Capítulo 10.
😊Holis, les dejo otro capítulo mas de este fic, no había podido actualizar antes por eso dejare doble actu el día de hoy, la otra actu la subiré mas tarde :3
A leer!
Pensó que el llanto de su chico iba a terminar pronto, pero eso simplemente no pasaba, LuHan aun lloraba aferrado a su cuerpo mientras el solo daba palmadas suaves en su espalda, tratando de consolar al menor, pero esto no pasaba. El que LuHan llorase de esa manera en sus brazos era algo que ya comenzaba a preocuparle. Le tomó su rostro con delicadeza en sus manos y trató de limpiar las lágrimas que humedecían la mejilla del más bajo, quien cerró sus ojos con fuerza y frunció sus labios.
—Ya amor, ¿qué pasa? ¿por qué sigues llorando? —preguntó angustiado aún con el rostro de su chico entre sus manos le regaló una pequeña sonrisa tratando de que LuHan le dijera pero LuHan no le miraba, se negaba a hacerlo mientras sus manos se aferraban con fuerza de la camisa ajena—. ¿No te gustó?
—No es eso... es hermoso —se obligó a decir con una pequeña sonrisa en sus labios, la misma que no llegaba a sus ojos, era débil. Y si de algo estaba seguro LuHan en ese momento era que eso debía ser su maldito karma cobrándole factura—. Es muy bonito, gracias —murmuró apenas mordiendose los labios internamente, Yixing le sonrió y besó su frente bajando lentamente a sus labios donde depositó un suave beso que LuHan apenas pudo disfrutar.
—De nada, amor. Te mereces esto y más —aseguró sonriendo, sus manos acariciaron con sus pulgares las mejillas ajenas notando que las lágrimas del menor no dejaban de correr por estas. Besó sus labios, las lágrimas de LuHan no dejaban de bajar en ningún momento, pero se dedicó a corresponder los labios y también en las caricias del mayor.
No podía simplemente hacer como si nada hubiera pasado, los lugares que Yixing tocaba en él los había tocado SeHun horas atrás, pero había una gran diferencia, SeHun había sido demasiado pasional cada uno de sus toques, mientras Yixing lo tocaba con delicadeza y besaba con suavidad cada parte de su cuerpo causando una gran confusión en su mente.
[…]
—Te amo —susurró Yixing cuando beso su sien dejando que LuHan descansara sobre su pecho. El menor se encontraba con sus ojos cerrados sobre su cuerpo, mientras sus dedos trazaban líneas imaginarias la piel desnuda de la espalda del menor—. ¿Quieres que nos quedemos aquí o volvemos a casa? —preguntó con suavidad tratando de no perturbar al más bajo. LuHan no parecía el mismo de siempre a pesar de que entregó como nunca a él lo sentía lejano en ese momento, como si estuviera perdido en sus pensamientos divagando en algún otro universo.
—Quiero que volvamos a casa Yi, no quiero quedarme aquí —respondió el menor removiendo su cuerpo un poco y miró al mayor con una sonrisa en sus labios, pequeña pero más real que antes, Yixing le acarició suave sus cabellos sintiendo como los labios de su chico besaban los de suyos a los cuales correspondió. Luhan sinceramente no quería seguir en ese cuarto, quería olvidarse de lo que pasó ese día. Aunque dudaba que eso fuera posible.
Cuando ambos llegaron a la casa de LuHan, Yixing se encargó de que LuHan estuviera seguro en casa. Hablaron por unos minutos más antes de que el mayor se despidiera de su novio con un beso en la boca, suave y lento por algunos minutos y un además de su mano. LuHan se quedó solo en su cuarto mientras que Yixing comenzó a caminar hasta su casa.
Yixing estaba feliz de que su chico y él estuvieran mejor que nunca, así lo sentía en ese momento, aunque, de alguna manera debía admitir que su chico estaba comportándose extraño. La mirada perdida del menor le causaba cierta incertidumbre, le preocupaba que algo grave estuviera pasando con él. Esa aura risueña del menor se estaba perdiendo cada día más.
