♡ ꒱ luna llena.
—¡Mira, Kookie, empieza a nevar!—Gritó emocionado TaeHyung mientras trataba de sacar su mano por la ventana para atrapar un copo de nieve.
Tocó el copo con su dedo índice pero este se derritió al tacto, sonrió como un niño pequeño, soltando risillas y alegrando el ambiente, llenando cada rincón de un color amarillo y de un calor hogareño.
TaeHyung era así, su presencia llegaba a pintar cada esquina de las habitaciones, llenando el lugar de su ligero perfume y de sus lindas risillas, alegrando la vida de todos. TaeHyung era la felicidad de muchos, era el sol en la mañana y la luna en la noche, las estrellas y las nubes, cada pequeño detalle que hiciera feliz a alguien.
Era todo.
JungKook lo veía así y no solo era por estar completamente enamorado de TaeHyung, sabía de su buena reputación entre todo el mundo, todos tenían algo bueno que decir de TaeHyung, todos contribuían con un pequeño grano para añadir a las cosas que los había hecho amar a Tae.
¿Cómo no podrían hacerlo? Si tan solo ver sus ojos te provocaba muchos sentimientos.
Se sentía muy suertudo al tener a alguien como TaeHyung a su lado. Agradecía mucho el haberse fijado en YoonGi, si no fuera por eso, nunca sus caminos se hubiesen unido. Aunque a veces creía algo contrario, que no importaba que, en algún momento de sus vidas sus caminos se unirían, porque en algún momento tendrían que estar tan enamorados como ahora.
El amor joven, tan dulce, tan arrebatador, lo vivían en sus pieles con intensidad.
TaeHyung recostó su cabeza en el hombro de JungKook cerrando un poco sus ojos para así poder descansar algo antes de llegar a su destino, JungKook siempre recostaba su mejilla contra los cabellos rosados de su amor. Ambos sintiendo el palpitar de sus corazones muy de cerca.
🍬🚬
—Ah.—Lloriqueó, metiendo sus manos en sus bolsillos y sacando una cajetilla de metal donde escondía sus cigarros. Sacó uno y lo encendió, el cigarro podría darle calor.—Hace demasiado frío.
—¡Es tan hermoso!—Gritó TaeHyung a lo lejos alzando entre sus manos cubiertas de lana una bola de nieve.—¡Mira esto, Hobi!
JungKook echó el humo de sus pulmones mientras veía a TaeHyung, con una sonrisa veía como aquella persona llena de luz correteaba por la nieve mientras jugueteaba con las bolas de nieve que había formado, jugando un momento con sus amigos mientras su risilla era la música de ambiente.
Era increíble, que la alegría de TaeHyung, le trajo más calor a su cuerpo que el cigarro entre sus dedos.
Con una sonrisa algo boba lo miraba, muy enamorado. Muy feliz.
—Vas a desgastar a TaeHyung, pídele una foto, así tienes algo que mirar para siempre.—Dijo JiMin a su lado.
—Cállate y ayúdame a abrir la puerta.—Empujó con su codo a su mejor amigo.
—Tantos años y aún no puedes abrir esa puerta. Tus padres estarían avergonzados.—Se burló JiMin.
—Por favor, abran las puertas que me estoy congelando aquí.—Se quejó Joohyun abrazándose a su propio torso.
—Vamos a abrir esa puerta.—Susurró JiMin tomando las llaves de las manos de JungKook.
JungKook solamente ahogó su risa y evitó burlarse, tomando sus maletas y las de TaeHyung para meterlas dentro. Una vez la puerta fue abierta dejó las maletas en la sala y prendió el aire acondicionado, frotaba sus manos mientras aún tenía la mirada pegada en TaeHyung; era hipnotizante verlo tan feliz. TaeHyung desde las afueras le sonrió mientras sacudía su mano.
🍬🚬
—Fue una buena cena.—Sonrió TaeHyung limpiando sus labios.—Pero estoy muy cansado, así que buenas noches a todos.
TaeHyung se levantó de la mesa recibiendo las buenas noches de sus amigos y tomó de la mano a JungKook levantándolo también de la mesa, su novio tatuado se despidió de todos también recibiendo muchos silbidos por parte de todos; molestándolos y sugiriendo que harían muchas cosas interesantes allá arriba.
Ambos sonrieron algo avergonzados y sonrojados, entrelazando sus manos mientras subían por las escaleras. Al entrar a la habitación se quitaron los zapatos y se deshicieron de sus chalinas pues la alcoba ya estaba bien ambientada. Se dieron un corto beso en los labios y se tiraron a la cama de espaldas. Se quedaron en silencio por muchos minutos mientras veían la pared encima de ellos; estaba llena de estrellas fosforescentes que JungKook había pegado en su niñez mientras visitaba a sus abuelos. TaeHyung rodó por la cama hasta llegar a la mesa de noche al lado de la cama, husmeó en los cajones y encontró un libro pesado, lo sacó de su sitio y lo miró desde su cómodo lugar dándose cuenta que era un lindo álbum de fotos.
—¿Tú hiciste este álbum?—Preguntó TaeHyung señalando las coloridas pegatinas de autos y estrellas que estaban adornando cada foto.
—Oh, sí. Siempre mi papá imprimía las fotos que tomaba de las cámaras desechables que vendían en las tiendas cercanas, tengo todas esas cámaras guardadas en algún lugar, tenía una que era de Winnie Pooh.
—Yo tenía también de esas cámaras, pero nunca supe que las fotos se podían imprimir, he desperdiciado la mitad de mi vida.
Ambos rieron. TaeHyung siguió hojeando el álbum riendo por las fotos graciosas que JungKook tomaba cuando era un niño, muchas de ellas eran fotos de sus juguetes y de él mientras apuntaba la cámara a su rostro.
—Eras muy tierno de niño, parecías un pequeño conejito.—Sonrió TaeHyung señalando la sonrisa y dientes de JungKook.
—¿Y ya no soy tierno?—Preguntó JungKook fingiendo estar ofendido.
—Eres tierno.—Pellizco una de las mejillas de JungKook, haciendo que ambos rieran.—Ahora eres un conejito con tatuajes y una chaqueta de cuero.
—Que lindas descripciones das.—Sonrió con los ojos cerrados acurrucándose del lado para estar cerca a TaeHyung.
TaeHyung dejó el álbum de fotos en el piso mientras se acurrucaba de lado, estando nariz con nariz con su novio, sonriendo tímido mientras veía y contaba los lunares de JungKook, pasó una de sus manos a la mejilla de JungKook y la acercó a sus labios; besó primeramente su nariz, justo en uno de sus lunares y luego dio un beso sobre sus labios. JungKook profundizó el beso acercándolo más hacia su cuerpo por la cintura.
Pronto el inocente beso se convirtió en uno más apasionado, comenzaban a acariciar sus cuerpo suavemente contra la tela, acallando gemidos y suspiros contra sus labios. JungKook comenzó su camino de besos desde los labios de TaeHyung hasta su cuello, mientras lo besaba acariciaba su cintura y su espalda baja logrando que los suspiros de TaeHyung se agravaran.
—Te amo mucho.—Susurró contra los labios de TaeHyung, logrando que su novio sonriese tímidamente.—Eres tan hermoso.
—Yo también te amo.—Sostuvo su rostro, elevando su mentón y haciendo que lo mire a los ojos, para que vea toda la sinceridad con la que repetía aquellas palabras; hablando con el corazón y el alma.—Te amo mucho, JungKookie.
Ambos sonrieron mirándose a los ojos, con un leve sonrojo sobre sus pómulos y entrelazando sus manos por debajo. Nuevamente se dieron un beso sobre sus narices y los besos siguieron.
Pronto ambos tenían pocas prendas sobre sus cuerpos, las manos suaves hacían calor contra su desnudez, acariciaban con tanta delicadeza y con tanta dulzura; como si fueran los pétalos de un tulipán. Los gemidos siendo ahogados contra sus labios mientras sus manos estaban entrelazadas. El dulce sentir en su vientre bajo se hizo presente una vez cuando sus cuerpos empezaron aquella fricción placentera, quitándose las prendas bajas JungKook hizo su camino de besos haciendo gemir a TaeHyung contra sus labios, llegando hasta sus muslos para besar el interior de ellos; besando cada porción de piel y delineando con sus dedos la suave piel de TaeHyung. Preparó a TaeHyung entre besos y caricias, deleitando sus oídos con los suaves gemidos de TaeHyung, trataba de ser algo sigiloso pues sus amigos aún se encontraban en la planta baja jugando juegos de borrachos. Cuando TaeHyung estuvo lo suficientemente preparado JungKook con un beso en su pecho entró en él, entrelazando sus manos lado a lado de sus cuerpos.
La sensación de estar juntos siempre era la misma; cálida y hogareña, entre los brazos del otro podrían sentir aquello llamado hogar, uno tan seguro y cálido que les ponía las mariposas en sus estómagos.
Sus cuerpos se enredaron uno contra otros con las manos entrelazadas sobre las sábanas mientras gemidos suaves y roncos eran soltados, sus cuerpos se mecieron al ritmo del otro, besando la piel que podían mientras se miraban a los ojos y sonreían. Se amaban tanto. Tanto que les hacía demasiado feliz, el haber encontrado a alguien que les mirara a los ojos sonriendo y con él sonrojo sobre sus mejillas. Se sentían afortunados de poder estar juntos y ser compañeros en la corta vida que habían recorrido.
Con un beso profundo ambos llegaron a su esperado orgasmo, desplomándose contra el cuerpo contrario y abrazándose mientras recostaban sus cabezas en sus cuerpos.
La luna iluminaba sus cuerpos desde lo alto, alumbraba el piso de la habitación mostrando las prendas regadas junto al álbum de fotos. JungKook extendió la sábana contra sus cuerpos y los cubrió mientras aún se seguían abrazando. TaeHyung se recostó aún más en el pecho de JungKook delineando los tatuajes que tenía sobre su pecho haciendo pequeñas cosquillas en su novio.
—Me gusta mucho cuando estamos acurrucados, se siente muy bien.—Susurró TaeHyung.
—Se siente como si estuviera en casa.—Dijo JungKook acariciando la cintura desnuda de TaeHyung.—Te sientes como mi hogar.
—Ya~—Rió avergonzado TaeHyung, ocultando su rostro en el pecho de su novio.—Me sonrojas.
—Que suertudo, yo al hacerte sonrojar.—Rió de vuelta JungKook.
—Presumido.
—Un poco.
Ambos rieron y una última vez se miraron a los ojos antes de volver a recostarse el uno contra el otro. El latido de sus corazones era la mejor canción de cuna, les pudo dar tranquilidad profunda e imperturbable con la que pudieron llegar a dormirse. Estando a salvo entre sus sueños.
Bajo la luz de la luna llena; ambos encontraron la tranquilidad sobre el cuerpo de su amado. Bajo la luz de luna soñaron con tomar té mientras leían o recitaban poesía. Bajo la luz lunar entrelazaban sus manos por debajo de las sábanas.
♡ ggukcotton | 2O24 ♡
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