Un año nuevo
~Días más tarde/Metro de Tokio~
Se podía ver a Ken, Hide y Eto esperando en el metro. Hoy era el día que las quintillizas volvían, y mañana era año nuevo, así que podría pasar algo de tiempo juntos.
El trío de amigos se encontraba hablando entre sí, y escuchando la historia de Hide...
Hide: les digo la verdad, había algo en ese zoológico. ¡No estoy loco!*seguro*
Eto: sí, claro... Ya sabía que yo que terminarías asustado.*mirándolo con decepción* La próxima vez busca mensajes subliminales en Hello Kity.
Hide: ¡digo la verdad! Sólo espera a que Nao termine de ver lo que grabamos, así me creerán.
Eto: si eso llega a ser cierto, te regalo 3200 protogemas en Genshin Impact.*estirando su dedo meñique*
Hide: acepto.*estrechando su meñique con el de ella*
Eto: ¡y no quiero que hagas ninguna edición en el vídeo!
Hide: ¡no lo necesito!
Y mientras los dos discutían, Ken se encontraba callado mirando al suelo; recordando lo que pasó en el zoológico con Kurona y Nashiro. Todo salió bien, ¿verdad?
Bueno... todo salió bien para Ken, en realidad. Porque aunque ellas hayan dicho eso, él sabía que les iba a doler cada vez que él se besara con cualquiera de sus novias, ya sea Eto, Touka o Itsuki. Sabía que iba a estar deprimidas, aunque lo iban a ocultar. Sabía que iban a llorar, aunque lo iban a ocultar...
Culpa. Era el sentimiento que pesaba en Ken. Culpable de su dolor, culpable de su sufrimiento...
Pero de cualquier forma haría su mejor intento por verlas sonreír de verdad. Y no esbozar una falsa sonrisa...
Eto: Ken-kun.
Ken: ¿huh?
Eto: quién crees que va a ganar? ¿El hablador de Hide o...
Hide: ...la pervertida de Eto?*finalizó*
Eto: ¿cómo me dijiste?*molesta*
Hide: per-ver-ti-da.*molesto*
Ken: ustedes sí que son molestos.*mirándolos con una mirada fría* Cállense.
Hide/Eto: sí. Lo sentimos.
Ken solo miró de nuevo al frente mientras soltaba un suspiro. En ese momento, un tren se detuvo delante de ellos. Las puertas de abrieron, y de ellas salieron las chicas que andaban esperando.
Mirándolas con una sonrisa, Ken se acercó a ellas, quiénes lo miraron con un sonrisa de felicidad.
Ken: bienvenidas, chicas.*sonriéndole*
Quintillizas: ¡Ken-kun/Ken/Kaneki-san!
De un rápido movimiento, todas ellas se abalanzaron sobre el pelinegro, abrazándolo con fuerza, mientras sonreían de felicidad.
Estando en el suelo, Ken sonrió levemente, para después abrazarlas.
Las personas que pasaban por ahí pusieron la mirada sobre las cinco chicas que se encontraban en le piso abrazando al pelinegro. Muchos chicos jóvenes sintieron celos del pelinegro, y deseaban que fueran ellos quienes estuvieran en el lugar del chico de los ojos grises.
Ken: chicas, ¿podrían levantarse?
Al escucharlo, las hermanas se colocaron de pie y ayudaron al chico a colocarse de pie.
Yotsuba: lo siento, Kaneki-san. Pero es que hace mucho que no te veíamos.*sonriéndole*
Ken: sólo fueron dos semanas.
Itsuki: para nosotras fueron meses.*queriendo besarlo*
Ichika: ¿qué cuentas, Ken-kun? ¿No ha pasado nada nuevo en nuestra ausencia?
Ken:*suspiró* ni te lo imaginas. Pasaron muchas cosas.*mirándolas* Pero veo que sí hubo algunos cambios en ustedes.*sonriendo levemente*
La mirada de Ken se enfocó en una de las cinco hermanas, más específicamente a Nino. ¿Y cómo no hacerlo? Si ahora había un cambio que a cualquiera sorprendería. La mirada del pelinegro y la de la pelirosa se encontraron, causando que la segunda hermana le sonreira, mientras dejaba ver su nuevo corte de cabello.
Nino: hola, Ken. ¿Cómo has estado?
Ken: bien, ¿y tú? Veo que te has cortado el cabello. ¿A qué se debe el cambio?
Nino: eh... Bueno, es que...*nerviosa* perdí una apuesta contra mi tía y mis hermanas, y me cortaron el cabello por eso.
Yotsuba: ¡y fue divertido hacerlo!*riendo un poco*
Ichika: incluso grabamos un vídeo cuando lo hacíamos. Aunque puede que te molesten los llantos de Nino.*sonriéndole*
Nino: ¡¡chicas!!*avergonzada*
Ken: pasa el vídeo.
Nino: ¡¡Ken!!*mirándolo*
Ken: tranquila. Solo lo veré y reiré un rato.
Nino: p-pero...
Ken: ¿por qué te avergüenzas? Te ves muy bien así.
