Capítulo 8.

Flashback (noche del baile de Portorosso)

(¿Cómo explicarle a la conciencia que esto fue mi culpa? )

Tal parece que la noche que se suponía la mejor de sus vidas, resultó ser una de las más trágicas de todas, siendo ahora solo la punta del iceberg...

Ahí se encontraban, cuatro chicos corriendo a la casa Marcovaldo lo más rápido que podían, en especial un joven de apenas diecinueve años, un chico de tirantes que estaba cargando a duras penas a un adolorido Alberto, le dolían los pies pero no dejaría que le pasara nada al chico de sus sueños.

G:-¡Rápido Guido, llévalo a su cuarto para curarle las heridas!

El pelicastaño subió rápidamente al cuarto del mencionado Alberto, quien estaba usando la chamarra de Guido para abrigarse de aquella tarde dolorosa, lo dejo recostado en la cama tratándolo con cuidado para no lastimarlo.

Gu:-¡Listo! Necesito un par de vendas y agua...
G:-Vendas... Nosotros no tenemos...
C:-En casa estoy seguro que vi muchas

Ciccio salió corriendo a casa, toda la noche se había vuelto en una muy agitada para los chicos que estaban dispuestos a ayudar a su amigo

G:-G-guido... Tus heridas...

A decir verdad al igual que Alberto, Guido tenía heridas visibles,rasguños que había ganado en la pelea pero no quería darle importancia, su prioridad era atender a Alberto

Gu:-Eso no importa... Deberías ir por Massimo, él sabrá que hacer.
G:-S-si... En un momento regresó

Giulia le lanzó una mirada a Luca a manera de advertencia, a lo que el pecoso sólo se limitó a asentir regalando una sonrisa cálida a su amiga, quien salió de la habitación dejando solos a los tres chicos, si eran honestos debían aclarar un par de cosas entre ellos.

Gu:-T-todo esto es mi culpa...

Decía Guido mientras veía a un lastimado Alberto en su cama, le dolía ver a la persona que amaba de esa manera, le había prometido cuidarlo y ahora solo se sentía miserable, si no podía proteger a Alberto entonces ¿Cómo le demostraría que era lo más importante para él? ¿Cómo le pediría una oportunidad de ser más que amigos si no era capaz de cuidarlo?

Sin más Guido empezó a sollozar, pequeñas lágrimas pero sinceras caían de los ojos del pelicastaño, si tan solo hubiera llegado más temprano, tal vez nada de esto hubiera pasado, lamentándose nuevamente.

A:-Hmp...

Un leve quejido solto Alberto mientras se retorcía en su cama.

L:-¡Alberto!

Guido se acercó al moreno, pasando una mano sobre su frente, apartándose bruscamente después de tocarla, mirando a Luca con una cara de miedo.

L:-¿Pasó algo?
Gu:-E-esta hirviendo en temperatura...

Luca miró de reojo al moreno, quien no dejaba de tener una cara de dolor, cerraba sus ojos apretandolos mientras salían pequeños gemidos de molestia, estaba sufriendo y eso era obvio.

Gu:-Necesito que traigas agua y trapos para atenderlo

La cara de Guido cada vez era más preocupante, daba vueltas por toda la habitación mientras sentía el mundo caer a pedazos

L:-C-claro...los buscare en la cocina...

Luca salió de la habitación con un sentimiento de remordimiento, sentía un fuerte dolor en el pecho, no le agradaba la idea de dejar solo a Alberto con Guido, pero debía sincerar su corazón, ambos estaban enamorados de la misma persona.

A:-G-guido...

Poco a poco Alberto abría los ojos, viendo con dificultad a un chico pelicastaño en su habitación.

Gu:-¡Alberto!

Guido corrió a su lado, sentándose en una esquina de la cama, tomando la mano de Alberto pasándola por su mejilla.

Gu:-A-Alberto...no te preocupes mi amore, ya estoy aquí contigo...

(¿Cómo explicarle a mi boca que no la besaras?)

Alberto había despertado con dificultad, viendo a Guido a la cara, mientras veía sus heridas aún presentes

A:-G-guido...Tus heridas
Gu:-E-eso no importa Albi, lo importante en este momento es que trates de descansar

Le regalaba una sonrisa forzada, le dolían sus rasguños sin duda dejarían una marca con los días, pero no quería demostrar su preocupación, sin embargo...

A:-Te lastimaron por mi culpa... lo lamento

La voz de Alberto cada vez perdía más la fuerza, no era fácil para él saber que las personas que están a su lado siempre terminan lastimadas, sentía culpa

A:-Déjame ayudarte...

Alberto pasó su mano bajando por los labios de Guido, retirando cuidadosamente rastros de sangre que seguía latentes a causa de los golpes de Eliot

Gu:-Oye... de verdad no es nada...

Las lágrimas en los ojos esmeralda no se hicieron esperar, mientras acariciaba levemente la cara de Guido, había pensado en el gran apoyo que le ha dado y sobre todo en el cariño incondicional

Gu:-Te prometo que estaré bien , por ti soy inmune a los golpes...

La mirada de Alberto y Guido se conectaron, haciendo valer cada golpe recibido y dado hasta ese momento, inconscientemente Guido se acercó a la cara del mayor, en específico a cierta zona de los labios, mientras sentía un sonrojo en su cuerpo, realmente estaba enamorado.

Sin embargo el pobre de Alberto antes de lo visto, perdió nuevamente la conciencia la fiebre era tan alta que se quedó dormido mientras buscaba un consuelo para sentirse mejor.

Todo esto pasaba mientras Luca subía a la habitación con sigilo, con un poco de agua y trapos en mano, solo alcanzó a escuchar una de las frases que se negaba a aceptar.

Gu:-Alberto...lamento no haber llegado antes, pero te prometo que no te dejaré solo otra vez, por que yo Guido Rossetti daré mi vida por ti... porque te amo Alberto Scorfano

Finalmente Guido volvió a arropar a Alberto quien seguía en un profundo sueño, el pelicastaño se acercó y beso de manera tierna la frente del moreno, sin saber que Luca había visto por la perilla aquella escena, sin saber que ahora era consciente sobre su confesión.

Luca sintió una punzada demasiado fuerte en el corazón, sus ojos empezaron cristalizarse, su estómago le dio vueltas y sin querer estaba dando respiraciones profundas jadeando, sentía que se desplomaria en cualquier momento, Bruno lo empezó a molestar

L:-A-Alberto...

Se negaba la idea de pensar que Alberto estuviera con alguien que no fuera él.

Esto no era parte de su plan, se suponía que terminaría la escuela regresaría a Portorosso, le confesaria su amor a Alberto.

Se suponía que ellos debían ser pareja como todo el mundo esperaba, incluso él, se supone que esperarían el día de su boda....

Se suponía que serían felices, pero ahora... por la cabeza de Luca solo pasaba una pregunta...

¿Alberto sentirá algo por él ?

Luca giro levemente la perilla, solo para ver como la cara de Guido pasó a una de enojo nuevamente al percatarse de unas marcas en el cuello de Alberto..

Gu:-...Marco....estos son.... ¿Chupetones?

Luca sintió su cuerpo débil sin duda quería despertar de esa horrible pesadilla, pero enfrentaría a Guido de eso no tenía ni la más mínima de las dudas.

Entró a la habitación, sorprendiendo a Guido quien tenía la cara llena de cólera, estaba furioso por su recién descubrimiento.

Gu:-Luca quiero que te quedes a cuidar a Alberto...
L:-¡¿Qué?!

Decía mientras Guido tomaba su chamarra dispuesto a irse del lugar de una manera agitada.

L:-Guido...¿Que planeas hacer?
Gu:-Voy a la casa de Marco, ese idiota me las va a pagar...
L:-Es una broma ¿verdad? ... Guido le acabas de romper la cara...
L:-¡Sabes que te meteras en problemas o aun peor meteras en problemas a Massimo!
Gu:-¡Acaso ya le viste el cuello a Alberto, tiene chupetones y mordidas!

Luca al recordar las verdadera razón de aquellas muestras de "afecto" no pudo evitar sonrojarse, posando una de sus manos en sus labios.

Gu:-Escucha Luca... Estoy seguro que ese idiota se las hizo y no planeo pasar esto por alto
L:-No...
Gu:-¿Ugh? ¿Dijiste algo?
L:-¡NO PLANEO QUE COMETAS UNA TONTERÍA PARA ARRUNIARLE LA VIDA A ALBERTO!

La platica en la habitación subia cada vez de tono, empezando así una pequeña riña entre ambos chicos quienes ahora solo discutían

Gu:-¿A que te refieres con eso?
L:-Marco es amigo de Ercole, si le dice del accidente de hoy, los Visconti pueden meter en problema a los Marcovaldo
Gu:-¿Qué pretendes que haga?
L:-Guido ve a casa...trata de descansar ya hiciste bastante
L:-Los secuaces de Ercole siempre terminan haciendo eso ¿Verdad?

