CAPÍTULO 16. (Epílogo GUIBERTO)
Epílogo GUIBERTO
Final Pt. 2
Gu:-¡Buenos días Ciccio!
Estar enamorado, es una de las mejores sensaciones y eso Guido lo sabía, estaba descubriendo uno de los sentimientos más fuertes, el pelicastaño que antes vivía en miedo y resignación ahora se encontraba simplemente perdidamente feliz.
Guido erradiaba una felicidad nunca antes vista, estaba más que enamorado de su joven ragazzo Alberto Scorfano.
Con quien había entablado una relación amorosa desde ya hace medio año, Rossetti estaba feliz y eso se notaba...
Si bien al principio fue complicado que el pueblo aceptará de su relación, poco a poco fueron aceptandolos viéndolos como una de las parejas más lindas en la historia de Portorosso.
C:-¿Hoy fueron girasoles?
Gu:-Fueron narcisos.
Guido se consideraba a si mismo como el chico más afortunado de Portorosso y diariamente recibía flores de parte de Alberto, no había ni un solo día en que un ramo de flores no llegara a la panadería de los Rossettis.
Y como si fuera un milagro a la panadería entró un joven moreno, ojiverde en vísperas de diecinueve años.
A:-¡Ciao cariño!
Gu:-Albi, mi amore...
Guido en cuanto vio a su ragazzo no dudo ni un minuto en saltar a sus brazos y plantearle un tierno beso sonoro en los labios.
Gu:-Ciao amore...
A:-Me preguntaba si querías ir a un pequeño picnic que yo mismo prepare en las afueras del pueblo
Gu:-No habría nada más que me hiciera feliz mi amore...
A:-Te veo después del trabajo amor...
Gu:-Suerte Albi, aunque se que no la necesita pues eres el mejor pescador de Portorosso...
A:-Después de Massimo claro...
La joven pareja se despedía con una seria de abrazos y mimos, pues ambos tenían tareas que hacer prometiendose verse en la tarde, todo esto mientras eran observados por Ciccio, quien sí bien estaba feliz de ver a sus amigos contentos, debía admitir que aveces estos dos podían pasar la barrera de ser demasiado melosos en público.
Mientras Alberto se hiba al trabajo en los botes y en la pesca, Rossetti terminan a de hornear el pan para después irse a casa de su ragazzo y ayudar en la pescheria.
C:-Me alegra verte tan feliz...
Gu:-No tienes ni idea...
Decía mientras soltaba un suspiro de enamoramiento...
Gu:-Ciccio esto han sido el mejor medio año de toda mi vida...
Gu:-Y todo gracias a ti...
C:-¿Disculpa?
Gu:-Fue gracias a ti que tuve el valor de confesarme a Alberto, tu tuviste la mejor idea de todas.
Rápidamente el pequeño Guido abrazo a su amigo regordete, mientras daba pequeños saltos sobre si mismo
Gu:-Juro que jamás había sido tan feliz...
C:-Todo fue gracias a que tuviste el valor de decirle a Alberto que es lo que sentías, te atreviste y pudiste cumplir tu sueño
Ciccio le daba pequeñas palmadas a su joven amigo mientras lo animaba
C:-Todo el pueblo dice que su relación es una de las más lindas.
Gu:-Y cómo no, si tendré de compañero de vida al gran Alberto Scorfano
C:-¿Cómo lo tomó tus padres?
Gu:-Bien....
Gu:-Al inició papá no lo tomó de la mejor manera, pero Alberto poco a poco se está ganando su confianza , al contrario a mi madre le agrado demasiado
C:-Me alegra saber que todos los apoyan...
Gu:-En realidad, no todos....
Si bien Alberto era un chico extraordinario, no todos habían aceptado su relación con Guido, en especial un niño de tez blanca pecoso que estaba a kilómetros de distancia ahora en Génova.
(...)
Ahí es se encontraba nuestro dulce mucho, Alberto Scorfano en la costa mientras cargaba las redes de la pesca del día.
Sin embargo algo dentro de se encontraba inquieto, sabía que estaba siendo observado por Ercole y sus secuaces, desde que se enteraron de la formalización de su relación son su antiguo secuaz...
A:-Hasta cuando planean dejar de verme idiottis
E:-¿Realmente no tienes pudor?
A:-¿Qué quieres Ercole?
E:-Solo decirte que me da repudio saber que estas con Guido
De las sombras salió, Ercole acompañado con Marco y Eliot, quien veían al mayor con cierto resentimiento
A:-¿Tienes algún problema con ello?
E:-Sólo digo que ustedes dos hacen una terrible pareja
La única finalidad de Ercole desde que llegó de su viaje era provocar a Alberto, incitandolo al odio.
E:-Vamos vaggo, todos sabíamos que terminarías con el otro Picoletto, pero veo que no fue así...
E:-En su lugar, corrompiste a Guido, ¿no te da vergüenza?
Esta era rutina diaria en la vida de Scorfano, soportar los insultos de Ercole y el constante acoso de Marco.
A:-Bien...sabes que, no tengo tiempo para esto...
Alberto estaba por irse rumbo a la pecheria de los Marcovaldo, sin embargo fue detenido por Visconti
Ercole, rápidamente empujó al monstruo marino, haciendo que este empezará a perder la cordura.
A:-¡Bien! Tu lo pediste Visconti
Alberto se abalanzó al cuerpo del mayor, tomándolo por el cuello de la camisa, cerrando su puño en dirección de su cara.
El moreno, estabas a punto de golpear a diestra y siniestra forma a Ercole, sus provocaciones estaban dando frutos, demostrando así lo peligroso que seguía siendo las criaturas marianas.
Gu:-¡ALBERTO!
Guido hizo acto de presencia , había escuchado el gran alboroto al momento de ir a la pescheria.
A:-Pero cariño
Gu:-Ya habíamos hablado de eso...Prometiste que ya no más peleas
A:-P-pero él se lo ganó.
Gu:-No vale la pena Albi, mejor vamos a la pescheria...
Solo bastó una falsa cara de enojo y una mirada de desaprobación por parte de Guido, para convencer a Alberto de dejar el conflicto.
Las pareja se alejo de la escena dejando a los chicos confundido, todo esto mientras se tomaban de la mano, pese a tener una relación, se complementaban de una manera positiva.
El carácter explosivo de Alberto se contrastaba con el tranquilo de su ragazzo Guido quien lo calmaba, demostrando quien la mayor de veces tomaba las riendas de la relación.
Gu:-Dijimos ya no más pelas
A:-Lo lamento mi marinerito
Pero Guido no podía estar molesto con Alberto para siempre, por lo que terminó dándole un abrazo a su ragazzo.
(...)
En una pequeña parte de la cuidad de Génova, se encontraba un pequeño de rosadas mejillas y lúdicas pecas, acompañado de su mejor amiga, la que consideraba su hermana Guilia Marcovaldo.
El pequeño Luca fue quien peor se tomó la noticia de saber que Alberto y Guido habían iniciado una relación.
Desde aquella noche de rechazo, le molestaba la idea de pensar en todos los días y veladas que ambos vivían, le repudiaba saber que Guido podía deleitarse del manjar que eran los labios de Alberto.
No había perdido la esperanza, aún cuando su mejor amiga le había insistido por estos largos seis meses que dejara ir a su hermano.
L:-Bien ahí va otra amore...
Decía Luca mientras ponía aquel sobre de carta en el buzón de la avenida, había ido por una de las cuantas cartas que le mandaba semanalmente a Alberto contándole su día a día, pero haciendo hincapié en sus sentimientos.
No bromeó cuando digo que el pequeño Luca tenía la intención de recuperar a Alberto a como diera lugar, detestaba a Rossetti, jamás imagino que era posible odiar tanto a alguien, hasta que el joven Guido se cruzó en su camino.
L:-¡Giulia volví!
