Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

[Una Vida Desastrosa]

{Uzi's perception.}

Humedad.

Era lo que se lograba percibir en la amplia habitación con tapizado azul desgastado, la tediosa humedad se respiraba cada segundo, las paredes estaban sucias y algo arañadas, un lugar digno de una pelicula de terror y aunque hubiese ese desastre había algo que lograba sobresalir de esa pila de desorden.

Yo y mi amado chico.

Podía sentirlo muy en mis adentros, haciendo un desastre total en mi, con su gran falo, recorriendo mi recto sin gentileza, quemaba, era doloroso, podía sentir la sangre brotar de a poco, mi vagina ya llevaba un buen rato desbordandose en semen de un solo culpable.

Sus manos se encajaban en mis caderas, las cuales ya estaban muy magulladas y teñidas en un rojo vivo era obvio que su climax se acercaba, eso solo haría que la sensación se volviese insoportable.

Jalé su cabello y lo obligué a acercarse a mi, mordí sus labios para apasiguar mi dolor, lo hice con la excitación del momento, siempre tenia esa sensación gelatinosa, era una parte realmente exquisita de succionar, el sabor a metal era un manjar, un caramelo y una cura para mis propias cuestiones, sorbí su sagre y acabé de lamer la herida, en respuesta recibí un gemido de dolor mezclado con extasis.

-¡Ngh..!-

Sin decir nada comenzó a ahorcarme parcialmente, podía sentir perfectamente la falta de oxígeno, eso agudizó mis sentidos, escuchaba la vieja cama rechinar, nuestros cuerpos chocar y...

-Papi...-

Una frase que adoraba usar durante el sexo, tan común como extraña se convirtió en el detonante para que el soltase toda su semilla en mi interior para terminar de llenarme, fue un mar de sensaciones, era mi fetiche, al cual tuve que atarlo a el, mi novio algo "ilegal".

Todos mis orificios ya habían sido profanados, como siempre ¿Y yo? Adolorida, herida, necesitaría mucho aftercare, pero el sabia como me gustaba.

-Linda... ¿No me sobrepasé?-

Nuevamente volvía a ser el mismo chico lindo, suave y responsable, sacó una toalla y la remojo en una solución antiséptica para tratar mis heridas superficiales.

-No te preocupes, estuviste dentro de los límites.-

Me dio un beso y pasó a revisar un poco como estaban mis partes íntimas.

-Parece que tuviste otro desgarre ya es la segunda vez en el mes... Solo limpiaré tu entrada superficialmente con agua y un trapo suave.-

Y eso hizo, un escalofrío recorrió mi cuerpo, aunque sin darle importancia a eso simplemente agarré mi celular de la cama de noche y empecé a revisar algunos de mis foros favoritos.

"El cigarro, la asombrosa droga lícita."

Entré por mera curiosidad, pero grande fue mi sorpresa al ver todos los comentarios de los fumadores activos.

"Desde que fumo me he sentido más relajado e incluso mis problemas se han ido."

"Los canallas de mis padres nunca me dejaron fumar, decían que me haría daño y me daría cáncer o una mierda parecida... ahora que lo hago me siento libre, podría jurar que es mejor que el alcohol."

-N, comprame unos cigarros.-

Fui directa, la verdad necesitaba saciar mi curiosidad más que cualquier otra cosa en el momento.

-... ¿Qué cos-?-

-Cigarros, quiero unos cigarros.-

Lo interrumpí y esperé una respuesta positiva casi al instante, al contrario de eso recibí un silencio total.
Mi boquiabierto novio se me quedó viendo, se se notaba como quería hablar, pero parecía costarle.
Se sentó en la cama y me cargó entre sus brazos, de una manera protectora.

-Uzi... Mi amor, tu sabes que eso puede traerle problemas a tus pulmones ¿Cierto? Además... Eres menor de edad y...-

-No creo que lo de menor de edad te preocupe mucho, estas follando con una de recién diecisiete futuro veinteañero.-

Pareció captar mi lógica, pero siguió intentando negociar conmigo.

