DESCRIPCION Donde Lisa y Jungkook delatan su relación con miradas.

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MMA 2018.

La chica miraba a su alrededor lleno de luces y efectos especiales, hasta que su vista se deslizó de vuelta a su presente; donde sus amigas estaban siendo apuradas para sentarse en los asientos dispuestos, para presenciar los premios de este año.

Lisa estaba más que incómoda. Aquel atuendo que le habían dado tenía largos adornos que la lastimaban al hacer algún movimiento inesperado o brusco.

— Lisa ¿Estás bien?— La chica asintió mientras miraba a Rosé, su mejor amiga.

— Es sólo que esto me está lastimando demasiado.— Dijo bajo, ya que a su lado había una señora que debía decirles donde tenían que sentarse.

— No te preocupes. Te aseguro que cuando veas a tu noviecito todo se te quitará.— Lisa le pegó un codazo a la rubia de cola alta.

— Cállate ya, Chaeyoung.— Musitó un poco irritada.

Jeon Jungkook y Lalisa Manoban eran pareja desde hace más de un año, y sí que han sabido mantenerlo para ellos, aunque sus miembros ya se hayan enterado.  Sabían desde el principio que sería difícil guardar el secreto, sin que nadie se enterara. Pero ellos lo quisieron así, querían que su relación fuese algo que sólo pudiesen disfrutar entre ambos.

— BLACKPINK, por favor pasen ya.— La señora las apresuró a sentarse y ellas asintieron.

Lisa no quería ir de primera pero le tocó, o más bien, la obligaron. Sus ojos se conectaron por un micro segundo con los de su chico cuando estaba haciendo su reverencia a los grupos presentes, provocando que este también hiciese una pequeña a su novia, que ante sus ojos se veía mas que hermosa.

Lisa se sentó con cuidado ya que los adornos que tenía su atuendo se atoraban en la tela, lastimándola.

Y esto obviamente no pasó desapercibido por Jungkook, y eso sí que lo enojaba. Para nadie es un secreto que los atuendos más incómodos y complicados de usar se los dan a Lisa, pero también sabe que su novia es una hermosa mujer que se puede ver bien hasta con una bolsa de basura.

— Deberías dejar de babear.— La voz de su hyung al lado, lo hizo mirar hacia otra dirección, esta vez enfocándose en las presentaciones.

— Por Dios, Kookie. Lisa te trae loco.

Él sonrió sabiendo que era verdad, lo traía loco, completamente.

Cuando iKON estaba haciendo su presentación, su equipo los llamó para ir al backstage. A lo lejos pudo ver a Lisa salir de la sala de espera sin nadie a su lado. Logró escabullirse e ir detrás de ella, la esperó afuera del baño mientras silbaba levemente.

Cuando Lisa pasó a su lado no pudo evitar quedarse tildado ante su belleza y cuerpo.

Qué modelo.

Jungkook aclaró su garganta para que Lisa lo notará pero no fue así.

— ¿No piensas saludar a tu novio?— Dijo haciendo que la tailandesa se volteara en asombro.

— ¿Cariño?— Dijo y los ojos le brillaban.— ¿Qué estás...?— No la dejó terminar ya que tomó su muñeca llevándola detrás de una pequeña habitación en dónde no podría molestarlos.

Lisa miró a su alrededor asustada de que pudiesen verlos.

— Jungkook ¿Estás loco? ¿Y si nos ven?— Preguntó en tono preocupado.

— Te extrañaba.— Dijo el chico e hizo un puchero.

Ella cruzó sus brazos sobre su pecho y miró a otro lado haciéndose la indiferente.

— Lo dudo.— Dijo sin mirarlo y él frunció el ceño sin entender.— Digo, te veías muy feliz viendo las presentaciones y más cuando se trataba de las chicas ¿No?

Jungkook sonrió un poco y negó con la cabeza.

— No me digas que estás celosa, Lalisa Manoban.

— Lo estoy.— Dijo orgullosa, sorprendiendo a Jungkook, él creía que lo iba a negar.— ¿Por qué? ¿No puedo? ¿Eres el único en esta relación que puede estar celoso? No es justo.— Ella puso sus ojos en blanco, pero ante la mirada de Jungkook seguía viéndose más que linda y esto lo hizo sonreír alegre.

— Claro que puedes, mi amor.— La acercó a su pecho.— Te ves muy sexy cuando estás enojada.— Dijo y tomó su cara entre sus manos.