Tras aquel comentario, la pelirosa se sorprendió y sonrojó al escucharlo. Mientras que las demás hermanas y Eto comenzaron sentir algo de celos...
Nino: ¿e-en serio crees eso?*jugando con su cabello de manera tímida*
Ken: sí. De hecho, prefiero mil veces este estilo que el anterior.
Nino: ¡y-ya veo!*volteando rápidamente para evitar que viera su sonrojo*
Mientras que pasaba eso, las hermanas miraban la escena con celos. Siendo Itsuki la que más estaba celosa al ver eso, ya que no era la primera vez que Ken y Nino actuaban de esa forma en su presencia. ¿Quizás su novio estaba empezando a genera sentimientos amorosos hacía su hermana?
No obstante, y antes de que pudiera sacar una conclusión errónea, alguien la tomó del hombro, causando que la pelirroja mirara detrás de ella. Ocasionando que una sonrisa de felicidad se presentara en su rostro.
Eto:*alzando sus brazos* ¡¡Itsuki!!
Itsuki:*alzando sus brazos* ¡¡Eto!!
Ambas amigas se dieron un gran abrazo, mientras saltaban de la felicidad de verse otra vez. Mientras eso pasaba, Hide se encontraba solo atrás de todas ellas, observando como las demás quintillizas intentaban llamar la atención del pelinegro.
Hide: aquí sobro.*con cara chibi*
~Time skip/Casa de las Nakano~
Se podía ver a las cinco hermanas sentadas en el sofá. Habían pasado todo el medio día desempacando sus maletas, siendo ayudadas por el pelinegro quién se ofreció a ayudarlas.
Actualmente las cinco se encontraban charlando con Ken, poniéndose al día en lo que habían hecho estas dos semanas que no se habían visto. Y aunque se llamaban cada día, en realidad sólo era para preguntarte todo lo que había pasado, y cuando jugaban por las tardes no tocaban mucho el tema. Pero ahora sí podían enterarse de todo lo que pasó.
Ken: entonces, ¿pasó algo interesante en estas semanas?
Ichika: pocas cosas interesantes. La mayor parte del tiempo nos la pasamos jugando con nuestra tía, pocas veces salíamos al exterior.
Itsuki: si tuviéramos que destacar algo sería que nos encontramos con viejos conocidos.
Yotsuba: sí. Yo me encontré con Ayane-chan, una amiga de la infancia.*sonriendo* Nos divertimos mucho...
Nino: yo solo cociné, y le enseñé algo a Miku.
Ken: ¿en serio?*mirando a Miku*
Miku: algo nuevo aprendí.
Itsuki: yo solo hablé con unas viejas amigas y ya. Nada más.
Ichika: sí, claro. ¿Y dónde está la parte de Goki?*pícara*
Ken: ¿Goki?*intrigado*
Itsuki: ¡Ichika!*sonrojada e intentando callarla, pero fue apartada por ella*
Ichika: es el amiguito de la infancia de Itsuki. Y quizás, el primer amor de Itsuki.*burlona*
Ken: ah, ¿sí?*prestando más atención*
Nino: ¡sí! Cuando éramos niñas, Itsuki y Goki pasaban la mayor parte del tiempo juntos. Y cuando llegamos, hablaron durante horas solos, ¿verdad, Itsuki?*burlona*
Miku: seguramente aún tienen algo secreto que no quieren decir.*riendo un poco*
Yotsuba: ¡y se ven tan tiernos juntos!
Itsuki: ¡chicas, ya basta!*avergonzada, nerviosa, preocupada*
Ken: ¿me podrían decir más?*mirando a las demás hermanas* Estoy interesado en ellos.
Ante la pregunta, las demás hermanas comenzaron a contarle todo sobre Goki y Itsuki. Riéndose al contar las anécdotas que ellas recordaban. Todo era visto por una pelirroja puesta en posición fetal, esperando a que todo eso pasara. La mirada de la última quintilliza se enfocó en una sola persona: su novio. Quién también la miró. No obstante, esa mirada era diferente. No era una mirad como la que se dedicaban, no. Era misma mirada que él le dedicaba hace meses, cuando apenas se habían conocido. Una mirada fría y sin emociones.
Ken apartó la mirada de la pelirroja y miró a la pelirosa de cabello corto, quién era la que estaba contando su anécdota. Itsuki se entristeció un poco por eso, quiera ir y abrazarlo; decirle que no era lo que pensaba. Quizás lo podría hacer más tarde...
Ichika: hubieras visto la cara de esos dos cuando estaban cerca el uno del otro. ¡Se veían tan lindos! Me pregunto si serán pareja...*pensativa*
Itsuki: ¡no somos pareja!*alzando la voz de repente*
Nino: sí, sigue engañándote a ti misma. Sabemos que ambos terminarán juntos.*riéndose de su hermana*
Itsuki: ¡que no lo somos!*gritó, esta vez un poco enojada*
Las hermanas siguieron riéndose de ella, causando que ella se enojara más. Pero al ver el rostro de novio, Itsuki se sorprendió un poco, ya que la expresión del pelinegro reflejaba leve tristeza.
En ese instante, la pelirroja quiso ir a aclararle todo a Ken, pero aún no era el momento, ¿no? Aún era muy pronto para anunciar su noviazgo.
Ichika: bien, ya fue suficiente de reírnos.*levantándose del sofá* Ken-kun, necesito acomodar las maletas en la parte de arriba del clóset. ¿Me ayudas?*acercándose a ella*
Ken: eh... Claro...
Ichika: ¡bien!*tomándolo de la mano* ¡Vamos!
Ante la mirada atónita de las demás hermanas que veían como Ichika llevaba de la mano al pelinegro a su habitación. Todas se intentaron quejar con la pelirosa, pero no pudieron ya que ambos ya habían entrado a la habitación de la hermana mayor. Dejando a todas celosas.
Itsuki: (Ken-kun...)*pensó con leve tristeza*
~En la habitación de Ichika~
Ken: bien, ¿cómo la subiré?*mirando la maleta*
Ichika: eres más alto que yo. Te las ingeniarás.*apoyándose en la puerta*
Mientras que la pelirosa se apoyaba en la puerta, presionó el botón del seguro con sutileza para no alertar al pelinegro.
Ken: osea, ¿me trajiste aquí para que haga magia y suba la maleta?*mirando la altura del clóset* Es más alto que yo.
Ichika: je, je, je...*acercándose a él* Algo así.*sonriéndole* ¿Tienes algún plan?
Ken: sí. Súbete en mi espalda y la colocas arriba.*arrodillándose como un perro* Sube.
Ichika: está bien. ¡Pero ni se te ocurra decir que peso!
Ken: no te preocupes.
Dicho eso, Ichika procedió a tomar la maleta y a subir en la espalda del pelinegro. Quién se quejó un poco al sentir el peso de Ichika. Logrando colocar la maleta en su sitio, Ichika procedió a bajar de la espalda del pelinegro.
Ichika: uff... Gracias por ser mi escalera, Ken-kun.*bromeó*
Ken: de nada.*levantándose* Si eso es todo me voy.*yendo a la salida*
Ichika: ¡espera!*tratando de que no se vaya*
Ken: ¿huh?*deteniéndose*
Ichika:*suspiró* en realidad, te traje aquí porque quería hablar contigo en privado.*sentándose en la cama*
Ken: ¿sobre qué?*curioso*
Ichika: sobre ti.
Ken: ¿hmn?*confundido*
Ichika: ¿te sientes bien?
Ken: ...¿a qué viene esa pregunta?
Ichika: pareces deprimido antes de que entrarámos a mi habitación. Por eso pregunto. ¿Hay algo que te suceda?
Ken: no es nada.*dando media vuelta* Todo está bien...
Ichika: mentira. Eso es lo que siempre dices cuando no lo estás.*declaró*
Ken: ¿eh?*volteando a verla*
Ichika: siempre que te encuentras mal o te pasa algo dices lo mismo: "no te preocupes, todo está bien", "no es nada", o "¿de qué estás hablando?".*cruzándose de brazos* Si nos ocultas las cosas, ¿cómo pretendes que te ayudemos?
Ken: no molestando, sería una buena opción para iniciar.
Ichika: pero he ahí el punto. No nos dices nada, ni siquiera porque somos tus amigas.*levantándose y caminando hacia él* ¿Es que...*estando al frente de él* no confías en nosotras?
Ken: no es eso. Es sólo que es problema mío lo que me está pasando ahora.
Ichika: ¡ajá!*apuntándolo con su dedo* ¡Así que sí tienes algo!*sonriendo de forma burlona*
Ken:*suspiró* (mierda...)*pensó* Sí. Está bien, tengo algo, ¿estás feliz? Pero es algo que puedo resolver fácilmente. No necesito que ninguna de ustedes me ayude, ¿okey?*levemente enojado*
Ichika: cielos...*sorprendida* No creí que te molestarías.*bajando un poco la cabeza* Sólo trataba de ayudar.
Ken: Ichika...*suspiró* Lo siento. Me dejé llevar. No debí hablarte así.*tomándola de la mano* Es sólo que... estaba un poco frustrado por una cosa.
Ichika: somos amigos, ¿cierto? Puedo ayudarte. Aunque sea un poco...
Ken: está bien. Te diré algo, pero debes guardar silencio.
~Mientras tanto con las demás hermanas~
Las cuatro quintillizas que se encontraban sentadas aún en el sofá, pero mientras que Nino, Miku y Yotsuba hablaban entre sí, Itsuki se dedicaba a guardar silencio y a estar más metida en sus pensamientos. Los cuales solo se enfocaban en una sola persona: Ken.
No hacia falta ser un genio para deducir lo que Ken había expresando en aquel choque de miradas con la pelirroja. Estaba celosos... Y dolido. No quería causarle más dolor de lo que ya había pasado en su anterior relación. Las palabras que les dijo Eto resonaron en su cabeza...
"La única razón por la cual Ken a decidido tener una relación con nosotras, a parte de que ama, es porque quiere dejar atrás la herida que le dejó Rize. ¿Sabes que Ken-kun no era así antes de que Rize le terminara? Él solía ser alguien distinto... Alguien a quien extrañé por mucho tiempo. Por favor, no le hagas más daño del que recibió."
Palabras que al recordarlas hacían que una gran culpa cayera en sus hombros. No quería herirlo de ninguna forma, pero por culpa de sus hermanas lo había hecho. Quería hablar con él ahora mismo, pero se encontraba con Ichika en su habitación.
Por cierto... ¿Qué estarán haciendo en su habitación?
Fue la pregunta que se le cruzó por la mente a la pelirroja. Quién de manera inmediata miró con celos la puerta de la habitación de su hermana mayor, imaginándose escenarios en las que el pelinegro y la pelirosa se encontraban solo y con poco ropa.
Nino: ¡Itsuki!*llamándola*
Itsuki: ¿eh?*mirándola* ¿Qué?
Nino: ¿quieres panqueques? Haré unos cuantos.
Itsuki: ah, sí. Segura.
Yotsuba: ¿qué tanto hacen Ichika y Kaneki-san ahí dentro?*mirando con duda la puerta de la habitación de Ichika*
Miku: ya llevan 15 minutos ahí dentro. Y no creo que para colocar una maleta en su lugar se necesite tanto tiempo.*dejando salir un poco de sus celos*
Itsuki: es cierto. Iré a ver.
Rápidamente la pelirroja se puso de pie y fue hacia la habitación de su hermana, siendo seguido por el resto. Al llegar, Itsuki intentó abrir la puerta, pero se dio cuenta de que había seguro. Esto alertó de sobremanera a las quintillizas, quiénes imaginaron lo que podían estar haciendo ellos dos.
Itsuki:*golpeando la puerta* ¡Ichika! ¡Abre ahora mismo!
Nino: ¡¿qué tanto hacen ustedes dos ahí dentro?!
No obstante, la puerta fue abierta por una Ichika distinta a la que las hermanas estaban acostumbradas a ver. En lugar de tener una sonrisa pícara, burlona. Lo que expresaba ers tristeza. Tristeza que era liberada en forma de lágrimas, sorprendiendo a las demás hermanas, quiénes se preguntaban el motivo por el que esta lloraba.
Miku: ¡¿estás bien?!
Yotsuba: ¡¿por qué lloras?!
Nino: ¡¿sucedió algo malo ahí dentro?!
Itsuki: ¡¿te encuentras bien?!
Ante las preguntas de sus hermanas, quiénes buscaban la razón de que estuviera llorando, Ichika respondió con una sonrisa que era acompañada de sus lágrimas.
Ichika: no es nada. Ken-kun y yo estábamos viendo un vídeo triste...
Al terminar de decir esa mentira, la mirada de la primera quintilliza se enfocó en el pelinegro que se encontraba mirando por la ventana afuera del departamento. Por primera vez... Ken se había sincerado con ella...
~Time skip~
Sentadas en la mesa de la sala, esperando la comida de Nino, las hermanas intentaban motivar un poco a Ichika, quién aún se encontraba deprimida. Por otro lado, Ken se encontraba ayudando a Nino a terminar los panqueques; mientras apartaba toda emoción negativa que había tenido desde que habló con Ichika.
Normalmente nunca se abría con nadie. Ni siquiera con sus dos mejores amigos, sólo cuando en verdad se sentía muy mal. Pero, entonces, ¿por qué se sinceró con Ichika? No sabía la respuesta, ni tampoco quería saberla por ahora. Dejando a un lado aquel vago pensamiento, el pelinegro procedió a derramar la última masa que quedaba en el sartén.
Nino: listo. Ese sería el último, Ken.*sonriéndole* Tienes talento como chef.
Ken: sólo vertí la masa en el sartén. ¿Eso es considerarse un chef?
Nino:*suspiró* (está más serio de lo normal. Le habrá pasado algo)*mirándolo con intriga*
La mirada de la segunda quintilliza perturbó un poco al pelinegro, quién le devolvió el gesto de la misma manera.
Ken: ¿sucede algo?
Nino: n-no. No es nada.*mirando al frente* O-Oye, Ken.
Ken: ¿sí?
Nino: este... Hoy es 29 de diciembre, ¿cierto?
Ken: sí. Mañana es año nuevo.
Nino: ¿quisieras pasar el año nuevo con nosotras? Iremos a ver los fuegos artificiales.
Al proponerle eso, Nino se puso nerviosa al no saber si Ken iba a aceptar estar con ellas. Pero se sorprendió aún más y se sonrojó al sentir la mano del pelinegro acariciando su cabeza, revolviendo su cabello. Para al final, mostrar una leve sonrisa como era costumbre en él.
Ken: pero no se pierdan esta vez, ¿sí?
Ante la respuesta positiva del pelinegro, la segunda quintilliza lo abrazó inconscientemente. Afortunadamente las demás hermanas estaban concentradas en Ichika, lo cual permitió que el abrazo se llevara a cabo.
La felicidad de Nino era expresaba en aquel abrazo, el cual fue levemente correspondido por Ken. Quién le dio un leve abrazo antes de separarla.
