Los días pasaban mientras Ana seguía igual, repasaba una y mil veces por su su cabeza todo lo que había pasado, revisaba minuciosamente que había hecho mal, acaso ¿era  ella el problema? tenía que serlo. Inconscientemente se hacía responsable de las decisiones que él había tomado. Tenía que ser eso, porque si no que otra explicación habría "porque ella y yo no", rondaba por su cabeza una y otra vez. La vulnerabilidad que no sentía hace mucho tiempo se volvió apoderar de ella por completo.

Esa vocesita interna que le decia que su cuerpo, su cara y  forma de ser, eran los responsables, no era suficiente para él, y se odiaba por eso.

Había pasado un mes, de lo que ella denominó, su debacle emocional, estaba aun peor que el primer día , se la pasaba en cama lamentándose de todo.
Sabía que ya estaba exagerando pero la autocompasión es un estado altamente adictivo y confortable, le costaba salir de ahí. Luego de los regaños de Max, la psicología inversa de Affie, y las suplicas de Sam, la dejaron sola por primera vez desde aquel día, . Sé quedo ahí sola en la acogedora cama de su amiga y con la mente maquinando ideas sin parar,  para callar esas voces internas, encendió la TV y mientras hacía  zapping se encontro con la imagen que inevitablemente tendría que ver en algún momento. 
Ella ahí lamentándose, sufriendo por su causa, y él como si nada de la mano de su linda novia, mostrándose como la parejita feliz. No era justo, ella no merecía esto. De pronto se hizo un clip en su cabeza, no podría seguir así, necesitaba seguir viviendo su vida y dejar atrás todo esto. No iba hacer fácil, pero ya tenía que enterrar ese sentimiento, no se iba a dejar morir por alguien que no lo haría por ella.

- ¿Se puede?

- Carajo¡ Amiga, saliste de la cueva

- Sí, ya era tiempo de ver nuevamente la luz, decidí que ya no quiero sufrir. Max tiene razón, yo valgo mucho más que eso.

Ahí, en un pequeño pero acogedor y llamativo pub de Londres, ella  anunciaba el inicio de una nueva etapa en su vida, la etapa en la que nunca más nadie la iba a volver a pisotear, usar o manejar a su antojo. La coraza que una vez tuvo, hoy volvió a crecer y mucho más dura y fuerte que antes.

- Nena te felicito, por fin has despertado de tu coma, estoy muy orgullosa de ti

- Gracias Af, ya tendrás cama para ti sola.

- Eso no importa, no me molesta compartirla contigo, ven acompáñanos, te presento a mi amigoa y colega, trabajaremos juntos en un nuevo proyecto; Ani, Alec. Alec, Ani

- hoooo omg¡ es un gusto enorme, soy un gran admirador tuyo, querida eres maravillosa¡ - me lo dijo con un tono bastante chillón pero divertido y sumamente cálido.

- Muchas gracias – conteste besando su mejilla y acomodando me en una silla a su lado -  y mucho gusto Alec 

No sabría explicar si era la buena vibra del lugar, la buena compañía, o las cosquillas que dos chops de cervezas le provocaban, pero en ese momento sintió que su propósito a seguir lo cumpliría. Volvío a sonreír sin esfuerzo y  sintio que volvio a ser ella.