
45 ) 2018
— ¡Seungmin!
El nombrado se detuvo al oír su nombre y se dio la vuelta, sonriendo de inmediato cuando vio al rubio correr a él, y detrás del ya dicho, el resto de sus amigos.
— ¿Qué sucede, Chan?
— ¿Dónde estuviste todo el fin de semana? ¡Te busqué por todas partes! —se quejó sujetando al menor por los hombros.
— Ah... —comenzó a reír—. ¡Les dije que iría a visitar a mi hermana!
— ¿Lo hiciste?
— Lo hizo. —ahora dijo Jeongin quien ya había llegado a ellos junto al resto.
— No me pones atención, que bueno saberlo. —se cruzó de brazos pero Chan sólo rió apenado—. ¿Pudieron terminar los preparativos de la fiesta?
El futuro cumpleañero asintió antes de buscar en su mochila la invitación que le tenía preparada al castaño. Sus otros amigos ya tenían la suya, y los amigos de sus amigos también, incluso gente que no conocía ya tenía invitación, pero Seungmin era el único que faltaba en recibirla. Claro está el porqué. Cuando finalmente la encontró la extendió al menor y sonrió ampliamente luego de que éste la tomó.
— Gracias.
— Habrá muchísima gente. —habló Wonpil captando la atención—. Podremos conseguir pareja o al menos algo casual.
Chan se giró inmediatamente a él.
— ¿Vas a... —murmuró el rubio— buscar a alguien esa noche?
Wonpil hizo un ademán con sus hombros.
— Recuerda que tienes que estar una hora antes junto a Jeongin, Wonpil y Hyunjin. —finalmente Minho continuó la conversación anterior, acercándose al castaño y poniendo una mano en la cabellera ajena—. Es un pase VIP, así que ni se te ocurra desperdiciarlo, ¿Entendido?
Seungmin soltó una pequeña risa y con delicadeza alejó la mano ajena, no le molestaba que el mayor tuviera la ya dicha sobre su cabeza; Sino que la relación de ambos se basaba en una falsa y divertida rivalidad que uno de los dos tenía que ganar.
— Obvio que no lo haré, soy importante, tengo el puesto importante que merezco. —respondió.
Minho sonrió.
— Y ni tanto porque Changbin, Jisung y yo estaremos ahí desde muy temprano. —burló pasando su brazo por los hombros del menor, comenzando a caminar después.
— Te detesto.
— Lo sé y estoy orgulloso de ello.
Ambos se sonrieron y tras dar por terminada la conservación, todos continuaron hasta el aula, donde el amigo que les faltaba se encontraba hablando con una chica pelirroja que luego de mirar a los chicos descendió su vista ya que había cruzado miradas con la persona que le gustaba y que estaba dentro de ese grupo.
— ¿Irás a la fiesta?
Hyunjin preguntó a la chica luego de saludar a sus amigos, quienes ya estaban tomando asiento al otro extremo del aula. La pelirroja alzó un poco su vista al pelinegro pero luego de no poder mantener el contacto visual volvió a agachar la cabeza.
— No lo sé, ¿Debería...?
La chica en cuestión era alguien tímida y callada, no solía ir a fiestas ya que no tenía muchos amigos, y además; Le daba un poco de vergüenza ya que la fiesta era del mejor amigo del chico que le gustaba.
— Claro que deberías, ¡Estará increíble la fiesta! Jackson organizó gran parte de ella y sabes que él jamás defrauda. —sonrió ampliamente—. Además se va a encargar del entretenimiento, no me digas que no quieres escuchar a Jackson cantar o bailar, ¡Es muy talentoso!
— Sí pero... —sonrió un poco—. Me da vergüenza con... —miró de reojo a su enamorado—. Ya sabes...
— ¡Oh, vamos Jihyo! —le intentó animar un poco más—. ¡Esta podría ser tu oportunidad perfecta para acercarte a Minho!
— ¡Bien! Pero sólo con una condición. —otra vez volvió a mirarlo fijamente—. Que tú te acerques también a Yeji.
Y esta vez fue Hyunjin quien bajó su mirada avergonzado.
— ¿Y bien?
Chan soltó un largo suspiro al tener la mirada de sus cuatro amigos. Nuevamente estaban teniendo esa conversación acerca de sus sentimientos que ni siquiera él entendía, o mejor dicho no podía explicar. Y sabía que sus amigos sólo querían lo mejor para él, pero renunciar a lo que le hacía sentir bien era complicado.
