Capítulo 14 "The End"
-Hola joven Charlie - dijo el oficial de policía mientras entraba a la sala de interrogación.
-Señor - dije en modo de saludo - estoy en problemas ¿verdad?
-Me temo que sí - dijo mientras suspira y se sienta lentamente al frente mío.
Suspiré profundo y sentí mi la vista llena de lágrimas - está bien, lo entiendo.
Éste me miró extrañado - recién llamamos al centro psiquiátrico Charlie, y la asistente social aún no llega. ¿Quieres contarme que fue lo que pasó?
Me encogí de hombros en un llanto reprimido - tengo miedo de que me haga daño.
-¿Quién Charlie? Dime, aquí estás a salvo - dijo el oficial brindando toda su confianza en mí.
-Lorraine, Lorraine Miüler - musité por lo bajo.
El oficial sonrió de costado - tranquilo ella está en otra habitación siendo interrogada, no podrá hacerte nada.
-¿Lo promete? - dije sobando mi nariz algo nervioso.
-Lo prometo. Te escucho - dijo sonriendo y sacando una grabadora.
Arrugué mi frente intentando demostrar mi miedo ante la situación - bueno verá, no me escapé de centro psiquiátrico por mí, fue porque Lorraine me lo había pedido - saqué de mi bolsillo la billetera, la cual tiene un poco de sangre - ella misma me la dio.
-¿Por qué? - dijo el oficial intentando comprender.
-Ella sufría violencia por parte de su marido. Sino me creen, pregúntenle, ya no pierde nada en decir la verdad ahora - me encogí de hombros de manera indiferente y me abracé a mi mismo - ella me obligó oficial, ella me manipuló desde un principio.
-Tranquilo, tranquilo, cuéntame desde el principio. Desde que la conociste - dijo alzando sus manos indicando a que respire lentamente.
Asentí aliviado, y por dentro podía sentir la victoria siendo rozada por las yemas de mis dedos.
CINCO HORAS ANTES
-¡Lorraine! ¡Maldita seas te acabo de hablar! ¡Contéstame cuando lo hago! - dijo apagando la televisión y sentí como arrojó el control remoto hacia la pared.
Antes de ocultarme, logré sacar un cuchillo de la alacena.
Me apoyé en contra de la pared, y esperé a que viniera. Podía percibir sus pasos pesados y firmes, al mismo tiempo que su respiración rasposa.
Podía sentir desde aquí el olor a alcohol que emanaba su cuerpo, y no pude evitar sentir pena por la vida que estaba teniendo Lori.
El ruido del auto me llevó por sorpresa, creí que Lori tardaría un poco más.
-¿Qué mierda haces aquí? - sentí la voz de Robert alejarse.
-¿De qué hablas cariño? Te dije que iba a hacer unas compras - hubo una pequeño momento de silencio - Bob ¿que ocurre?
-Quédate aquí - dijo en tono autoritario, y sentí sus pasos acercarse a la cocina nuevamente - quien quiera que sea, lo lamentarás.
Cerré mis ojos y me enfoque en sólo oír. Así sabré cuando será el momento perfecto para atacar.
El crujir de la madera me indica que está cada vez más cerca.
Y sólo tuve que contar hasta tres, y allí lo vi, cruzar la puerta a espaldas de mí.
Alcé el cuchillo en alto y me avalancé hacia el, dejando que el filo roce su cuello.
Tomé sus brazos y de una simple maniobra pude inmovilizarlo.
-¡Que mier...
-Chist - le susurré en su oído - al fin nos conocemos Robert.
-¿Bob? - dijo con voz preocupada Lorraine.
-¡Quédate allí! - gritó el maldito sobre mi agarre - ¿qué quieres? ¿dinero? Porque tengo mucho, o quieres...
-Calla maldito y escúchame muy bien - dije presionando el cuchillo en su cuello - verás, yo soy un arma, pero no accionaré sin su permiso.
-¿Permiso? ¿De qué hablas niño? - dijo en una leve queja.
-¿Charlie? - dijo aquella voz que hacía mucho no escuchaba - ¿qué haces? - dijo abriendo sus ojos de par en par al ver el cuchillo en el cuello de su marido.
-Hola Lori, la extrañé - sonreí de oreja a oreja - vine a ayudarla, a hacerle ver la solución.
-¿Solución? ¿Lorraine éste es un paciente tuyo? No te quedes ahí mirando ¡ayúdame! - dijo con voz desesperada.
-¡Calla! - grité a todo pulmón haciendo temblar todo mi cuerpo entero - estoy hablando con Lori, si te piden hablar hazlo, sino calla - dije en un susurro apretando el cuchillo nuevamente en su cuello.
Lorri se quedó en silencio observando atentamente lo que estaba pasando, mientras un par de lágrimas descienden por sus mejillas rojizas.
Por primera vez puedo verla vestida con algo que no cubra todo su cuello, es increíble como resaltan los hematomas morados, uno más grande que otro.
