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一Chan, los waffles otra vez te salieron amargos 一bastó con darle un mordisco, el sabor desagradable de la masa se apodera de mis pobres papilas gustativas.

一De qué hablas 一Seungmin sale a la defensa del wendigo, arreglándoselas para meterse tres waffles en un solo bocado. Juraría haber oído su mandíbula traquear一. Están deliciosos, como siempre. Mira, tal vez puedas ocultar el sabor si le echas sirope de chocolate.

Iba a decirle que no, pero el niño se me adelanta y cubre la superficie con el sirope.

Esta alternativa la he tomado antes, así que cuando le doy otro mordisco y tiene el mismo resultado, ni me molesté en expresar mi desagrado.

一¿Seguro que no le estás metiendo algo raro al waffle que le haces al corderito? 一inquirió Minho, y a juzgar por su deleite con el desayuno, diría que soy la única en esta mesa que no puede saborear la dulzura del waffle.

一El waffle está preparado con la misma masa de todos 一Chan se precipita a cortar un trozo del desayuno con su tenedor y se mete un trozo a la boca一. Sabe normal 一entonces me miró a mí y levantó una ceja一¿No me estarás jugando una broma?

一Te juro que sabe amargo 一me puse de pie y dejé los cubiertos en sus respectivos lugares一¿Sabes qué? De ahora en adelante, yo me ocuparé de mi propio desayuno...

Presentí la fija observación de Chan en mi cara antes de irme a la cocina. Sé que me quería decir algo. Agradezco que no lo haya hecho. Además, no me sienta bien el que él invierta su tiempo y energía en prepararme algo que por algún motivo soy incapaz de deleitarme.

一¿No te estarás enfermando, o sí?

一¡Ah! 一el wendigo me asustó, ya que salió de la nada. ¿Dónde estaba? Me recompuse y me dispuse a recogerme el cabello para asegurarme de que no caiga en la comida por accidente一No, yo me siento bien. ¿Por qué pensarías que estoy mal?

一Estoy preocupado por ti. Eso es todo.

Abrí la nevera y saqué el cartón de leche junto al cereal. Fui a buscar una cuchara y nada más darme la vuelta, encuentro al pelinegro vertiendo el cereal en el tazón por mí.

一Te dije que estoy bien 一me apresuré a él y aparté el tazón una vez acaba.

La cara seria del muchacho me causa un vacío extraño, a veces pienso que he dicho algo que no debería cuando me estudia con esos ojos inexpresivos; jamás puedo adivinar lo que está corriendo por su mente.

一Okay, si tú lo dices.

A la mañana siguiente, desperté con una nariz densamente congestionada, un terrible picor en la garganta y dolor de cabeza. Para acabar de rematar, eran las diez de la mañana, me quedé dormida en un día en el que debía ir al Café.

一Ahg, cielos 一siento que mi cabeza da vueltas al intentar sentarme. Pasé mi mano por mi cuello, bajando hasta el inicio de mi pecho. Estaba hirviendo.

Tambaleando un poco en mi camino hacia el pasillo, justo estaba el wendigo caminando por ahí. Mi febril existencia, producto de la fiebre, debió ser suficiente indicio para que Chan adivinara lo que estaba mal.

一No me mires así 一fruncí el ceño y abrí la puerta del baño, esquivando su cara de "lo sabía"一Ayer me sentía saludable.

Cerré la puerta, sin dejar que me replicara y dejé la toalla en su sitio. Había una capa espesa de condensación flotando en el reducido espacio.

Es común que las temperaturas internas de un dragón sean fogosas, sofocantes. Por lo tanto, la mejor manera de refrescarse es darse una buena ducha helada y larga.

Giré la llave para abrirla, sin pensarlo mucho y esperé al contacto refrescante del agua; sin embargo, fui recibida por un intenso calor, hasta el punto en el que juraría que esa agua derritiría mi piel.

¡¿Quién rayos se baña con agua así de caliente?!

一Cuidado 一primero, sentí sus manos sujetarme, evitando que me cayera. Segundo, la sutil voz de Chan一Deberías escucharme más en lugar de ser tan testadura.

一Maldito seas, Chan. ¿Cómo haces para escabullirte sin que te vea? 一estaba distraída, pensando en que hoy muero por causa de esta horrible fiebre, pero...一¿E-Estás sin ropa?

一Negativo. ¿Cómo me iba a dar tiempo para quitarme la ropa y evitar que te tropezaras?

Solo para confirmar que no me estuviera mintiendo, con cautela, busqué su abdomen a tientas.

Sí tiene ropa puesta, pero está mojada.

一Estaré bien, idiota. No tienes que cuidar de mí como si tuviéramos cinco años 一me separé de él, repitiéndome numerosas veces de tener cuidado y no darme la vuelta. Me abracé a mí misma y ajusté la temperatura del agua.

Hay algo de movimiento a mis espaldas y supuse que se había ido. No obstante, esa suposición es comprobada incorrecta cuando siento algo ligeramente áspero tocar mi espalda. Estaba usando la esponja de ducha en mi espalda, el gel de baño refresca ese ardor en mí.

一¿Te acuerdas de ese suéter que nos regaló tu mamá cuando éramos niños? 一cuestionó el pelinegro, su voz siendo igual de paliativo que un sedante. Habla tan bajo, que ni se oye su eco en las paredes de la ducha.

一No me lo recuerdes. Qué suéter más terrible 一me abstengo de un escalofrío.

一Fue hecho con amor 一¿acaso oí una pequeña risa venir de él? Bien sabe que ese es uno de los recuerdos más mortificantes para mí. No exactamente por el hecho de que usar ese suéter equivale a tener termitas encima, sino porque fue una acción un poco desconsiderada de parte de mi madre, ya que la semana anterior le hablé de que tenía un crush en Chan y nos regaló eso como un mensaje indirecto.

一Te juro por dios, que como digas que todavía lo tienes...

一Cómo iba a tirar a la basura algo así 一obviamente no le veo la cara, pero juraría que ha torcido los ojos.

La charla había logrado distraerme lo suficiente, como para percatarme tarde de que Chan había dejado la esponja de baño a un lado; en su lugar, sus dedos eran lo que frotaban directamente en mi abdomen.

一¿Ya te sientes un poco mejor? 一parece que él también se ha dado cuenta de la acción inconsciente y se alejó de mí一Al menos ya no estás ardiendo como un horno.

一Sí, me he refrescado algo 一miré por encima de mi hombro, viendo a Chan salirse de la ducha一. Gracias.

☁︎໋ ˒ 𝐇𝐎𝐍𝐄𝐘 𝐃𝐀𝐓𝐄𝐒‎ ˆ ͎۫ 🍥 ⸃ ͙۪۫

No acostumbro a enfermarme con frecuencia, pero de las pocas veces que me pasa, todas golpean fuerte. Es por eso que, cuando abro los ojos en esta nueva linda mañana y siento que los malestares se han ido de un día para otro, me parece una novedad.

Arrojé mis piernas fuera de la cama y caminé al tocador, por alguna razón mi cuerpo se siente más pesado de lo normal.

Me paré frente al espejo y levanté la cabeza, dando con...

¿Por qué estoy viendo a Chan?

Llevé una mano a mi cara, la imagen en el espejo se replica al mismo tiempo. Sujeté mi cachete derecho y lo jalé, con el pasar de los minutos llegando a la conclusión de que一

Estoy en el cuerpo de Chan.

Como si tuviera una estampida de bueyes correteándome, salí dispara hacia mi propio cuarto, en donde en teoría debería estar el cuerpo que me corresponde.

一¡Chan! ¡Chan, despierta! 一me subí encima de mi...¿su cuerpo? Y lo agité mínimo treinta mil veces. Por la agresividad de mis temblores, se despierta confundido y con la mirada me pregunta qué demonios está pasando.

一¿Qué ha pasado?

一Ves esto normal, ¿huh? Dame un buen vistazo 一abrí las palmas de mis manos a los lados, gesticulando que analice la situación.

一Es muy temprano para esto 一tomó las sábanas y se arropó con ellas hasta la cabeza.

一¡No te duermas! 一no puede ser que yo sea la única que está entrando en pánico por esto.

一Por qué haces demasiado ruido, Chan 一preguntó Seungmin desde la otra cama, sentándose y por supuesto, no podía faltar su observación irritada.

一Hey. ¡Hey! 一arrebaté las cobijas de ¿Chan? y tomé su rostro entre mis manos.

一Cambiamos de cuerpo, ¿y qué? Son las seis de la mañana, ya resolveremos esto algún...día...一bostezó Chan y se volvió a acomodar en la cama.

一¿Cómo que cambiaron de cuerpo? 一el gumiho está más alarmado que Chan, incluso salió de su propia cama y se acercó a mí一Primero lo de los waffles amargos y luego esto. ¿A caso te cayó una maldición?

一No tengo idea 一me rasqué la mejilla y tomé mi celular de la mesita de noche. Por costumbre, puse mi dedo índice en el lector de huellas y el celular no me lo reconoce. Suspiré exasperada y agarré la mano del cuerpo que está ocupando Chan y lo situé en el lector.

一¿Qué vas a hacer? 一se asomó Seungmin a mi lado.

一Voy a llamar a Jisung para decirle lo que pasó, a ver si él tiene una respuesta.

一¿Estará despierto a esta hora?

一Él es quien abre el Café 一puse el móvil en mi oreja, atenta al tono de llamada一. Debería estarlo.

一¡Xinnie! ¿A qué se debe esta temprana llamada? 一Jisung contestó desde la otra línea.

一Verás, ha pasado un inconveniente 一por hábito, fui a sujeta un mechón de pelo en mi hombro, para luego recordarme que no estoy en mi cuerpo一. Por extrañas razones, que solo el universo sabe, cambié de cuerpo con Chan.

一¿Cómo?

一¡Amanecí esta mañana en el cuerpo de Chan!

一Oh, ya iba a preguntar qué hacía Chan usando tu celular 一Jisung se lo ha tomado mejor de lo que esperaba一. Trae tu cuerpo y el de Chan al Café, creo que sé cómo ayudarlos.

一¿Qué hay de mí? 一Seungmin se pegó al celular puesto en mi oreja, casi empujándome hacia el piso. Por desfortuna, Jisung ya había colgado.

一Dormilón 一aproveché, que el cuerpo de Chan es más fuerte que el mío, para levantar el mío propio一. Ponte algo presentable, vamos al Café.

一Yo no trabajo ahí 一murmuró, rehusándose a abrir tan siquiera los ojos.

Varios forcejeos después y un creciente dolor de cabeza, llegamos al Café. Son puntualmente las siete y media de la mañana. Changbin y Jisung ya estaban moviendo cosas adentro.

一Se nota que quien está ahí dentro es Chan 一comentó Jisung, dando pequeñas palmaditas en su rostro一. La Xinnie que conozco entra a trabajar con buenos ánimos.

一No sabes lo que tuvimos que hacer para que se cambiara de ropa 一añadió Seungmin, con una evidente expresión de diversión. Es parte de la naturaleza de los gumihos el disfrutar este tipo de problemas一. Tuvimos que desnudarlo entre los dos para hacerlo.

一Uh, me hubiera gustado ver eso 一bromea el íncubo.

一Es justo por eso que estoy enojado 一replicó Chan, cruzado de brazos.

一Ni siquiera es tu cuerpo 一contrarresté.

一Mientras yo esté adentro, es mío 一anunció con total seriedad. Se dirigió luego al dueño del Café一Y bien, Einstein, ¿cuál es el plan?

一Los ángeles controlan el tema este del cambio de cuerpos, seguro podríamos ir a pedirle ayuda a Minho.

一¿Y la necesidad de que viniéramos aquí?

一Los ángeles residen en una zona muy vigilada y de alta seguridad, tanto así que incluso si Minho afirma conocerlos, no les van a dar paso. Solo se le concede acceso a esa zona si tus antepasados han tenido un trato directo con los ángeles.

一Definitivamente los wendigos no habrán tenido ese privilegio 一Chan expresó con sarcasmo.

一Antes de que vinieran, llamé a Minho para ver si podía venir aquí, pero no contestó. En parte también quiero que vayamos a verlo, porque no hemos sabido nada de él en semanas 一Jisung se quitó el delantal y lo dobló a un lado.

一¿Me vas a dejar solo aquí otra vez? 一inquirió Changbin.

一No hay de otra. Y sí, Changbin, sí. Te pagaré más.

Nos dejaron entrar a la tan exclusiva zona, solo porque los ancestros de Han habían acordado contratos con ángeles de esas épocas. A juzgar por lo bien que conoce el protocolo para entrar, me puedo hacer una idea de cuántas veces habrá visitado a Minho.

一¿Estás seguro que este es el apartamento de Minho? 一Chan ojeó la placa en la puerta, con un número designado.

一Segurísimo. He estado aquí antes por lo menos diez veces 一tocó el timbre y esperamos en silencio a una respuesta. Respuesta que no llegó.

Impaciente, Chan hundió su dedo múltiples veces en el botón. Si no fuera porque Jisung lo obliga a contenerse, quién sabe si hubiera hecho un cortocircuito.

一Parece que no está ni en su casa 一Jisung se rascó la cabeza, para luego buscar su celular一. Al último que vi con Minho fue Hyunjin. Tal vez él sabe dónde está.

一¿Deberíamos reportarlo como desaparecido? ¿Qué tan común es que pase esto?

一Ha pasado antes, pero esa vez fue hace tres años.

一Ehm, chicos... 一el gumiho llama nuestra atención y, con un sencillo empujón en la puerta, la abrió. Entre todos nos miramos con la misma expresión de asombro, pero entramos con cuidado.

一Qué irresponsable de su parte el haberse ido sin asegurar su casa 一comentó el dragón a la par que entró y cerró la puerta. El sitio entero estaba a oscuras. Tanteé en la pared hasta encontrar un interruptor. Le di varias veces y las luces seguían sin encenderse.

一No te preocupes por las luces, podemos ver perfectamente en esta oscuridad 一dijo Seungmin a mi lado.

一¡Minho! 一primero Jisung alzó su voz y luego le seguimos. Llamamos el nombre del ángel unas cuantas veces. No hay manera de que no nos esté escuchando, estamos en un espacio cerrado.

Estábamos caminando por doquier, hasta dar con su habitación cerrada.

一¿Estará durmiendo? 一se preguntó Chan a sí mismo.

一Deberíamos intentar abrir la puerta 一sugerí.

一Oigan, miren 一Jisung nos hizo un ademán para que fuéramos con él. Estaba señalando algo en el piso. Fuimos a donde estaba él, cerca de la ventana que estaba rota. Los restos del vidrio esparcidos por el piso.

一¿Y si alguien lo secuestró?

一Cohibir un ángel no es precisamente fácil 一Jisung negó su cabeza, rechazando mi sospecha一¿Y si solo está durmiendo? No hemos visto su cuarto.

Jisung se aventura a entrar él primero al terreno desconocido. A diferencia de las luces del resto del apartamento, las de la habitación del ángel sí se prenden, revelando un líquido magenta y cian esparcido por la alfombra.

... ¿La sangre de los ángeles no son de esos colores?

El tono de llamada de un celular nos hace salir de nuestros pensamientos. El celular pertenece a Jisung, quien se dispone a atender la llamada, Algunos rondaron por ahí por si encontraban algo nuevo respecto a Minho, mientras esperábamos a que la llamada resultara tener algo que ver con el ángel.

一Falsa alarma, todos 一fue lo que dijo Jisung, captando nuestra completa atención一. Bueno, es algo grave, pero supongo que es mejor a que hubieran secuestrado a Minho. Él está en el hospital.

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Resultó ser que Minho había recibido un castigo por romper alguna de la miles de leyes que tienen lo ángeles一se negó a decirnos cuál.

Por fin era mi turno de entrar a la habitación, con un tiempo contado de cinco minutos para decirle lo que quisiera.

一Siento haberles preocupado 一se disculpó con sinceridad. No parecía tener algo fracturado, pero por lo que nos informó el doctor, había perdido mucha sangre一. Me gustaría ayudarles ya mismo para deshacer el intercambio de cuerpos.

一Descansa primero 一repetí, la verdad es que el ángel no se ve en las mejores condiciones para ejercer fuerza一. Me pregunto si los waffles que me dio Chan tiene algo que ver...¿Tal vez lo mezcló con algo que no debía?

Eso parece llamar la atención del hospitalizado. 一¿Waffles?

一Sí, unos waffles que, quién sabe por qué, solo a mí me saben amargos.

一Oh, yo sé por qué 一Minho hizo una pequeña pausa y clavó su mirada en mí一. Son unos waffles especiales. Saben así solo a aquellas personas a las que el chef más ama. Entre más amargo, mayor el afecto.

fin del capítulo (･-･) \(･◡･)/