— ¿Creen que tengo oportunidad con él?
Su pregunta provocó un silencio (quizás incómodo) en la habitación, no incómodo porque los dos eran hombres sino porque como ya se había mencionado, ya habían tenido esa conversación posteriormente.
— Chan...
Pero antes de que Hyunjin hablara lo hizo Minho:
— Tal vez. —las miradas ahora fueron a él—. Él no te ha rechazado directamente a pesar de que le has dado demasiadas señales, entonces probablemente tenga miedo de expresarse. Sabes que no es fácil decir que te gusta un chico siendo chico o una chica siendo chica, así que... Quizás él sólo tenga miedo de aceptarlo. —hizo un ademán con sus hombros—. Es eso o es estúpido.
— Minho... —murmuró Changbin.
El anterior de igual forma que Hyunjin fue interrumpido pero esta vez por Jisung:
— Tiene razón. —recibió las miradas ahora él—. Quitando el hecho de que ambos son chicos, es muy difícil confesarse a una persona que te gusta... —descendió su cabeza para no mirar al pelinegro que tenía al frente—. Chan, tú eres el que da las señales... Pero, ¿No te aterra que no las entienda y que al confesarte todo se echará a perder? —el rubio asintió aunque el castaño no lo vio— Sé que no es fácil, por ello no te obligo a confesarte...
— Pero —Minho volvió a hablar y Jisung fijó su vista en él— también existe la posibilidad de que él no entienda si realmente son señales o no, y está esperando a que se lo digas.
Chan suspiró ruidosamente para que guardarán silencio.
— No importa... —mostró una amplia sonrisa—. Creo que lo de Wonpil es pasajero, por ello quiero intentarlo con una chica... Es muy linda y agradable.
— ¿Ah si? ¿Quién es? —Changbin preguntó.
— Yeji. —respondió.
— ¿Qué? —murmuró Hyunjin.
Pero en ese momento abrieron la puerta y eran los amigos que faltaban quienes traían una energía muy alegre, la cual contagió a todos excepto a Hyunjin. Él seguía pensando en ese nombre que había salido de la boca de Chan. Pero antes de que pudiera decir algo, la fiesta inició entre ellos.
— ¿Qué haces afuera? —se acercó a su amigo quien estaba en una parte del jardín alejado del resto.
— Ah... —se giró para mirar al pelinegro quien le entregó un vaso pequeño lleno de soju—. Gracias... Es que de verdad hay demasiada gente y mucho ruido, tenía que descansar un poco. —rió levemente antes de tomarse la bebida de un sólo trago—. ¿Y tú? —dejó el vaso en una fuente que había a su lado derecho.
— No te vi adentro y me preocupé. —se acercó poco a poco a él, aunque el ajeno se alejaba también.
— ¿Me estabas extrañando? —una risa burlona acompañó su pregunta, mientras seguía retrocediendo hasta que ya no pudo más.
Y aunque no entendía porqué Changbin continuaba acercándose, jamás sospechó de él.
— Por supuesto. —puso su mano al costado del rostro foráneo cuando la espalda del menor pegó en la pared—. ¿Cómo no hacerlo? Estoy en esta fiesta por ti.
Y con su otra mano libre acarició la barbilla de su amigo pero Seungmin inmediatamente giró el rostro para alejarlo.
— ¿Qué te pasa? ¿Estás ebrio? —ahora sí, un poco incómodo caminó a la derecha, dirección contraria a donde el brazo del mayor se encontraba.
— Disculpa, pensé que tú y yo...
— ¿Que tú y yo qué? —caminó lejos de él.
— No te hagas el tonto, Seungmin. —frunció su ceño antes de acercarse a él—. El como me miras sin que nadie se dé cuenta, ¡Tú mismo provocaste esto!
— ¿Qué? No, a ver... —estiró ambos brazos para detenerlo—. ¿De qué estás hablando? No te he mirado de ninguna forma, ¿Creíste que estaba enamorado de ti? Perdóname si eso di a entender, pero estás muy equivocado... Permiso.
Cuando iba a irse, Changbin le sujetó con fuerza del brazo, jalándolo a él hasta tomarlo de la cintura con firmeza.
— ¡¿Qué haces?! ¡Sueltame! —forcejeo lo más que pudo hasta que pudo zafarse luego de golpearlo en el abdomen—. ¡Estás enfermo, Changbin! ¡Ni se te ocurra volverte a acercar a mí!
Se volvió a dar la vuelta pero la voz del pelinegro le detuvo, en ese punto Seungmin ya sentía tanta impotencia que quería largarse de ese lugar y llorar.
— ¡No te van a creer! ¡Nadie te va a creer! —le gritó.
— ¡No pienso decirles nada! —se volteó a verlo—. ¡Y no por ti, ni porque pienso que no me van a creer, sino por la amistad que tienen entre ellos y no quiero dividirlos por alguien tan malditamente idiota como tú! —con su diestra limpió las lágrimas en su rostro antes de finalmente marcharse.
Corrió al interior de la casa rápidamente, quería mantenerse alejado, y si era posible, quería estar cerca de Jeongin, Wonpil o Hyunjin, quienes eran más probable que estuvieran separados de Minho, Jisung y Chan. No era que no quisiera estar con éstos tres últimos, sino que Changbin probablemente iría con ellos, y no quería ni verlo, ni fingir estar bien frente a él.
Al ingresar a la casa cayó al suelo luego de sentirse mareado de repente. Frunció su ceño y apretó sus ojos para intentar ajustar su vista ya que ésta comenzaba a distorsionar todo a su alrededor.
— Hey, Seung. ¿Estás bien? —oyó la voz de Jisung.
Éste le ayudó a levantarse y Seungmin se apoyó en él y después en un mueble a su derecha. ¿Había bebido demasiado? Era imposible, aunque así fuera, podía controlar el alcohol muy bien.
— ¿Qué te pasa? ¿Estás bien? —insistió una vez más el de mejillas regordetes.
— Sí, perdona... —respondió sin mirarlo—. Me mareé un poco y todo se ve borroso...
— ¿Qué? —una sonrisa escapó de sus labios— ¿Estás ebrio? ¡El magnífico Kim Seungmin está ebrio! —rió en compañía del menor— Oye, eres el que más aguanta el alcohol después de Minho, ¿Cuánto bebiste?
— Estoy seguro que no mucho pero... —sus piernas fallaron pero no cayó ya que Jisung alcanzó a sostenerlo—. Mierda...
— Tranquilo, amigo. Te llevaré a una habitación para que descanses. —le sonrió dulcemente antes de ayudarlo a caminar de forma lenta.
Con la mirada empezó a buscar a uno de sus amigos hasta que logró hacer contacto visual con Minho. Le hizo rápidamente una señal y el pelinegro se acercó a ellos.
— ¿Qué pasa? —cuestionó mirando a Seungmin dormido, o eso parecía.
— Creo que bebió de más, ¿Puedes ayudarme a llevarlo a la habitación? —le regaló una sonrisa.
— ¿Bebió de más? —frunció su ceño— Mmh, bien.
Minho en lugar de pasar el brazo ajeno por sus hombros, decidió cargarlo por completo, por supuesto; Con ello recibió algunas quejas de Jisung diciéndole que podía ayudar, aún así el pelinegro no escuchó.
— Es raro...
Todos lo miraron.
— ¿El qué? —preguntó Chan.
— Seungmin no se pone ebrio con facilidad. —respondió Minho mientras agitaba su propio vaso—. Debió beber demasiado para ponerse así, a tal punto en que sólo se durmió...
— Tiene razón. —continuó Wonpil—. La última vez recuerden que todos bebimos juntos, y los únicos que amanecieron completamente bien fueron Seungmin y Minho. —miró al pelinegro, luego al pelirrojo—. Y Jeongin, claro, pero porque él no bebe.
— Sí, estuvieron tomando toda la noche y jamás... Cayó ninguno. —afirmó Jeongin sintiéndose inconforme—. Mejor iré a verlo...
Se levantó pero no pudo irse porque Hyunjin le tomó del brazo.
— Déjalo descansar un poco primero. —le sonrió al menor quien lo dudó muchísimo, pero al final decidió quedarse.
Gran error.
[Se tocará un tema sensible, por favor si no es de tu agrado pasa hasta el siguiente separador, gracias.]
En la habitación, Seungmin quien seguía poco consiente pero no podía moverse, observó cada movimiento de su supuesto amigo pero no podía ni gritar, sentía su garganta oprimida, y aunque no fuera así, realmente se sentía muy débil. Aún así quería llorar, intentó pelear; Sin embargo, nada funcionó.
— Por favor... —suplicó con el poco hilo de voz que tenía—. Por favor vete...
— Vaya, así que una pastilla no fue suficiente. —una sonrisa se formó en sus labios antes de acercarse al rostro del castaño—. Seungmin, debo admitir que me siento un poco decepcionado... Jamás notaste que soy gay, pensé que me ponías atención pero al parecer no soy tan importante como tu querido Jeongin o Minho, ¿Cierto?
— Déjame...
— ¿Quizás con esto seré importante? —le besó de forma lenta la mejilla—. Sólo relájate más de lo que ya estás... Prometo que te gustará.
Y sin más que poder hacer, cerró sus ojos cuando sintió las lágrimas salir de éstos.
— ¿Seungmin? —preguntó Hyunjin.
Se levantaron de inmediato cuando el castaño salió de la habitación rápidamente con sus zapatos en mano. Ya era de mañana, un poco tarde quizás. Pero lo importante era que al fin su amigo despertó.
— ¿A dónde vas? —Chan se acercó y le sujetó del brazo pero el castaño se zafó de manera brusca, dando la vuelta tras hacerlo.
— ¡Sueltame! —retrocedió un poco.
Pero al ver el rostro de Chan lo único que pudo ver en su cara fue a Changbin y después a Wonpil. ¿Quería hacerle lo mismo a él? Asustado se alejó y apartó su mirada.
— ¿Todo en orden? —ahora preguntó Minho aunque todos se acercaron.
— ¡No, no hay nada de orden, no se acerquen! —gritó extendiendo sus manos para que se detuvieran, cosa que hicieron.
— ¿Pasó algo, Seungmin?
Al oír que Changbin preguntó eso inmediatamente sintió un nudo en su garganta y tantas ganas de llorar pero ya no de tristeza o asco, sino de enojo. Obviamente sus amigos notaron eso, ¿Cómo iba a mentirles? No quería arruinar su amistad, no quería que se separaran por su culpa... Porque había sido su culpa, ¿No? No podía sacar esa pregunta de su mente.
— Seung... —murmuró Jisung.
Finalmente se rompió y cayó al suelo llorando, todos se acercaron y se agacharon a él, queriendo entender qué pasaba.
No quería decirles la verdad, pero al mismo tiempo necesitaba gritarlo, necesitaba sacarlo de sí.
— ¡Abusó de mí! —gritó con dolor—. ¡Changbin abusó de mí...!
Y después de esas palabras, un profundo silencio invadió la habitación, lo único que podía escucharse era el llanto de su pequeño amigo.
— ¡Yo no hice nada, por dios! —se defendió una vez más ante Minho y Wonpil quienes lo tenían acorralado en la pared—. ¡¿Por qué yo haría eso?!
— ¡Porque eres un asqueroso gay! —Seungmin le gritó como respuesta desde el otro lado de la habitación.
— Seungmin eso... —Chan quiso hablar pero el castaño no se lo permitió.
— ¡¿Eso qué?! —ahora se fue en contra del rubio— ¡Abusó de mí porque eso es, un asqueroso y maldito gay! —las lágrimas continuaban saliendo— ¡Eso buscan todos, eso quieren todos!
Jeongin lo abrazó con fuerza.
— ¡Deja de decir estupideces! —dijo Changbin—. ¡¿De verdad le van a creer?! ¡Me vieron durante toda la noche! ¡¿Por qué haces esto, Seungmin?!
Un golpe en su mejilla impidió que siguiera hablando, había sido Minho, quien le golpeó en el rostro. Después de eso nadie dijo absolutamente nada más. Se podía sentir la tensión, incomodidad y de más por toda la habitación. ¿Qué debían hacer ahora? ¿Cómo iban a arreglar ese asunto tan grave?
— Por favor... —murmuró Seungmin en súplica—. No tengo porqué inventar algo así... Créanme por favor, no importa si quieren seguir cerca de él —su llanto continuaba—, sólo créanme por favor...
— Changbin no haría eso porqué es gay... —comentó Chan mirando al castaño.
— Opino lo mismo. —dijo Jisung.
Mala elección de palabras.
— ¡Callense! —miró a ambos— ¡Ustedes dicen porque son iguales a Changbin! ¡Tú Chan con Wonpil y tú Jisung con...! —pero guardó silencio antes de decir el nombre de Minho.
Su corazón estaba roto, pero aún así no podía decir cosas que ellos le confiaron para defenderse, menos con Minho allí.
— No, Seungmin. —ahora el antes mencionado se acercó a él—. Ellos no quisieron decir eso, se referían a que —de igual forma fue interrumpido.
— Minho... ¿Tú también? —alzó su vista para mirarlo con lágrimas en los ojos.
Pero no esperó a que alguien más dijera algo, se puso de pie, apartándose de Jeongin para hacerlo y de forma rápida para que nadie lo detenga, salió de la casa, azotando la puerta cuando la cerró.
— ¡Seungmin! —gritó el pelirrojo parándose también pero oyó la voz de Changbin.
— Jeongin... ¿Le vas a creer?
Guardó silencio unos segundos no por duda a las palabras de Seungmin, sino porque sabía que lo que estaba por decir no era correcto, o mejor dicho no era algo que él (Jeongin) diría.
— Cállate... Maldito gay.
Y corrió detrás de su enamorado.
— No sé qué mierda tienen en la cabeza... —murmuró Wonpil decidido a irse también.
— Wonpil por favor... —comentó Chan.
— ¡Tú cállate! —le dijo de frente cuando pasó junto a él—. Y creer que en algún punto yo... —lo miró de pies a cabeza—. Que asco saber que alguien como tú está enamorado de mí...
Y también siguió al castaño y pelirrojo.
Otra vez el silencio se encontraba en toda la habitación, no podían decir algo, no sabían qué hacer. Estaban en un... Shock, todo había pasado tan rápido y parecía que nada era real.
— Hyunjin, ¿Tú también...? —habló Changbin mirando como el pelinegro se iba en silencio.
De igual forma, en silencio sus últimos tres amigos decidieron seguir a Hyunjin, pero Changbin se levantó y los siguió hasta que salieron de la casa.
— ¡Chicos por favor! —se puso delante de ellos, deteniendo su paso— ¡Les juro que no hice nada! ¿No les quedó claro? ¡Seungmin es un homofóbico!
— Cállate. —ordenó Minho.
— ¡Minho por favor! ¡Ustedes me conocen! —suspiró desesperado— ¡Aunque vayan con Seungmin ahora no servirá de nada, como dije es un homofóbico! Chan, a ti te puso en mal con el chico que te gusta, ¡Y los desprecia a ustedes dos! —exclamó refiriéndose a Minho y Jisung— ¿No lo pueden ver? ¡Es homofóbico, y gracias a él ahora Jeongin y Wonpil también lo son!
No había respuestas, y el único que le estaba viendo a los ojos era Minho.
— Por favor...
Chan le sujetó de la camisa con fuerza y lo jaló a él.
— Tendrás que pedir perdón de rodillas y jurarnos por tu estúpida vida que lo que dices es verdad. —proclamó el rubio antes de soltarlo.
Fue ahí donde de forma lenta, Changbin se puso de rodillas frente a los tres y agachó su mirada.
— Perdón enserio... Y juro por mi vida que no hice nada. —mintió con un tono de voz bajo—. No tengo idea porqué Seungmin inventó eso, siempre he sido tan bueno con él... —pero una sonrisa se formó en sus labios.
Una sonrisa que ninguno de los tres pudo ver.
— Seungmin... —susurró Wonpil mientras le acariciaba la espalda.
— Gracias. —dijo mientras se aferraba a Jeongin quien lo abrazaba—. Gracias por creerme y quedarse conmigo...
— Eso no es algo que debas agradecer. —ahora habló Jeongin sintiéndose imponente.
— ¿Qué haremos ahora? —preguntó el otro castaño.
— Algún día. —exclamó Seungmin intentando sonreír suavemente—. Algún día me van a creer, sólo eso quiero. —acarició la mano de Wonpil cuando éste le sujetó la suya—. Sólo quiero que ellos confíen en mí y me crean...
¡Hola! Espero estén teniendo una linda mañana/tarde/noche y que estén disfrutando de ésta. Aquí otro capítulo nuevo ya que quería explicar un poco cómo fue lo de Seungmin; Debo admitir que no es algo que me gustó escribir, tuve que hacer varias pausas porque no podía seguir escribiendo pero al fin aquí está.
Muchas gracias por leer, sin ustedes esta historia no habría llegado hasta donde está ahora, y enserio les agradezco tanto apoyo.
Perdonen si tuve algún error ortográfico o en la redacción, si es así pueden decirme y lo editare.
Una vez más gracias, y hasta luego.
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