Mordí mis dientes al imaginarme cómo sufrió por ello.
Eso hizo que ajustara mi agarre en Robert generando unas quejas de su parte.
-Detente, por favor - alzó sus manos intentando tranquilizarme.
-¡No! - alcé mis cejas - mírate, toda lastimada. ¿Quién te lo hizo?
-Entraron a robar, y me golpearon - dijo de forma entrecortada.
-¿Quién te lo hizo?
-Ya te lo dije Charlie...
-¡¿Quién te lo hizo?! - pude sentir que la respiración de Robert se incrementa segundo a segundo.
-Estaba sola, y entraron por la puerta trasera...
-Ya no, no sigas mintiendote a ti misma - dije negando lentamente - deja el miedo de lado, y saca tu coraje de una buena vez, ahora bien ¿quién te lo hizo?
Vi como sus puños se apretaban lentamente, y como más lágrimas se derramaba una y otra vez por sus pómulos.
Su mirada iba entre la mía y la de Robert, mientras frotaba su brazo lentamente.
Le di su tiempo, no le pregunté más nada. Es difícil para ella decirlo en voz alta, lo entiendo.
-Lorraine llama a la maldita polícia - dijo Robert por lo bajo - Lorrai...
-¡No! - gritó sin creer lo que acaba de decirle - no, no y no - alzó su vista hacia mí - él siempre me lo hizo Charlie. No fueron ladrones, fue él - lo señaló temblorosa - vivo con miedo, necesito ayuda...
-Sólo tienes que pedirlo, dime las palabras y yo solucionaré tu problema Lori - asentí lentamente para que se enfocara sólo en mi voz - déjame ayudarte, por favor. Dime que puedes ver como yo, dilo Lori.
Robert largó una risa cargada en nerviosismo - ésto es ridículo, Lorraine mi amor, has lo que digo y llama a la maldita policía - al ver que ésta no reacciona y se queda viéndome sólo a mí, éste se altera - ¡loca! ¡perra! ¡la próxima vez te dejaré peor que antes!
Me mantuve firme sin despegar la vista de Lori, y ésta con sus ojos cargados en lágrimas lo miró a su marido.
-No Bob, no habrá próxima vez. Te voy a denunciar, y cumplirás tu pena como se debe - dijo por lo bajo sin ninguna pizca de piedad.
-No - dije firmemente - esa no es la solución que yo quiero, no me mientas, se que lo quieres hacer tanto como yo - dije arrugado mi entrecejo y hundiendo sólo un poco el cuchillo.
-No Charlie, yo no soy una asesina como tú - y esas fueron las únicas palabras que lograron desatar la tormenta en mi interior.
Sentí un agujero negros apoderarse de mi pecho y estómago. Una desilusión enorme comenzó a crecer rápidamente en mi interior. Pude ver que en los ojos de Lori, no existía el mismo amor que yo sí veía en ella.
Tanto para nada. Ésto no es sólo una injusticia, es la sepultura de mi cordura que creí tener.
Todas las señales fueron falsas, me equivoqué... realmente me equivoqué en ella.
En cuanto vi a Lori tomar el teléfono y marcar a la policía, comencé a oír la voz de Robert.
-Maldito bastado ¿feliz por lo que lograste? Te recuerdo que tengo tanto dinero que lograré salir, y hacer la vida de Lorraine una pesadilla - hizo una pausa mientras tragaba saliva - si antes la hice sufrir, ahora haré que quiera suicidarse. Y estarás tú para verla muerta, pálida, fría... - eso último lo dijo en una risa retenida.
Negué lentamente y largué un grito desgarrador, mientras hundo con fuerza el cuchillo en su cuello. Los gritos de Lorraine se mezclaron con los míos, pero eso no me impidió hundirlo una vez más, y ésta vez, con más profundidad, hasta sentir parte de mi mano dentro suyo.
Mientras mis manos se encuentran firmes, puedo sentir su sangre tibia en contacto con mi piel. Me arrodillé a su lado sintiendo como se ahoga con su propia sangre, la cual es de un color rojo oscuro, tan oscuro que parece sangre negra.
Lo miré fijamente a los ojos, quiero ver y presenciar como el brillo en ellos se va apagando, hasta que no quede nada de luz. Y así fue, exactamente igual que los de mi hermana cuando la vi morir. Una mirada totalmente apagada.
Me puse de pie y tiré el cuchillo ensangrentado a un costado de la cocina, y hasta hace unos minutos sólo escuchaba un zumbido, ahora puedo diferenciar los gritos de Lorraine.
Me giré hacia ella, y la rebaje con la mirada. Me encogí de hombros y me senté al frente suyo con mis piernas cruzadas.
No siento nada, solo la veo y escucho.
-Eres una idiota - dije finalmente interrumpiendo sus llantos - verás que no quedará así, te castigaré doctora. Y creo que de todos, tú tendrás el castigo más leve.