Mientras sacaba las llaves de su casa reconoció a uno de los vecinos de su calle, era uno de aquellos chicos que se la pasaban con mal vivientes haciendo alguna que otra fechoría. Solía muy poco hablar con ese tipo de personas, pero por el bienestar suyo y de LuHan sabía que lo mejor era hablar de vez en cuando con ellos.
—Hola Yixing, ¿qué onda, hoy no andas con LuHan? —preguntó con una pequeña sonrisa ladina en sus labios el chico que era un poco más alto y flaco que Yixing, caminaba un poco encorvado y usaba ropa holgada dándole la tópica apariencia de un cholo, Yixing le miró y sonrió amable.
—Lo acabo de dejar en su casa —comentó y abrió la puerta apoyándose sobre el muro de esta, mirando como el chico sonreía y de frotaba la nariz, quizás al haber consumido un poco del polvo que siempre traficaba con jóvenes en la calle o sus propios amigos—. ¿Por que la pregunta, Joe? —preguntó curioso, si bien conocía a ese chico desde hace un tiempo, pero muy poco preguntaba por su novio pues LuHan era bastante reservado con personas como él.
—No lo sé. —Se encogió un poco de hombros sacando una cajetilla de su pantalón, Yixing miraba sus acciones en todo momento—. Creí que habías terminado con él, lo he visto con un tipo de carro, parece ser de buena familia —comentó mientras sacaba un cigarro y lo encendía, aquello llamó la atención de Yixing, al único que conocía que era de carro era ese chico, SeHun. Y la idea no fue agradable—. ¿Quieres? —preguntó ofreciéndole una calada del cigarro después de darle una calada él.
—Gracias —dijo al tomar el cigarro, lo pensó un momento antes de llevarlo a sus labios y aspirar el humo con profundidad, lo dejó salir lento, el calor que le brindó en esa noche fría fue relajante—. ¿Y cuándo los viste? O mejor dicho, ¿cómo los viste? —arregló su pregunta dando una nueva calada al cigarro, queriendo que eso calmase un poco la ansiedad de sus dudas. Joe sonrió y sacó otro cigarrillo.
—Pues, ya sabes —sonó obvio al hablar. Yixing arqueó una ceja—. Después de la escuela, se va con él en el coche, y lo viene a dejar a su casa, antes de que tú llegues, como me la vivo por esos rumbos es fácil de verlo, ¿conoces al tipo? —cuestionó pensando en que había algo extraño ahí, siempre lo había notado pero no estaba seguro de seguir hablado, se encogió de hombros sacando unos sobres de polvo blanco—. ¿De esta no consumes? Necesito un poco de feria, amigo.
—No amigo, ya sabes que puro cigarro —rechazó apagado el cigarro después de dar la última calada. No podía relajar su mente, pensaba en lo que decía el adverso. Si bien quería pensar en que SeHun solo llevaba a su chico al trabajo y le hacía el favor de recogerlo, LuHan no tenía porque mentirle, el confiaba en su novio, no se pondría a dudar en ese momento. Le dio unos billetes a su amigo, pues sabía que lo necesitaba, después de despedirse del adverso entró a su casa.
[…]
Cuando LuHan llegó a la universidad lo primero que vio fue a SeHun esperando por él en la entrada de la universidad, ambos caminaron en silencio hasta la facultad a la que LuHan pertenecía. El chico más alto no dejaba de ver en ningún momento el cuerpo del menor, después de lo que había pasado entre los dos y probar lo que era Luhan, le estaba siendo realmente difícil no querer tocarlo nuevamente. Simplemente debía admitir que se sentía perdido por ese chico.
—Te eché de menos, después de lo de ayer creo que estoy perdido por ti —confesó tomándolo por la cintura al doblar pasillo y besó sus labios, LuHan le correspondió de la misma manera a pesar de la sorpresa, no iba a negar que sentía como algo se estremecia en su interior por los besos ajenos y la forma en la que sus dedos se estrechaban en su piel—. Te quiero —susurró SeHun sobre los labios del menor haciéndolo sonrojar.
