Los demonios son una creación hecha con los mismos ingredientes que contiene un ser humano; lujuria a un nivel pasional, envidia a morir, egocentrismo pedante, ira de los mil infiernos, inhumanidad injusta, locura de pecado... amor eterno.

Un demonio es tan capaz de desear algo a un extremo de ilusión que hace cualquier cosa por conseguirlo así demore siglos. Lo que más anhelan estos seres es vivir el paraíso al que se le prohibió entrar por mandato de un dios omnipotente, todos quieren escapar de sus cadenas atadas al infierno.

Ellos buscan y se sienten atraídos por aquellas personas de energía blanca inmensa, llenas de imaginación sin límites, con cuerpos débiles expuestos a un robo fácil; la única manera en que pueden permanecer todavía con los mortales es si se hacen pasar por uno, su método más práctico es conseguir una especie de chivo expiatorio a base de engaños y contratos.

Con mi experiencia entre los mortales alcanzo a creer que esto no es nada fuera del otro mundo para ellos, pues los he visto hacerlo día con día en su rutina, es por ello que un demonio no me parece diferente de un humano común y corriente.

A todo esto, sólo me queda concluir que para salvar a mi padre y devolverlo a donde pertenece dada su condena, yo mismo debo alentar el proceso, por su propia cuenta jamás sucederá, no acepta su destino y se mantiene aferrado a una realidad ajena a su existencia, ya no podrá ser humano de nuevo, Hab y Bramatugh lo confinaron a ser un demonio, no hay más. Las cartas no tienen que ser devueltas una vez el juego comenzó.

-Handree Nótt Mány/ anotación de demonología básica/ estudio sobre Zomadr

Cuerpo celeste

[Voz de narrador: Handree Nótt M.]

En realidad no recuerdo gran parte de mi vida pasada y sé muy poco sobre el final, lo que más claro está en mi es el punto medio.

La guerra entre La luna y El sol estuvo planificada desde mucho antes que diera inicio. La ley dictaba forzosamente que los lazos entre ambos reinos deberían ser forjados por el amor y la sabiduría solidaria, pero quienes se destinaron a cumplir sus mandatos cambiaron el significado, en lugar de ello predominó el odio y la envidia, predominaron las dudas y la exigencia del saber más allá de desear un aprendizaje.

Supuestamente, la maldad y el castigo existen por desobediencia; en este caso, durante mucho tiempo se creyó que había de por medio un ataque de traición, por lo tanto, no habiendo desobediencia, sí estuvo presente la rebeldía.

Cuando llegó la noticia de que papá había muerto en manos de quien en ese entonces fue el regidor de El sol, no tardamos mucho en levantar armas, aunque naturalmente primero se debía proceder a elegir un nuevo líder. Umerio y yo competimos por sustituir el lugar como hijos, yo hubiera desertado sin problemas, pero sinceramente lo conocía muy bien, mejor que a mí mismo, entonces mi pelea iba más lejos de querer el poder.

Mi hermano era igual que mi padre; avaricioso, ansioso y terco, así que de inmediato supe que si él se quedaba con la victoria, muchas cosas destructoras vendrían próximas.

Por otra parte estaba el otro extremo del conflicto; se dice bastante sobre que un solo factor puede alterar gravemente el resultado final, tal cual dicen estas palabras es cierto. Yo siempre he creído que una persona no es cruel únicamente porque así lo quiere, influyen bastantes piezas en su vida. Hablando directamente sobre Heihos... nunca tuve el privilegio de conversar cara a cara con él, sin embargo, de haberlo hecho estoy seguro que más de una vida se hubiese salvado, más de un destino sería mejor que ahora.

ーDecís llamaros mi hermano, pero está de más deciros que la sangre que corre por vuestras venas es la de un traidor.

ーHe tratado infinitas veces de explicar todo esto, Umerio... Si me cerrais las puertas, no puedo hacer mucho.

ー¿Para qué? ¿Para que en una de estas me vengáis con el cuento que de estuviste involucrado en el asesinato de nuestro padre? Ahorradme la decepción, por favor ーUmerio dio media vuelta y caminó hasta las puertas de la gran habitación en que se encontraban discutiendo.

ー¡Sal por esa puerta y dad la espalda como cobarde! ーexclamó Handree con firmeza.

Umerio me escuchó y detuvo su paso... no olvido lo que sentí en ese momento cuando volteó a verme; éramos apenas unos plebeyos adolescentes, aseguro que nuestra pelea, si estuviésemos ahora mirándonos, nos daría risa sarcástica, pues nos dejamos cegar por el enojo y no buscamos una solución, buscamos un culpable.

ーOs vi con mis propios ojos, inventar una excusa estaría en vano...o mejor aún ーregresó frente a su hermano y se detuvo para observarlo fijamenteー decidme con sinceridad qué sucedió en aquella ocasión ¿Qué fue lo suficientemente fuerte como para matar a nuestro padre?

ー...Heihos y su padre son inocentes... ーluego de enfrentar el rostro de su hermano en silencio, declaró sin una pizca de remordimiento ni de inseguridad.

Me sentí mala persona con no revelar por completo la verdad sabiendo que Umerio moría de la rabia, pero podía más el sentido de responsabilidad y compromiso que construí con mi padre. Le juré que jamás lo delataría. Hasta ahora, luego de siglos y siglos, he mantenido mi promesa, sin embargo, comienzo a creer que es tiempo de confesar.

A través del tiempo y con forme pasaron los años, fueron surgiendo muchos involucrados en esta guerra a contra voluntad gracias a las blasfemias de un ser tan egoísta como lo fue mi padre, incluyendo a Christen por ejempo, el mayor Jake mate y el prospecto perfecto para llevar las cargas de las consecuencias, afortunadamente él se desgastó y parece que el final ya no tarda en llegar... Espero no equivocarme.

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[De vuelta en los departamentos para pacientes de psiquiatría]

ー¡Shiner! ¡Hermano! ーLuna buscaba en cada rincón y cada edificio del lugar con su preocupación hirviendo y desbordándoseー ¡Shiner, tenemos que volver!

La rubia buscó un buen rato, llegó a imaginar incluso que su hermano se había devuelto a casa sin ella, no obstante, pisando por los escalones de uno de los edificios más viejos, alcanzó a percibir un incómodo olor a sangre muy penetrante en su nariz... y de no haber sido porque su cabeza de inmediato le mandó malas señales, no habría sido capaz de correr persiguiendo el fuerte olor hasta el final del pasillo, lugar en que asomó su vista por la sucia ventana presenciando la escena más escalofriante de su vida.

El cuerpo desfigurado de Shiner reposaba en el suelo indicando a Luna vaya a saber qué bestia lo devoró apenas dejando rastros de su ropa ensangrentada y mechones de cabello dispersos. La joven ojiazul no soportó el asombro ni el sentimiento, no contuvo echarse a llorar y vomitar del asco, imposible saber si eran peor los trozos de carne humana dispersas o la peste que dominó en el lugar. Sólo era cierta una cosa, quedarse de pie y seguir mirando no era una opción.

ー¡Lo lamento... lo siento mucho...! ーlloriqueando a mares, Luna recargó sus manos en la ventana grabándose cada detalle de la escena y, aunque le costaba como si una parte suya se le desprendiera del pecho, caminó lentamente alejándoseー ...Lo siento, hermano... Debí ser más consciente y detenerte... Perdóname...

Sin llegar al inicio de los escalones, sin haber cruzado enfrente del primer departamento, el ruido de unas pezuñas a paso veloz obligó a Luna apretar el suyo para escapar, pues bien sabía que algo la perseguía tal vez buscando destinarle el mismo final que a su hermano. A causa de escapar, una especie de fuerza invisible tiró de los brazos de la chica como tratando de regresarla arriba, pero ella forcejeó tanto que consiguió librarse de dicho agarre cayendo por unos cuantos escalones como consecuencia hasta topar el piso.

ー¡No podéis...! ーexclamó Luna adolorida y levantando su cuerpo del suelo con gran dificultadー ¡No podéis conseguirlo conmigo!

No esperó más tiempo, la rubia corrió en dirección a donde supuestamente se encontraba la explanada, esa era su prioridad, sin embargo, extrañamente, por más que corría, doblaba esquinas y seguía derecho, siempre volvía al frente del mismo edificio donde mataron a su gemelo.

ー¡Qué carajos...! ーgritó la joven deteniéndose con sus nervios de punta y dándose tiempo de limpiar las lágrimas de sus ojosー esto no es real... no estoy en el mundo real... ーse dijo a sí misma con la intención de reaccionar y pensar con claridad.

Mientras que Luna deambulaba para encontrar una salida, Zomadr vigilaba sus pasos muy de cerca, disfrutando de la tensión ajena como si volviera más deliciosa la presa.

ーDebe existir una manera de salir de esta ilusión, todo tiene un remedio ーpersistió entre susurros a si misma sin dejar de caminar.

Y entre esas conversaciones personales, en unos segundos que la joven prefirió correr a caminar, sucedió una especie de choque con "la nada" tan fuerte que la tiró al suelo. Ella no veía absolutamente nada enfrente suyo, pero claramente escuchaba voces de ningún lugar y poco entendibles, se sentía tan confundida que no concevía levantarse de nuevo.

《¡Lo juro, sentí que alguien me empujó!》

Dijo una de las voces.

ー"¡Ya entiendo!" ーpensó Luna con iluminación al fin poniéndose de pieー sigo aquí...

De pronto, tal cual una ráfaga de luz, se iluminó el fondo de un par de edificios a un costado de donde se miraba de pie la chica, algo a lo cual ella no dudó en acercarse. El rayo de luz era tan enseguecedor que al cruzarlo, Luna tuvo que entrecerrar sus ojos, detalle que le prohibió darse de cuentas que ya estaba nuevamente en su dimensión, varada a mitad de la explanada y atrás, junto a uno de los edificios principales, un par de ancianos conversando bajo el sol ¿Para qué esperar más? La ojiazul caminó rápidamente al portón de entrada/ salida y se piró del lugar... pero no se adelantó más de una cuadra sin antes echar una última vista a su martirio, el espacio que atestiguó los últimos respiros de su hermano.

Luna se consideraba a sí misma como una persona fuerte, capaz de pensar antes de actuar ante situaciones complejas, pero en el caso que la ocupaba actualmente... su fuerza le dio permiso para echarse a llorar con sus manos caídas y sin vergüenza de no limpiar sus ríos oculares. A pesar de aparentar que ella y Shio andaban por su lado individualmente, estaba segura de que era lo contrario, siempre estaban juntos y difícilmente se separaban, no había uno más débil que el otro, cuando se necesitaban, no existía qué o quién los tumbara... no obstante, con lo ocurrido recién, la ruleta de la vida la mandó a jugar sola a partir de ahora.

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Alise y Handree andaban camino a la propiedad de la mujer. Afortunadamente no dominaba el silencio ni la tensión, pero bien sabía Handree que se debía a que Alise evadía tocar el tema de Dalziel. Luego de casi media hora, a poco de llegar a la colonia Rosales, Alise al fin abrió debate con una pregunta que, sinceramente, el mayor no esperaba recibir.

ーHandree, ¿...quién es Umerio...?

El interrogado receptó la pregunta como una especie de examen del cual dependía su vida, no evitó tragar saliva con discreción e incluso se distrajo un poco del camino. Vaya que si bien a él no le correspondió hablar en la reunión que convocó Elian, sí sufrió de una apertura a sus memorias involuntaria, entonces no estaba del todo tranquilo.

ー¿Puedo saber por qué tenéis esa duda? ーdevolvió Handree con amabilidad y gran confusión.

ーMe lo he preguntado desde siempre, no es porque haya recordado de la nada que Matías me dio a entender que vos lo habéis conocido ーaclaró Alise.

ーVale, pero no sé del todo qué tenga de relación con vuestra familia ーadvirtió con despreocupaciónー sólo os puedo decir que era mi hermano menor, perdí todo rastro y contacto suyo desde mucho antes de conoceros a vosotros. No me creías mucho, tengo entendido que Matías era quien le conoció mejor después de mi.

ー¿...De qué época sois? ーvolvió a preguntar la rubia con total atención en Handree.

ー¿Época? ー Handree preguntó echando una leve risa y un suspiro de meditaciónー si no mal recuerdo, de más de seis siglos antes de que vos nacieras.

ー¿De verdad? ¿Cómo es que estuvisteis en donde fuimos encontrados nosotros? No entiendo porqué Matías y su hermana eran amigos vuestros.

ー¿Recordáis lo que nos compartió Elian? ーmiró fugazmente a Alise.

ーSi ーrespondió la rubia.

ーDiré que en esta vida existe un amplio universo y nuestra inteligencia no es la única ni la más avanzada, lo que su hermana explicó sobre ocupar un espacio en este mundo es la respuesta más cercana.

ーNo comprendo muy bien ーdijo Alise confundida y sin pizca de entendimiento.

ーTodas las personas tenemos habilidades y capacidades; veis a Dalziel, Elian, incluso vuestros hijos ーcontinuó atendiendo la vista al camino y pocas veces a la atención que Alise le brindaba encantadaー Aziz, por ejemplo, era muy perceptible, lo que le ocurría no cualquiera lo tiene, no cualquiera es tan sensible a las energías ni a saber que hay algo malo o bueno en cierto lugar.

ー... Anoche... ーAlise, luego de pensar con lo último que explicó Handree, se atrevió a compartir lo ocurrido en su hogarー no estoy completamente segura de que sea verdad, pero ayer...creo que Christen tomó a la fuerza a mi hijo para hablarme. Sé que es algo imposible, es sólo que (...) ーel mayor la errumpiórrumpió.

ー¿Tomó a la fuerza? Explicad mejor que no entiendo a qué va eso ーsu sentido de alerta e intuición se encendió de inmediato.

Alise explicó con lujo de detalle todo lo que sucedió desde la aparición del ente a Luna hasta su discusión con Shio, por alguna razón logró desahogar todos sus miedos y sus faltas de fe, ya ni siquiera estaban en el camino, tenían minutos de haber llegado a la entrada del arco de árboles.

ーAlise, hay que ser sinceros ¿De verdad creéis que existiendo tanto mundo somos los únicos con vida y rasocinio?

ーSé que de alguna manera estoy mal, pero ante tantas cosas extrañas sin respuesta me he cerrado por temor ーconfesó la mujer con agotamientoー ahí está Dalziel, la única persona que se suponía para mí era normal y resulta que le encuentro algo oculto. Fuera distinto si ese algo no sobrepasara límites.

ーPero la criónica no va lejos de también ser imposible y posible a la vez ーargumentó Handreeー sólo echad un vistazo a nosotros, estuvimos literalmente muertos mucho tiempo y nuevamente estamos aquí respirando un aire que ya no deberíamos gozar. La única diferencia es que esto tiene una explicación médica.

Alise no tuvo una respuesta ante las palabras de Handree, sus labios habían quedado completamente callados.

ーEl problema que yo veo es que estáis asustada nada más, con obvias razones igual, no voy a negarlo ーrecargó su brazo en la ventana del auto y prosigue a hablarー todos nos asustamos ante lo que no conocemos. Si sois religiosa por creencias deberíais saber bien de lo que hablo por todo lo que hicieron los católicos ante supuestos brujos en vuestra época. Les asustaba una fuerza mayor y desconocida fuera de lo que decretó Hab.

ー...La medicina también teme de los enfermos metales ーcomplementó Alise.

ーPorque no los entienden... y los torturan como si su existencia fuese un crimen ーHandree gesteó una mirada de molestia e inconformidadー Elian leyó los expedientes de Aziz y es imposible no sentir rencor con cada párrafo, pero eso es a lo que voy. Los humanos somos demoníacos, vemos algo ajeno o desconocido y actuamos de la peor forma posible. Lo que pasó con vuestro hijo, Shio, admiro a ese chico; prefirió escuchar a su moral para ayudar a Christen aunque no lo conoció jamás. Qué daría yo de que Umerio hubiese sido así, pero él fue otro cantar muy catastrófico.

ーY lo reté por hacer algo que yo no me atreví a hacer jamás... ーadmitió Alise con la culpa comiéndola viva.

ーSi estuviera en vuestro lugar, haría algo ya para acabar todo esto, leería la carta que Shio encontró. No sabemos qué pueda venir allí ni quién la escribió ーaconsejó Handree.

ー...Gracias por todo, Handree ーAlise sonrió conmovida y cargando la valentía de no ser una Magdalenaー me habéis ayudado más en media hora que si hubiese estado sola toda una noche.

ーIndependiente de todo, me gusta ayudar ーHandree devolvió la sonrisaー y es un placer ayudaros a vos y Dalziel.

ーSupongo también debo hablar con él, no me enorgullece decir que me puse demente con él ーsuspiró avergonzadaー ni siquiera lo dejé hablar.

ーYo estaba tentado a visitarlo, cualquier cosa sabéis que él es sencillo ーexternó el pelinegro convencido.

ーEso amo de él ーdijo la rubia sonriente y antes de salir del auto, volvió a mostrar su gratitudー de verdad, muchas gracias por todo.

ーCuando gusteis, Alise ーpuso en marcha su auto y se retiró.

Alise esperó a que Handree avanzara lejos para caminar hasta su hogar...el tiempo era sabio y la preparaba más y más para recibir la noticia que Luna le daría al llegar.