Nino: te veo mañana.
~Al día siguiente~
Se podía ver a las quintillizas sentadas en el sofá de su casa, preparándose para salir y encontrarse en la zona acordada con Ken y compañía. Las quintillizas vestían sus respectivos yukatas, iguales a los que llevaron hace un tiempo, cuando fueron a ver los fuegos artificiales. Hoy, nuevamente los verían, pero de una forma distinta. Y lo pasarían al lado de sus amigos. Lastimosamente, su padre tenía otros asuntos que atender, así que no podría estar con ellas en esta fecha tan especial. Sin embargo, las quintillizas no se encontraban tristes por eso como el año pasado, sino que sonreían porque iban a pasar esta fecha con sus amigos, y Ken.
Estando listas, las hermanas salieron rápidamente de su departamento, yendo a la parte del hotel donde las esperaba el chofer. Entraron rápidamente al vehículo, y en cuestion de segundos ya se encontraban dirigiéndose al lugar acordado. Una zona algo diferente a lo que estaban acostumbradas.
Eran las 4 de la tarde; el viaje hasta ese lugar tomaría 1 hora. La emoción era mostrada sin miedo en el rostro de cada una de las hermanas. Hoy, iba a ser un día especial...
~Mientras tanto con Ken~
El pelinegro se encontraba mirando se en un espejo. Recordando a la chica que le había regalado ese atuendo el día que fueron a aquella tienda de ropa. Sin duda, Miku poseía un gran gusto por la ropa oriental clásica. Aunque tampoco era tan antigua, era lo justo y lo perfecto para él.
Sonrió nuevamente al verse y a recordar aquella vez.
Touka: parece que te gusta mucho ese regalo. Estoy un poco celosa.*habló, apoyada en la pared de la habitación, mirándolo con una sonrisa*
Ken: tu también te ves muy bien, Touka-chan.*mirándola con una leve sonrisa*
Al escuchar eso, la peliazul se sonrojó un poco. Apartó un poco la mirada y empezó a jugar con su cabello de manera tímida.
Touka: ¿en serio?
Ken: ¿por qué mentiría?*manteniendo aquella sonrisa* En verdad, el kimono te quedas muy bien.*acercándose a ella* Me dan ganas...*arrinconándola en la pared y tomándola de la mejilla izquierda* ...de besarte.*besándola*
Dándole un corto beso, Ken logró hacer que Touka se sonrojara por completo, y se escondiera en el pecho del pelinegro, evintando ser vista.
Ken: sí. Te ves muy hermosa. Y más cuando te sonrojas.*sobando la mejilla*
Touka: Ken-nii-chan...*volviéndolo a besar*
Nuevamente, los dos se fundieron en un apasionado beso. Tomándola del cuello acercándalo a ella, y él subiéndola a la mesita de noche que tenía en su habitación; ambos continuaron besándose con más pasión, dejando que la lujuria se apoderara de ellos.
Eto: ¿podrían echarle agua a su calentura? Tenemos que ir a un lugar, ¿saben?
Hide/Nao: jóvenes calenturientos.*dijeron al unisono*
Al escuchar la voz de sus amigos, los dos dejaron de besarse y comenzaron a bajar la cabeza poco a poco, mientras un tinte rojo aparecía en sus rostros.
Ken/Touka: sí...
Los dos miraron a los demás, notando los kimonos que llevaban para esta ocasión. Eto llevaba un kimono blanco, con algunos detalles en amarillo, rosa y negro; y adornado con numerosas flores. Las cuales le hacían ver más hermosa de lo que ya era.
Por otro lado, Nao llevaba un kimono gris que cambiaba con su cabello y sus ojos. Y al igual que con Eto, la hacía ver más hermosa de lo que ya era.
Y por último, Hide... Pues, el vestía de una forma algo peculiar. Puesto que llevaba un sombrero de samurai moderno, acompañado por un kimono totalmente negro y un paraguas en su cintura, imitando a una katana.
Ken: ¿por qué estás vestido así, Hide?
Hide: porque... ¡quisiera desafiar al admin!
Todos: ¡jajajajajajaja!
~Time skip~
Por fin habían llegado, después de una hora de viaje, al fin se encontraban en el lugar acordado por las quintillizas. Los cinco amigos bajaron del auto y miraron el lugar. Una linda casa de madera; con un balcón que daba directamente con la ciudad, por lo cual los fuegos artificiales se podrían ver fácilmente. Detrás de ella se encontraba un hermoso bosque, del cual salían múltiples sonidos de pájaros que se iban a refugiar antes de que cayera la noche.
Sin duda, un buen lugar para pasar el último día del año. Los chicos caminaron un poco hasta la puerta, donde Hide golpeó un par de veces. Luego de unos segundos, una castaña conocida por todos abrió la puerta, recibiendo al grupo de amigos y quedando sorprendida al ver que todos traían un kimono como ellas. Pero su mirada fue enfocada en un pelinegro que llevaba aquel kimono que le había regalado hace meses atrás.
Un sonrojo se hizo presente en su rostro, mientras observaba lo bien que veía Ken usando aquel kimono.