— Deja de molestarme.— Dijo y le dio un golpecito en su pecho.

— ¡Bebé, me dolió!— Jungkook se quejó tocando su pecho.

— No mientas.— Dijo y sacó su lengua juguetonamente.

Qué adorable.

Tomó la mejilla de la chica otra vez con su mano y alzó un poco su cabeza para darle un pequeño beso en los labios.

Ella empezó a jugar con el saco del chico mientras miraba el piso.

— También te extrañé, Kookie.— Dijo de repente, haciendo que el corazón del chico saltara lleno de alegría y amor.

Tomó sus mejillas y alzó su cabeza, y le dió otro beso: — Lo sé.— Dijo.

— Mi labial puede quedar en tus labios, bebé.

— ¿En serio?— Dijo preocupado.

— Claro que no.— Dijo y rió.

—  ¡Lisa!— Se quejó el chico. Ella rió alegre ante sus quejidos.

— Ouch.— Ella dijo en tono bajo.

— ¿Qué pasó, bebé?— El lado protectivo de Jeon Jungkook salió a flote.

— Esto me lastima.— Dijo señalando los múltiples adornos con cristales que estaban en su blusa, lastimándola cada vez más.

— A veces no entiendo a sus estilistas, cariño. Te quiere hacer ver súper sofisticada y a la moda, pero eso a la vez te hace sentir incómoda.— Dijo molesto. Lisa hizo un puchero y trató de arreglar su atuendo.— Déjame ayudarte.

Ella sólo asintió y dejó que su novio la ayudara.

— ¿Mejor?

— Mejor.— Ella asintió.

— Sé que te ves bien en cada atuendo, pero también sé que puedes llamar la atención de muchos chicos, con lo hermosa que eres.

— Culpa a mi estilista.— Respondió casualmente.

— No gracias, recuerdo como terminó todo la otra vez.

Lisa rió un poco, lo recordaba.

— ¿No tienes frío?

— Sí, tengo mucho frío.— Ella asintió de una manera muy tierna.— ¿Podemos intercambiar la ropa? Los tuyos se ven súper cómodos y calientes.

— Si pudiese, te lo hubiera dado desde el principio.— Dijo y le dió un beso en la frente. — Ven aquí.

Abrió su gran saco para que Lisa lo abrazara felizmente y posara su cabeza en su pecho.

Jungkook cerró su saco cubriendo también el pequeño cuerpo de la chica.

—¿Está mejor?

— Sí.— Respondió suavemente.—¿Podemos estar así para siempre?

— Es lo único que quiero, Lali. Estar así contigo, para siempre.— Dijo y apoyó su mejilla en la cabeza de la tailandesa.

Estuvieron así unos minutos, disfrutando la presencia del otro, en silencio.

— Te amo.— Dijo el chico.

— Yo te amo más, Kookie.— Dijo y alzó su cabeza para verlo.

— Deberíamos ir a una cita a nuestro lugar especial. Como en los viejos tiempos.— Lisa sonrió emocionada y asintió feliz ante la idea de su novio.

— Sí.— Dijo y le dió un leve beso. Aunque frunció el ceño unos segundos después.

— ¿Qué pasó?

— ¿Escuchaste un gemido?— Preguntó.— Escuché a una mujer gimiendo.

Se quedaron en silencio para después escuchar como otra vez, un nuevo gemido llenaba el pequeño pasillo.

Ellos caminaron tomados de la mano hasta llegar a una pequeña puerta, la habitación de limpieza.

Para su gran sorpresa vieron como Jennie y Jimin tenían... relaciones sexuales, allí. Lisa quitó la vista rápidamente.

— Oh.— Jungkook tapó la boca y ojos de su novia.— Espera debo decirle que se apresure, en unos minutos debemos ir a presentarnos.— Él asintió.— Jennie unnie, sé que estas teniendo un buen tiempo allí adentro, pero debemos ir a presentarnos.

— ¡¿Lali?!— La voz exaltada de Jennie los hizo reír.

— La misma, ya sabes. Eso lo puedes finalizar después.— Jungkook miró con una sonrisa pícara a su novia.— Cariño debo irme.

— Bien, bebé. Demuestrales quien es la mejor en el escenario, cariño.— le dio un beso en los labios haciéndola sonreír.

— Como siempre. Nos vemos.

Vio como esta se alejó y suspiró feliz.

Tengo a la mejor novia. Pensó.