La chica detrás del mostrador de Mini's me da una pequeña bebida que le había pedido, me siento en uno de los taburetes al lado de Dez, quien no se despega de aquella revista, allí dándole un sorbo que hace que se termine enseguida.

—Wow, la cita de Austin y Brooke está tomando mucho tiempo.

—¿Por qué estás tan emocionada al respecto? Es sólo una cita Ally.— Cuestiono con una pequeña sonrisa, aunque ella está más emocionada que todos nosotros.

—No es sólo una cita, es la tercera entre ellas.

Hace el gesto con la mano en frente de mi rostro y lo quito bajándola lentamente.

—Claro, porque sepas cuanto llevan saliendo lo hace menos raro.

—Tengo incluso el tiempo exacto de cuando saliste con ese chico de Texas.— Frunzo el ceño confundida ante esa confusión.

—Es imposible, duró tan poco que...

—Treinta minutos con cuarenta y cinco minutos, totalmente confirmado.— Ally me interrumpe y abro mi boca para tratar de decir algo pero no sale nada.

Es verdad, fue la cita más corta de todo mi historial de citas, sabía que había durado media hora, sólo que no esperaba que también supiera los segundos exactos. 

—En mi defensa, era un buen chico pero no me tipo de chico.

—¿Y quién es tu tipo de chico, Summer?— Pregunta Ally, en lo que me encojo de hombros sin tener respuesta alguna. Justo Austin junto con Brooke aparecen en la distancia entrando justo al centro del shopping.— ¡Oh! Aquí vienen, actúen como si no estuviéramos viendo.

—No estamos.— Contesta Trish sin levantar la mirada de su revista.

Río un poco y apoyo mi cabeza sobre mi mano viendo a Austin con aquella castaña que lleva un cuaderno en sus manos, le muestra algo a mi mejor amigo en lo que él asiente con la cabeza y definitivamente conozco esa sonrisa está feliz pero definitivamente no es donde de verdad quiere estar.

Algo que se escucha muy claro es que le cancela una salida a Dez para salir con Brooke, después de eso Austin se acerca a nosotros, esta vez si con la gran sonrisa que conozco a la perfección.

—¡Hola chicos!— El rubio se acerca a saludar a Dez con la mano pero él pelirrojo se voltea todo enojado ante la cancelación de sus planes.

—¡De acuerdo! Basta de cosas aburridas del amor.— Trish se levanta de aquella silla llamando la atención de todos.— Tengo grandes noticias. Austin, ¿Qué es eso que estuviste pidiéndome desde que me convertí en tu representante?

—¿Cantar en Time Square en la víspera de año nuevo?

—Cerca, ¡Voy a conseguirte la portada de "Cheeta Beat"!

—¡Eso es increíble!— Doy un salto de mi asiento con una gran sonrisa.— Estoy feliz que puedas volar de esa manera.

Austin me toma del hombro para abrazarme por encima de estos.

—Sólo tienes que completar una forma que enviaremos para que vean lo interesante que eres para estar en la portada y estoy segura que puedo hacerte quedar.

Trish agarra un papel de arriba de la mesa para entregárselo a Austin, él lo toma y se sienta en la silla frente a la mesa agarrando un lápiz.

—¿Nombre?— La reacción de estar muy seguro me hace reír.— Fácil, va a tomar mucho más que eso para confundir a Austin Moon.— Cuando dice su nombre, lo va escribiendo en la hoja, al poco tiempo se da cuenta de algo.— Oops, demasiadas "o."— Borra lo mal que escribió su nombre.

Tomo asiento en la silla libre.

—No es un examen, ellos quieren saber como es tu vida, que es lo que te gusta, que es lo que haces, no creo que sea demasiado complicado.— Digo intentando aligerar un poco la carga que tiene Austin.— Trata de no estresarte tanto, hasta casi olvidas como escribir tu propio nombre Austin, así que dime, ¿Qué es lo que te gusta hacer?

—Bueno, me gusta tocar música, pasar tiempo con mis amigos...

—¡Aburrido!— Trish interrumpe las palabras del rubio.— Tiene que ser único y emocionante, yo me encargaré de esto y luego lo envío. Estoy acostumbrada a hacerme más interesante, ¿Cómo creen que conseguí mi nuevo trabajo de salvavidas? ¡Ni siquiera sé nadar!

Aunque Trish lo dice aquello riendo, entre los demás nos miramos dándonos cuenta que eso es bastante peligroso, sin embargo no decimos nada.

Al día siguiente me estoy arreglando frente al espejo para ir a la tienda de música como una rutina de todos los días, estoy más allí que en mi propia casa pero es porque me encanta pasar tiempo con mis amigos, incluso si sólo nos sentamos a ver como Ally vende los instrumentos en la tienda, eso es más divertido que estar en mi casa ahora mismo.

Salgo de allí y conduzco hasta el centro comercial, si, soy la primera y la única del grupo en tener la licencia de conducir y es por eso que a veces ellos me usan de taxi. Tiene sus ventajas y desventajas, los tengo que llevar a todos lados, pero me deben dinero cada vez que lo hacen, la gasolina no está barata y es el auto de mis padres, no mío. 

Llego a la tienda de música y cuando entro Ally rodea el mostrador pareciendo aliviada, allí también está Austin con una guitarra.

—¡Por fin llegas! Austin esta cantando todo lo que estoy haciendo.

Miro al rubio quien sonríe con los labios apretados.

—Estoy muy aburrido.

—Me he dado cuenta, deja la guitarra, ya estoy aquí.

—Eso me hace feliz.— Austin deja la guitarra como le he dicho y se acerca a abrazarme a lo que yo reacciono enseguida.

—¡Austin!— La voz de Trish suena en nuestros oídos y nos separamos viendo que también viene Dez a su lado.— Estuve hablando con Cheeta Beat toda la mañana, ellos enviaron a una de sus mayores reporteras para entrevistarte.

—¡Increíble!— Austin y Dez chocan los cincos festejando.— Debieron amar el cuestionario que has armado.

—¡Ah! Y si preguntan, eres cinturón negro en kung fu, nadas con delfines, amas las motocicletas y otras cosas que no recuerdo.— Dice con una gran sonrisa y emoción, tanto que se le contagia a Austin quien parece no darse cuenta que nada de eso es él.

—No debiste haber mentido.

Asiento con la cabeza ante las palabras de Ally.

—Algo saldrá mal, escuchen mis palabras.— Levanto mi mano al cielo como si estuviera hablándole a alguien que me da mi poder o algo así.

—Lo único que tienes que hacer para tener la portada, es impresionar a Megan Simms, ella es la reportera más poderosa del medio.

Agarro un par de dulces de una canastita que tiene Ally debajo del mostrador y comienzo a comer una por una, justo en ese momento aparece una niña con un estilo interesante y una cámara colgando de su cuello.

—¡Oh por dios! Austin Moon, de verdad eres tu.— Dice con emoción, levanta la cámara para sacarle una foto con un gran flash que deja al chico confundido por un par de segundos.

—Ahora no niña, estamos esperando una reportera de Cheeta Beat.— Habla Dez tratando de detener a la niña fanática de mi mejor amigo.

—Soy la reportera.— Ante la confesión de la niña, la cara de todos nos cambia y nos damos cuenta que en serio mandaron a alguien de diez años a hacer este trabajo.— Megan Simms.— Ella extiende su mano en dirección a Austin y él la estrecha, confundido como el resto de nosotros.

Ni siquiera pude tragar el caramelo dentro de mi boca.

—Pero tienes como cinco.

—Tengo diez, y no suelo emocionarme, pero estoy muy feliz.— Dice la niña con una voz cantarina para luego abrazar a Austin.

Una imagen muy linda, pero a la vez asusta porque es la persona que está por entrevistarlo.

Megan lo suelta para ver a Ally acercarse por detrás.

—¡Tu eres Ally! La compositora. Eres la chica más épica del mundo.

—Gracias Megan.— Responde con una gran sonrisa.

Doy vuelta el mostrador para quedarme al lado de Trish.

—Entonces que la entrevista empiece, ¿No es cierto?— Digo con una pequeña sonrisa.

Megan cuando me ve sonríe un poco acercándose en mi dirección, extiende su mano a lo que la estrello confundida y con duda por aquella reacción. 

—Summer Hale, mejor amiga de Austin y una chica muy talentosa debo decir, un gusto conocerte.

—¿Cómo lo sabes?— Pregunto elevando una de mis cejas.

—Austin habla siempre en sus entrevistas de como se convirtieron en mejores amigos cuando tenían cinco años, nunca se separaron desde entonces y demuestran una gran fortaleza y como las amistades pueden durar tanto como ustedes, los admiro de verdad. — Giro a ver a Austin quien sonríe un poco, asiente con la cabeza dándole la razón a la niña, ¿Tan poca atención presto cuando Austin está en entrevistas? Puede ser que me distraigo fácilmente con la mesa de comida en todos los lugares.— De verdad espero que pronto puedas convertirte en cantante Summer.

—Wow, gracias Megan, es muy lindo de tu parte.

—Pero ahora si, empecemos con la entrevista.

—No hay entrevista, vine a ver a Austin hacer todas las cosas divertidas que escribió.

Todos allí gritaron un qué, a lo que yo simplemente me cruz de brazos sabiendo que algo como esto iba a suceder.

—Yo lo dije.