Recordando los acontecimientos de la infancia,Guido sintió como su coordura empezó a perderse.

Gu:-¿A que te refieres Paguro?
L:-Ya me escuchaste

Decía Luca de una manera seria y fría, mostrando por primera vez aquella cara, una que nunca se había, era un niño dulce e inocente en público pero en el fondo dentro de él se encontraba una persona territorial y celosa que estaba dispuesto a enfrentarse a quien fuera por la persona que juro amar.

Gu:-No planeo irme del lado de Alberto el me necesita y tampoco voy a dejar que ese par lo moleste...
L:-¿No lo entiendes?
L:-Lo que menos necesita Alberto en este momento son problemas, sera mejor que regreses a casa...
L:-Yo cuidare de mi Alberto...
Gu:-¿Tu Alberto?

Ahora ambos chicos se veían de manera desafiante el uno al otro, sin duda el coraje estaba por sus venas.

L:-S-solo...
Gu:-¿Sabes que...? Yo al menos defendí a Alberto de esos idiotas, mientras tu te quedaste sin hacer nada
L:-E-eso no es verdad...
Gu:-¡Siempre haces eso!...
Gu:-¡Siempre esperas que los demás te salven pero no puedes hacer nada por ellos!
L:-Guido... Cállate

Ambos estaban perdiendo el sentido de las palabras cegado por su ansiedad de saber que pasaría después, se estaban dejando llevar sin saber las consecuencias de sus actos

L:-¿Qué sabes tú de Alberto?
Gu:-Apuesto qué mucho más que tú...
Gu:-¿De verdad piensas que lo conoces, solo porque son amigos de la infancia?
L:-B-bueno yo...

(¿Como decirle al corazón que tu no volverás?)

Gu:-¿Acaso tu lo conoces mejor que nadie?
Gu:-Acaso sabes que... Alberto le teme al fuego desde su accidente en el barco, o que su sabor favorito de helado es la vainilla

L:-(Silenzio Bruno...)

Gu:-Acaso viste su alegría cuando finalmente pudo escribir su primera carta para ti, pero adivina ¿quién le enseñó?
Gu:-¿Sabes que Alberto siempre ve las estrellas antes de dormir?
Gu:-Siempre me cuenta la anécdota de las anchoas

L:-(¡Silenzio Bruno...!)

Gu:-Que odia estar solo y le gusta dormir siempre acompañado, porque le da miedo la oscuridad y porque tiene miedo de que todo esto sea un sueño y que al final despierte en la torre de la isla ¡¿SEGURO QUE LO CONOCES MEJOR QUE NADIE?!

L:-¡Ya cállate!

Luca sentía nuevamente como su mundo se caía en pedazos, el se había ido a estudiar, fue su decisión pero a costo de perderse los momentos más preciados de Alberto, sintiendo su corazón romperse...

Guido había reaccionado de sus palabras, vio a Luca llorar en el suelo analizando la situación, sintiendo remordiemito de haber dicho eso.

No era culpa de Luca después de todo, por lo que se acercó arrepentido queriendo disculparse.

Gu:-... Oye Luca... Yo no que-

Sin embargo Luca en un momento de ira cegado por su Bruno interno empujó a Guido, evitando que este se acercara a Alberto

Gu:-¡¿Cuál es tu problema?!
L:-¡Tu eres mi problema Guido!
Gu:-¡¿Qué?! Solo hago esto por Alberto, no entiendes que...
L:-¡YO TAMBIÉN ESTOY ENAMORADO DE ALBERTO!

Aquellas palabras sin maquillarlas habían salido de la boca de Luca mientras sollozaba, sentía todo su cuerpo desplomarse, cayendo al vacío...

Los ojos de Guido se abrieron, quedando en blanco aquellas palabras fueron como un balde de agua fría, un golpe de realidad del cual no se levantaría tan fácil.

Su cabeza le estaba dando vueltas, ¿Como fue tan ciego para no darse cuenta? Todas las señales estaban presentes como para saber que Luca sentía más que una amistad, pensando en si Alberto correspondía esos sentimientos, sintiendo su corazón a punto de estallar.

Ma:-¡YA BASTA!

El ambiente se había interrumpido ya que Giulia, Ciccio y Massimo llegaron a la casa Marcovaldo interrumpiendo la pelea que estaba a punto de dar contienda.

Ha pasado media hora desde el accidente, Luca y Guido no se habían dirijido la palabra.

Gu:-Tsk*
C:-Ya casi termino...

Ciccio le ponía pequeñas bandas adhesivas a Guido en sus heridas, mientas terminaba de tratar las de sus brazos y piernas, todo esto mientras un ambiente de tensión e incomodidad se hacía presente.

La puerta de la habitación del moreno de ojos esmeralda se abrió, saliendo Massimo y Giulia con un botiquín y agua, aparentemente la fiebre de Alberto se había detenido mientras sus heridas fueron curadas por la pelirroja

Ma:-Tengo que hablar con los padres de Marco y el otro chico Eliot, las cosas no pueden volver a pasar
G:-Te acompañaré padre

Massimo salió del recinto de los Marcovaldo, acompañado de su hija y su fiel felino quien estaba en su hombro

C:-Será mejor que me vaya...

Dijo Ciccio mientras le daba ánimos a Guido, la madrugada había caído y sus padres se preocuparía si no regresan a dormir

G:-Luca... Puedes dormir en el escondite...
G:-Creo... que es mejor que Alberto descanse un poco
Ma:-Guido sabes que si quieres quedarte eres bienvenido
Gu:-C-claro... Gracias signor Marcovaldo

Los tres habían salido de la casa en busca de clarificar las cosas, sin embargo Guido no tenía intención de dejar a Alberto en un momento crítico como este.

Guido y Luca entraron a la habitación del mayor sin cruzar palabras o miradas, ahora ambos desconfían del otro, mirando a Alberto dormir plácidamente con una gran cantidad de vendajes.

Guido tomó una pequeña silla de madera y la coloco a lado de la cama de Alberto lo tomó de las manos, esperando un milagro de recuperación.

Luca por su parte se había acostado en el pequeño espacio entre la cama y el cuerpo de Alberto, mirando al techo querido tener la oportunidad de poder hablar una vez más con el de ojos esmeralda.

Sin decir nada, sin quitarse la ropa de las fiesta, las horas pasaron y cuando menos lo sintieron se quedaron dormidos.

Guido tomando de la mano de Alberto y Luca inconscientemente abrazando su cintura.

(...)

Presente

La mañana había golpeado al pueblo, un nuevo día comenzó, todos se encontraban desayunando en la casa Marcovaldo.

Se encontraba cierta incomodidad en los presentes que compartían desayuno, los relegados y Guido acompañando a su "enamorado"

Alberto se encontraba sorprendido por lo ocurrido en esta mañana, todavía recordaba como despertó con ambos chicos a su lado sin tener conciencia de lo ocurrido una noche anterior.

El desayuno terminó y Guido se despidió de Alberto, deseando su recuperación, si era sincero con él mismo no quería irse pero debía regresar, sus padres debían estar preocupados de saber en donde pasó la noche.

Eso sin mencionar que el día siguiente sería el ¡Gran día del festival de Portorosso!...el día de su confesión...pese a saber los sentimientos de Luca, el plan seguirá su curso, sin importar que...

Gu:-¡Ciao Alberto!
Gu:-Te veo mañana en el festival, que te recuperes

Se despidió Guido mientras le daba un cálido beso en la mejilla, después de eso el chico se fue...

L:-¡ALBERTO!

Luca corrió a refugiarse a los brazos de Alberto, el mayor todavía no entendía el comportamiento de Luca esa mañana, si era sincero con él mismo, el pequeño de cabellos chocolate había sido más cariñoso de lo usual, no lo había dejado ni un segundo de abrazar o de tomarlo de la mano, simplemente le estaba dando demasiados mimos de cariño.

A:-Oye... Mi burbuja ¿esta todo bien?
L:-¿Podemos hablar?

L/Gu:-(No importa a quien vas a elegir te seguiré aún así queriendo)

Final del capítulo 8.
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Volví después de casi una semana, perdón por eso, pero apenas termine mi semestre y la cantidad de tareas fue ridículamente alta... Pero ya salí de vacaciones por lo que esta semana habrá recurrentes actualizaciones.

🛐Les dejo una imagen de referencia de donde salió la apariencia de Marco, son dibujos de ig-@soupdusilence

🛐Y bueno también aclarando que los siguientes capítulos, serán específicos para las parejas, ya que se acerca el capítulo de la confesión antes de eso cada pareja tendrá un capítulo de desarrollo en donde solo se tocará su ship ya sea Luberto o Guiberto, entonces a partir de él siguiente capítulo sólo se tocará un ship en específico y no se mencionara nada del otro.

🛐Y recuerden niños no es chapulinear, a mi me gusta decir que la tierra es de quien la trabaja...
Bai