Ken: hola, Miku.*saludó con una leve sonrisa*
Miku: lo usaste...
Ken: sí. Era un momento especial, y me lo dio una persona especial. Dime, ¿qué tal me veo?
Miku: m-muy bien. Te ves muy bien.*mirando a otro lado por momentos*
Ken: gracias. Tú tampoco estás nada mal.
Miku: n-no es cierto.*desviando la mirada* En fin, pasen.*haciéndose a un lado*
Todos empezaron a entrar a la casa, y mientras lo hacían, Ken sintió algo que lo perturbaba. Al girar, notó las miradas de celos que Touka y Eto le lanzaban. Como respuesta, Ken solo se limitó a sonreír de una manera nerviosa.
Al llegar, todos fueron recibidos por las quintillizas con alegría. No obstante, hubo un poco de incomodidad entre dos personas. Entre una pelirroja y un pelinegro.
Desde ayer no habían hablado, ni siquiera por llamada. Ken seguía teniendo sus dudas sobre lo que le dijeron sobre Goki, pero quería creer que Itsuki le fue fiel. No quería que lo mismo pasara dos veces.
Por el lado de Itsuki ella quería solucionar ese malentendido. Quería arreglar las cosas con su novio. Lo único malo, es que no había encontrado el momento para hacerlo. Desde que llegó de su viaje, ella no ha podido estar a solas con Ken. Ni ayer, ni hoy había podido. Pero, quizás podía aprovechar este día para poder aclarar las cosas...
~Time skip~
Eran las 9 de la noche, faltaban tres horas para que el año nuevo llegara y la emoción estaban en todos. Actualmente, los amigos se encontraban comer una deliciosa cena preparada por Nino, Eto, Touka y Ken.
Varios pescados fritos en un gran plato, varios tazones de arroz, carne de res asada, unos cuantos tazones de sopa de verduras y pollo; un gran pollo horneado en medio de la gran mesa. Como juego, un espectacular zumo de mora, endulzado con un poco de limón. Y, por último, un gran pastel de fresa al lado del pollo.
Todos se encontraban apunto de iniciar a comer. No obstante, alguno de ellos tendría que unas palabras antes de comer. Un agradecimiento.
¿Pero quién sería esa persona?
De repente, todas las miradas se enfocaron en el único chico de cabello negro.
Ken: ¿qué?*preguntó, levemente nervioso*
Ichika: Ken-kun, ¿quisieras ser tú quién diga las palabras
Ken: ¿eh? Yo no...*desviando un poco la mirada* ¿Por qué no hace alguien más?
Nino: no seas tímido, Ken. Nadie se va a burlar de ti.*sonriéndole*
Hide: vamos, Kaneki. Haz un discurso que nos conmueva el corazón.*riendo un poco*
Touka: lo harás bien.
Nao: es cierto. Todos queremos oírte.
Miku: vamos, Ken. No pierdes nada, ¿o sí?
Ken: no, pero...
Itsuki: yo pienso que serás capaz de hacerlo bien. Siempre haces todo bien.
Yotsuba: es cierto. Se te da bien hablar con las personas y ayudarlas, esto no debe de ser nada para ti.
Eto:*tomándolo del hombro* ¿te sientes apenado? Oohhh... Es la primera vez que te veo así en mucho tiempo.*burlona*
Ken: ¡hmp! No seas ridícula. No estoy apenado.*respiró hondo* Está bien.*poniéndose de pie y tomado su vaso*
Los demás se emocionaron al ver que el pelinegro aceptaron. Guardaron silencio y escucharon las palabras que Ken iba a decir.
Ken: yo... quisiera agradecerles a todos ustedes por haber estado conmigo este año.*levemente sonrojado* Gracias por haber estado para mí en este año. Eto, mi mejor amiga. Gracias por haber estado este año a mi lado. Por las veces que animaste y me diste fuerzas para seguir adelante. Sin ti, probablemente no sería el mismo.
Eto: Ken-kun.*conmovida*
Ken: Touka, mi otra mejor amiga. Eres muy especial para mí. Agradezco que fueras uno de los motivantes que tuve para seguir adelante. A pesar de todas nuestras discusiones o peleas, siempre te querré. Gracias, Touka-chan.*sonriéndole*
Touka: Ken-nii-chan...*sonrojada y conmovida*
Ken: Nao.*mirándola* A pesar de que no hemos hablado mucho, quiero expresarte mi más sinceros agradecimientos por haber llegado al corazón de Hide. Sé que puede ser un idiota a veces, pero es un buen chico.*sonriendo al recordar algunos momentos que pasó con el bicolor* Y gracias por haberme ayudado a mí también en varias ocasiones. Espero contar contigo para el síguiente año, cuñada.
Nao: ¡puedes contar conmigo!*alzando su pulgar con una sonrisa* Cuñadito.
Ken: Hide.*mirándolo* Mi hermano. Te agradezco por siempre estar a mi lado desde el primer día que nos conocimos. No puedo expresar con palabras lo que significas para mí, pero...*sonriendo levemente* te quiero, hermano.
