DESCRIPCIÓN Donde Jungkook tiene una pelea con una estilista de Lisa, que resulta siendo una sasaeng.

* * *

"¿No tienes frío con ese vestido?"

"Lisa ese vestido parece una maldita cortina ¿En qué piensa tu estilista? ¡Está horrible!"

"¿Por qué siempre te dan los atuendos incómodos? Podía ver desde abajo como no podías hacer tu paso en As if it's your last"

"¿Por qué Jennie noona tiene shorts de emergencia y tú no?"

"Las chicas llevan cosas cómodas y tú estás así. Ya colmaron mi paciencia hablaré con ellos"

Lisa suspiró cuando aquellos comentarios recorrían en su cabeza, mientras Jungkook la jalaba por los pasillos de su compañía. Lisa maldiciendose ya que sentía que aquello se saldría de control.

Esto sería como Jungkook exponiendo su relación parte 203889, sólo que esta vez frente a su estilista.

...Genial.

— Jungkook espera...— Le llamó, pero él la ignoró. Lisa suspiró frustrada.— Jungkook esto no es buena idea.— Se quejó en un tono de voz delgada.

— Claro que lo es, Lisa. Esa señora se está aprovechando de ti. Cree que porque no eres coreana, puede jugar contigo.— Dijo enojado.— Pero no es así. Tú tienes a un novio que te defiende y quiere lo mejor para ti.

Lisa casi que sonríe por sus tiernas palabras, pero se contuvo. Jungkook enojado podía ser como un volcán apunto de hacer erupción. Y su estilista no era la persona más amable del mundo.

Lisa no se lo decía a su novio, pero muchas veces su estilista la ha llegado a intimidar e incluso tratar mal verbalmente. Ella no quería darle más razones a Jungkook para que insultara a la señora, por lo tanto no le decía nada. No obstante, le gustaría poder pedirle ayuda y no guardarse todo para ella.

— Jungkook, déjalo así.— Le dijo cuando ambos estuvieron parados frente a la puerta.

— No lo dejaré así. Sé que no quieres que me preocupe, pero también sé que esta situación te pone mal.— Susurró. Tomó la mano de su novia.— Vamos, yo estaré aquí. Tengo un plan.— Continuó susurrando.

¿Un plan? Lisa alzó una ceja confundida.

— Me esconderé aquí y tú vas a sacarle toda la información posible. Grabaré, si veo algo raro, claro que entraré a defenderte. Esto se lo mostraremos a tu jefe.

Lisa rió sarcástica:— ¿En verdad crees que esto le interesa al CEO?— Preguntó en tono obvio.— Le vale mierda Jungkook. Por eso no ha hecho nada en casi un año de nuestro debut.— Dijo la mayor.

Jungkook frunció el ceño:— Pues esta vez tendrá que hacerlo o se las verá conmigo. Vamos, abre la puerta.

Lisa suspiró y asintió, su mano temblorosa abrazando el pomo de la puerta, para después darle la vuelta. Cuando esta se abrió Sun Hee, su estilista pegó un pequeño salto. Lisa cerró levemente la puerta, dejándole un espacio a Jungkook para que grabara lo que pasaba adentro.

Sun Hee terminó de guardar unas cosas y la miró con una sonrisa burlona. Lisa tragó fuertemente. Esa señora la ponía nerviosa.

— ¿Qué quiere?— Preguntó en tono duro e irrespetuoso.

Jungkook frunció el ceño mientras sostenía su teléfono, su actitud le empezaba a desagradar.

— ¿Puedo hablar con usted Sun Hee?— Preguntó nerviosa Lisa. Jugaba con sus manos, Jungkook podía verla y sentirse mal al ver como su novia se desvanecía frente a la mujer.

— Ya estamos hablando.

— Quiero que deje de menospreciarme. — Dijo en voz clara. Sun Hee alzo una ceja.— Estoy cansada de que me trate como le plazca sólo porque soy extranjera. No es justo.

— Deberías saber que por ser extranjera no tienes los mismos derechos que las otras. Entre eso está tu paga ¿Verdad?— Se cruzó de brazos.

— Lo sé. Pero también sé que sus actitudes hacia mi no son las mejores.

— ¿Por qué sólo te vienes a quejar ahora? He sido su estilista desde su debut ¿Qué es diferente ahora?

— Me cansé. Eso es lo diferente.— Susurró.— Me cansé de sus discriminaciones.— Dijo con los ojos húmedos.

Me cansé de las discriminaciones de todos.

— Pues lo siento Lisa, pero dudo que tu jefe te crea cuando yo puedo simplemente decir que estás celosa de las otras miembros.— Respondió como si nada. Caminó un par de pasos más hasta quedar frente a ella, una sonrisa siniestra en su rostro.— Tendrás que seguir aguantando, querida.

Jungkook apretó su mandíbula lleno de rabia, la conversación siendo grabada por audio, las ganas de entrar y maldecir a aquella señora lo hacía sudar un poco.

— Usted es una...— Las palabras de Lisa se quedaron en el aire cuando sintió una mano impactar con su mejilla. Abrió sus ojos de par en par al sentir ese lado de la cara, arder. Llevó rápidamente su mano allí y gimió llena de dolor.

— ¡Niña insolente!— Gritó la mujer, Lisa la miró llena de miedo.— ¡¿Qué ibas a decirme?! ¡¿No te bastó con quitarme a mi Kookie?! ¡Me separaste de mi hombre, ahora tendrás que aguantar!

— ¡Suficiente!— Ambas se sobresaltaron al escuchar el grito de Jungkook, la puerta abierta de par en par y su mano sujetando el celular con la prueba mayor.

Jungkook corrió para estar frente a Lisa y miró con rabia a Sun Hee.

— No se atreva a ponerle una mano encima.— Dijo con tono furioso. — Agradezca que es una mujer porque si no le juro que...— Jungkook tomó una fuerte respiración, tratando de medir sus acciones.

Sun Hee miró a Jungkook con una sonrisa que daba miedo. Lucía tan obsesiva, tan loca que Lisa se sintió temblar.

— Kookie. Mi Kookie. No sabes cuánto tiempo he estado esperando este momento...— Sun Hee intentó acercarse a Jungkook pero este se alejó, temeroso ante la actitud de la mujer que definitivamente no estaba en sus cinco sentidos.— ¡Claro! ¡No quieres que toque porque la estúpida de Lisa esta aquí! ¡¿Qué esperas para irte?! ¡No dejas que mi Kookie y yo estemos juntos!— Sollozó.

— Usted está loca...— Susurró Lisa agarrada del brazo de Jungkook.

Sun Hee negó con la cabeza, sus uñas clavandose en la piel de sus manos. Se veía como una verdadera psicópata.

— No, no, no, no. Creí que al hacerte todas esas cosas te alejaría de mi Jungkook, pero no fue así.— Empezó a decir. Sus manos viajaron a su cabello, jalando de él hasta que sus rodillas tocaron el piso.— Pensé que me amarías, Kookie.— Dijo con un hilo de voz.

Jungkook frunció el ceño:— Ya llegarán.— Susurró. Lisa lo miró confundida mientras que Sun Hee seguía murmurando cosas sin sentido.

— La policía, Lili.— Susurró otra vez.

— ¿Cómo la llamaste? No me di cuenta.— Preguntó sorprendida.

— Tengo mis trucos.— Dijo con una pequeña sonrisa, pero enfocado en el siguiente movimiento de la mujer.

— Jungkook, por favor.— Se quejó la mujer. Lisa se escondió más detrás de su chico, el miedo brotando en sus venas.

— Está bien, estoy aquí.— Le hizo saber.

Lisa asintió con los ojos húmedos. Pronto pasos se escucharon cerca, Sun Hee levantó la mirada asustada.

— ¡No! ¡¿Llamaste a la policía?!— Gritó.

— Lo siento Sun Hee, pero no estás bien.— Le dijo Jungkook.

— ¡Eres un hijo de puta!— Gritó de vuelta, al sentir sus manos siendo esposadas.

Sollozó al sentirse lejos de Jungkook y su mirada se oscureció cuando vio como este envolvía a Lisa en un abrazo.

Esa debería ser yo ¿Porque no se da cuenta de que nos amamos? ¿De qué yo soy la mujer de su vida?

— Está bien. Ya pasó, Lali. Tranquila. Respira por favor.— Le susurró Jungkook a Lisa, que sólo apoyaba su cabeza en el pecho de su novio y sentía las lágrimas caer.

— Me hizo sentir muy mal, Kookie.— Sollozó.— Estaba muy asustada.

— Está bien. Prometo que nada de esto ocurrirá más. Estaré aquí para ti, siempre mi amor.

— ¿Siempre?

— Siempre.