CAPITULO 21
JAYDEN
- ¿Amelia está contigo? -. Preguntó Anthony.
-Estoy en la universidad, ella se quedó en mi casa-.
-Tienes alguna forma de confirmar que sigue ahí, la he estado llamando y no contesta-.
-No, seguro se quedó dormida, ¿por qué? -. Pregunté ahora yo confundido.
-Max vino a la cafetería, cuando le entregué su pedido este se quedó viendo a unas personas que entraban sonriendo y antes de que aquellas personas nos miraran salió corriendo al baño, lo seguí y este estaba muy alterado, me dijo que esa era la familia de Amelia y que no entendía por qué ellos estaban ahí si nunca salían de su barrio adinerado, me pidió que los atienda y que trate de escuchar algo, cuando me acerqué a pedir su orden estos hablaban de algo que querían hacer para quedarse con una herencia, le conté a Max y dijo que tal vez hablen de Amelia, ya que ella es la única huérfana en esa familia, me pidió que no la dejemos sola-.
-Estoy a punto de presentar un examen muy importante-.
-No puedes darlo otro día-.
-No el señor Coleman no permite que demos el examen atrasado, prometo hacerlo lo más rápido que pueda e iré de inmediato donde ella-.
-Está bien, háblame cuando llegues con ella-.
Colgué la llamada y empecé a marcarle a Amelia, le marqué por varios minutos, pero no respondía, estaba nervioso, preocupado, no sé cómo puede haber gente así, tanto les cuesta verla y dejarla ser feliz.
El señor Coleman entró mostrando así que el examen acababa de empezar, respondí lo antes posible, se me hizo fácil responder, ya que Amelia me había ayudado a estudiar y todo lo que habíamos revisado estaba en el examen, sonreí cuando terminé, le entregué el examen y salí del salón dirigiéndome al estacionamiento por mi auto.
***
- ¡Diablos, Amelia, ¿por qué rayos no contestas el puto teléfono?!-. Le pregunté alzando la voz, cuando llegué a casa la encontré de lo más tranquila sentada en el sofá mientras veía una película.
-Se apagó y no tenía como cargarlo, lo siento- dijo inocente - ¡Y no me grites! -. Chilló cruzando sus brazos a la altura de su pecho.
-Lo siento ¿sí?, solo que me preocupé, Anthony me llamó y lo que me dijo no fue muy bonito-.
- ¿Qué fue lo que dijo? -.
-Que tu familia está aquí, Max los ha visto en la cafetería y le dijo a Anthony que te llamara a avisar, pero no respondías-. Ella me miró confundida.
-Pero ellos no salen de su barrio-.
-Lo sé Anthony también lo mencionó-.
-No sé a qué viene todo eso, que motivos tienen para estar aquí-. Sus ojos se llenaron de lágrimas, me acerqué sentándome a su lado.
- ¡Hey! Linda ven aquí-. La abracé mientras ella ponía su cabeza en mi pecho -No te pasará nada, no permitiré que se acerquen-. Afirmé abrazándola más fuerte.
-Si han salido de su barrio ha de ser porque traman algo, ellos no salen de ahí de por gusto-. Habló nerviosa.
-Hoy fue mi último examen, desde ahora tendré algunos meses libres por lo que no me separaré de ti para nada-.
Me miró sonriendo mientras asentía, la tomé de las caderas haciendo que quede por completo acostada en mi regazo mientras seguíamos viendo la película que anteriormente estaba viendo, le envié un mensaje a Anthony diciéndole que Amelia estaba bien y que cualquier cosa que necesitemos se lo diría.
-Jayden-. Habló luego de unos minutos.
- ¿Sí? -. Levantó su cabeza de mi pecho hasta quedar frente a frente, tomó mi cara entre sus manos, acarició mi mejilla y se quedó observando mi rostro por un largo tiempo para luego volver a hablar.
-Quiero que me prometas algo-. Pidió mirándome.
-Por ti cualquier cosa-.
-Quiero que, si mi familia llega a aparecer no te entrometas, no quiero que salgas lastimado por mi culpa-.
-No voy a prometer eso, te dije hace unos minutos que estaré contigo y lo voy a cumplir, es una promesa y yo nunca rompo mis promesas-.
-Deja de ser tan necio, Jay no quiero que te lastimen por mi culpa, no quiero sufrir más, no quiero llevar con la culpa de que por mí tú saliste lastimado, solo quiero que hagas eso por mí-.
