Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

𝟬𝟴 | Ellos dicen

—¿Saro? ¿Estás escuchando?

Saltó en su lugar arrebatando el sueño que se acumulaba en ella, talló sus ojos quitando los rastros de sueño y miró a su amigo con una sonrisa para luego asentir.

—¿Qué hiciste para tener tanto sueño?

—Vi una maratón de películas de terror hasta las cinco de la mañana, no me arrepiento.

—Si sigues así tendrás ojeras.

—No importa, Opp, igual seguiré siendo linda ¿eh? —Sonrió jugando con sus cejas.

—Lo seguirás siendo. —Correspondió la sonrisa para luego despeinar los cabellos de su amiga.

Freen sonrió asintiendo y con todas las fuerzas que quedaba en su cuerpo trató de prestar atención al maestro Tong, una especial atención pues al final de la clase iría a preguntarle sobre el rendimiento de Becky en su nuevo examen.

Los números que eran anotados en el pizarrón se hacían borrosos, pero ella trataba con toda su fuerza de prestar algo de atención, aunque su cabeza doliera de sueño.

De forma rápida el salón ya empezaba a recoger sus cosas para concluir con su clase, con los ojos cansados Freen alistó en su mochila todos sus materiales para alcanzar al profesor.

—¿A dónde vas tan apresurada?

—Quiero hablar con el profesor Tong.

—¿Sobre qué?

—Después te cuento.

Dicho lo último casi corriendo fue a alcanzar al profesor, este con una sonrisa le recibió, Freen era la alumna favorita de todos los docentes ya que tenía un muy buen rendimiento en el colegio.

De forma opuesta Becky era la pesadilla de todos los docentes.

El profesor le comentó que el examen que había dado Becky había estado más que bien, respondió todas las preguntas y en un tiempo rápido, iba a poder salvar la materia que llevaba arrastrando desde el semestre pasado.

Aquello hizo muy feliz a Freen.

Con una sonrisa en el rostro caminó por el pasillo mientras abrazaba un libro, últimamente todo lo que estaba relacionado a Becky le provocaba una inmensa felicidad, haciendo a su corazón palpitar de forma entusiasta y haciendo que las mariposas revoloteen.

Recordó su noche solitaria donde había hecho una maratón de sus clásicos favoritos, su mente le hizo imaginar lo bonito que sería estar acompañada mientras disfrutaba un buen tazón de palomitas mientras los compartía con alguien más, sería lindo, ya que a sus amigos no les gustaban las películas de terror, muchas veces se habían negado a compartir el hobby favorito de Freen, los comprendía, no podía obligarlos a pasar toda una tarde en un domingo viendo películas.

Y de repente pensó en Becky.

Ella también era su amiga, podría compartir palomitas con ella mientras veían algún clásico de Stephen King, la sonrisa en su rostro se amplió aún más.

Estaba tan inmersa en sus pensamientos que no se fijó cuando chocó con alguien aplastando el libro que traía contra el pecho de la persona con la que había tenido el infortunio de chocar.

—Deberías de caminar con más cuidado. —rio

Reconocería aquella risa y aquella voz en cualquier lugar al que fuese. Era Becky, quien la miraba con gracia y algo de ternura en sus ojos.

—Perdón. —rio de vuelta, sintiéndose avergonzada.

—Tú tranquila. —Revolvió el cabello de Freen logrando que esta se sonrojara.

Para Becky, todo en Freen causaba una inmensa ternura, hasta el mínimo detalle le haría sonreír como una tonta.

—Bueno, yo las dejo. —Interrumpió Irin riéndose por las sonrisas bobas en el rostro de Freen y Becky.

Becky asintió sin prestarle atención, estaba más ocupada viendo el tono carmín de las mejillas de Freen.

—¿Qué tal? ¿Cómo estás?

—Bien. —Asintió. —Oí que te fue en tu examen.

—Más que bien, tuve una buena nota. —Sonrió. —No lo hubiera logrado sin ti.

—Oh, nada de eso, fuiste tú la que estudió y resolvió el examen, yo solo pedí que se te diera una oportunidad, eso es todo.

—Bueno, igual te lo agradezco, supongo que te debo algo.

—No, nada de eso. —Negó. Pero al instante se arrepintió, recordó que era una solitaria amante de las películas de terror. —Aunque ya creo con que puede recompensármelo...

—¿Ah sí? ¿Con qué?

—¿Te gustan las películas? —Preguntó parándose de puntitas y ladeando su cabeza al igual que una cachorra.

—Si, me gustan. —Asintiendo, queriendo gritar por lo tierna que era Freen.

—Bien, todos los domingos tengo una maratón de mis películas favoritas ¿quisieras acompañarme?

Becky podría levantar el pecho en orgullo, Freen Sarocha le estaba invitando a pasar un domingo a su lado mientras le compartía sus películas favoritas, no podría estar más feliz.

—Claro que aceptó, rosita.

—Rosita...aún suena muy lindo. —Sonrió.

—Como tú.

Los ojos de Becky se abrieron en sorpresa, no pensaba repetirlo en voz alta, solo quería que aquello fuese para ella.

—Gracias. — Freen soltó una risilla mientras trataba de disimular el sonrojo en sus mejillas.

—U-uh. —Tosió. —Tengo que ir al laboratorio, nos vemos luego.

—Nos vemos Becky.

Con una sonrisa y ondeando sus manos en dirección de la otra separaron sus caminos.

Aún las mejillas de Freen estaban con el tono carmín en ellas mientras mordía su labio inferior y trataba de ahogar una sonrisa boba.

Fue a la mesa donde sus amigos siempre se juntaban y se sentó soltando el suspiro que había contenido en sus pulmones durante el encuentro con Becky.

—¿Dónde estabas? —Preguntó Nam.

—Caminando por ahí. —Sonrió.

—Alguien parece feliz~—Molestó Nutt mientras picaba el costado de Freen. —¿Acaso te viste con Becky?

—¿No es obvio? —Respondió Nam mientras mordía una papa y sonreía en dirección de Freen.

—¿Qué te dijo? —Preguntó Nutt mientras seguía picando en Freen.

—Nada. —Susurró.

—Oh vamos, no me digas que por "nada" tú estés como un tomate.

—Bueno, solo lo invite a que me acompañara en mis domingos de películas y ella acepto. —Sonrió Freen, haciendo que Nutt soltara un grito emocionado.

—¿Enserio la invitaste? –Pregunto Opp sentado al lado de Nam.

—Uhm, sí. —Asintió con una sonrisa.

—No debiste.

—¿Por qué?

—Ya sabes todo lo que dicen las personas sobre Becky, que a la primera invitación ella aprovecha para meterse entre las piernas de alguien. —Dijo Opp de forma seria. —No te hagas ilusiones con ella.

—No lo estoy haciendo...

—Si no lo estarías haciendo tu cara no destilaría felicidad al nombrarla. No te encariñes con alguien como Becky, no cuando sabes que todos esos rumores son ciertos.

—Solo es mi amiga.

—Y sería mucho mejor si no lo fuese.

El estómago de Freen se sintió vacío.

Claro que sabía todo lo que las personas decían sobre Becky, que era una rompe corazones, una rebelde sin causa y alguien que no tenía futuro.

Había oído que practicaba boxeo, que se metía en peleas callejeras, que solo paraba de fiesta en fiesta probando todo tipo de alcohol, parando de cama en cama y rompiendo las ilusiones de las personas cuando pudiese hacerlo, que era alguien mala. Había escuchado cada una de ellas.

Pero ella sabía que no era así, Becky podría hacer de su vida una fiesta, pero jamás podría lastimar el corazón de alguien.

Aunque no fue tan cordial contigo cuando estaba enojada. Recordó.

Tratando de borrar todo pensamiento pesimista de su cabeza se enfocó en las cosas buenas que había descubierto en Becky. Se enfocó en las palabras bonitas que de vez en cuando se le escapaban.

El hablar de las personas sobre Becky no afectaría la amistad que tenía con ella, no sería tan tonta para dejarse llevar por el hablar de los pasillos.

No cuando Becky sonreía de forma bella cuando la veía.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro