12. Muñeca.
DESCRIPCIÓN Donde Jungkook está más que celoso de Lisa en unos premios, y no le molesta decírselo en backstage.
* * *
Seoul Music Awards 2018.
—Jennie unnie, para...—Su voz delgada se escuchó en el camerino. La tailandesa tapó su rostro, soltando pequeñas risitas mientras Jennie sólo seguía tomándole más y más fotos a su amiga.
—No, te ves muy linda, Lali. Jungkook morirá cuando te vea así vestida.— Dijo pícara.
Lisa abrió sus ojos exageradamente y le hizo una señal para que callara. Alguien podría escucharlas y ahora lo que menos necesitaba era que su relación se revelara.
—Silencio, por favor. Alguien podría escucharte.—Jennie puso los ojos en blanco y después rió burlona. Lisa podía ser muy ingenua cuando se lo proponía, nadie las escucharía.—¿Saben si GOT7 estará?— Preguntó ya que tenía muchas ganas de ver a su amigo Bambam.
Jisoo hizo un sonido de aprobación:—Sí, en el grupo que tenemos lo confirmamos ¿No leíste los mensajes?
—¿Cómo los va a leer si se la pasa hablando sólo con su Kookie? Son lo más cursi y empalagoso de este planeta.—Se quejó Rosé. Las chicas rieron, pero sus risas cesaron cuando Lisa tiró un cojín a la chica de vestido blanco.—¡Oye!— Rosé se quejó.
—Y claro, cuando tú estas hablando hasta los codos con Yoongi oppa, nadie te dice nada ¿No?
Rosé hizo un puchero:—Es diferente. Con Yoongi oppa ya llevo más de un año. Ustedes están acostumbradas.— Las chicas rieron por las palabras de Rosé, definitivamente estaba muy enamorada del rapero.
—En fin, debemos prepararnos para cantar la misma canción de siempre.— Dijo Jisoo mientras se levantaba del sillón. Jennie rió.
—Calma, dijeron que esta vez volveríamos con un álbum completo.— Dijo esperanzada.
Si supieran.
—Aunque me gusta cantar esta canción, creo que las cosas serían mejor si tuviésemos más. Digo, ya vamos a cumplir dos años desde nuestro debut y sólo tenemos cuatro canciones.—Habló Rosé al lado de Lisa, ambas caminando al unísono.
—¡Bambam!—El grito de Lisa llamó la atención de los idols allí presentes. Todos conocían la amistad de estos dos, así que no les sorprendía que se viesen siempre en backstage.
Lisa se soltó del brazo de Rosé y corrió como niña pequeña hasta llegar donde su amigo. Le dio un apretado abrazo que en realidad estaba disfrutando, lo había extrañado muchísimo.
Todos los miraban. Hubiese sido incómodo si no estuviesen acostumbrados a ello, pero a un punto en el cual no les importaba.
—¡Lalisa Manoban!—Un muy feliz Bambam la saludó. Una gran sonrisa en su rostro.—No me has respondido mis mensajes todo por estar con Jungkook. Pensaré que lo hiciste porque no tenías tiempo y no porque prefieres a tu noviecito.—Se quejó. Lisa rió.
—Por favor, Bambam. Así tuviese tiempo tampoco te hubiera contestado.— El chico se sobresaltó sintiéndose ofendido, puso una mano en su pecho y abrió su boca mientras veía a Lisa sorprendido.
—La traición.— Dijo y Lisa empezó a reír tan fuerte, que tuvo que poner una mano en el hombro de su mejor amigo.
Ambas risas decayeron cuando una persona aclaró su garganta detrás de ellos. Lisa se volteó y sonrió al ver de quién se trataba. Pero al notar su mirada oscura, su sonrisa fue desapareciendo lentamente.
— Jungkook, amigo mío.—Lo saludó Bambam, que casi grita del susto cuando los ojos de Jungkook se posaron en su existencia. Se veía muy intimidante.—Creo que me voy. Nos vemos después.—Se fue del pasillo repleto y Lisa sólo suspiró.
Antes de decir algo, Jungkook tomó su mano y la arrastró fuera de aquel concurrido pasillo. Lisa no veía nada ya que se empezaron a adentrar por un lugar oscuro. Empezó a entrar en pánico ¿Podrían verlos? En unos minutos empezarían los premios y ambos debían estar con sus grupos o los rumores crecerían.
—Jungkook...—Susurró antes de que el mencionado la empujara a un cuarto oscuro y pequeño. Gimió cuando sintió su espalda dar contra la pared. No veía nada debido a la oscuridad del lugar.— ¿Por qué estamos aquí? La gente se dará cuenta de que faltamos.— Dijo preocupada.
Jungkook sonrió. Lisa no fue capaz de ver su sonrisa.
— ¿Cuántas veces debo decirte que no me gusta que te vistas de esa manera?— Su tono frío casi que le heló la sangre a Lisa.
Alzó una ceja ¿Y a este qué bicho le picó?
—¿A qué te refieres?