Hide: tsk...*mirando a otro lado* Eso fue muy cursi...*ocultado sus ganas de llorar* ...hermano.*sonriendo levemente*
Ken: y...*mirando las quintillizas* ustedes. Creo que si no las hubiera conocido, quizás mi año hubiera sido igual de aburrido que los anteriores. Gracias por todo.
Quintillizas: Ken-kun/Ken/Kaneki-san.
Ken: a todos ustedes, ¡les deseo un feliz año nuevo!*alzando su vaso*
Todos: ¡¡sí!!*alzando sus vasos*
Ken: bien, ya hice mi espectáculo. Ahora no jodan más.*cambiando si sonrisa por su mirada seria y sentándose*
~Time skip~
El tiempo pasó rápido para ellos, amigos que se encontraban disfrutando aquel momento en lo que se podía llamar una pequeña fiesta que hacían. Música a alto volumen, bailes e idioteces. Lo único que faltaba era alcohol, pero aún eran menores de edad. Quizás para el próximo año traían una botella de vino o whisky.
Y mientras que los demás estaban dentro de la casa bailando, Ken se encontraban sentado en una de las sillas del patio trasero de la casa; descansando sus oídos de la música fuerte. Es cierto que disfrutaba las fiestas, pero a veces, hay que descansar un rato.
Y ahí estaba, sentado mientras miraba el bosque que se encontraba delante suyo, recordando aquella noche en la que él y Itsuki si hicieron pareja. Pero también recordó lo que dijeron sobre aquel chico llamado Goki, y su relación con Itsuki.
No lo conocía, pero sentía molestia al pensar en él hablando con Itsuki. ¿Esto era lo que llamaban celos? Por primera vez lo había sentido, y no le gustaba esa sensación. Quería creer que su relación con Itsuki podría funcionar. Quería creer que... lo mismo no se iba a repetir.
???: ¿qué haces aquí afuera?
Y como si la estuvieran llamando, la pelirroja en la que Ken estaba pensando se encontraba al lado de ella. Al mirarla, la incomodidad se manifestó de gran manera, evitando que pudieran verse por más de unos pocos segundos.
Evitando verse a los ojos, mantuvieron un silencio incómodo. Solo se podía escuchar la música de adentro...
Ken: ¿qué haces aquí?*rompiendo el silencio*
Itsuki: b-bueno... quería respirar un poco aire fresco. ¿Y tú?
Ken: lo mismo.
Itsuki: je, je, je... Qué coincidencia.*mirando al frente* Oye, Ken-kun.
Ken: ¿huh?
Itsuki: ¿quieres ir a un lugar... dónde podamos hablar?*mirándolo con nerviosismo*
Ken: ...*pensando un poco* Está bien.*levantándose* ¿Y si preguntan por nosotros?
Itsuki: Eto nos cubrirá hasta que volvamos.*empezando a caminar* Sígueme.
Rojo y negro empezaron a caminar hacia el bosque, buscando un lugar donde poder hablar. Avanzando unos cuantos metros dentro del bosque, encontraron un lugar apropiado para poder hablar.
Sentándose en el tronco de árbol caído. Estando solos y alejados, un suspiro salió de la boca de la pelirroja quién fue directo al grano.
Itsuki: quieres saber sobre mí y Goki, ¿cierto?
Ken: ¿quién es? ¿Qué relación tienen? ¿Te gusta?*dejando salir sus celos*
Itsuki:*riendo un poco* lo siento, es que se me hace gracioso que estés celoso.
Ken: responde.*serio*
Itsuki:*suspiró* Goki Hanayama fue mi primer amigo en toda mi vida. Pero eso ya te lo contaron mis hermanas. De hecho, te contaron casi toda nuestra vida juntos. Poco puedo decir.
Ken: ¿te gusta?
Itsuki: ¿te enojarás?
Ken: no...
Itsuki: hubo un tiempo en el que él me gustaba. Estaba enamorada de Goki. Incluso, quería casarme con él.
Ken: ya veo.*desviando la mirada*
Itsuki: Pero llegaste a mi vida, y cambiaste todo.*sonriendo levemente* Sin darme cuenta, me enamoré de ti. Y todo aquel sentimiento que sentía hacia Goki quedó atrás. Te di todo de mí, Ken-kun.*levantándose y acercándose a él* Mi primer beso, mi primera cita...*sentándose en las piernas del pelinegro* hasta te di mi cuerpo y mi alma.*tomándolo de las mejillas* No pongas esa cara, no me gusta.
La pelirroja levantó la mirada del pelinegro, dejando ver la tristeza que este tenía.
Ken: yo... no sé si creer lo que dices...
Itsuki: ¿huh? ¿Por qué?
Ken: hace tiempo... escuché unas palabras parecidas de alguien que decía amarme... Pero todo fue una mentira.*mirándola a los ojos* ¿Cómo puedo confiar en ti?
Itsuki: el corazón es donde se almacenan los sentimientos del ser humano.*tocando el pecho del pelinegro* Siente mucha felicidad, y dolor. Y pocas veces vuelve a ser el mismo. Pero yo... estoy segura que nunca te haría daño.*tomando la mano del pelinegro* Déjame mostrarte.