Después de unos minutos, Luca regresó al pequeño departamento de la signora Marcovaldo.
G:-Ciao Luca, ¿donde estabas?
L:-Fui a dejar la carta al buzón
Guilia al oír tal confesión no puedo evitar ver a su amigo con una cara de angustia y muecas de tristeza
G:-¿Tu carta semanal para Alberto?
L:-¡Así es! Estoy muy emocionado por las vacaciones de invierno, planeo estar todo el día con él
G:-Luca...
(Quiero quedarme a tu lado por siempre)
¿Porque no puedo estar contigo?
L:-Sabes últimamente pensé que... Podríamos decirle la siguiente vez que lo vea que considere mudarse aquí con nosotros
G:-Luca ragazzi escucha...
L:-Estuve investigando sobre escuela de arte, creo que el tiene un gran talento, asi estáticos los tres juntos y en un futuro cumplir nuestro sueño de viajar juntos en la vespa...
Luca no había aceptado la idea de perder a quien era el chico de sus sueños, el y Alberto debían haber terminado juntos, ellos se aman ¿verdad?
Estaba perdiendo la conciencia poco a poco, cegado por bruno y los sentimientos de negación estaba cobrando factura en su joven corazón.
G:-¡Luca basta!...el esta con Gu-
Los ojos de Luca se humedecieron antes que la pelirroja pudiera tan siquiera terminar esta oración.
Veía a su amigo y pese a no querer entrometerse de más otra vez en esta situación, no dejaría que tomará partido en dirección de alguno de los dos.
Amaba a los dos chicos como sus hermanos y mejores amigos, pero con el pecosos su relación era diferente, con Luca convivía todo el año a tal punto de verlo como el hermano menor que nunca tuvo, aquel que debía proteger, verlo llorar era lo que más odiaba.
La pelirroja pensó que no estaba mal si talvez lo ayudaba, no era lo correcto pero... ¿Qué si lo era?
G:-Todavía amas a Alberto... ¿No es así?
L:-Con toda mi alma
G:-¿Qué planeas hacer?
L:Recuperar su amor, enamorarlo nuevamente, encender la chispa del amor que ambos tenemos... Y desacherme de él
(Si lo pierdo todo, ¿sere capaz de vivir en paz?)
(Todos los pecados, las heridas y los sentimientos)
G:-Espero que sepas lo que harás Luca
G:-Supongo que no me queda opción que ayudarte
L:-Serán las vacaciones más largas... Pero iré por ti mi amore...
Tenía una vacaciones para recuperar a Alberto y separarlo de Guido, si no lo lograba tenía demasiados veranos por delante para conseguirlo.
Porque Luca, no se daría por vencido, ni en sueños dejaría de luchar por su amor de verano.
L:-(Si no es en este, tal vez será el siguiente verano)
(Me pregunto porque no puedo ser el único)
(...)
A:-Tienes todo listo amore...
Gu:-Ya casi lo tengo Albi
Estaban los chicos en la casa Marcovaldo, empacando lo necesario para su velada romántica, Guido preparando la canasta y Alberto las bebidas.
Ambos se habían arreglado para la situación, Alberto usando su característica playera roja, el collar que le regalo Guido en aquella ocasión y en su dedo índice un anillo dorado.
Mismo par que Guido tambien tenía uno en su dedo índice, un regalo del Alberto cuando lograr festejar su último aniversario.
A:-Andiamo Guido
Ambos salieron de la casa Marcovaldo a las colinas en las afuera de la ciudad, todo esto mientras ambos sostenían sus manos, enredando sus dedos.
Caminaron hatsa llegar al lugar acordado, en el camino estaba repleto de margaritas por lo que el moreno ojiverde no perdió la oportunidad, de enredar pequeñas margaritas en cabello castaño de su ragazzo.
A:-Guido solo quiero decirte que... Estos últimos meses son para mi los mejores de toda mi vida.
A:-Estar a tu lado es lo único que necesito, porque cuando estoy contigo estoy en mi hogar
Gu:-Albi, me haces el chico más afortunado de todo Portorosso, eres mi alma gemela y no importa quien intervenga entre nosotros, yo no dejaré que algo te pase...
Guido fue acercándose poco a poco a su ragazzo abrazandolo por el cuello.
Gu:-Mi amor por ti es tan inmenso y real que prometo que estaré para ti en todos los momentos y me esforzaré por ser un buen ragazzo, por hacerte el chico más feliz de Portorosso
Gu:-Prometo que seré la mejor versión de mi la que me insipras ser, seré el ragazzo del cual te sientas orgulloso...
Ambos se juntaron en un corto beso, un leve rose que fue suficiente para profundizarlo, se amaban y de eso no tenían dudas.
Guido pasaba las yemas de sus dedos por los risos de Alberto, mientras que con la otra tomaba su mejilla dándose un beso lleno de amor y lujuria que marcaría el inmenso amor que ambos sentían..
La noche había caído a Portorosso, después de su velada romántica donde reinaban los mimos y amores, Alberto estaba en la casa Marcovaldo encerrado en su habitación.
Sin embargo estaba con la compañía de su ahora ragazzo Guido, este a petición de Alberto se había quedado a descansar en la casa de su suegro.
Y tal como un recuerdo del pasado, como si de un dejavu se tratara, ambos estaban bajo la fría sabana de la cama.
La luz de la luna que pasaba por su ventana, ninguno había conciliado el sueño sólo estaban viéndose de forma directa hacia los ojos, en silencio, verde y café se miraban directamente.
Las mejillas de ambos se coloreban de color rojizo, están en silencio pero uno cómodo, no hacían falta las palabras eran de sobra ambos, solo querían estar juntos.
Alberto deslizó una de sus manos acariciando la suave piel de Guido, era una piel de porcelana, un diamante en bruto que lo había sido valorado hasta entonces.
A:-Ya te dije que eres lo más hermoso que he visto en toda mi vida
Ambos estaban enamorados, no importaban quien se metiera en su camino, eran felices juntos.
Alberto no podía estar más feliz de haber hecho su elección, escoger corresponder a Guido había sido su mayor felicidad.
Nadie le había hecho sentir tal sentimiento, estar con la persona amada, sentirse la prioridad de alguien más, el amor y el calor del cariño
Gu:-Ti amo Alberto....
A:-También ti amo Guido...
Se pertenecían sin importar la opinión de otros, se amaban y era lo único importante.
Pesé a que sabían que los chicos de Génova nunca aceptarían su relación, ellos estaban felices de tenerse.
A:-Porque somos un equipo y por qué siempre te apoyare mi dulce amore.
Sellando así bajo la luz de luna su amor, ambos se acercaron sin más juntaron sus labios.
En un tierno beso, seguido de una ronda de caricias y de mordidas, dejando marcas que serán visibles pero ya no les importaba, se pertenecían.
La joven pareja pasó el gran rato envuelta en una guerra pasional, besos sonoros, leves gemidos y mimos fue lo que se escucho en aquella noche.
Quien diría que todo esto fue gracias a una elección que había hecho el buen Alberto Scorfano, encontrado a la persona a que amaría por la eternidad, su media naranja y su compañero Guido Rossetti.
Y todo gracias a una elección.
(Choose me)
Fine -
Choose me
Final GUIBERTO Pt.2
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Nota :
🛐Ya estamos finalizando este proyecto, que me tomo casi cuatro meses....
Si cuatro meses... ¿Me estoy volviendo loca?
🛐En fin pido una disculpa por mi tardanza, pero prometo que mis cuestiones de escuela con muchas, considero incluso dejar de escribir por un rato.
🛐Ya podemos descansar porque ya se terminó esta historia 🥰 y....
X:-Pero te falta el especial poliamor y bercole....
Inbeth :- ª
Los espero en el siguiente final a manera de especial.
Bai
Créditos
Imagen de Separadores y de inico
Ig. @Kazumitoshio
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