Viaje al campamento
Habían pasado unas cuantas horas desde que las quintillizas habían recogido a Ken y Eto de su hogar. Actualmente, las quintillizas se encontraban jugando "el Juego de las Quintillizas", consiste en que cada una de las hermanas es uno de los dedos de la mano. Ahora mismo, le toca a Nino.
Nino: ¿quién soy?*mostrando un dedo*
Miku: Nino.
Ichika: creo que es Miku.
Yotsuba: ¡Yotsuba!
Itsuki: creo que es Nino. ¿Y tú quién crees que es?
La pelirroja quedó en shock al ver a su lado izquierdo. Las demás hermanas notaron la expresión que Itsuki había puesto al ver a dónde se encontraban Ken y Eto. Encontrándose con los ya mencionados, dormidos; lo único "raro" era que Eto tenía su cabeza en el hombro del pelinegro.
La impresión se mostró en los rostros de las cinco hermana, ya que a pesar de que el peliengro haya negado en más de una ocasión ser novio de la peliverde, esa escena podía fácilmente contradecir lo que anteriormente había dicho.
Itsuki: Kaneki-kun, despierta. Te toca jugar.*celosa, despertándolo*
Ken: ¿uh?*abriendo los ojos* ¿Qué sucede?*bostezó*
Itsuki: te toca adivinar.
Nino: ¿quién soy?
Ken: mm...*medio dormido* Eres Miku. Ya es normal que me insultes cada vez que puedas.
La segunda quintilliza se sorprendió de que el pelinegro se haya dado cuenta de eso. Y en efecto, era verdad lo que decía, ella era Miku.
Ken: si eso es todo, me dormiré otra vez.*volviendo al lado de Eto*
Itsuki: espera. ¿No quieres jugar con nosotras?
Ken: está bien. Pero yo pongo el juego, ¿está claro?
Ichika/Miku/Yotsuba/Itsuki: okay, policía.
Ken: muy bien, qué comience el juego. La que hable a partir de ahora, me paga 5000¥.*volviéndose a dormir*
Nino: jajajajajajaja... Cayeron todas en su trampa.*riendo*
Ken: Nino págame.
Nino: ¡eh! ¡¿Por qué yo?!
Ken: por hablar.
Nino: ¡pero si yo no acepté jugar!
Ken: me vale.
~Time skip~
Las quintillizas por fin había salido del tránsito en el que llevaban una hora. Ahora mismo y por culpa de una tormenta de nieve, las quintillizas, el pelinegro y la peliverde se encontraban en una de las habitaciones de un hotel.
Mientras que el pelinegro y la peliverde observaban la habitación, Nino discutía sobre el hecho de tener que compartir habitación con el peliengro.
Nino: ¡me niego a que él duerma aquí!
Yotsuba: un grupo grande vino sin reserva. Era lo único que quedaba.
Nino: cuando veníamos, pude ver un cuarto perfecto para él. Podría dormir ahí.
Yotsuba: ¡es una casa de perros y amanecería muerto!
Eto: ¿es así de molesta, Ken-kun?*susurró al oído*
Ken: te terminas acostumbrando.
Miku: ¿qué susurran ustedes dos?*celosa*
Eto: nada importante.
Miku: ¿segura?*con un rostro sin emociones*
Eto: así es.*con una sonrisa*
Ken: ¿celosa, Miku?
Miku:*se sonroja* n-no.*mirando a otro lado*
Nino: reunión, chicas.
Todas las quintillizas se reunieron con rapidez, formando un círculo.
Nino: escuchen chicas, tengan cuidado con él.
Yotsuba: ¿eh? ¿Por qué?*confundida*
Nino: bueno... nosotras somos chicas y el es un chico.
Itsuki: por favor, Nino. Kaneki-kun no es así.
Ken:*agachándose* ¿quieren hacer algo?
Ante la repentina pregunta, las cinco hermanas se asustaron, y se pusieron contra la pared.
Nino: ¿h-hacer qué?
Ken: no lo sé, por eso les pregunto. Eto y yo pensamos en ver una serie o una película. O quizás las dos. ¿Ustedes qué quieren hacer?
Yotsuba: y-ya veo.*nerviosa*
Ichika: s-suena bien.*nerviosa*
Itsuki: (estaremos bien, ¿verdad? Kaneki-kun no es de esa clase de chico, ¿cierto? Aunque... no me molestaría si hiciera algo como... ¡No! ¡¿En qué estás pensando, Itsuki?!)
~Time skip~
Ya era de noche. La cena ya había sido servida y los chicos se encontraban cenando y platicando sobre trivialidades. Todo iba bien, hasta que Yotsuba sacó el tema de la fogata.