—Yo también te quiero —correspondió a ese sentimiento. Sabía que después del tiempo que habían estado pasando juntos no solo era atracción, sino que había algo más naciendo por SeHun. Se alejo un poco del más alto mordiendo sus labios, SeHun quiso besarlo nuevamente—. SeHun, debo ir a clases
—Más tarde vamos a casa —pidió besándolo una vez mas, LuHan sonrió y negó con su cabeza, tenía trabajos que hacer ese día, pero SeHun no pensó en rendirse—. ¿Sí? —Le siguió dando cortos besos en su mejilla y labios hasta que obtuvo una respuesta positiva del menor entre pequeñas risas.
Despues de estar juntos algunos minutos más LuHan tomo camino hacia su salón de clases donde de inmediato buscó a Minseok, ambos salieron del salón y subieron a la terraza de su facultad recargándose sobre la malla, LuHan no sabía cómo decirle lo que había hecho a su mejor amigo. Sabía que Minseok tendría las palabras correctas, pero sentía bastante vergüenza.
—¿Qué pasó? —preguntó el chico de mejillas regordetas sin rodeos, sabía que algo le pasaba al chico pues era preocupación andante en realidad.
—Me acosté con SeHun, Min. Soy un idiota —confesó mordiéndose los labios mirando a su amigo quien por alguna extraña razón no se sentía sorpredido, él había imaginado que algo así pasaría tarde o temprano—. Me siento mal, Yixing me preparó una cena romántica en un hotel y ¿qué crees? Me llevó al mismo hotel donde me acosté con SeHun, y fue la misma cama.
—¿Qué mierda hiciste? ¡LuHan! —MinSeok podía creer eso, lo que no concebía era cómo era posible que su amigo haya sido tan estúpido para hacer eso. Para traicionar la confianza que le brindó ese chico que solo se desvivía por él día con día—. Te dije que dejaras esta mierda LuHan. ¿No amas a Yixing acaso?
—Si lo amo, pero... también quiero a SeHun —respondió sintiéndose bastante confundido. Sabía que amaba a Yixing más que a nada en el mundo, aun con sus tonterías, pero, no podía negar que se sentía bastante atraído por SeHun. MinSeok le dio una bofetada, LuHan le miró en shock sintiendo sus ojos aguarse, MinSeok nunca le había puesto una mano encima de esa manera.
—No me salgas con esa estupidez, LuHan. Tú no amas a Yixing, de ser así jamás le hubieras engañado. ¿Por que llegar a este punto? —cuestionó severo mirando como su pequeño amigo soltaba lágrima tras lágrima.
—Porque no quiero ser pobre toda mi vida, quiero comodidad, quiero que alguien consienta todo lo que quiero y Yixing no puede hacer eso como lo hace SeHun de fácil —dijo con el ceño fruncido, esa había sido la razón para que cometiera semejante estupidez, estaba consciente de eso, MinSeok quiso darle otro golpe pero solo apretó su puño—. Jong lo ha dicho muchas veces y en ocasiones pienso que tiene razón. Yo solo quiero...
—JongDae es un idiota, LuHan, y tú otro por hacerle caso —declaró con la mandíbula tensa, ver a LuHan llorar le parecía nefasto en ese momento, realmente estaba decepcionado de su amigo—. ¿Acaso has olvidado todo lo que Yixing ha hecho por ti? ¿No recuerdas como todos le hacían el feo a ese niño pobre que vendía paletas en la calle? Él se acercó a ti, te tendió la mano, te buscó una casa donde vivir , paga tus estudios y tú le pagas con esto. ¿Qué clase de chico eres, LuHan?
—MinSeok..
—Nada. —Paró cualquier cosa que el adverso quisiera decir—. Lo mejor que puedes hacer ahora es decirle a Yixing lo que has hecho y tal vez te perdone. Aunque, yo no lo haría. —Era el consejo mas práctico que le podía dar, MinSeok suspiró al ver a LuHan negar una y otra vez con su cabeza—. LuHan.
—No, Yixing va a dejarme y yo no quiero perderlo, lo de SeHun es solo por...