Austin casi se rompe la mano tratando de probar que puede romper un bloque de concreto ante la mentira que sabía kung fu.

Fingió que una motocicleta del centro comercial era suya y la verdadera dueña nos asustó a todos lo que provocó que Megan creyera que le estaban robando.

Comió insectos por la idea de Dez de que estaba haciendo una dieta de proteínas, lo cual fue muy asqueroso de ver y mi estómago no pudo soportarlo.

Y cuando creíamos que eso era suficiente para que ella se fuera, resulta que su editor quiere que se quede todo el fin de semana sólo por las mentiras de Trish y que Austin no se anima a decir la verdad por miedo a quedar mal. Llega un punto que ni yo estoy soportando ver tantas mentiras juntas, aunque es divertido, a Ally y a mi nos causa gracia y esperamos ver que tanto aguanta antes de decir las cosas.

¿Lo peor de todo esto? Es que estuvimos toda la noche despiertos por otra mentira más de Trish, y escuchando la canción de la mariposa más de cien veces durante toda la noche, y aunque ella sea una niña, déjenme decirles que me dan ganas de empujarla por la puerta y dejarla afuera.

¿De dónde es que saca tanta energía ella? Creo que nosotros nos estamos volviendo tal vez muy mayores para hacer este tipo de cosas.

Después de la pijamada, fui a mi casa a darme un baño y cambiarme de ropa, el agua por lo menos me ayudaría a mantenerme un poco más despierta durante el día. Los vuelvo a encontrar en el centro comercial el sábado a la tarde y me acerco a la mesa donde aun está aquella niña con Trish, Dez y Austin.

 —No puedo esperar por la fiesta de esta noche.— Es lo primero que escucho al acercarme por parte de Megan.

—¿Fiesta?— Decimos todos al mismo tiempo que me coloco al lado de mi mejor amigo que parece más muerto que vivo por la falta de sueño.

—¡Cierto! Todos los sábados Austin tiene una fiesta temática.— Lee Trish de la hoja que ella escribió.

—¡Austin!— Llamo su atención girando mi cabeza para verlo.— ¿Podemos hablar un segundo?

—De acuerdo.— Dice con duda, lo tomo de la muñeca y nos alejamos un poco de los demás en lo que Trish intentan buscar una fiesta temática rápido.— ¿De qué querías...?— Sus palabras quedan en el aire cuando le doy un golpe en el brazo, se queja enseguida.— ¡Hey! ¿Por qué fue eso?

—Tienes que parar esto, todos están muertos de sueño y tu estás más del otro lado que de este, ¿Acaso has visto a Ally? Está durmiendo parada al lado del tacho de basura.— Lo regaño viéndolo a los ojos y señalándolo de una forma amenazadora.

—Estamos tan cerca de poder hacerme ver genial en esa revista y tener la portada, ¡Un pequeño esfuerzo más!

—Bien, pero no creo ir esta noche, tengo mucho sueño, Austin.

—Tienes que ir, te necesito ahí Summer, eres mi mejor amiga.

Por supuesto que tenía que poner aquellos ojitos de perro para suplicarme que me quedara, niego con la cabeza un poco soltando un suspiro. Megan se nos acerca a nosotros y bajo la mirada.

—Estoy tan emocionada por la temática de "Brillo en la oscuridad" espero que vayas Summer.— Dice la niña con emoción a lo que sonrío un poco.

—¡Claro que iré! No he faltado a ninguna desde que empezaron las fiestas.— Digo a lo que ella salta de emoción y enseguida vuelve con las demás. Miro a Austin que me mira con ambas cejas levantadas, me encojo de hombros.— Se le llama presión social.

—Ajá, es sólo eso.

Ruedo los ojos y me acerco a Trish para que ambas comenzáramos a planear una fiesta de varios días en una sola hora, Ally nos prestó la tienda de música así que enseguida salimos en busca de las decoraciones y pinturas que fueran necesarios para que literalmente todo brillara allí dentro en la oscuridad. Mientras tanto, Austin y Dez fueron a jugar paintball con Megan, lo cual si es muy divertido y ninguna de las dos chicas me dejó ir porque necesitaban mi ayuda con esto.

Para el momento que llegó la hora, todas ya estábamos vestidas, maquilladas y todos los invitados llegaron antes de que el creador de la fiesta asistiera con Dez, ambos tienen caras de que vivieron de las peores experiencias de sus vidas.

Tomo la chaqueta blanca de Austin que pinté personalmente y me acerco a entregársela.

—¿Cómo fue el paintball?— No puedo evitar contener la risa.

—Extremadamente doloroso, en especial cuando juegas con una niña de diez años que es experta.

—Nunca la vi venir, era como si estuviera en todos lados.— Dez tiene la mirada perdida en lo que dice aquello y me río asintiendo.

Austin toma la chaqueta de mi mano para colocársela, una chica baja por las escaleras de la tienda con un vestido azul brillante y digo un "wow" por lo preciosa que es. Trish toma de la muñeca a mi mejor amigo para acercarla a ella.

—¡Hey! Aquí viene la nueva novia super modelo europea de Austin, ¿Disfrutas la fiesta?

—Austin Moon mi novio.

—Trish la contrató porque dijo que salías con una europea.— Respondo a su duda que ni siquiera tuvo que preguntar porque su rostro lo dice todo.

—¿Cuántas cosas más inventaste en ese cuestionario?— Austin gira a ver a la modelo quien le sonríe y saluda, el rubio no tarda en caer en sus encantos y ruedo los ojos.— No es que me esté quejando, ¡Es tiempo de una canción!

Austin salta al escenario y todas las luces se apagan, sólo brillando en la oscuridad la ropa de todos los invitados. El chico canta allí una de sus nuevas canciones con toda la emoción, en lo que parece ser que Megan lo está disfrutando y estoy segura que será parte de la portada de esto.

Me acerco a la mesa de las bebidas una vez todo termina y me sirvo ponche en un vaso, a los segundos se me acerca Megan con una gran sonrisa y se la devuelvo.

—¿La estás pasando bien en la fiesta?

—¡Totalmente! Y venía a decirte que me gustaría que tuvieras un pequeño segmento en la revista como Austin, la estrella, Ally la escritora y Summer la inspiración.

—¿De verdad? Wow no me lo esperaba para nada, es muy lindo de tu parte.

—Así que dime, ¿Qué es lo que te gusta hacer? ¿Qué sientes al estar al lado de una super estrella en ascenso?

—Austin y yo somos mejores amigos desde que tenemos memoria, siempre compartimos todo hasta los mismo sueños como ya sabes, no lo sé, me gusta estar con ellos, escribir sus canciones, tengo incluso las mías propias para comenzar con una futura carrera,.

—¿Por qué aun no has grabado nada aun si tanto deseas ser cantante?

Ladeo mi cabeza y miro la pared un par de segundos.

—La verdad es que nunca lo había pensado, estuve tan metida en querer apoyar a Austin con su carrera que me he olvidado de la mía, no es que me esté quejando pero tienes razón Megan.— Vuelvo a verla y sonrío un poco, por primera vez creo que agradezco que ella estuviera aquí para abrirme los ojos.— Esta vez es mi turno de lograrlo, Austin ya lo hizo, me toca a mi, ¿No es cierto?

—Las puertas se abrirán para ti, incluso tal vez y seas tan interesante como Austin.

Me río asintiendo con la cabeza y ella desaparece entre la gente dentro de aquella fiesta.

Doy un sorbo al ponche que me había servido con anterioridad y por primera vez siento que todo comienza a tener sentido en mi vida.

Austin camina entre la gente y apoya su mano sobre la mesa para verme mejor, elevo una de mis cejas.

—¿Qué fue esa charla con Megan? ¿Me he perdido de algo?— Pregunta con curiosidad en lo que sus ojos se conectan con los míos, niego con la cabeza apretando los labios.

—Ella me dijo que algún día podré ser tan interesante como tu.—Me burlo y Austin sacude su chaqueta en forma de orgullo.

—Estoy segura que lo serás, no tanto como yo, por supuesto.

Ambos reímos, a los segundos me quedo seria y vuelvo a conectar con Austin.

—¿Algún día crees que lo lograré? Ser cantante, ¿Seré lo suficientemente interesante y talentosa para que alguien me quiera en su empresa?— Pregunto teniendo una clase de crisis existencial que no sabía que podía tener.

Tal vez estaba mejor siendo ignorante al camino de mis sueños.

Austin se endereza y me mira con cariño, a lo que ladeo mi cabeza.

—Summer, por supuesto que lo lograrás, eres talentosa, muy interesante, en cuanto te conozcan, todos morirán por tenerte en su empresa.

—Gracias Austin, eres el mejor.

El chico mira por encima de mis hombros y parece asustarse, frunzo el ceño con una pequeña sonrisa.

—Ya sé que soy el mejor pero ahora debo correr.— Antes de que pueda decir algo, desaparece y me río.

Giro para ver de qué se asustó y es Brooke, la chica con la que está saliendo, quien entró enojada y bueno, le ha estado mintiendo estos días así que entiendo el por qué quiere correr.

Suelto un suspiro mirando el escenario allí armado y todas las ganas de estar en uno me llenan por completo, allí es donde pertenezco y todo el mundo lo sabe, sólo alguien necesitaba abrirme los ojos a mi para darme cuenta de eso y quien diría que una niña de diez años lo haría.

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