"¿Qué pasa? ¿El gatito te arañó con sus garras? Esa herida se ve mal" Revali mantenía su habitual tono burlón reviviendo memorias que no vale la pena recordar.

"¡Vaya!, ¿que trae a el Campeón Orni por estos rumbos?" Sidon se puso de pie sosteniendo gentilmente al renombrado héroe de Hyrule en sus brazos.

Revali soltó una estruendosa carcajada "Solo mírate, dándole lata al pobre príncipe zora, ten un poco de vergüenza" Link se sentía profundamente avergonzado, era una posición que contrastaba por completo con su rol, era obvio que el príncipe era inconsciente de la situación debido a su gran gentileza, por lo que algo dentro de sí le impedía rechazar sus gestos por mas incomodos que pudiesen tornarse para él... ¿es "incomodo" si quiera la palabra correcta?

"OH" Sidon bajó a Link sobre sus pies "No es un inconveniente en lo absoluto cuidar de las heridas de tan magnifico guerrero, ¡Link acaba de librar a mi gente de un terrible peligro!" Sidon dijo con una sonrisa y entusiasmo que no cabían dentro de sí, sin embargo Revali contrastó esta emoción con una mirada perforante.

"Cierto" defirió del tema "Te preguntarás que hago por tus nobles tierras, ¿no es así? Pues, ¿recuerdas a Dimai? La traje devuelta sana y salva a su hogar, pero no tienes que agradecerme, La princesa se está encargando de atender sus heridas, me preguntaba porque no estabas ahí para asistirla también." Revali deserto por completo del tema anterior centrando la atención en sus méritos, y luego tornó la conversación señalando al príncipe de estar ausente como un látigo que se enrolla y azota devuelta.

-"Revali, mi gratitud siempre es profunda ante tus nobles acciones para ayudar a mi gente, estoy seguro de que mi padre querrá recompensártelo, te pido que esperes por mí en el palacio, iré ahí en cuanto acompañe a Link con los sanadores" Sidon posee altos dotes mediáticos, pero Link realmente no deseaba pasar un segundo más en este lugar y situación.

-"¿El gran héroe que doblegó al Rey demonio, necesita escolta por un simple rasguño?" Revali no pudo contener su risa "Ve con él, asegúrate de que no se lastime más de la cuenta, pero que no abuse de tu hospitalidad" la manera en que el campeón de los Orni miraba despectivamente a Link tensó un poco el ambiente, para luego soltar una risa que más parecía un bufido y se dio la vuelta "Te veo en el palacio príncipe Sidon" Revalio dio se impulsó hacia los cielos en un solo aleteo.

Sidon tenía una expresión disgustada mientras Revali se alejaba "Te ruego disculpas por eso... En lo absoluto creo que sois incapaz de ir por tu cuenta ni que estéis abusando de mi hospitalidad, realmente quiero agradecerte por aplacar a la bestia, ¡te pido que aceptes mi gratitud!" cada oración proveniente del príncipe terminaba en una sonrisa muy entusiasta, pero Link se mantuvo en silencio, el peso de nacer como el héroe escogido por la Diosa Hylia conlleva la expectativa de miles de ojos sobre él, por lo que acostumbró a llevar cualquier carga en silencio.

El príncipe suspiró y el camino se hizo largo, acompañados solo con el sonido de sus pasos y el croar de las ranas.

Sidon carraspeó de manera tímidamente "Um... Link" El pequeño rubio levantó su mirada, cargaba en su espalda una manta empapada con sangre de monstruo que envolvía una buena cantidad de huesos y tripas de centaleón que Link recolectó antes de partir.

"¿Me permites hacerte una pregunta?" Sidon un poco nervioso observó a Link asentir con la cabeza, tomo aire pensando en cómo conjugar sus palabras

"Hay alguna razón en especial por la cual hayas decidido traer contigo esa pila de..." Link ahora entendía mejor porqué el príncipe actuaba de manera tan extraña "Los vendo por mons" contestó con total naturalidad.

"Oh, ya veo... Dime, ¿comercias seguido con Kilton?" Sidon era consciente de la certeza de los rumores acerca de una misteriosa tienda de monstruos que de vez en cuando llegaba a las afueras de la región de los Zora.

-"Lo conocí hace no mucho, sus artículos son... peculiares"

-"Oh seguro que lo son, los jóvenes guerreros de mi armada se han presentado con toda clase de artilugios curiosos, como, esencia de monstruo, un martillo resorte, y unas mascaras de apariencia un tanto divertida"

-"Las máscaras son muy útiles, aunque el olor no es muy agradable"

-"Si intercambiáis viseras de monstruo por ellas, me puedo imaginar porqué" Link rió ante el comentario del príncipe con una sonrisa inesperada y cálida, enterneciendo el corazón del príncipe, en su pecho pasó una corriente difícil de explicar, nada le hacía más feliz que poder interactuar con el mítico salvador de Hyrule, pero no podía perder la compostura ahora, todo había ido de maravilla hasta ahora.

-"¡Sidon, Link!" La princesa Mipha saludo desde lejos, Sidon pudo verla y apresuró su paso con Link a su lado, es increíble la diferencia de estatura que hay entre los hermanos.

-"¡Por la Diosa! Tu túnica esta quemada, déjame ver ¿Qué te sucedió?" Mipha dio unos pasos hacia Link asomándose a su costado preocupada "Oh, Link vamos, entra al sanatorio" Mipha los guió hacia la entrada, donde Link levanto su bolsa con objetos valiosos a Sidon "Podrías sostener esto por mí?" Sin pensarlo el Príncipe tomó la manta que envolvía las vísceras de las manos del héroe para luego alejarla un poco de su cuerpo un tanto desconcertado al notar que la manta había dejado una huella de sangre de monstruo en la palma de su mano.

-"Noté que aplicaste magia curativa en su herida, hiciste un gran trabajo mi hermanito ¡estoy orgullosa!" Mipha alentó de manera entusiasta, la conexión familiar es notoria entre ellos, pero Sidon se tornó muy tímido ante los elogios de su hermana, sus mejías se pintaron de un tono azulado ¿era eso rubor?

-"De hecho creo que has progresado mucho en tus habilidades- ¿qué es eso?" La sonrisa de Mipha cayó rápidamente al notar la bolsa en cuestión.

-"Link colectó unos... materiales"

-"Oh" los hermanos observaron la bolsa con cierta inquietud.

Link tomó asiento en la camilla y se retiró la camisa, con un poco de dificultad, dejando ver su cuerpo lleno de cicatrices, los sanadores principiantes se acercaron con curiosidad para ver trabajar a Lady Mipha su magia curativa, siempre era impresionante como solo posando sus manos luminosas ejercía un gran poder sanador.

-"¡Por las Diosas! Chico, estas lleno de cicatrices ¿a qué te dedicas?" Un joven zora hizo una mueca de dolor al ver el cuerpo del héroe.

-"Estas ante el campeón hyliano, el héroe escogido por la Diosa Hylia en carne y hueso" Sidon anunció con una sonrisa como ninguna otra, mientras Gruve el zora de escamas azules abrió sus ojos como platos en completo shook mientras volvía su vista al guerrero hyliano.

-"¿QUE?" un puñado de zoras se acercaron por la conmoción, todos empezaron a hacer preguntas al héroe, Link contó un par de sus historias que parecían fascinar a los jóvenes, lentamente la multitud fue creciendo, y casi todos los niños zora se habían escabullido a escucharlo con asombro. El príncipe no podía evitar sonreír, ni en sus más ocurrentes sueños se habría imaginado que estaría presenciando tal escena.

Sidon se acercó a Bazz uno de sus guardias más confiables "¿Podrías sostener esto por mí? Asegúrate de entregárselo a Link en cuanto termine la sesión" Bazz tomo la manta confundido mientras el príncipe de dirigía al palacio.