-Charlie, irás a prisión - dijo ella en un tartamudeo, mientras tiembla sin cesar.
-¿Ah si? - dije inclinando mi cabeza a un costado - eso lo veremos - dije al mismo tiempo que las sirenas de policía comenzaban a sonar de fondo.
-Eres un maldito asesino - dijo abrazándose a sí misma.
Comencé riéndome, y poco a poco, lo fui transformando en un llanto incontrolable.
La policía entró a la fuerza, y en pocos segundos nos trasladaron a la comisaría del pueblo.
-¡Está fingiendo! - fueron los últimos gritos de la doctora, antes de que nos llevaran a ambos - ¡no le crean ni una palabra! ¡Maldito asesino!
EL AHORA
Luego de contarle toda mi historia con Lorraine, continué con el relato de anoche - en cuanto llegué a su casa, ella me había dicho que tomara un cuchillo de la alacena y que entrara por la puerta trasera ya que estaba sin cerradura - miré levemente hacia abajo - sólo tardaría unos minutos en auto hasta volver. En cuanto regresó, allí comenzó a gritarme para que lo haga.
-¿Hacer qué Charlie? - dijo el oficial atento a mis palabras.
-Hacer que matara a su marido, me recordó una y otra vez mi trauma de pequeño, el trauma que tuve con mi hermana - tragué fuertemente - pregúntele al doctor Hole, yo nunca hablé con nadie de mi pasado, sólo me abrí con ella. Y ahora me doy cuenta que fue para utilizarme a su favor - apreté mi cabeza fingiendo desesperación - fue mi culpa por haberle creído, mí culpa, mí culpa.
-Tranquilo, tranquilo. Ya todo se va a aclarar - dijo el oficial poniéndose de pie.
-Ella les mentirá, al igual que mintió con el maltrato de su marido. Al igual que logró engañarme a mí - dije cerrando mis ojos demostrando mi miedo.
-Ahora vengo, tengo que hacer un par de llamadas - dijo cerrando la puerta a sus espaldas.
Y aquí estamos, sólo y en un cuarto de interrogatorio.
Sé que hay cámaras que lo graban todo, por lo que no perdí la postura de estar aterrado.
Cubrí mi cabeza con las manos, mientras lloro una vez más, moviéndome de atrás hacia delante.
-Charlie - dijo el oficial entrando - ven vamos, serás trasladado a un nuevo centro psiquiátrico. En éstos momentos el centro de Lincoln será demandado por falta de atención tanto en sus pacientes como en sus trabajadores. Además acabamos de confirmar que Walter es un alcohólico, como tú nos dijiste, y Lorraine Miüler confirmó ser víctima de violencia física, y será arrestada por ser cómplice y culpable del asesinato de su marido, así que no debes temer más por ella Charlie - me comentaba mientras me llevaba fuera de la residencia - de seguro acabarán cerrando sus instalaciones.
"el temible centro psiquiátrico abandonado" pensé.
Mientras me llevaban al auto, pasé por la sala interrogatoria de Lori, la cual llora de forma incontrolable. En cuanto cruzamos miradas, yo le di una leve sonrisa de costado.
-¡Mentiroso! ¡Maldito manipulador! ¡Te odio! - dijo mientras la retenían unos oficiales.
Te lo dije Lori, el castigo iba a ser justo. Me lastimaste, y yo te lo devolví de la misma forma.
Nadie sale limpio de mi mundo, nadie.
Él traslado al nuevo centro psiquiátrico fue bastante largo, y debo admitir que cuando llegamos, me impresioné al ver una instalación tan lujosa.
En cuanto me ingresaron a mi nuevo cuarto, me dieron sólo unos cuantos minutos para instalarme, antes de que tenga mi primera sesión.
Me llevaron por los amplios pasillos del lugar, los cuales brillan en su color blanco.
Ingresé al consultorio y me acomodé en una de las sillas.
-Buenos días Charlie, ¿cómo te sientes el día de hoy? Mi nombre es Verónica - dijo la psiquiatra sonriéndome de oreja a oreja.
-Buenos días a usted - dije alzando mi ceja y recalcando la última palabra - hoy está muy hermosa Vero ¿puedo llamarla así?
Sonreí en mis adentros, veremos que cosas ocultas encontraremos aquí.
Fin
Hola amores, gracias por leer...
Me divertí mucho escribiéndola, reconozco que me llevó muchísimo tiempo el tener que investigar sobre el tema, pero estoy feliz con el resultado que logré conforme pasaba la historia. Fue una novela rara, en el sentido que en el momento en donde tenía que escribir escenas profundas, me encontraba yo misma hablando como si fuera Charlie o hasta pensando como él.
Pero bueno, fue una nueva experiencia más vivida🤭
Supongo que nos seguiremos leyendo en otras historias más!!
🖤Con mucho love Valu Winchester🖤
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