Sally estaba enojada.

Se suponía que hoy sería el día donde ella y Julie practicarían los diálogos de su próxima obra en la cuál a estado trabajando recientemente.

Estaba todo listo y preparado, el vestuario, la iluminación hasta el escenario esta listo ¡Incluso ella había confirmado que sería puntual!.

Resoplo molesta al ver la hora, llegaba mas de 30 minutos tarde, ¿Que estaba haciendo que era más importante que practicar su obra?.

Su impaciencia estaba llegando a su punto culmine mientras miraba por la ventana de su hogar, tal vez con la esperanza de ver a su amada vecina caminar en dirección a su casa y tocar la puerta.

Trataba de mantenerse positiva ante la situación.

“Quizas este ocupada con algo.... O puede ser que se haya olvidado que era hoy.... No! Eso no podría ser verdad, quizás se distrajo jugando otra vez y perdió la noción del tiempo de nuevo!” – mientras más pasaba los minutos más trataba de encontrar razones por las cuales ella no aparecía, cada una se sentía como una apuñalada en el corazón.

Estaba tan absorta en sus pensamientos que el toque de su puerta casi la hace saltar del susto.

Sorprendida por el toque observó con atención afuera desde su ventana, para su deleite y alivio era Julie quien había tocado.

Prácticamente se abalanzó sobre la puerta antes de abrirla por completo, poniendo su mejor sonrisa y arreglando se un poco, no quería verse mal en especial frente a ella.

“Julie! Me alegro que hayas venido! Creí que no vendrías, te estabas tardando tanto que pensé–”-

“Lo lamento Sally pero no podre practicar hoy..."

Que.

Se quedó en silencio contemplando sus palabras con claridad.

“Estaba realmente emocionada por practicar hoy contigo sin embargo surgió un... ‘pequeño problema’"– podía escuchar como su voz sonaba nerviosa, casi culpable.

“Lo lamento tanto, se que querías practicar tanto esto pero... No puedo dejar esto sin resolver... Lo siento mucho, Sally"– había una profunda tristeza en esa palabras qué se sintió como un golpe en el estómago oírla con ese tono tan deprimente.

“No te preocupes Julie! Podemos hacerlo otro día si quieres!"– sonó más nervioso de lo que se esperaba que fuese, algo en su interior se alivió al confirmar que de hecho había surgido algo que le impide practicar hoy, en vez de simplemente ignorarla.

“Enserio? No estas molesta?"- el cambio en su actitud fue repentino, paso de parecer un cachorro triste a prácticamente brillar de emoción, juro que incluso vio pequeños brillos en ellos.

“C-claro! No podria enojarme contigo Julie, después de todo te ofreciste para ayudarme!"- hizo una pequeña mueca ante su tartamudeo, podía sentir como sus mejillas ardian ante la expresión de su vecina, le parecía adorable...

Ajena al crecimiento nerviosismo de su vecina, Julie se abalanzó sobre ella dándole un fuerte abrazo con un chillido de felicidad.

“Gracias Sally! Prometo no decepcionarte esta vez, lo juro!"-

El repentino toque la hizo sonrojarse por completo, podía sentir como los brazos de Julie la rodeaban en un abrazo, con los brazos un poco tembloroso logro corresponderle torpemente el abrazo.

“No hay de que Julie!"-

Ella soltó una pequeña risa y , desgraciadamente, se alejo del abrazo.

Parecía que su estado ánimo había mejorado un poco.

“Esta bien! Nos vemos luego Sally! Avísame cuando sera la próxima practica"- levanto su mano en forma de despedía mientras se daba la vuelta y se alejaba de la casa.

“Nos vemos..."-

Julie se alejaba poco a poco siendo simplemente una figura en la distancia, inconsciente del suspiro que salió de Sally y la forma en la cual su rostro se puso colorado, sostenía con fuerza su pecho como si su corazón se saliera de su en cualquier momento.