Yotsuba: ¿y ya tienen pareja para bailar en la fogata?
Ken: ¿otra vez con eso?
Yotsuba: oh, por favor. Debes admitir que es algo romántico, ¡la leyenda es real!
Ichika: ¿leyenda?
Ken: no te preocupes, Ichika. Es solo una leyenda sin lógica que no vale la pena contar.
Nino: eso del baile, es una perdida de tiempo.
Miku: de seguro nadie te invitó.
Nino: ¡cállate!
Itsuki: (aquí vamos de nuevo)*con una gota de sudor en la nuca*
Ichika: no vayan a pelear. Mejor...*tomando un folleto* Vamos y tomamos un baño al aire libre. ¿Hmn? ¿Baños mixtos?*observando mejor el papel*
Nino:*levantándose de golpe* ¡aparte de compartir habitación también tendré que compartir baños! ¡Me opongo!
Ichika: ¿qué te hace pensar que nos bañarémos juntos?
Ken: me sorprende que no quieras bañarte conmigo, Nino.*volviendo a comer* No sería la primera vez...
Itsuki/Miku/Eto: Nino...*con una mirada sombría*
Nino: ¡se equivocan! ¡Oye!*molesta y avergonzada*
Ken: mmm...*sonriéndole de manera tonta*
~Time skip~
Luego de cenar las quintillizas decidieron darse un baño antes de dormir en las aguas termales. Cada una comenzó a quitarse su toalla y entrar.
Ichika: ahhh... Qué bien se siente.*estirándose*
Nino: sí...
Itsuki: hace tiempo que no nos bañabamos juntas.
Yotsuba: Miku, ¿te a crecido un poco el pecho?
Miku: todas somos iguales.
Nino: bueno, hay algo de lo que debemos hablar, chicas.*seria*
Todas: ¿hmn?
Itsuki: ¿qué es, Nino?
Nino: en la habitación solo caben 6 futones. Alguien deberá dormir con él.
Ante la respuesta de la pelirosa, las demás hermanas quedaron sumergidas en sus pensamientos. Dormir al lado del pelinegro. Ese pensamiento hacía que las mejillas de las demás quintillizas se sonrojaran levemente.
Aunque claro. También pasaban por sus cabezas el hecho de que Ken era un hombre que estaba en una época donde las hormonas están disparadas. No sabían lo que podría suceder si en algún punto, ellas y él... llegaban a hacer algo indebido.
Ichika: Nino, creo que te lo estás tomando muy en serio.*un poco nerviosa*
Yotsuba: ¡es cierto! ¡Kaneki-san sería incapaz de hacer algo así!
Nino: ¿ah, sí? Entonces no hay ningún problema en que tú duermas con él, ¿cierto?
Yotsuba: bueno... No sabría que responderte.*sumergiéndose más*
Nino: estamos solas con un chico. ¡No hay que bajar la guardia ni por un momento!
???: ustedes sí que son exageradas.
Las chicas miraron en la dirección en la que una voz femenina se había escuchado. Encontrándose con una Eto, en toallas, parada detrás de ellas.
Eto: ¿puedo entrar?*preguntó con una leve sonrisa*
Itsuki: sí. Claro.
Eto: gracias.
Al escuchar la aceptación de las hermanas, Eto procedió a quitarse la toalla que cubría su cuerpo. Las quintillizas quedaron sorprendidas por lo que veían, Eto Yoshimura, había mostrado su escultural figura. Lo tenía todo. Unas curvas envidiables, unos pechos perfectos, unos glúteos firmes. Total: lo tenía todo como para volver loco a cualquier hombre.
Bajo la atenta mirada de las Nakano, la peliverde entró en las aguas termales.
Eto: ahh... Qué bien se siente.*relajada* ¿hmn?*notando las miradas* ¿Qué sucede, chicas?
Todas: nada.*mirando a otro lado*
Eto: ya veo. A propósito, oí de lo que estaban hablando. ¿Por qué todas ustedes tienen miedo de dormir con él? Él no les hará nada.
Nino: ¡ja! ¿Cómo puedes estar tan segura? ¿Acaso ya has dormido con él antes?
Eto: así es. He dormido muchas veces con él, y no ha pasado nada.
Ante la revelación, las quintillizas quedaron sorprendidas de que ella haya pasado varias noches en la cama del pelinegro.
Eto: pero si tienen miedo, yo me encargaré.
Todas: ¿eh?
Miku: te refieres a...
Eto: así es. Yo dormiré con Ken-kun.
Por alguna razón, tres de las cinco quintillizas se molestaron al escuchar eso, pero rápidamente se calmaron. Ellas no podían hacer nada, ya que la peliverde las superaba en casi todo. Además de poseer más experiencia con el pelinegro que ellas.
Nino: ¿y no te ha hecho nada? ¿No te ha tocado o algo más?
Eto: ¿de qué hablas, Nino? Dormir con Ken-kun, es como dormir con una peluche, ¡se siente igual de bien!*sonriendo*
Nino: al parecer confías demasiado en él.
Eto: la confianza es una parte fundamental en una amistad. Ken-kun es de las personas en las que puedes confiar con seguridad, y no es un pervertido como dices, Nino.
Nino: si tú lo dices...
Itsuki: ¿y cómo es eso de que han dormido juntos muchas veces?*levemente celosa*
Eto: cuando éramos niños, yo invitaba a dormir a Ken-kun a mi casa de vez en cuando. Nos la pasabamos bien juntos, incluso diría que era como mi hermano mayor, ya que siempre me defendía de todo. Incluso ahora, lo hace.*melancólica*
Yotsuba: ¿y nunca fueron algo más que amigos?
La pregunta de la pelinaranja llamó la atención de todas en el lugar. Inmediatamente la curiosidad las invadió y miraron a la peliverde, esperando una respuesta.
Eto: bueno... lo máximo que hemos hecho ha sido besarnos.*mirando al cielo*
Todas: ¡¿b-besarse?!
Eto:*asintió* sí. Por accidente lo hicimos cuando éramos niños, y por culpa de un compañero de clase nos besamos hace dos años.
Ante la respuesta, Miku apretó con fuerza su pecho al escuchar las palabras de Eto. Su corazón le dolía. Saber que tu amor ha besado a alguien antes que tú. Querer que esa persona a la que amas, te dé su primer beso. Eso ya no era posible para Miku.
Por otro lado, Itsuki había quedado sorprendida al igual que su hermana. Solo que esta no sabía que se habían besado dos veces. Mientras procesaba esa información, por su mente pasó el momento en que el peliengro y ella unieron sus labios por accidente. Itsuki llevó sus dedos a sus labios, estando con sus mejores mejillas sonrojadas.
Mientras tanto, Ichika sentía disgusto al oír eso, aunque no sabía el por qué. Así que solo lo dejó pasar.
Eto: bueno, me iré a dormir.*levantándose* Ustedes también deberían hacerlo. No querrán tener un resfriado en el campamento, ¿verdad?*bromeó*
Sin nada más que agregar, Eto se fue del lugar, dejando solas a las quintillizas. Las hermanas estaban sorprendidas por lo que la peliverde había dicho.
Nino: bueno, Yoshimura-san dormirá con él. Así que podemos estar tranquilas de que no nos hará nada.
Itsuki: sí. Lo que tú digas.*mirando hacia el cielo nocturno*
~Mientras tanto con Eto~
La peliverde había llegado a la habitación donde dormirían esa noche. La peliverde giró la perilla de la puerta y entró, encontrándose con una habitación oscura.
Eto: (parece que ya se acostó...)
Continuando con su camino, Eto entró en la habitación donde estaban los futones, y en el último en el fondo a la izquierda, se encontraba el pelinegro mirando su celular.
Eto: parece que ya estás listo para dormir.*llamando la atención del chico*
Ken: sí, así es. Solo te estaba esperando.*mirándola* ¿Cómo dormiremos si solo caben seis futones en el suelo? Alguien tendrá que dormir junto a otro.
Eto: yo dormiré contigo. Claro... Si no te importa, je, je...*con una sonrisa de tristeza*
Ken: no me importa en lo absoluto.*haciendo un espacio en su futón* Ven.
La sonrisa de tristeza de la peliverde cambió a una de felicidad absoluta y se apresuró a acostarse con su amado.
Eto: gracias.*acostándose a su lado* ¿No te relaja estar así?*mirando al techo*
Ken: ¿así? ¿A qué te refieres?*viéndola*
Eto: es que dormir contigo me trae recuerdos de nuestra niñez. Cuando tú ibas a dormir a mi casa.
Ken: mmm... Ya veo.*sonriendo levemente* Eran buenos tiempos.*mirando al techo, al igual que la peliverde* Aún no sé me olvida cuando me abrazaste dormida y te hiciste pis en mí.*riendo un poco*
Eto: ¡no tenías que recordarme eso!*avergonzada*
Ken: tú eres quién inició recordándome eso.*con burla por la actitud de Eto* Aunque ahora que me pongo a pensar, no has cambiado casi nada en estos diez años. Sigues siendo aquella niña que conocí.*melancólico*
Eto: ¿y eso te gusta o no?
Ken: sino me gustara, nunca te hubiera besado en primer lugar.
Eto: ¡...!*se sonroja* eso significa que...
Ken: no te hagas ilusiones, pervertida verde.
Eto: moo~*haciendo un puchero* Eres malo, Ken-kun.
Ken: bueno, basta de charla. Vamos a dormir.*dándole la espalda* Hasta mañana, Eto.
Eto: hasta mañana, Ken-kun.*haciendo lo mismo que el chico* (así que aún soy esa niña tonta...)*pensó con tristeza* (Ken-kun...)
~De vuelta con las quintillizas~
Las hermanas Nakano salían de las aguas termales y se dirigían a su cuarto a dormir. Habían pasado treinta minutos desde que Eto había regresado a la habitación, así que ya deberían estar dormidos.
Las chicas entraron por la puerta y se dirigieron a dormir.
Ichika: ¿creen que ya estén dormidos?
Miku: es probable.
Nino: yo creo que Yoshimura-san nos engañó a las cinco. No creo que ella haya dormido con él.*suspiró* Bueno, no hay problema en que duermas con él, ¿verdad, Itsuki?
Itsuki: ¡Nino, no digas eso!*sonrojada* Además, ¿qué te hace pensar que no lo hizo, eh?
Nino: intuición femenina.
Yotsuba: ehhh.... Chicas, deberían ver esto.
Yotsuba quién se encontraba al frente de la puerta abierta de la habitación, con una cara de sorpresa llamó a sus demás hermanas. El resto de las quintillizas se acercaron a ella y preguntaron...
Miku: ¿qué sucede, Yotsuba?
Yotsuba: ....*apuntando al frente*
Las hermanas siguieron con su vista a lo que apuntaba la pelinaranja. Quedando sorprendidas de ver eso.
En el fondo de la habitación, al lado izquierdo, se encontraban Ken y Eto dormidos en un solo futón. Pero eso no era lo que las sorprendía de sobremanera, sino que el pelinegro abrazaba de forma posesiva a la peliverde. Ocasionando que se vieran como una pareja.
Nino: saben, a veces me cuestiono si no son pareja.*sorprendida*
Ichika/Miku/ Itsuki: (Ken-kun/Ken/Kaneki-kun...)*pensaron mientras llevaban su mano hacia su pecho*
Yotsuba: bueno... Creo que deberíamos hacer lo mismo que ellos.
Ichika: s-sí, tienes razón. Bueno, chicas, a dormir.
Tras terminar de mirarlos, las quintillizas se dispusieron a dormir. Aunque habían tres de ellas, que disimuladamente miraban al pelinegro y la peliverde. Ichika, Miku y Itsuki, observaban como el pelinegro atraía el cuerpo de la peliverde más hacia el suyo.
Las tres chicas, solo podían ver eso. Al parecer, Eto estaba disfrutando el dormir con él peliengro, ya que en un momento dibujó una sonrisa en su rostro dormido.
Con algo de dolor en sus corazones, las tres hermanas enamoradas del pelinegro, precedieron a dormir; dejando caer una lágrima antes de hacerlo.
~Al día siguiente~
La molesta luz del sol, entraba por las ventanas del hotel, iluminando las habitaciones y despertando a quiénes estaban en ella.
En la habitación de las quintillizas, se encontraban cada una de ellas regadas por doquier. Al parecer se habían estado moviendo toda la noche.
Actualmente, Ichika se encontraba despertando de su sueño. Por culpa del sol, sus ojos se empezaron a abrir, encontrándose con una gran sorpresa.
Ken Kaneki, su tutor, amigo e interés romántico, se encontraba cerca de ella. Ichika se ruborizó al verlo y rápidamente se separó y levantó.
Ichika: ¿Ken-kun? ¿Por qué?*sonrojada*
La pelirosa de cabello corto pudo notar algo que sin saber por qué, la molestó. Ken no solo estaba durmiendo con Eto, sino que Miku se encontraba encima de el peliengro, utilizándolo como cama.
No sabía por qué, pero en ese momento solo quería apartar a su hermana de el chico. Y así lo hizo, Ichika procedió a despertar a la castaña.
Ichika: Miku. Miku.*moviéndola y susurrando*
Miku: mmm... ¿Qué sucede?*abriendo los ojos*
Ichika: baja la voz. Es hora de despertar.
Miku: ¿hmn? ¿Por qué?
Ichika: mira hacia abajo.
La castaña hizo caso a lo que su hermana le había dicho. En ese momento, la cara de la castaña se volvió tan roja como un tomate, y de sus orejas estaba saliendo vapor. Sus manos se encontraban tocando el pecho del pelinegro, ocasionando que se mareara un poco; parecía que en cualquier momento se iba a desmayar.