-No lo voy a hacer, porque no me van a lastimar ni a ti tampoco, Linda yo estaré contigo, pelearé cualquier batalla junto a ti, no te dejaré cuando más me necesitas, no ahora luego de lo que hemos pasado y hemos logrado, hace unos meses cuando intentaste suicidarte me prometí a mí mismo cuidarte y estar contigo cuando caigas, porque si tú caes yo estaré ahí para levantarte o incluso para evitar que lo hagas, estamos juntos ahora y cualquier cosa la superaremos juntos-. Limpié varias de sus lágrimas y la volví a abrazar.
-No te merezco, eres demasiado para mí-.
-No digas eso linda-.
Nos quedamos en silencio unos minutos más.
-Ya sé que te hará sentir bien-. Dije tomando sus caderas para moverla a un lado y poder salir de debajo de ella, tomé sus manos y la puse de pie.
- ¿A qué te refieres? -.
-Iremos a las cascadas, así que ve a cambiarte mientras preparo algo-. Sonreí al ver la gran sonrisa que tenía en su rostro, dio unos saltitos y caminó hasta mi habitación, me dirigí a la cocina en busca de algo para llevar.
***
AMELIA
Estábamos en camino a las cascadas, Jayden hacía o decía cualquier cosa para que me distraiga, pero el simple hecho de que mi familia haya salido de su barrio me aterraba, no sabía que iban a hacer solo de pensar que tal vez vinieron por mí me preocupaba, ya que ahora no estaba sola y no quería que mis amigos y mi novio salgan heridos, además no entendía el por qué vendrían por mi ¿si me odian no seria mejor dejarme lejos de ellos?.
Llegamos a las cascadas, después de varios meses el lugar seguía siendo hermoso, nos sentamos en el muelle, Jayden sacó unos sándwiches dándome uno, lo tomé y empecé a comer.
El resto de tarde pasó entre conversaciones sin sentidos, risas, caricias y muchos besos, ya era alrededor de las 9 de la noche cuando decidimos regresar, caminamos hasta el auto de Jayden, en la radio sonaba "When You Walk Away" de 5sos, empecé a cantar el coro y así el camino a casa fue de la misma manera en como habíamos pasado la tarde, risas y miradas por parte de ambos.
Llegamos a casa y lo que vi me hizo arrepentirme por no haber querido quedarnos en las cascadas más tiempo, intentamos regresar al auto, pero este estaba siendo rodeado por unos hombres, retrocedí y Jayden tomó mi mano en señal de apoyo, me giré de nuevo hacia las personas que estaban esperando en la puerta de la casa.
- ¿Qué es lo que quieren? -. Pregunté fría.
-Te queremos a ti cariño-.
-No me digas así-. Advertí
-Está bien iremos al grano, venimos por ti así que decide o vienes por las buenas o lo harás por las malas, no nos hagas mostrarte cuáles son las malas-.
-Ella no irá con ustedes-. Habló Jayden.
-Oh cariño, claro que lo hará, si quiere que nada te pase estoy segura de que vendrá por su cuenta-.
-No lo hará, no permitiré que le hagas daño-. Jayden se paró delante de mí.
-Jayden por favor, no quiero que te lastimen-.
-Te dije que no permitiré que te lastimen y lo estoy cumpliendo, no dejaré que te toquen ni un solo pelo-.
Tomé su mano mientras me ponía a su lado y encaraba a mi familia.
-Niña no seas tonta, no nos hagas lastimarlo, no tiene por qué salir lastimado-.
-No te tengo miedo, ya no-.
-Eres tonta en serio, ¿crees que estamos aquí para negociar?, pues déjame decirte que no es así, esto no es una negociación-.
-Como llegaron hasta aquí-.
-Una linda chica nos habló de ti y de tu noviecito, ella nos trajo-.
Mierda, Kassandra.
- ¿Por qué hacen esto?, se libraron de mí, ¿no es eso lo que querían? -.
-Si, pero ahora que nos enteramos de otra cosa, no nos conviene que estés libre-.
- ¿De qué hablan? -.
-Eso no es asunto tuyo, ya me estoy cansando, será mejor que vengas aquí de una vez-.
Di un paso hacia delante, pero Jayden jalo mi mano haciendo que vuelva a ponerme a su lado.
-Eres tonta y por eso tu noviecito será el que sufra-.
-Adelante-. Les dijo a unos hombres y estos caminaron hacia nosotros, tomaron a Jayden separándolo de mí.
- ¡NOO!, déjalo, iré con ustedes-.
-Igual ibas a hacerlo, pero ahora te queremos ver sufrir un rato-. Sonrió cínicamente.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro