Leonel abrió la pequeña ventana de la puerta y se me quedó mirando, se veía furioso y empezaba a temer por la vida de Jacob. Había visto a Leonel matar a muchos, su alma estaba tan manchada que otra muerte más no haría diferencia a su historial.

-Debería de matarte- Dije con ira haciendo que sus ojos saltarán de sorpresa.

-Eso mismo estaba pensando yo de tu perro faldero- Hablo este con mi mismo tono de voz.

-Olvídate de Jacob él no es tu problema ahora, yo sí lo soy porque no te dejaré vivir sabiendo lo que le hiciste a mi padre.- Dije sin poder evitar que mis ojos se aguaran.

-¿Tu padre? no quieras cambiarme el tema Bellator estamos hablando del infeliz con el que estuviste mientras yo no estaba aquí.-Dijo este intentando volver al tema de Jacob haciendo que me molestara más

-¡MATASTE A MI PADRE Y CON QUÉ DESCARO VIENES A PARARTE AQUÍ, PONERME LA MANO ENCIMA Y ACTUAR COMO SI YO TE DEBIERA UNA DISCULPA!- Grite ya harta logrando solo que el se riera

-Yo no maté a tu padre Maya- Contesto serio y sereno para mi sorpresa.- Tal vez fue Chris o Freddy.

Su respuesta aunque me dio la respuesta de quien lo mato me dio paz y me dolía admitir que la paz que me daba era saber que no había sido el.

-Ya suéltalo- Dije con fastidio por su mirada penetrante juzgandome, sabía lo que quería decir ya que me había respondido asi que deje que lo dijera.

- Las mujeres siempre quieren al infeliz que no tiene nada para ofrecerles.- Dijo este con ironía y burla

-Tu solo desearías que tu fueras el infeliz- Conteste con la misma burla en mi voz dejándolo sorprendido y aún más furioso- No me engañas eres un niño jugando hacer el rey.

- ¡SOY EL REY!- Gritó pegandole a la puerta- No me hagas demostrartelo Maya.

- ¿Que me vas hacer eh? tu estás roto y dijiste que era igual que tu, entonces yo también estoy rota- Hable acercándome cada vez más a la puerta.

-Tu no estas rota, pero con gusto voy a encargarme- Dijo antes de irse dejandome con la palabra en la boca.

-LEONEL VEN, A DONDE VAS, VUELVE- Grite a todo pulmón por la pequeña ventana, con los nervios de punta me senté en una esquina del pequeño cuarto. No debí molestarlo, no debí enfurecerlo sabrá Dios de que sería capaz.

20 minutos después...

La puerta del cuarto se abrió sorprendiéndome al instante, pero aunque estaba abierta no veía a alguien parado ahí. Y cuando me iba a levantar para salir de la nada una bolsa negra de basura salió disparada cayendo dentro del cuarto. Estaba amarrada como basura, pero algo en mi me rogaba abrirla y la presión en mi cabeza me hizo abrirla haciendo que pegara un grito y mil lágrimas arrepintiéndome al instante.

- ¿Te gusto mi regalo reina?- Preguntó Leonel por la ventana con su brillo asesino y su sonrisa de loco.

-¡COMO PUDISTE!- Le grite al tener al lado la cabeza de Jacob en una bolsa.

Leonel odio mi reacción y abrió la puerta cerrándola con el adentro del cuarto. Yo estaba llorando sin poder parar sentada en una esquina temiendolo lo que él me haría. Solo la primera vez que la vi tuve miedo de el luego nunca más, pero ahora le tengo miedo y al parecer lo noto porque se enojo.

-Deja de llorar por él- Pidió casi a gritos

-¿Cómo puedes ser tan frío?- Pregunte entre lágrimas, mirando lo que él había hecho.

-Tu eres la fría, te declare mi amor y me rechazas, pero cuando me voy por ¡UNA PUTA SEMANA MAYA YA ESTABAS TU REVOLCANDOTE CON ESTE CABRON! - Grito haciendo que sus ojos se vieran como los de un loco mientras se agarraba el pelo despeinandoselo.

- El me cuido y nunca dejo que me violaran.- Dije parandome del suelo haciendole frente.

- Yo te cuide

-No, tu solo te aseguraste de volverme loca de romperme emocional y mentalmente. Nunca me cuidaste solo me destrozaste y aun tienes el descaro de culparme por lo sucedido- Dije interrumpiendolo.

- Nunca debiste sentir algo por él y no me arrepiento de lo que hice- Dijo el acercandose a mi.

-Pues yo si me arrepiento de lo que hice- Dije con enojo sacando su carta doblada de mi pantalo.

-La guardaste- Susurro paralizado.

- Y fue un error- Conteste antes de que el saltara a tomarme la cara y besarme, un beso tan caliente y apasionado que pensarias que hasta habría fuegos artificiales en el lugar, pero lo empuje saliendo de ese sueño pasajero.

- ¿Por qué hiciste eso?- Pregunté molesta

-Mañana no te veré, consideralo una despedida- Contestó el sobandome la cara.

- ¿Cómo que mañana no te veré?- Pregunte hasta sin darme cuenta

- Mañana después de la función que darás te van a matar y no puedo hacer nada por que lo dijo el jefe.

-Ayúdame a escapar- Pedí mirándolo fijo, sabía que era probable que recibiera un no como respuesta; pues muchas veces le pedí salvarme y dijo que no, pero su sonrisa me dijo que esta vez sería diferente.

- Sacaré a todas las demás mientras te llevan con el presidente y mientras tu estas con el, intenta matarlo. Luego yo pasare por ti y nos iremos todos. ¿Qué te parece?.

-¿Qué hay de Chris y Freddy?- Pregunte dándole a entender que su plan tenía fallas.

-Ah eso es simple y se soluciona rápido, ahora mismo los traeré aquí te dejare mi arma y tu los mataras qué te parece.