Invisible 4| Trato
—¿Hablas en serio? —preguntó Logan, incrédulo. Alice asintió —. No puedo darte eso —aseguró Logan.
La chica se encogió de hombros.
—Entonces no hay trato —dijo ella y se dispuso a abrir la puerta.
Logan la tomó del brazo y se sorprendió al ver el rostro enojado de la chica cuando volteó.
—Lo haré —dijo él. Alice lo miró sin creerle —. Debes darme tiempo, no es nada fácil, pero lo haré —aseguró él.
—¿Cuánto tiempo? —pregunto la chica.
—Dos meses.
-—Un mes o no hay trato —dijo ella con mirada penetrante.
Logan suspiro, debía aceptar.
—Está bien, en un mes será.
La chica asintió y le tendió su mano para cerrar el trato.
Él la estrechó y supo que su venganza acababa de comenzar.
Alice sacó un cuaderno y bolígrafo de su mochila y comenzó a escribir.
Logan la observó impaciente, la campana sonaría en dos minutos y llegaría tarde a clases.
—¿Qué haces? —preguntó el chico.
Alice no le respondió, siguió escribiendo y un minuto después arrancó la hoja, la doblo y se la entregó a Logan.
—Aquí está todo lo que tienes que darme para que yo cumpla con mi parte del trato, ¿bien? —Logan asintió —. Perfecto —dijo ella y salió del coche a toda velocidad.
Quizás estaba mal, no podía fingir ser novia de un chico porque si. Su moral estaba en juego, su moral de, ¿no tener novio?
No tenía idea de por que pensaba tanto en eso, solo sería mentir un poco, ayudar al chico friendzonado a conquistar a la chica que le gustaba y sus notas serían las mejores. Su madre estaría orgullosa de ella y ese último pedido era el mejor, podría...
Una mano sujetó su brazo y Alice estaba dispuesta a insultar a él o la responsable, pero al voltear se encontró aturdida la tener el rostro de Logan a escasos centímetros del suyo.
—¿Qué... qué haces? —preguntó nerviosa.
Era la primera vez que se sentía tan nerviosa al lado de un chico.
—El trato comienza ahora —susurró Logan antes de rozar los labios de la chica con los de él.
Se sentía extraño, Alice no llegaba a sentir eso que decían, no llegaba a sentir las cosquillas o electricidad, no llegaba a sentir... nada.
Los labios de Logan no se movían sobre los de ella, tan solo estaban allí, quietos.
¿Se podía llamar a eso un beso?
No era que Logan no tuviera experiencia, pero por alguna razón no podía besar a Alice como era debido, había algo que lo empujaba a quedar quieto, allí.
La chica se alejo de él lentamente y lo observó sorprendida. ¿Qué se suponía que tenía que hacer ahora?
—Yo...
Logan carraspeó y le sonrió seductor, con esa sonrisa que sabía tenía, pero jamás utilizaba.
—Eso hacen los novios, ¿cierto? —preguntó Logan.
El chico se vio sorprendido al ver a Alice tensar la mandíbula y mirarlo con odio.
—No vuelvas a besarme sin mi permiso —dijo la chica y se dio la vuelta haciendo que Logan soltara su brazo y se dirigió al instituto.
El chico observo a Alice irse y sonrió con suficiencia en el momento que vio a su hermano acercarse, se había asegurado de que tuviera un buen ángulo del beso.
—Tenemos que hablar —dijo Mark al llegar frente a él.
Logan asintió sin quitar esa sonrisa de «te gane».
—Está bien, pero después de clases.
—No, vamos a hablar aho...
—Después de clases —aseguró Logan interrumpiendo a su hermano y se dirigió al instituto.
El juego acababa de comenzar.
Logan entro a su salón y tomó lugar en su pupitre, Anett ya se encontraba sentada frente a él, pero él no la observo.
Ella no había intentado siquiera hablarle luego de saber de sus sentimientos y eso lo ponía extremadamente triste.
Ella era la chica que soñaba, dulce, buena, estudiosa, simpática, cabello negro, piel blanca, sonrisa perfecta, ella era la chica que él quería. .. ¿Cómo se le había ocurrido salir con aquella chica Alice? Aún no entendía cómo su hermano se había fijado en ella.
No tenía buen carácter, no sonreía y si lo hacía era con burla o maldad, ella no era simpática o estudiosa, esa chica no tenía nada que llamara la atención de una buena manera.
Había visto la mirada de Mark cuando beso a Alice, había visto la decepción en el rostro de su hermano. Vio la tristeza y el odio, pero no se detuvo, no dejo de besar a la chica porque quería que Mark sintiera lo mismo que él, quería que sufriera aún más, y lo lograría.
Mark debía estar realmente enamorado de esa chica, entonces: ¿Por qué se había acostado con Anett? ¿Por qué había elegido estar con la chica que él amaba? ¿Por qué tuvo que traicionarlo?
Una nota fue colocada en su pupitre y Logan observó a la persona que se la estaba entregando, Anett, quién le sonreía con timidez.
La chica se volteo y Logan leyó la nota.
"No quiero estar peleada contigo, perdóname por no darme cuenta de tus sentimientos. Quiero que volvamos a ser amigos Logan, ¿quieres?"
«No, Anett Stone, ahora me querrás como más que amigos»
Pensó Logan y respondió la nota.
"Claro que quiero volver a ser tu amigo"
Esa chica se enamoraría de él y lo elegiría.
Al dirigirse a la cafetería, Alice vio a Mark comiendo con sus amigos, por alguna razón quiso acercarse, agradecerle su actitud del día anterior, algo... pero no lo hizo.
Intento no prestar atención al chico y caminó hasta tomar lugar en la fila del almuerzo, necesitaba buscar el de ella y el de su amiga Mary, la cual estaba en el baño y Alice había venido antes para no perder su mesa especial, aquella mesa escondida de toda la multitud en un rincón del lugar.
Ese era el lugar que les gustaba, alejados de la multitud, sin personas molestando, sin...
Unas manos rodearon su cintura por detrás y Alice se dio la vuelta y golpeó a la persona con su mano, inmediatamente el chico la soltó y ella bufó al ver a Logan.
—¿Qué haces? Estás lo...
—Eres mi novia, Alice —le recordó Logan en un susurro y tomó el rostro de la chica besando su frente.
Eso era raro para Alice, extremadamente raro. Esas eran las cosas que odiaba, abrazos, tomarse de las manos, besos en público y el chico parecía querer eso y Alice no estaba segura de poder lograrlo.
—Si, deberíamos de hablar sobre eso —dijo ella cuando él se alejo y la observó sonriendo, pero la sonrisa del chico se borro al escucharla.
—Tenemos un trato —dijo él bajito.
Alice bufó.
—Creo que debemos hablar sobre eso también —aseguró ella y se dio la vuelta volviendo a prestar atención a la fila del almuerzo.
Alice observó a Logan seguirla en todo momento hasta llegar con ella, a la mesa que compartía con su amiga.
Alice bufó.
—No debes estar en todo momento conmigo, eso podría denunciarse como hostigamiento o acoso, ¿lo sabías? —preguntó la chica dejando su bandeja y la de su amiga sobre la mesa.
—Eres mi novia -—respondió Logan imitando su acto y sentándose frente a Alice.
—Por eso odio ese término. No porque las personas sean novios deben de estar en todo momento juntos —aseguró la chica y Logan frunció el ceño.
Ella le hacía recordar a alguien, pero ¿a quién?
—¿Alice?
Logan giró su rostro para encontrar a la confundida amiga de Alice, quién lo observaba con el ceño fruncido.
—Oh Mary, ya conoces a Lucas, es el tonto que quería que sea su novia —dijo Alice en voz alta y Logan se tenso.
Ella no podía abrir la boca más de lo necesario.
—Hola, Lucas —saludo Mary y tomó lugar al lado de Alice.
—Soy Logan, Mi nombre es Logan y es un gusto conocerte —saludo.
Alice se dedicaba a comer tranquilamente, pero el ambiente era incomodo.
¿Donde carajos estaba Kyle? Necesitaba a su mejor amigo ya mismo allí.
—Y, ¿qué haces aquí? —preguntó Mary.
Logan levantó la mirada de su almuerzo y respondió con algo que hizo que Alice se atragantara.
—Soy novio de Alice.
—No somos...
Una mirada de advertencia por parte de Logan hizo que la chica no terminara de hablar.
—¿De verdad? —preguntó Mary con los ojos como platos.
—Si, si Mary. Ahora come y no preguntes más —dijo Alice molesta y artículo un tenemos que hablar a Logan.
Logan suspiro, esa chica era muy difícil de convencer.
Alice siguió comiendo y él se vio observándola nuevamente, observo como comía sin educación, como se atragantaba por comer tan rápido, como hablaba con su amiga sin prestar atención a que aún tenía comida en la boca y la estaba mostrando.
En un momento determinado, y sin comida en la boca, ella sonrió y Logan se vio... aturdido.
Su sonrisa era... bonita, dulce, serena, era una sonrisa inocente.
—¿Logan?
Logan se giró para encontrar a su amigo con el mismo rostro de confusión que la amiga de Alice al llegar.
—Kyle —exclamó Logan en un suspiro —. ¿Por qué tardaste tanto?
El chico no le respondió, sino que se dedicó a mirar a Alice y luego una mirada reprobatoria fue dirigida a Logan, no dijo nada. Saludo a las chicas y se sentó al lado de Logan para comer su comida.
—Así que, Kyle ¿Te gusta el fútbol? —preguntó Mary y Alice rodó los ojos.
Eso era lo peor del mundo, la incomodidad reinaba, era como una cita dob...
No puedo continuar comiendo, se levantó de su asiento y observó a Logan.
—Necesitamos hablar —dijo la chica.
Logan frunció el ceño, pero se puso de pie y se dispuso a seguirla.
—Problemas en el paraíso.
Se escuchó a sus espaldas por parte de Mary, pero ninguno prestó atención y continuaron caminando.
—Esto está mal —dijo la chica al llegar a un lugar alejado de todos.
Logan suspiro. ¿Por qué era tan cambiante?
—Quizás ahora sea incomodo, pero luego nos acostumbraremos —aseguró Logan.
Alice negó.
—Necesitamos darle cuanto antes celos a esa chica y rogar porque tu plan funcione lo más rápido posible para parar con esta locura.
Si, era cierto que necesitaba darle celos a Anett, pero también necesitaba que Mark lo vea, aún más, con ella.
—Luego te mostrare a Anett.
Alice asintió.
—También creo que deberíamos de contarles a nuestros amigos la verdad, no me gusta...
—No puedes contar que no somos novios reales, Alice, nadie lo puede saber. Además tienes que estar conmigo, Anett tiene que vernos juntos, ¿entiendes? —la interrumpió Logan acercándose a ella.
La chica retrocedió sintiéndose extraña por la cercanía.
—Mary es mi amiga y no le voy a mentir —dijo ella.
Logan bufó.
—¿No puedes mantener un secreto? —preguntó él.
—No tengo más amigos además de Mary y no me gusta mentirle. No me gustaría depositar mi confianza en alguien y que esa persona me mintiera y con Mary no nos mentimos, quiero decírselo —aseguró Alice.
En ese momento se sintió de lo peor.
Viera como lo viera, él le estaba mintiendo, ella estaba confiando en él y él le mentía.
—Puedes contárselo —dijo Logan y Alice asintió.
—Está bien, también recuerda que debes hacer mis tareas, así que a la salida te entregare mis cuaderno de historia y matemáticas para que comiences a cumplir con tu parte del trato —dijo la chica.
—Así será —aseguró Logan.
«Amiga invisible.
Gracias por tus consejos, creo que ya he encontrado la forma de poder salir adelante ante este problema.
No sabía que tenías un hermano pequeño. Creo que él te ha contagiado y por eso eres tan infantil (es una broma)
Puedo hacerte una pregunta: ¿Crees que la venganza es mala?
Pista: Este año será muy raro para mi.
Atte: Chico invisible.»
Logan dobló la carta y la guardó en su escritorio.
Camino hasta su cama y se recostó tomando el mando del televisor para encenderlo, pero antes de hacerlo la puerta de su habitación fue abierta con brusquedad y Mark se hizo presente.
—¡¿Qué mierda hacías con Alice?! —gritó el chico al entrar.
Su pecho subía y bajaba a toda velocidad y sus ojos se encontraban inyectados de rabia.
Logan sonrió, nuevamente, con suficiencia.
—¿Por qué debería importarte? —preguntó el chico encendiendo el televisor, aún sin levantarse de su cama.
Mark avanzó unos pasos.
—Ella es mía —dijo Mark —. No puedes caer tan bajo Logan, no puedes utilizarla. ¡¿Qué carajo le dijiste para que este contigo?! —preguntó el chico desesperado.
La sonrisa de Logan no se borró de su rostro.
A pesar de sentirse un poco culpable, de ver que su hermano estaba realmente desesperado, no quiso dar marcha atrás.
—Ella es mi novia, Mark, no es tuya, nunca fue tuya y nunca lo será —desafió Logan y se puso de pie.
Mark no lograba reconocer a su hermano.
—Esta es tu venganza, ¿cierto? La estás utilizando —susurró el chico sin querer creerlo.
—Eso no es lo importante, lo importante es que ella esta conmigo —dijo Logan y señalo la puerta —. Ahora vete.
La respiración de Mark se descontrolo aún más y se acercó intimidante a Logan
-—¿Al menos sabes qué le sucedía? ¿Por qué estaba llorando?¿Siquiera sabías qué estaba llorando? —preguntó Mark y la sonrisa de Logan desapareció sin saber qué responder. Una risa amarga brote de la garganta de Mark y observó a su hermano con desprecio —. En este momento eres tan mierda, o más, que yo.
Sin más el chico salió de allí dejando a Logan preocupado.
La chica estaba mal, lo había notado y no había insistido para saber qué le sucedía.
Si iban hacer las cosas que hacen los novios, él necesitaba ser un verdadero buen novio.
Necesitaba hablar con ella.
A la mañana siguiente se despertó más temprano de lo habitual, y luego de desayunar, se dirigió a donde había encontrado a Alice el día anterior.
Necesitaba hablar con ella, necesitaba demostrarle que podía confiar en él, que no solo la estaba utilizando...
Golpeo el volante con fuerza, la chica estaba triste y él si, la estaba utilizando.
Alice se hizo presente ante sus ojos y Logan avanzó con su auto hasta estar a su lado en la calle.
—¿Qué quieres? —preguntó la chica sin mirar.
—¿Como sabes que soy yo? —cuestionó Logan y ella se detuvo observándolo.
—Eres el único que me acosa —lo pensó un segundo —. En realidad eres el segundo que me acosa, pero tú has llegado a sobrepasar los límites —dijo la chica.
Logan la observó, aquellas ojeras estaban menos pronunciadas, lo que quería decir que ella había dormido, aunque sea un poco.
—¿Estás mejor? —preguntó él y Alice frunció el ceño, pero luego pareció entender su pregunta.
—Si, yo... lamento haberte tratado mal. Estoy pasando por un momento difícil —dijo ella.
Logan se sintió extraño al escucharla disculparse. Parecía ser de las personas que no estaban acostumbradas a hacerlo.
—¿Te llevo? —preguntó Logan haciendo como si nada pasase para no poner incómoda a Alice.
La chica observó a su alrededor nerviosa, no quería que su padre la viera subir al coche de un chico, no era que le importara lo que pensara, pero no quería tener que discutir con él.
Tras un suspiro la chica asintió y Logan, con una media sonrisa, abrió el auto desde adentro para que pudiera entrar.
Alice jugueteaba con el cierre de su mochila sobre su regazo, Logan se dedicaba a conducir en silencio y el único sonido era el del motor.
Tras unos minutos, ella no aguantó más y sin pedir permiso estiró su mano encendiendo el radio.
Logan la observó con el ceño fruncido, pero no dijo nada.
Tras cambiar de estación repetidas veces, Alice se decidió por una canción.
No una canción de One direction, Taylor Swift, Justin Bieber, Selena Gomez o cualquiera de las cosas que escuchaba Anett, sino que una canción que Logan no creyó sería el gusto de Alice, aquella canción que Logan amaba desde pequeño, aquella canción preferida de su padre, aquella canción que era dedicada a su madre y él siempre la escuchaba pensando en Anett, aquella canción estaba siendo cantada por Alice a todo pulmón dentro de su auto.
—No sabía que te gustara The Beatles —dijo Logan pero Alice no le prestó atención, parecía no haberlo escuchado por seguir cantando.
Una sonrisa boba se formó en los labios del chico al verla así, se veía feliz, contenta, sin preocupaciones y eso, eso lo hizo sentirse bien.
Al estacionar el carro, Alice volteo a Logan y lo observó seria.
—¿Qué sucede?
—No puedes volver a besarme, tomarme de la mano, abrazarme, no puedes ser meloso, no...
—Se supone que somos novios, debemos comportarnos como tales —la interrumpió Logan.
—No me gustan esas cosas —aseguró Alice.
—El trato es que debemos ser la mejor pareja, que debo ser el mejor novio y así Anett me verá, ¿recuerdas? No puedes pedirme que te trate indiferente cuando debemos estar juntos siempre.
—Pero...
—No volveré a besarte si no quieres, pero no puedo dejar de abrazarte, comer contigo, tomarte de la mano —Logan suspiró —. Son las cosas que hacen las parejas, Alice —dijo con resignación.
La chica desvió la mirada al frente.
No le gustaba nada de eso, no sabía por que, pero lo odiaba.
Por otra parte necesitaba ese trato, sabía muy bien que necesitaba buenas notas, y a pesar de que ella había pasado los años anteriores, había sido con muchos problemas y no se sentía segura de lograrlo este año lejos de su madre y hermano, quería ser un orgullo para su madre, la hacía sentir mal saber que todo era mentira, que ella no ganaría esas notas, pero... quería hacer sonreír a su madre.
Alice giró su rostro y observó a Logan, el chico la observaba suplicante.
—Está bien —dijo al chica y Logan suspiró con alivio —. Pero sigo sin querer que me beses.
Un risita escapó de los labios del chico y Alice se quedo sorprendida por el sonido, rápidamente alejó esos pensamientos.
—¿Es un trato? ¿Un verdadero trato? —cuestionó Logan tendiendo su mano.
Alice estrecho la mano de Logan con mirada cansada.
—Es un trato.
El chico tomo la mano de Alice al salir de auto y se sorprendió al sentirla tan suave y cálida, algo extraño para una chica tan fría y brusca, pensó.
—Esto es extraño —susurró la chica observando cómo los miraban las personas.
Logan no respondió, sino que soltó la mano de la chica y pasó su brazo sobre los hombros de Alice.
—Así es mucho mejor —dijo él y Alice agradeció que haya soltado su mano, pero maldijo que el cuerpo de Logan se sintiera tan bien a su lado.
—¿Dónde está la chica? —pregunto Alice.
Logan observó a su alrededor y tras unos segundos habló:
—Allí, esa es la chica —informó observado a Anett a unos metros.
Alice siguió la mirada del chico y quedó sorprendida al ver a Anett.
Ella era perfecta, como una modelo de comercial. Su cabello estaba perfectamente peinado con grandes ondas, estaba maquillada, su piel era como porcelana y el vestido color blanco que traía la hacía ver como una muñeca.
—No lograrás hacerla tener celos de mí —soltó Alice.
Logan frunció el ceño y la observo.
—¿Qué? —preguntó sin entender.
Alice quito la mirada de Anett y observo a Logan.
—Esa chica es como una Barbie... morocha, pero Barbie al fin, y yo soy como la versión desmejorada de un vagabundo —Alice estaba seria —. Tu plan no funcionara —aseguró.
Logan se quedo observándola. Ella había dicho esas palabras sin tristeza, sin baja autoestima, ella lo había dicho como algo extremadamente normal.
—Mi plan funcionara —dijo luego de unos segundos y recorrió el cuerpo de Alice con sus ojos —. Y respecto a tu atuendo, podemos cambiarlo.
Alice negó y Logan sabía que se negaría.
—Yo estoy perfecta como estoy, me siento bien y amo mi ropa —dijo la chica colocando sus manos dentro de los bolsillos de sus pantalones deportivos.
Logan sonrió.
—Genial, entonces te presentare a Anett Stone.
Logan estaba nervioso, rogaba porque su plan funcionara.
Sabía que era extraño que a solo unos días de confesarte a una chica aparecieras con otra diciendo que era tu novia, pero era su única opción y no tenía tiempo para esperar. Si lo pensaba mucho corría el riesgo de arrepentirse.
Anett se encontraba concentrada en su celular, su piernas estaban cruzadas y una sonrisa diminuta se formaba en sus labios.
—Babearás —susurró Alice y Logan despertó del trance.
Al llegar al lado de Anett, la chica levanto la mirada y frunció el ceño al ver a Logan y Alice.
—Hola —saludo Logan sin quitar sus manos de los hombros de Alice.
—Hola —respondió Anett aún confundida.
Logan carraspeo.
—Anett, ella es Alice, mi novia.
Los ojos de la chica se abrieron sorprendida.
—¿Tu, qué? —preguntó observando a Alice si disimular.
A Alice no le gusto eso, no le gusto que la chica la recorriera de pies a cabeza, que se mostrara tan sorprendida.
Si, ella Alice Love Peace, la chica más descuidada del colegio estaba saliendo con Logan... el sexy-nerd, y ¿qué?
Una guerra de miradas se desató entre las chicas y Logan quiso saltar de alegría al verlo.
—Mi novia, Anett, solo quería presentártela ahora que somos amigos, nuevamente —dijo Logan recalcando la palabra amigos.
—Oh —soltó la chica y se puso de pie —. Mucho gusto Alice, soy Anett y espero que nos llevemos muy bien —dijo y le tendió la mano a Alice.
Alice no pensaba estrechar su mano, no quería ni ver a esa chica nuevamente, le caía mal.
Un apretón en su hombro la hizo reaccionar y tras una sonrisa extremadamente forzada, estiró su mano y estrecho la de Anett.
—El gusto es mío —murmuró Alice y soltó la mano de Anett alejándose de Logan —. Debo irme, me encontraré con mi amiga en nuestro club anti modelos de revista —dijo la chica y salió de allí.
Logan la observó irse confundido y luego dirigió su mirada a Anett, quién lo observaba seria.
—¿Qué estás haciendo, Logan? —cuestionó su amiga.
Logan sonrió como si no le importara nada de ella.
—Sigo con mi vida Anett y espero tener tu apoyo, porque Alice es la chica a la cual me voy a dedicar ahora.
Sin más salió de allí, dejando a su amiga.
Logan sabía que ella había entendido sus palabras, antes, las horas, los días y las noches de Logan estaban dedicadas a Anett.
Antes era a ella a quién ayudaba a estudiar, era a ella a quién sacaba a comer un helado, a quién cuidaba las noches de borrachera, era por ella que se desvelaba para hablar por teléfono o enviar mensajes, su vida se resumía a complacer a Anett, pero ahora ella vería que todas esas atenciones y más, iban a ser dirigidas a otra persona... a Alice.
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