Viernes.

Taehyun besaba a beomgyu mientras sentía como el efecto del celo se iba lentamente. Ya había pasado toda su semana y no tenía quejas, ya era un lindo omeguita marcado por su alfa.

Taehyun amaba mucho a Beomgyu, era su alma gemela y lo sabía desde el comienzo de todo.

"Alfa... mimos." Exigió, beomgyu se rió un poco y asintió.

"Con gusto." Beomgyu acarició los muslos del menor y le pasó la mano por el cabello tiernamente.

"Eres muy hermoso, ¿Sabés?" Taehyun de sonrojó furiosamente y solo le dió un beso al mayor en respuesta.

"Tu también eres muy hermoso, el mejor alfa que pude tener."

Beomgyu sonrió y siguió acariciándolo. Taehyun era su bebé, su lindo omega.

"¿Nos vamos a casar en el futuro?" Beomgyu río ante la pregunta del menor. Por supuesto que lo harían.

"¿Qué clase de pregunta es esa? Por supuesto que si nos casaremos en unos años. Eso es lo que quieres, ¿No?" Tae rápidamente asintió muy contento.

"¡Si! Porfavor, quiero casarme contigo."

"Pronto, solo tendrás que esperar un poco."

"Te amo mucho, beom." Beom le dió un sonoro beso en los labios  y otro en la frente.

"Yo también te amo muchísimo. Gracias por dejarme acompañarte en tu celo. Sé lo mucho que importa eso en los omegas así que lo aprecio demasiado."

"Eres la única persona con la que pasaría un celo, eres lo mejor que me pasó."

Beomgyu sonrió, sabía que taehyun jamás lo abandonaría y viceversa. Estaba tan contento, ahí es donde pertenecía, en brazos de su lindo omega mientras recibía besos de sus labios pomposos.

Ahí es de dónde ambos pertenecían. Pertenecían a su amor.