Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

A Glimpse Of Us

Chaeyoung's pov

Después de salir de la cafetería, mis pensamientos seguían atrapados en Mina. Nada parecía poder sacarme de ese estado melancólico, pero decidí que no quería quedarme en casa, atrapada en la tristeza. Así que llamé a Jihyo. Sabía que, aunque las palabras no pudieran aliviar mi dolor, su compañía siempre lograba darme un poco de paz.

Jihyo me invitó a su casa sin pensarlo, y pronto me encontré en su sala, sentada en el sofá mientras ella me preparaba una bebida caliente. El ambiente estaba relajado, pero el silencio entre nosotras era denso. Sabía que me veía perdida en mis pensamientos, y a pesar de ser tan buena amiga, no quería presionarme a hablar si no estaba lista.

— ¿Te encuentras bien? — preguntó Jihyo, sentándose a mi lado con una mirada cálida pero preocupada.

Sonreí débilmente, aunque en realidad me sentía completamente desconectada de todo lo que sucedía a mi alrededor.

— No... pero estoy intentando estarlo — respondí con una risa amarga. Pensaba en Mina, en todo lo que compartimos, en lo que podría haber sido. Pero la realidad era otra. Mina ya no estaba allí.

Jihyo observó un momento, sabiendo que no era el momento para presionarme. Sin embargo, se le ocurrió cambiar de tema.

— Entonces, ¿has visto alguna película buena últimamente? — preguntó con una sonrisa.

Por un momento, intenté concentrarme en la conversación. Me sentía cómoda, pero sabía que mis pensamientos seguían vagando hacia Mina. Necesitaba un respiro.

— No mucho... en realidad no he tenido ganas de ver nada — admití, sintiéndome culpable por no estar disfrutando de las pequeñas cosas que antes me hacían feliz.

Jihyo asintió y me pasó una manta, como si supiera que algo en mi interior pedía consuelo. Pasaron unos minutos en silencio, hasta que finalmente decidí levantarme.

— Voy al baño, necesito refrescarme un poco
— dije, sin muchas ganas de seguir en la conversación. Mi mente seguía ocupada por todo lo que no podía soltar.

Me dirigí al baño, buscando un pequeño respiro. Mientras tanto, desde la sala, escuché la voz de Jihyo.

— Chaeyoung-ah, ¿puedo usar tu teléfono para pedir algo de comer? El mío está sin batería
— preguntó, como si fuera algo casual.

— Claro — respondí, agradecida de no tener que pensar en nada por un momento. Cerré la puerta del baño, dejándome unos segundos para tranquilizarme, pero no pude evitar pensar en lo que había dejado abierto en el teléfono. La foto. Esa foto que había sido tomada sin que Mina supiera, capturando el primer momento íntimo que compartimos.

Cuando salí del baño, Jihyo estaba sentada en el sofá, mirando mi teléfono con una sonrisa extraña en el rostro. No me había dado cuenta de que había dejado la pantalla abierta. Al principio, me sentí un nudo en el estómago, pero no pude hacer nada al respecto.

Me acerqué a ella, y antes de que pudiera preguntar qué sucedía, Jihyo me miró con una mezcla de sorpresa y suavidad en sus ojos.

— Chaeyoung... —dijo, su voz llena de ternura
— ¿Está eres... tú?

Mis ojos se abrieron al instante al darme cuenta de que había dejado la foto de Mina y yo abierta. En ese momento, mi rostro se sonrojó con fuerza, y mi corazón dio un vuelco. Apreté las manos sobre la tela del pantalón, sintiéndome incapaz de hablar.

— ¡Oh, Dios! — exclamé, tomando rápidamente mi teléfono, intentando tapar la pantalla con la palma de mi mano.

Pero Jihyo, con una expresión serena y una sonrisa leve, sostuvo el teléfono un poco más alto, como pidiéndome que no lo apartara.

— No lo ocultes — dijo con una voz suave. — En serio, Chaeyoung, no tienes por qué sentirte incómoda. Esto... es hermoso.

Miró la foto, observándola con detenimiento. Yo, incapaz de apartar la vista de su rostro, me sentía como si mi alma estuviera expuesta. La foto de Mina y yo en esa noche tan especial, cuando todo parecía perfecto. El primer momento en que nos entregamos completamente. El amor, la conexión, el deseo que compartimos, todo quedó atrapado en ese solo instante.

Jihyo sonrió, y aunque sus palabras me hicieron sentir vulnerable, también me reconfortaron más de lo que imaginaba.

— Lo que veo aquí no es solo una foto, Chaeyoung. Veo algo más. Veo la conexión profunda entre ustedes dos. La forma en que se miran, cómo se entienden sin necesidad de palabras. Esto es amor, y es lo más hermoso que he visto.

Me quedé en silencio, absorbiendo sus palabras. La vergüenza que sentía comenzó a desvanecerse un poco, reemplazada por una cálida sensación de alivio. Jihyo tenía razón. Lo que compartí con Mina, aunque ahora ya no estuviera en mi vida, era algo que valía la pena recordar.

— Entonces... — mi voz sonó rota, como si las palabras apenas lograran salir. — ¿Por qué me dejó, Jihyo?

Ella alzó la vista, sorprendida por mi pregunta. Y fue ahí cuando mi frustración y mi dolor se desbordaron.

— Si esto era amor, ¿por qué me dejó? ¿Por qué dijo que era lo mejor para mí? — mis lágrimas comenzaron a caer con más fuerza, y ya no traté de detenerlas. — ¡Nada de esto me hace bien! No estar con ella no me hace bien.

Jihyo parecía procesar mis palabras, buscando cómo responder sin hacerme más daño. Finalmente, suspiró y me miró directamente a los ojos.

— Chaeyoung, a veces las personas hacen cosas pensando que están protegiendo a quienes aman, incluso si eso significa alejarse.

Negué con la cabeza, incapaz de aceptar esa explicación.

— Pero si Mina me amaba, ¿por qué no lo intentó? ¿Por qué no peleó por nosotras? — sentí que mi voz se rompía completamente, y llevé mis manos al rostro, ahogada en la mezcla de tristeza e impotencia.

Jihyo se acercó, colocó una mano en mi hombro y susurró con ternura:

— Tal vez no supo cómo. O tal vez pensó que dejándote ir te estaba dando algo que ella creía que no podía darte. Pero eso no significa que no te amara.

Su respuesta solo hizo que mis lágrimas fluyeran más, porque aunque no quería creerlo, una parte de mí sabía que Jihyo tenía razón.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro