"Entonces, ¿qué haces normalmente después de los muffins y los lattes?" Preguntó Nayeon. Todavía se sentía un poco nerviosa por el altercado con Jennie, y quería hacer algo con Mina para dejar de pensar en ella. "Aún quedan un par de horas para el turno del almuerzo. ¿Damos un paseo? ¿Ir a McDonald's y criticar su menú?"

"Vamos a tomar una siesta", dijo la japonesa, interrumpiendo a Nayeon. "Porque hoy es lunes, y ambas sabemos lo que eso significa".

"Los lunes de Carbonara," murmuró Nayeon. "Estupendo. Fue divertido por un tiempo, pero ahora no quiero que sea lunes nunca más. Ojalá pudiéramos borrar los lunes por completo. Que la semana sea de martes a domingo. Nunca más lunes".

"Estás mintiendo", dijo Mina a sabiendas. "Lo amas."

Nayeon intentó fruncir el ceño a Mina, pero se desvaneció una vez que vio la sonrisa en su rostro. Saber que ella era la razón por la que Mina estaba sonriendo hacía que la mayor se sintiera mareada y feliz por dentro. Partió un trozo de su muffin y lo empujó contra la boca de Mina. La japonesa abrió la boca, pero no antes de hacer un gran espectáculo de poner los ojos en blanco.

"Todavía está seco, ¿eh?" Preguntó Nayeon, sonriendo. "Eso es lo que sucede cuando se usa leche baja en grasa en lugar de leche entera para los muffins. Eso lo aprendí en la escuela culinaria".

"¿Entonces deberíamos agregar muffins a tu lista de platos especiales?" Mina respondió. "A este ritmo, tendremos que abrir para el desayuno para que todas las personas puedan degustar tus mundialmente famosos muffins de chocolate".

"Que graciosa", dijo Nayeon. Tomó otro bocado de su panecillo y masticó pensativamente.

"En realidad estás pensando en qué alimentos para el desayuno puedes preparar, ¿no es así?" Preguntó Mina, sonriendo.

"¿Así que siesta?" Preguntó Nayeon, ignorando la pregunta de Mina. "¿Tu casa o la mía?"

"Realmente no me importa", respondió Mina. "Comparto apartamento con Momo, pero ella nunca vuelve a casa entre las reuniones de la mañana y los turnos de almuerzo. Podríamos ir allí si quisieras ".

"Bueno, yo vivo sola", respondió Nayeon. "Eso es incluso mejor. Y no hay absolutamente ninguna posibilidad de que alguien entre e interrumpa nuestra siesta ". Movió las cejas sugestivamente y sonrió cuando Mina puso los ojos en blanco.

"Vamos a dormir, Nayeon", dijo Mina, la exasperación clara en su voz, pero estaba mezclada con un toque de cariño. "Porque si no tomamos la siesta, la cuarta olla de carbonara te agotará". Se puso de pie, tomó la mano de Nayeon y comenzó a sacarla del café. "Y no voy a preparar tu plato especial por ti".

"Eso fue una vez", dijo Nayeon, poniendo los ojos en blanco. "Y tomé un café en la sala de empleados y estuve bien por el resto de la noche".

"Siesta", dijo Mina, dando un ligero cabezazo a Nayeon. "En mi casa", agregó, notando el brillo en los ojos de la mayor. "Luego el almuerzo, luego la siesta nuevamente, luego la cena, luego el sexo".

"Si no estoy agotada después de cocinar toda la noche", murmuró Nayeon, inclinándose hacia el lado de Mina mientras caminaban hacia su apartamento.

"Oh, no, has descubierto mi plan maestro", dijo Mina arrastrando las palabras. Soltó la mano de Nayeon a favor de envolver su brazo alrededor de los hombros de la chica.

Nayeon sacudió la cabeza con cariño y caminó con la japonesa de regreso a su apartamento.

Momo y Mina vivían en un apartamento dúplex en la calle 65. Era en la parte más bonita de la ciudad, lo que no sorprendió a Nayeon en lo más mínimo, ya que Momo era dueña del mejor restaurante del lugar. Y Mina era la jefa de cocina de dicho restaurante.

"Bonito lugar", dijo Nayeon mientras entraba en la sala de estar. "Es hogareño".

"Momo lo decoró", dijo Mina. "Ella dijo que sería bueno tener un lugar cómodo para dormir cuando termináramos de trabajar, así que listo", dijo, señalando el apartamento.

"Bueno, ciertamente se ve cómodo", dijo Nayeon, mirando a Mina de arriba abajo. "Te ves bastante cómoda también", agregó la coreana.

"A dormir", respondió Mina, una vez más rodando los ojos. "Podemos tener sexo más tarde".

"Bien", gimió Nayeon, permitiendo que la menor la llevara al dormitorio. Se acostó de espaldas y Mina se dejó caer en la cama junto a ella, acostada boca abajo. Mina envolvió uno de sus brazos alrededor de la cintura de Nayeon y se acercó más al cuerpo de la chica. La coreana se quedó dormida con la respiración rítmica de Mina y el peso reconfortante del brazo que cubría su cintura.

***

Cuando Nayeon se despertó, se dio cuenta de que Mina se había ido. Tuvo un pensamiento fugaz de que tal vez la japonesa se había ido a trabajar sin ella y se podría tomar el día libre, hasta que recordó que hoy era lunes de Carbonara y olió los deliciosos aromas provenientes de la cocina.

"¿Estás preparando el almuerzo?" Nayeon preguntó aturdida mientras salía del dormitorio. Mina estaba en la cocina salteando lo que parecían tiras de carne. Olía delicioso.

"¿Cuánto falta para ir al trabajo?" Nayeon preguntó, envolviendo sus brazos alrededor de la cintura de Mina y besando su nuca. "Estás caliente", murmuró en la espalda de la menor.

"Aproximadamente una hora," respondió Mina, y Nayeon pudo sentirla reír. "Hay cebollas y pimientos picados en el refrigerador".

"¿Fajitas para el almuerzo?" Preguntó Nayeon.

"Sí", respondió Mina, quitando la carne del fuego. "¿No te gustan las fajitas? Tenía que cocinar esta carne hoy o se iba a echar a perder, y odio desperdiciar comida ".

"No, no, me gustan las fajitas", respondió Nayeon. "Pero parece un poco elaborado para el almuerzo. Por lo general, solo hago algo de ramen o un sándwich de queso a la parrilla antes de un turno, y luego como un poco de lasaña durante los períodos lentos".

Abrió el refrigerador de Mina y se sorprendió un poco al descubrir que estaba tan bien abastecido como los refrigeradores de Wolfgang's. Había pollo, verduras frescas, jugos y huevos en las puertas y los estantes. Nayeon encontró las bolsas de cebollas y pimientos y se las entregó a Mina. También tomó una bolsa de queso rallado y la colocó sobre el mostrador.

"¿Eres chef de primera y preparas ramen para el almuerzo?" Mina preguntó dubitativa. Colocó la carne en tortillas con una cuchara y le dio una a Nayeon.

"No me llamaría de primera ya que solo soy una sous chef, pero sí, preparo ramen para el almuerzo", respondió Nayeon. "No es la gran cosa." Alcanzó la fajita que Mina estaba ofreciendo, pero se sorprendió cuando la japonesa no soltó el plato.

"Nayeon, te graduaste de una de las mejores escuelas culinarias del país", dijo Mina. Dejó el plato sobre la encimera y puso las manos sobre los hombros de la mayor. Nayeon trató de no mirar a Mina a los ojos, pero podía sentir los ojos de la contraria clavados en ella, por lo que levantó la vista de mala gana. "Podrías llevar esa carbonara a Italia, y podrías sacar dejar en quiebra a muchos restaurantes", continuó Mina. "No sé por qué tienes tantas dudas sobre tus habilidades culinarias. Tu carbonara apareció en una revista. Tienes otros chefs que intentan llevarte a sus restaurantes. ¿Cuál es tu problema?"

"Yo ... sólo puedo hacer una cosa" murmuró Nayeon. "Y luego todo lo demás es bastante normal. Solo tengo una sección del menú. Literalmente haces casi el noventa por ciento del menú. Puedes trabajar donde quieras; Yo solo puedo trabajar en lugares donde tienen una parte italiana del menú. De lo contrario, podría ir a McDonald's".

Mina suspiró y besó la frente de Nayeon. "Eres una idiota", dijo en voz baja. "Puedes preparar todo lo que hay en ese menú tan bien como yo puedo, si no que mejor".

"Excepto los postres", dijo Nayeon en voz baja. "Jihyo todavía no nos enseñará todos sus secretos". Le ofreció a Mina una pequeña sonrisa. La menor le devolvió la sonrisa y le dio otro beso suave en la frente.

"Está bien, está bien, excepto los postres", se rió Mina. "Pero eres una buena chef, Nayeon. No le enseño a cualquiera cómo hacer mi bistec".

"Solo hiciste eso porque querías meterte en mis pantalones", respondió Nayeon. "Y mira lo bien que te funcionó".

"Correcto," Mina bufó. "Te lo enseñé porque sé que eres una buena chef. No le habría dicho a Momo que te contratara si no hubiera creído que lo eras".

"Pensé que Momo me contrató por mi carbonara".

"Tu carbonara jugó un papel muy importante, sí", respondió Mina. "Pero la decisión fue mía, porque yo era quien iba a trabajar contigo. Ya hemos hablado de esto ".

Nayeon frunció los labios y el ceño. Mina se inclinó y le dio un suave beso. "Eres una buena chef, Nayeon", dijo en voz baja. "Y cuanto antes te des cuenta, mejor estarás".

Nayeon atrajo a Mina a un fuerte abrazo. A pesar de su exterior brusco, la japonesa era blanda. Parecía saber exactamente qué decir para calmar a la coreana.

"Gracias", murmuró Nayeon en el pecho de Mina.

"Cuando quieras", respondió la menor.

"Es mejor que estas fajitas sean buenas si van a reemplazar mi ramen", dijo Nayeon, soltando a Mina y tomando una fajita, amontonándola con cebollas.

Mina puso los ojos en blanco con cariño y le entregó a Nayeon el queso rallado.

***

Cuarenta y cinco minutos después llegaron a Wolfgang's. Saludaron con la mano a Tzuyu, que estaba ordenando el frente del restaurante en preparación para los clientes del día. Sana y Chaeyoung se movían alrededor de sus secciones, asegurándose de que todo estuviera listo, pero ambas saludaron a Mina y Nayeon calurosamente. Dahyun estaba detrás de la barra, limpiando vasos de cerveza.

"¿Qué tal?" Preguntó Nayeon, caminando hacia la barra. "¿Ya estás trabajando? Pero es solo el almuerzo".

"Hay una recepción de boda", respondió Dahyun, sin apartar los ojos del cristal que estaba limpiando. "Hay barra libre y Momo quiere ver qué tan bien lo hago bajo presión".

"¿Boda?" Preguntó Nayeon, frunciendo el ceño. Ya estaba un poco estresada por el lunes de Carbonara, y ahora tenía que agregar una boda a la carga de trabajo del día.

"Al menos no es vegetariano", dijo Mina, empujando a Nayeon y sonriendo.

"Ja-ja", dijo Nayeon, empujando a Mina hacia atrás. "Buena suerte hoy, Dahyun".

Dahyun asintió en agradecimiento. Nayeon y Mina regresaron a la cocina. Mina atrajo a la coreana a un profundo beso antes de que se fueran a sus respectivas estaciones. "Eres una gran chef", dijo en voz baja, besando a Nayeon en la frente. "Lo vas a hacer muy bien hoy".

"Será mejor que el sexo de esta noche sea alucinante", dijo Nayeon, mientras comenzaba a agarrar ollas y sartenes para las copiosas cantidades de carbonara que estaba a punto de preparar. "No quiero recordar mi nombre al final".

"Veré qué puedo hacer", dijo Mina, sonriendo. Le dio a Nayeon un último beso antes de caminar hacia su estación. "Quién sabe, es posible que hoy ni siquiera esté tan ocupada".

Definitivamente estaba muy ocupada.

Tanto Nayeon como Mina corrían por la cocina como pollos con la cabeza cortada. Nayeon estaba haciendo una olla tras otra de carbonara, y la japonesa estaba haciendo una gran cantidad de filetes, porque aparentemente todos en la fiesta de bodas tenían un apetito insaciable. Sana y Chaeyoung venían constantemente para tomar pedidos y entregar otros nuevos. Jihyo no estuvo trabajando hasta la cena, pero afortunadamente tenía algunos postres extra en el refrigerador. Periódicamente, Mina se acercaba y besaba a Nayeon en la mejilla, pero la coreana ni siquiera podía responder, estaba tan ocupada.

Definitivamente tampoco tuvieron sexo alucinante esa noche. Mina básicamente tuvo que llevar a Nayeon de regreso a su apartamento, la chica estaba tan agotada.

El martes, Wolfgang's apareció en un artículo de la sección Local de Daegu.

"Nayeon, ¿viste el artículo en el periódico esta mañana?" Tzuyu preguntó cuándo aparecieron Nayeon y Mina en el trabajo. "¡Básicamente nos animan a ganar cinco premios seguidos! Y no tenían nada más que cosas buenas que decir sobre tú y Mina, el dúo culinario que está arrasando en la ciudad ".

"Te dije que eras una gran chef", respondió Mina con indiferencia.

Nayeon puso los ojos en blanco y hojeó el artículo al que se refería Tzuyu. "Dice que se necesitaría un milagro para que alguien nos gane", leyó. "Dicen que nuestra mayor competencia es Silver Kim, pero continúan diciendo que su menú se ha mantenido igual durante los últimos cinco años y su estilo repetitivo probablemente los perjudicará. Bueno, esto es emocionante", dijo Nayeon sonriendo, entregándole el papel a Tzuyu.

Tzuyu asintió con la cabeza de arriba abajo, parecía un lindo cachorrito. "Mjmm", dijo. "Es emocionante. No puedo esperar a los premios. Quiero decir, las veo cocinar todo el tiempo, pero va a ser genial cuando ustedes cocinen para ganar el premio al Mejor Restaurante por quinto año consecutivo ".

"Ese es el plan", dijo Nayeon, sonriendo. Miró a Mina, quien le lanzó una mirada de complicidad.

***

Más tarde ese mismo día, Jennie entró como una tormenta a la cocina.

"¿Qué demonios es esto?" preguntó, sosteniendo el artículo que predecía que Wolfgang's ganaría los próximos premios. "¡Te dije que te mantuvieras fuera de esto!"

"Estás actuando como si yo tuviera algo que ver con eso", dijo Nayeon. "¿Y quién te dejó entrar aquí?" Miró alrededor de la cocina con la esperanza de que Chaeyoung o Mina entraran. Mina acababa de ir al baño, y conociendo a Jennie, probablemente esperó hasta que Chaeyoung estuviera ocupada antes de dirigirse a la cocina.

"No importa cómo entré", espetó Jennie. "Te dije que te mantuvieras fuera de esto y que no te concierne. Te estás burlando de mi tía con solo estar aquí".

Nayeon puso los ojos en blanco, porque estaba cansada de escuchar a Jennie quejarse de su tía y su restaurante. "Jennie, no sé qué quieres de mí. No voy a dejar mi trabajo y, según el periódico, no tienes ninguna posibilidad de ganarnos en los premios. Entonces, mi consejo para ti es que lo superes, porque no te daré lo que quieres ".

Jennie entrecerró los ojos y estaba a punto de decir algo antes de que Chaeyoung entrara en la cocina.

"Hey Nay, necesito tres pedidos de..." Chaeyoung se congeló. "Oh, no puedo esperar a escuchar la explicación de esto". Cruzó los brazos sobre el pecho y miró a Jennie expectante.

"Creo que Jennie ya se estaba yendo, Chae", dijo Nayeon, tratando desesperadamente de evitar una pelea en la cocina.

"¿Estás segura de que se iba?" Preguntó Chaeyoung mientras caminaba hacia Jennie, deteniéndose a centímetros de su rostro. Sus narices casi se tocaban. Chaeyoung inclinó la cabeza en un gesto pensativo fingido. "Porque parecía que tenía algo que decirte. Estoy segura de que no le importaría decirlo para que todos escuchemos".

"No tengo nada que decirte", dijo Jennie, inclinando la barbilla desafiante. "Esto es entre Nayeon y yo".

"Está bien", dijo Chaeyoung, sonriendo. Comenzó a dar vueltas alrededor de Jennie de una manera depredadora. "Yo tampoco tengo mucho que decirte, ya sabes lo que siento por ti. Pero te aconsejaría que no acoses a Nayeon, Tzuyu o cualquiera de nosotras aquí en Wolfgang's, si sabes lo que es bueno para ti ".

Jennie permaneció clavada en su lugar en el suelo, pero mantuvo los ojos en Chaeyoung o Nayeon todo el tiempo.

"Nayeon, necesito tres pedidos de rotini", dijo Chaeyoung, acercándose y besándola en la mejilla. "Tengo que volver. Es muy difícil ser mesera en un restaurante tan popular y galardonado. Grita si necesitas algo ". Le ofreció a Jennie un último saludo falso antes de salir de la cocina.

Nayeon volvió su atención a Jennie, quien parecía visiblemente conmocionada después del enfrentamiento con Chaeyoung. Su lenguaje corporal estaba tenso y sus ojos se movían hacia todos los rincones del restaurante.

"Sólo... quédate fuera de esto, Nayeon" dijo, con una voz apenas superior a un susurro. "No sabes con qué estás lidiando". Se volvió y salió corriendo del restaurante.

***

Nayeon no había planeado contarle a Mina sobre su encuentro con Jennie, pero la japonesa se enteró por Chaeyoung. Luego, Nayeon tardó veinte minutos en asegurarle a Mina que estaba bien y que Jennie no hizo nada.

"Deberías haber venido a buscarme", gruñó Mina.

"¿Dónde? ¿En el baño?" Preguntó Nayeon. "Estuvo bien. Chaeyoung la asustó hasta la sumisión. Probablemente ya no vendrá".

"Probablemente." Mina resopló. "Más bien, definitivamente".

***

El miércoles estuvo mucho menos ocupado y mucho más relajado que el lunes; No hubo especiales ni fiestas de bodas que se sumaran a las complicaciones. Jennie no apareció en absoluto, por lo que Nayeon estaba increíblemente agradecida. Todavía estaba ocupada, pero Mina dijo que el artículo probablemente todavía estaba generando algo de publicidad adicional, lo que provocaba que llegara más gente.

El jueves era el día especial de bistec, por lo que Mina estaba preparando bistecs como si no hubiera un mañana. Momo también llegó esa noche y anunció que Dahyun se uniría oficialmente al Equipo Wolfgang's.

El viernes, Jennie regresó durante el turno de la cena.

"Mina, Jennie está en mi sección", dijo Sana mientras entraba en la cocina.

"¿Qué quiere?" Mina gruñó. Nayeon vio como la japonesa menor apretó los puños y cuadró los hombros con anticipación. "Esta es la segunda vez que ha venido aquí esta semana".

"Eso es todo", respondió Sana, claramente nerviosa. "Ella está en mi sección. Como si estuviera pidiendo comida. Pidió un bistec y una carbonara".

"¿Entonces está siendo como Plancton y tratando de obtener la fórmula secreta de nuestros platos especiales?" Nayeon bromeó en un esfuerzo por aligerar el ambiente. Sacó una risa de Sana y una mirada de Mina.

"Ella sigue mirando a Tzuyu también", agregó Sana. "No me gusta. Jennie sigue mirándola a ella y luego de nuevo a la cocina. Está haciendo que Tzuyu se sienta realmente incómoda".

Mina se tensó visiblemente y Nayeon se apresuró a ponerse al lado de la menor. Entrelazó sus dedos y acarició el dorso de la mano de Mina con el pulgar.

"¿La dejaste ahí afuera sola?" Mina preguntó lentamente.

"De ninguna manera", respondió Sana rápidamente. "Chaeyoung está ahí fuera y también Dahyun. Y todavía hay como ocho clientes por ahí. No es tan tonta como para intentar hacer algo cuando hay gente, especialmente testigos".

"¿Qué crees que quiere?" Nayeon preguntó: "Teniendo en cuenta que la última vez vino para amenazarme".

"No lo sé", dijo Sana con nerviosismo. Sin embargo, preguntó por ti, Nayeon. Quería saber cómo te estaba yendo y si estabas emocionada por estar en tu primera competencia".

"¿Cuál es su problema?" Nayeon se preguntó en voz alta. "Hace dos días, básicamente me dijo que me olvidara de competir, y ahora se pregunta si estoy emocionada".

"No lo sé", respondió la japonesa mayor, frotándose la parte posterior de la cabeza. "¿Qué quieren hacer?"

"Llévale la comida por ahora", respondió Mina, entregándole a Sana un plato de carbonara y un bistec. "Si sigue poniéndote nerviosa, ven a buscarme y le pediremos que se vaya".

Sana asintió y empezó a salir de la cocina.

"Sana, espera". Mina llamó. "¿Alguien ha llamado a Momo?"

"No", respondió Sana. "Ella no trabaja hoy".

"Llámala", respondió Mina con dureza. "Ella va a querer escuchar sobre esto".

Sana sacó su teléfono y caminó de regreso. Mina se dio la vuelta y dejó escapar un profundo suspiro.

"Va a estar bien, Mina", dijo Nayeon. "Ella está tratando de ponernos nerviosas".

Mina jugueteó en sus bolsillos y sacó sus llaves. "Aquí", dijo, poniéndolas en las manos de Nayeon. "Ve a mi casa. Te veré allí tan pronto como cerremos".

Nayeon la miró con curiosidad y le devolvió las llaves. "No me iré", dijo intencionadamente. "No sé lo que está planeando, pero no va a funcionar. Me quedaré."

Mina parecía querer discutir, pero Nayeon se acercó y la besó. "Estará bien", dijo en voz baja. "Eres mi chef con armadura brillante, ¿verdad?"

Mina resopló y asintió. Besó a Nayeon de nuevo antes de regresar a su puesto.

Unos diez minutos después, Chaeyoung y Sana regresaron a la cocina.

"Ella está sentada allí", dijo Chaeyoung. Nayeon se dio cuenta de que estaba enojada. Su habitual vibra de "soy genial" la había abandonado. Ahora, parecía enojada y ferozmente protectora. "Ella solo está comiendo su comida, sonriendo y saludándonos cada vez que llamamos su atención. Solo quiero golpearla".

"Por una vez, estoy con Chaeyoung", refunfuñó Sana. "La quiero fuera. Y tampoco puedo localizar a Momo. ¿No es esto como romper las reglas o algo así? ¿Tienes que quedarte en tu propio restaurante durante el período previo a los premios? ¿Qué está haciendo ella aquí?"

"No lo sé", respondió Nayeon. "Pero mientras ella no cause ningún problema, no sé qué podemos hacer. ¿Es ella la única que queda?"

"Sí", respondió Chaeyoung. "Todos los demás clientes se fueron a casa. Dahyun está ahí con Tzuyu para asegurarse de que no intente quemar el lugar o algo así ".

En ese momento, hubo un gran estruendo, un grito ahogado y el sonido de una puerta abriéndose y cerrándose. Nayeon y las demás se apresuraron al comedor para encontrar a Dahyun desplomada sobre la barra con fragmentos de vidrio roto y una gran herida en la cabeza, y sin señales de Jennie o Tzuyu.

"¿Tzuyu?" Sana llamó. "¡¿TZUYU ?!"

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