Bien dicen por ahí que no hay eternos días soleados, que tarde o temprano una lluvia se avecina; ojala ella se hubiera dado cuenta que eso era posible en su relacion, pero bien es sabido que cuando una ama le es difícil ver con claridad.

Pasaron días desde la declaración de amor y  parecía que todo funcionaba bien, pero ella notaba a Frank un tanto apagado, como si su cabeza maquinara día y noche sin parar, estaba pensativo todo el tiempo, distante, y a veces parecía querer decirle algo, pero luego se arrepentía, no quería molestarlo creía que era su imaginación  parte de sus inseguridades, así que le daba su espacio. La verdad es que la única relación seria que tuvo en toda su vida había sido con Chris, y siempre tenían crisis, tenía que dale su espacio, eso y el tiempo eran parte de su relación. Penso que con Frank podría pasar lo mismo. Sabía que él era un hombre muy reservado, se conocían cientos de rumores sobre su vida privada, miles de chicas que pasaron por su cama y unas cuantas que posiblemente tuvieron algo más serio que una simple noche de sabanas, por tal razón creí que le costaba un poco asimilar lo que sentía por ella.

De eso se convencío, pero se estaba mintiendo a mí misma.

La filmación llego a su fin, y como era de esperarse Frank y Ana debían tomar caminos diferentes, pero no del todo, claro, ellos tenían una relación y la seguirían a distancia, y así fue como se despidieron, no sin antes haber pasado una noche romántica, que a ella le pareció a despedida, pero seguía convenciéndose de que solo eran ideas suyas y tenía que relajarse, todo era nuevo para ella con él y tenía que acostumbrarse porque lo amaba, realmente lo amaba y estaba dispuesta a todo con él.

Pasaron dos semanas desde que se habían separado. Las cosas no iban bien, al menos no para Ana. Hablában por teléfono, pero la mayoría de las veces era ella quien empezaba la conversación mientras él parecía que contestaba solo por cordialidad; el hombre que ella conocía, no era el mismos que se encontraba detrás de esas conversaciones telefonicas. Y sus nervios, ansiedad y sexto sentido, la pusieron en alerta, no dudo en conversarlo con sus amigos y al hacerlo llegó a la conclusión de que algo andaba mal y tenía que resolverlo.

En Los Ángeles tenían una pre-presentación sobre el film que habían grabado en Montreal, y ahí se volverían a ver, tenía que enfrentarlo y preguntarle qué pasaba que problema tenia, necesitaba verlo a los ojos, pero sobre todo necesitaba estar entre sus brazos ya que era la única forma que todos sus miedos podían desaparecer.

Se dirigío al hotel donde se haría la presentación, de más esta decir que el lugar estaba atestado de fans y periodistas, por las celebritis que se encontraban ahí y por las diferentes películas de las cuales se hablaría en el evento. Antes de salir a la rueda de presentación principal, la organización les permitía a los protagonistas estar tranquilos en una sala donde podían beber, comer y estar con colegas para pasar el rato.

Al llegar a la sala privada, algunas personas se le acercaron para saludarla, fingiendo una amplia sonrisa y casi evadiendo sus preguntas, buscaba a Frank. Y ahí estaba cerca de una mesa sirviéndose algo de beber, no dudo ni un segundo y disculpándose de las personas que la hablaban, se dirigió hacia dónde estaba, todavía no se había dado cuenta de su presencia. Se veía realmente atractivo, como siempre, y por Dios como lo había extrañado. No era muy demostrativa, pero con el cerca se olvidaba de todo, así que se dirigío hasta él y por detrás lo abrazó tiernamente por la cintura.

- Hola cariño - susurró...

Él se sobresaltó y salió de su agarre como si quemara, disimuladamente, se dio vuelta quedando frente a ella con un semblante serio y un tanto preocupado.

- Ana ¿qué haces aquí?

- ¿Cómo que hago aquí? No es obvio - dijo frunciendo el ceño sin poder entender su reacción.

- Disculpa, me tomaste por sorpresa, no te esperaba.

- Perdón, no quise molestarte – demás está decir que se estaba muriendo por dentro debido a su tono frio y su rechazo.

- Tenemos que hablar, pero no aquí, te parece vernos en mi hotel después de que termine todo este circo.

- Claro – solo pudo decir eso tragándose las lágrimas, sabía que algo malo estaba pasando ya no lo podia negar.

Se les acercó el agente de prensa diciendo que ya era hora de ir encaminando a la sala. Él solo la miro y cuando paso por su lado susurro cerca de su oído...

- Cambia esa cara, la película es más importante.

El tono frio y demandante terminaron de quebrar su interior, él jamás había sido así con ella, lo único que esperaba es que toda esta basura terminara lo antes posible para poder tenerlo al frente nuevamente, necesitaba una explicación coherente porque esto la estaba superando.