Y sin vacilar, la pelirroja colocó la mano del pelinegro en su seno izquierdo. Ken no tardó mucho en saber a qué se refería con esa acción.
Itsuki: ¿lo sientes?
Ken: late muy rápido...
Itsuki: desde aquella noche en el campamento hasta ahora, mi corazón nunca ha dejado de pertenecerte. Yo soy tuya, y solamente tuya. Y tú, aunque sé que no eres solamente mío, sé que hay un espacio en tu corazón que me pertenece. Te lo dije aquella vez y te lo diré ahora.*acercándose a los labios del pelinegro* Te amo.
(Reproducir)
Y mientras que el reloj marcaba las 11:20 de la noche, ambos se dieron su primer beso después de mucho tiempo. Separándose un poco, Itsuki le sonrió con calidez. A lo que Ken sonrió levemente, para después agarrar a la pelirroja de la cintura y volver a besarla. Ambos se separaron después de unos segundos y se dieron un cálido abrazo, mientras que sus sonrisas no desaparecían.
Ken: yo también... Yo también te amo.
Perdiéndose en la mirada del otro, ambos se volvieron a besar...
~Time skip~
Faltando cinco minutos para que llegara el nuevo año, Itsuki y Ken llegaron de vuelta a la casa de madera, donde estaban siendo esperados por todos sus amigos, quiénes no perdieron el tiempo y preguntaron por su ausencia. Pero gracias a la intervención de Eto y a las mentiras de la pareja, ambos consiguieron engañar a las hermanas de la pelirroja.
Sin perder más tiempo, todos fueron al pequeño balcón al lado derecho de la casa, donde contemplaban la gran ciudad de Tokio. Y cuando la cuenta regresiva llegó a cero, los fuegos artificiales que indicaban el inicio de un nuevo año explotaron en el cielo.
Aquel espectáculo de colores fueron vistos por todos en la ciudad, sonriendo como lo hacían cada año. Y en la casa de madera de las quintillizas, al igual que en el resto de la ciudad, las sonrisas gobernaron.
Y mientras que la mayoría de sus amigos se encontraban al frente de ellos. Ken y Itsuki se encontraban atrás, cerca de la puerta, agarrados de la mano mientras miraban al cielo con una sonrisa, recordando lo que hicieron en el bosque solos...
~Flash back~
Apoyándose en uno de los árboles que se encontraban cerca, una Itsuki sintió como su amado pelinegro la despojaba de su yukata, y empezaba a lamer todo su cuerpo. De igual forma, Itsuki hizo lo mismo. Recorriendo el cuerpo del pelinegro hasta llegar a su entre pierna, haciendo sentir un poco de placer al pelinegro antes de volver a apoyarse en el árbol; pero esta vez dándole la espalda a su amado.
Ken entró dentro de Itsuki, sintiendo aquella sensación que tanto le encantaba. Dando movimientos lentos, oyendo los gemidos de su novia, abrazándola y lamiendo su cuello con lentitud. Sintiendo las caricias que ella le daba en su cabello...
Acostándola encima de sus ropas, Ken continuó escuchando los lindos gemidos que Itsuki soltaba. Pero, esta vez, Ken chupaba los pezones rosados de su novia y masajeaba sus senos...
Amor, pasión, lujuria. Sentimientos que dominaron durante ese tiempo, hasta que Ken sacó su miembro y liberó su semilla en el cuerpo exhausto de la pelirroja.
Recobrando el aire, la pareja se miró con una ligera sonrisa y se dio un suave beso antes de regresar...
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
(Próximo capítulo: Encuentro no deseado)
¡¡¡FELIZ NAVIDAD Y PRÓSPERO AÑO NUEVO!!!
Lore-Craft: bueno, chicos. Como ya pueden imaginar, este será el último capítulo de Cinco Quintos de tu Corazón de este año 2020.
Se que para muchos, incluyéndome, este año ha sido una mierda. Pero lo superamos. Y sí, se que apenas estamos iniciando el mes de diciembre, ¡¿pero qué demonios?! Nosotros somos unos guerreros que resistieron como los campeones que somos. Y seas cual sea lo que venga después de esto, sé que podremos sobrevivir.
Muchas gracias por haber leído este fan fic. Lo agradezco de todo corazón. Un año más haciéndolos felices, y no saben lo que me alegra leer eso comentarios que me motivan a escribir. Muchas gracias de todo corazón.
En enero volveremos con más ganas, como siempre. Y por fin, daremos paso a la segunda parte del arco de Rize.
¿Qué creen que pasará?
¿Las cosas se pondrán tensas?
¿Qué fue lo que pasó entre Ken y las quintillizas?
¿Ken se abrirá y les contará su pasado?
¿Quién será la chica de la foto?
¿El 2021 llegará el final definitivo de Cinco Quintos de tu Corazón?
Dejen su respuesta en los comentarios.
Por cierto, para los que no vieron el anterior capítulo, está detrás del "Ideas desechadas". Aunque creo que ya lo saben :v
Sin nada más que decir...
Sayonara... Arigato...
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro