4.- Bufanda
-¿puedes decir mamá?- Beomgyu abultaba adorablemente sus labios, intentando que Mingyu diga "mamá" y no "papá" el cual ya pronunciaba bastante bien
-papá- aplaudió aquel bebé
-algún día me querrás- suspiró colocando a Mingyu en su carrito, ya había llegado el viernes lo que significaba que ambos irían a la universidad junto con Mingyu para "evaluar su estado"
-¿ya estás listo?- Soobin arreglaba su cabello a pesar de que sus ojeras eran algo notables
- sipi- Beomgyu se veía adorable aún con ojeras, siempre se veía adorable
-tengo frió- Soobin se había vuelto mas agradable a los ojos de Beomgyu
-yo igual- se levantó del sofá yendo a abrazar a Soobin, Beomgyu siempre estaba calentito y Soobin se enfriaba fácilmente, así que ahora solían pasar la mayoría del tiempo abrazados ya que empezaba a hacer frío, Mingyu estaba mas abrigado que un osito, sus regordetas mejillas eran adorables
El bebé empezó a balbucear -papá- llamó estirando sus bracitos lo más que podía -papá- repitió arrugando su ceño lentamente
-¿ahora que pasó?- Soobin se separó de Beomgyu y se agachó para sostener a Mingyu entre sus brazos -¿que pasa?.
-Dice que ya es hora- Beomgyu tomó su bolso y el de Soobin -vamos, llegaremos tarde- le entregó uno de los bolsos a Soobin y se dirijió a la puerta principal.
-Cierto, gracias por avisar, Mingyu- besó la regordeta mejilla del infante.
Salieron de aquel departamento sintiendo el aire de la fría mañana, Beomgyu empezó a temblar, solo traía un sweter... y no le protegía del todo.
-Podemos volver si quieres.
-¿Porqué deveríamos volver? Ya es tarde- a Beomgyu no le gustaba afrontar que se le había olvidado algo, que se sentía mal o que necesitaba algo
-Te vas a resfriar, vamos, volvamos, te abrigas y vamos a la universidad, no es la gran cosa llegar unos segundos tarde.
-Cierto, llegaremos tarde, estoy bien así que vamos- su nariz se tornaba roja al igual que sus nudillos y sus orejas, el rojo carmín de sus labios era natural.
-No séas modesto, te digo que te vas a resfriar- Soobin si andaba abrigado, se sacó su bufanda y se la puso a Bomgyu atrayéndolo hacia él, no sin antes dejar a Mingyu en su carrito, obviamente.
-He-hey, qué haces- la cercanía de Soobin lo puso algo nervioso, las frías manos de Soobin acomodaban su bufanda en el cuello de Beomgyu, almenos ptotegería sus amigdalas.
-Listo, dejarse cuidar no es tan dificil, omega testarudo.
-S-si- aquella bufanda tenía impregnada el aroma del alfa.
Pino y café...
Las mejillas de Beomgyu enrojecieron lentamente.
-¿Sigues teniendo frío?- estaba dispuesto hasta a darle su chamarra para que Beomgyu no se emfermase.
-N-no es eso, vamos- sus manos temblaban, pero no sentía frío en absoluto, aunque sus manos estaban raramente heladas y sus nudillos rosados.
-Dame tu mano- demandó Soobin ofreciendo su mano para que Bromgyu le entrege lo pedido, sin embargo, el omega lo miraba confundido.
Soobin rodó los ojos y tomó la mano de Beomgyu, se sorprendió por lo frío que estaba, si Beomgyu siempre es cálido, le entregregó uno de sus guantes y con la mano sin guante tomó la mano desnuda de Beomgyu, para que así el calor permaneciece.
-El carrito...
-Lo llevaré con mi mano libre- y así lo hizo, Mingyu parecía feliz de estar viendo a papá y mamá quererse mutuamente.
Después de todo llegarían algo tarde, pero hubo una buena razón.
-Llegamos tarde- habló sonriendo tiernamente Beomgyu.
-Pero llegamos- sus manos seguían unidas y los lentes de Beomgyu sobresaltaban levamente.
-Apúrate- Beomgyu aceleró el paso un poco.
-Ya voy, ya voy- su mano era jalada por Beomgyu, pero Mingyu dormía así que no se apuraría demasiado, no quería despertar al angelito.
Beomgyu estaba tan centrado en llegar que no vió que alguien se acercaba corriendo y sin fijarse, aquella persona chocó con Beomgyu y derramó una taza de café en el sweter del omega.
-Lo siento- pronunció esa persona antes de salir corriendo, parecía igual o más apurada de Beomgyu.
-Idiota- una voz familiar apareció, Taehyun ayudó a Beomgyu a levantarse ya que Soobin se había ocupado de proteger el carrito de cualquier peligro.
-Supongo que tendré que esperar a que seque- ocultó el frío que sentía y se reincorporó.
-Oh, no, eso no- Soobin le entregó el carrito a Hyuka, el cual llegó junto con Tae -porfavor cuida de Mingyu mientras arreglo el asunto del sweter de Beomgyu- ni le dió tempo para responder cuando se llevó a Beomgyu a los vestidores.
-No sé que tratas de hacer, pero estoy completamente bien- el vestidor estaba completamente vacío.
-Solo mírate temblar- Soobin no aceptaba que Beomgyu siempre siga que está bien aún cuando no lo está.
-Eso no tiene nada que ver, volvamos a clase yo--
-Quítate el sweter- ordenó.
-¿Qué? No, espera, esto secará, ahora volva-- un suspiro de Soobin fué lo que se escuchó antes de que el alfa le quitara la bufanda, los lentes y el guante que traía puesto.
-Te quitarás el sweter tú o te lo quitaré yo- lo acorraló en la pared, Beomgyu no tenía escape.
-Deja de jugar, volvamos a clase.
-Conste que tú decidiste ésto- introdujo sus manos adentro del sweter de Beomgyu -quédate quieto, si te remueves así será mas difícil-
Las mejillas de Beomgyu enrojecieron al encontrar el doble sentido en las palabras de Soobin.
-No sabía que tenías esos pensamientos- Soobin rió subiendo sus manos por el torso de Beomgyu junto con su sweter.
-No sé de qué hablas- ahora su pecho estaba desnudo y algo pegajoso por que café antes derramado.
-Realmente eres un bebé- abrió el bolso de Beomgyu donde habían toallitas húmedas y limpió el pegajoso pecho del omega para que ya no esté pegajoso, sin querer querer rozó uno de sus rosados pezones con la fría toallita.
-Ugh!- cerró sus ojos, apretó sus puños y gimoteó efímeramente, tan pronto como se dió cuenta de lo que pasaba y tapó su boca con ambas manos.
Que bonito sonido...
-Lo siento- Soobin continuó con su trabajo hasta dejarlo limpiasito.
-No te preocupes- pero de alguna forma se sintió bien.
Soobin se sacó la chamarra y uno de los sweteres que traía, se lo dió a Beomgyu.
-Te va a hacer grande, pero no sentirás tanto frío- vistió a Beomgyu colocándole el guante, la bufanda y los lentes, aquel sweter gigante tenía el aroma de Soobin.
-No te burles de mi estatura- tomó la chamarra de Soobin y le ayudó a colocársela -gracias- sus mejillas estaban rojas.
-No quiero que te enfermes- no podía sacar de su cabeza el rostro de Beomgyu cuando rozó aquel sensible lugar -dejaré esto en mi casillero, cuando salgamos lo llevaremos a la lavandería- se refería al sweter manchado con café.
-No tenías que hacerlo- estaba tan conmovido por las acciones del alfa que lo abrazó -Gracias- aprovechó que Soobin estaba un poco agachado para ponerse de puntitas y besar su mejilla como aquel día que salió de compras.
Ahora Beomgyu no era el único con las mejillas rojas.
Cami~
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