— A todo. Los idols viéndote como si fueses algún pedazo de carne, tú siendo muy cariñosa con el maldito de Bambam y yo sin poder gritar a los cuatro vientos que eres mi muñeca.— Dijo contra sus labios.— Además ¿No te han dicho que responder a una pregunta con otra pregunta es mala educación?
Lisa tragó saliva nerviosa. Jungkook celoso siempre iba a ser muy sexy. Pero a la vez daría miedo, depende la situación. Y digamos que en esta no veía un buen final.
— J-Jungkook...—Dijo nerviosa cuando sintió la cálida mano del menor colarse por su falda. Alzó su pierna larga y la envolvió en su cintura. Lisa alzó la otra por sí misma ayudándose.
—Me encanta que digas mi nombre de esa manera, muñeca.—Susurró en su oreja, para después morderla lentamente. Lisa casi que derritiéndose ante su toque.—Repitelo para mi.—Su aliento caliente chocando contra el cuello de Lisa, que desprendía un olor floral que lo volvía loco.
—Jungkook.- Soltó sin quererlo aún más sexy que antes. Jungkook gruñó y apretó su trasero, mientras que sus ganas de hacerle el amor ahí mismo crecían. Pero debía controlarse, no era el lugar o el momento. En cualquier instante los premios empezarían y no quería encontrarse en aquella situación.
Sus labios chocaron con los de ella, besándose con desesperación. Ambas manos en cada mejilla, tocando su piel con delicadeza. Lisa gimió cuando Jungkook atrapó su labio inferior. Sus manos bajaron al abdomen del menor y empezó a tocarlo por encima de su traje, esto volviendo más loco a Jungkook, quería más.
Mucho más.
Las manos temblorosas de Jungkook liberaron las mejillas de Lisa para después bajar lentamente por su cuello y sus pechos. Empezó a tocarlos por encima de aquel crop top de color blanco y negro, a juego con su falda tubo alta.
( A ver si adivinan de que atuendo estoy hablando :/ )
Lisa envolvió sus manos en su cuello y escondió su rostro en el pecho del chico, casi que perdiéndose en su varonil esencia.
Jungkook dejó ir las piernas de Lisa su y la soltó con cuidado en el piso. Sus manos ahora en la delgada cintura de la tailandesa, rozando ma pequeña porción de piel expuesta que dejaba su atuendo.
Pegó su frente a la suya y rozó su nariz con la suya, mientras una sonrisa llenaba su rostro. Lisa lo abrazó otra vez fuertemente. Sin querer salir de ahí.
—No tenías que ponerte celoso.— Susurró, sin quitar su rostro de su pecho.
Jungkook suspiró y en medio de su abrazo empezó a balancearlos de adelante hacia atrás.
—Lo sé. Es sólo que a veces me da miedo no ser lo suficientemente bueno para ti...—Lisa frunció el ceño ante sus palabras.—Miraba como esos hombres te veían y notaba como ellos eran mucho más lindos o talentosos. Un gran ejemplo es Bambam. Lo conoces más, tienen su amor por el baile en común. Entré en pánico, muñeca.
Lisa sintió sus ojos húmedos por sus palabras. No quería que su chico se sintiera así.
Se separó del abrazo y conectó su mirada con la de él. Entre sus manos acunó las mejillas de Jungkook.
— Te amo. Muchísimo. Jamás te dejaría por otra persona, Kookie. Eres más que suficiente para mi y todo el mundo, eres talentoso y mereces la galaxia entero. Entiende eso. Nadie es más talentoso que alguien o más hermoso. Cada persona tiene sus propios atributos y tú eres increíble. Así que para de preocuparte por esas cosas y dame un beso.—Jungkook rió ante sus palabras y se inclinó.
—Como lo pida mi muñeca hermosa.— Lisa sonrió sintiéndose muy sonrojada y sólo pudo suspirar de placer, cuando los labios de Jungkook chocaron con los suyos.
—¿Quién está ahí?
Lisa casi que pega un grito del susto, cuando escuchó la voz de Jennie afuera de la oscura habitación. Abrió sus ojos en pánico y miró a Jungkook que sólo le hizo una señal de silencio.
—Vamos, Lisa. Se que estas ahí. Jimin y yo te vimos entrar con Jungkook ¿Creen que somos estupidos? Apúrense, ya casi van a empezar los premios.
—¿No les da una sensación de deja vu este momento?— Se escuchó como Jimin preguntaba.
Jungkook rió irónico:—Sí, te tengo la respuesta. Tú y Jennie haciéndolo en un cuarto. Lisa y yo descubriendo todo. Ahí tienes tu deja vu.— Respondió el chico, que rió aún más cuando escuchó a Jimin quejarse como niño pequeño.
— ¡Yah, Jeon Jungkook!— Dijo al verlo salir de la habitación con Lisa detrás de él.— Pero nosotros los encontramos en la misma situación.
Jimin sonrió pícaro y dio un grito muy agudo cuando Jungkook empezó a correr detrás de él. Ambos llegando al pasillo donde esperaban todos los idols, que los miraban sorprendidos o riendo.
Jennie y Lisa entrelazaron brazos y los siguieron mientras negaban con la cabeza ante la locura de sus novios.
( Jenlisa tus patronas. Se tenía que decir y se dijo ).
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