-Son adictivos, pronto querrás más y más... Eso sería un problema, mi vida, siempre te he dado lo que quieres, el vivir conmigo, incluso compartir fetiches, pero cuando se sobrepasa y llega a tu salud yo entro en dilema.-

-Anda... Será solo uno a la semana ¿Qué tal así?-

Pareció pensarlo, me miró de manera indecisa hasta que finalmente asintió.

Besó mi cabeza con amor, uno tan puro y empalagoso, aunque parecía arrepentido de su reciente acción ante mi decisión, sus ojos pasaron a un mueble, teniendolos fijos en una cosa.

Su mirada se posó sobre un peluche, uno muy pequeño, el cuál había sido comprado con un único proposito... Nuestro niño.

Parecía melancólico, se aferró más a mi por un rato, al mismo tiempo que yo a el, su calor me traía calidez y consuelo, después de todo... las cosas pasan por algo, mi primer embarazo fue a mis dieciséis años, lo perdí porque mi cuerpo era bastante inmaduro, era obvio, pero algo dentro de mi deseaba concebir, tener a un pequeño ser en la casa, que nos llamara de aquí para allá, lamentablemente no fue posible, mi experiencia fue terrible y desgarradora, me dejó fuertemente marcada, pero seguía con ese deseo en alguna parte de mi.

-No tendré que comprar cigarros, V dejó unos en el auto, voy por ellos.-

Salio caminando a paso lento, aún pensativo.

Debía admitir que en parte fue mi culpa, no me cuidaba, vivir con mi padre era estresante, me hartaba, no me apoyó ni lo intentaba, solo me reprendía por haber acabado asi.

Un aborto causado por inmadurez, estrés y falta de cuidados, nunca tomé vitaminas ni fui al ginecólogo, N recién estaba en juicio, todo pasó tan rápido que... Solo logré ver el charco de sangre bajo mis piernas en cuanto llegue al tribunal.

Aunque esa fue una de las razones por las que se apiadaron de el, créanme nadie quiere pasar por aquel terror, el país se ablandó con ese muchacho que corrió a ayudar a su novia 3 años menor que el, aún con sus esposas de metal encima se soltó de los policías para ir a ver que tenía, fue para bien, supongo, si no fuese por eso el se hubiese quedado cumpliendo una cadena perpetua seguramente.

Sentí un peso extra en la cama matrimonial en la que me encontraba y un olor conocido pero poco explorado se hizo presente en nuestra habitación.

El venía ya con un cigarro, me sonrió de manera inocente para después sacar el pequeño objeto de sus labios e introducirlo en los mios, fue tan inesperado que no pude evitar toser.

-¿Estas bien?-

-Si... Solo deja acostumbrarme...-

Me producía una sensación polvosa, quería toser, aún asi seguí y seguí, ya al poco rato se sintió más agradable, era gratificante, pero me mantuve muy concentrada que no noté que ya se estaba terminando, por lo que me quemé los dedos al seguir sosteniendolo.

N tomó el cigarrillo y lo dejó en el cesto de basura.

-Sopla.-

Lo miré curiosa, lo hice, vi un débil humo salir de mi boca, era agradable a la vista y daba una linda sensación.

-¿Solo uno a la semana?-

Me cuestionó nuevamente, mirándome algo más serio que antes.

-Solo uno a la semana, no me hagas volver a repetirlo, además ¡Puedo dejarlo cuando quiera! Créeme.-

-¿Y porque debería hacerlo?-

Se puso juguetón e intento besarme por lo que opte por tomar una almohada y empezar a golpearlo con ella, haciendo que el se cayera de la cama, lo cuál hizo que tuviéramos un buen rato lleno de risas.

--------------------------{ } ------------------------

[Final de el primer capítulo]

{1257 Palabras}

<Espero que les haya gustado, me gustaría saber su sincera opinión, agradecería que compartieran la historia, pues cuesta un poco tratar de mejorar la narrtiva>

Opiniones en general--->

¡Nos vemos!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro