejarme hasta que lo hice, así que lo estoy disfrutando muchísimo.

Todos decidimos irnos hasta la parada de bus, ya lo sé, no es la mejor opción en nuestra posición, pero ya era muy tarde como para que alguien andará por ahí ¿Verdad?

* * *

-¿Seguirás disculpandote?- Alcé la mirada mientras Jungkook caminaba a mi lado. Íbamos más atrás que los otros.

-Sí. Arruiné tu camisa.- Dije avergonzada.

Jungkook paró y yo también lo hice a su lado. Me paré al frente y levanté un poco la mirada para verlo a los ojos.

Su rostro bajo la luz de la luna lo hacía ver como si fuese un Dios griego completo.

Y creo que de repente ahora sí estoy recordando de donde lo conocía. Maknae, banda de chicos popular... ¡BTS!

- ¡BTS! -Solté en un chillido. Jungkook dio un pequeño salto y yo me disculpé con una sonrisa nerviosa.-Lo siento, ignora lo que dije sólo recordé algo.

-¿Está bien?- Rió un segundo después.-Toma.

Bajé la mirada a sus manos y sentí mis mejillas rojas al ver un papel en sus manos, con su maldito número.

-Llámame.-Sonrió pícaro para después salir corriendo hasta llegar al lado de los chicos.

Empezaron a subir al bus, a excepción de Bambam que volvió corriendo hacia mi.

Cuando el bus pasaba a nuestro lado, todos salieron por algunas ventajas:- ¡Adiós, Lalisa!- Gritaron y me permití reír. Pero mi sonrisa se hizo mayor al ver cómo Jungkook me guiñó el ojo.

Suspiré, el chico de los timberlands ya me trae loca.