Ichika: oye, oye. Cuidado.*sosteniéndola*
Miku: dormí con Ken... Dormí con Ken...*decía de manera boba*
Ichika: bueno es hora de despertar a todas...
Itsuki: ¡buenos días!*entrando* Es hora de...*viendo a sus hermanas*
Silencio incómodo...
Nadie sabía cómo reaccionar a eso. Delante de la pelirroja, estaba una Miku aún encima del pelinegro, y una Ichika tratando de bajarla de ahí.
Itsuki: ¡¿q-q-qué están haciendo?!*sonrojada, celosa y dolida*
Miku: ¡no es lo que parece, Itsuki!*avergonzada*
Ken:*abriendo los ojos* mm... ¿Qué haces encima de mí, Miku?*sorprendido*
Eto:*despertando* ¿huh? Por qué tanto... ¡¡Ehh!!*viendo a la castaña* ¿Qué crees que haces? ¡Bájate de ahí!*llendo a apartarla*
Yotsuba:*despertando* ¿quién se murió?*viendo lo que pasaba* ¡Oh! ¡Miku fue la agresiva en esta ocasión, increíble!*impresionada*
Nino:*despertando* ¡ah! ¡Callense de una buena vez, aún quiero dormir! ¿Eh?*observando el panorama* ¡Maldito, ¿qué crees que le haces a Miku?!*abalanzándose sobre ellos*
Y así, comenzó la mañana de aquel inusual grupo de amigos. Con una Nino enojada con Ken, una Eto, Itsuki y Ichika intentando bajar a Miku del pelinegro. Y una Yotsuba intentando calmar a su hermana Nino.
Mientras que las quintillizas intentaban solucionar el malentendido/asesinar al pelinegro. De la puerta que daba a los pasillos del hotel, tres profesores entraron a la habitación. Encontrándose con una gran sorpresa.
Profesor 1: ¿qué está sucedien aquí?*preguntó al ver todo lo que estaba pasando*
Profesor 2: un momento. ¿Kaneki? ¿Yoshimura? ¿Y las Nakano? ¿Qué hacen?
Ken: oh, sensei. Buenos días, ¿en que le puedo ayudar?*preguntó, mientras era asfixiado por Nino*
Eto: ¿qué sucede, sensei?*preguntó, mientras alejaba a Miku de Ken*
Profesor 3: bueno... ¿Podrían explicarnos por favor el por qué están así?
Nino: ¿oh, esto, sensei? Esto es un problemita que ya estamos solucionando, ¿verdad, Kaneki?*dijo mientras seguía asfixiando a Ken*
Ken: sí, sensei. Es solo un malentendido que ya estamos a punto de resolver.*respondió con una leve sonrisa, mientras luchaba por su vida*
Profesor 1: bueno... Si ustedes lo dicen.
Yotsuba: a propósito, ¿qué están haciendo ustedes aquí?*preguntó, mientras intentaba separar a Nino de Ken*
Profesor 3: ¿cómo? ¿No lo soben?
Todos: ¿huh?*deteniéndose*
~Time skip~
Se podían ver a vários autobuses sabiendo una pequeña colina rodeada por la gran cantidad de nieve que había dejado la tormenta de anoche. En uno de ellos, se podía ver a Ken y Itsuki sentados en sus respectivos puestos en el bus.
Ken:*suspiró* así que todos estábamos en el mismo hotel.*dijo mientras se sobaba el cuello*
Itsuki: sí. Al parecer se quedaron a pasar la noche como nosotros, pro culpa de la tormenta de nieve.
Ken: qué casualidad...
Itsuki: oye, Kaneki-kun.*apartando su mirada* Anoche, Yoshimura-san dijo que habías pasado muchas noches con ella, en la misma cama. Dime, tú y ella... ¿han hecho algo más?
Ken: ¿a qué viene esa pregunta?*confundido*
Itsuki:*suspiró, para después darle una sonrisa* no, no es nada, olvídalo.*apoyando su cabeza en el hombro*
Ken: ¿Itsuki?
Itsuki: solo déjame estar así unos momentos más.*cerrando los ojos*
Ken: bueno... Está bien... Supongo.*mirando hacia la ventana del autobús*
Itsuki: (ahora estoy más segura de lo que siento, Kaneki-kun. Yo te amo. Y desde este momento... ¡pelearé por tu amor!)*juntando su mano con la del pelinegro*
(Próximo capítulo: La prueba de valor)
Sí, un gran cambio.
Soyonara....
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