—Su dinero, sí. Ya me quedó claro —obvió el chico de mejillas regordetas, LuHan se despeino frustrado limpiando las lágrimas que había soltado por toda la frustración que sentía en su pecho—. Vas a hacerte daño tú y le harás daño también a Yixing, y si SeHun te quiere también de verdad a él igual. Estás haciendo todo mal Han. No puedes jugar a tener algo con dos personas a la vez, ¿conoces el dicho del perro de las dos tortas? —preguntó, LuHan desvío la mirada, eso no le iba a pasar a él.
—Nadie saldrá herido, Yixing no va a enterarse y SeHun, él no creo que sea algo serio, él lo sabe —se dijo así mismo también queriendo creer que era así. Pero las palabras de SeHun diciéndole que lo quería le estaban haciendo sentir miserable en ese momento, pero no iba a cambiar lo que realmente deseaba—. Yo voy a casarme con Yixing en un par de meses, y seremos felices, SeHun quedará atrás además de que, no volvere a intimar con él —prometió.
—¿Estás seguro, LuHan? De igual manera, ya has faltado demasiado a Yixing, ese chico no lo merece —dijo el chico palmeando el hombro del adverso mientras caminaba de regreso al salón, a pesar de que dijera a LuHan sabía que ya todo estaba jodido—. Solo piensa que si ya diste ese paso, no te importara dar uno más.
LuHan se quedó callado, no iba a ser así, pero él no iba a decirle a su novio la verdad, no se iba a arriesgar a que Yixing lo dejara. Simplemente no iba a permitir eso.
[…]
La duda en su cabeza lo estaba matando de alguna manera, pensaba cada día en lo que su amigo y vecino le había dicho, LuHan estaba extraño esa última semana después de que estuvieron en el hotel. No entendía porque pero los celos estaban ahí comiéndole la cabeza.
La simple idea que su chico esté pasando bastante tiempo con ese tipo no le agradaba, incluso había comenzado a fumar por el estrés que pensar en ello le causaba. Había querido hablar con LuHan del tema, sacar sus dudas pero su novio se distanciaba cuando estaba por tocar el tema. No podía seguir con eso.
La voz de su jefe lo saco de sus pensamientos cuando entró a su oficina.
—¿Yixing, puedes llevar estos papeles a este negocio? —le pidió su jefe dándole un paquete y un folleto con la dirección del lugar, lo tomó y leyó la dirección, él conoció a esa calle porque era la misma de la escuela de LuHan, checó la hora, aún era temprano, sabía que llegaría al punto de la hora de salida de su chico, ese día no había quedado de ir a recogerlo porque sabía que LuHan iría a su trabajo, y la idea de comprobar si era SeHun ese chico del que le habló su vecino le picaba.
Asintió a la orden de su jefe y tomando sus cosas caminó hacia la oficina de su amigo. Se despidió de Baek y tomó el mandado saliendo de la empresa para la que trabajaba yendo hacia la dirección indicada.
El camino era algo largo, pero estaba a tiempo. Miró la hora en su reloj una vez más, cuando llegó tomó su celular después de entregar su pedido y marcó al número de su novio. Esperó unos cuantos timbres hasta que escucho la voz de su chico quedándose parado.
—¿Han? —dijo cuando le atendió la llamada.
—Amor ¿qué pasa? —preguntó LuHan con voz extrañada ante la llamada de su chico al otro lado de la línea—. Nunca llamas a esta hora. ¿Pasó algo?
—Quería nada más escuchar tu voz, y saber si ya vas a tu trabajo —respondió intentando sonar desinteresado en ello, como si fuera lo más natural, ya que era verdad que nunca marcaba en horas de clases o salidas a menos que queden de verse, escuchó silencio en la otra línea.—. ¿Entonces?
—Ya voy para el trabajo, salí hace varios minutos estoy en camino —le respondió, Yixing sonrió incrédulo cuando a varios metros lejos de la escuela lo vio salir y subirse al coche de ese chico.
—Claro, amor. ¿Vas solo? —preguntó pensando o queriendo pensar que SeHun solo lo llevaba a su trabajo por ser su amigo y amabilidad. Tenía que see solo eso, no había necesidad de sentirse inquieto.
—Sí —respondió LuHan y Yixing no sabía porqué le mentía.
Nos vemos mas tarde, si os gusto dejen su bello voto y comentario
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro